Ikaru
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Entre ne la casa y empece a inspeccionarla un poco,aunque bueno casi verdaderamente ni podia ver una mierda la verdad...estaba todo oscuro y la unica luz que tenia era la que entraba por la puerta y por las pequeñas rendijas que quedaban de las ventanas tapiedas a si que no veia tres en un burro.Bueno verdaderamente no entre en la casa pues me quede en el rellano y habia otra puerta mas que estab cerrada...me daba un gran miedo abrirla la verdad por que no sabia que podia ancontrarme dentro si os decia la verdad.Siempre fui muy pàranoico con estas cosas aunque creo que me estoy repitiendo demasiado.
Entonces oi de nuevo el pequeño silvido de uan flecha mire al rededor pero parecia que no iba dirigido hacia mi la verdad,pero tendria que tener ciudo mucho cuidado la verdad.Eso me hizo pensar que era una persona la que estab disparando tantas flechas hacia la gente que estaria por aqui,si tenia el presentimiento de que no estaba solo y lo tuve aun mas cuando escuche una voz,parecia que decia que alguien corriese y no volase,no lo entendia pero provenia de un den den mushi.Deberia de ser de otra persona y se le habria caido al alguien,volvi a tener un miedo horrible cuando empece a escuchar pasos en la madera vieja de la casa,pero estos se me pasaron cuando me di cuenta de quien era esa persona era Stinger,un cazador que habia conocido hace tiempo y con el que me llevaba algo bien,entonces despues de decirme una palabras dio un violenta patada en la puerta que estab indeciso de abrir,despues me dijo que ya podia pasar,el tono de sus palabras me hizo resoplar un poco pero le dije yo despues :
-no,ya entrare yo primero jaja,la verdad es que es una suerte tenerte aqui,nunca se sabe lo que peude ocurri en estos sitios jajaja,bueno voy a ir entrando
Entre rapidamente en la casa quedandome a un lado esprandole a el dentro de ella...
Entonces oi de nuevo el pequeño silvido de uan flecha mire al rededor pero parecia que no iba dirigido hacia mi la verdad,pero tendria que tener ciudo mucho cuidado la verdad.Eso me hizo pensar que era una persona la que estab disparando tantas flechas hacia la gente que estaria por aqui,si tenia el presentimiento de que no estaba solo y lo tuve aun mas cuando escuche una voz,parecia que decia que alguien corriese y no volase,no lo entendia pero provenia de un den den mushi.Deberia de ser de otra persona y se le habria caido al alguien,volvi a tener un miedo horrible cuando empece a escuchar pasos en la madera vieja de la casa,pero estos se me pasaron cuando me di cuenta de quien era esa persona era Stinger,un cazador que habia conocido hace tiempo y con el que me llevaba algo bien,entonces despues de decirme una palabras dio un violenta patada en la puerta que estab indeciso de abrir,despues me dijo que ya podia pasar,el tono de sus palabras me hizo resoplar un poco pero le dije yo despues :
-no,ya entrare yo primero jaja,la verdad es que es una suerte tenerte aqui,nunca se sabe lo que peude ocurri en estos sitios jajaja,bueno voy a ir entrando
Entre rapidamente en la casa quedandome a un lado esprandole a el dentro de ella...
El periódico OPD
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- peporro:
- Al caminar por el oscuro pasillo (Ya que las esfera violetas comienzan a desaparecer) las risas se hacen más fuertes y paren proceder de tan solo una persona, al llegar al final del túnel una puerta de madera algo mas chica que el ancho del túnel estaba frente a él y del otro lado se encontraba de seguro la persona que les había disparado.
- Ghost Leviatans:
- Los hombre lobos lleban al pequeño grupo de cazadores hasta las montañas nevadas donde los llevaron por tuneles frios y algunos que extrañamente eran calidos, al salir del tunel terminaron en una cueva donde varios tuneles surgian y un gran grupo de esas extrañas criaturas, el hombre lobo que los habia llebado hasta alli le hizo una seña a Ichigo a la par que comenzaba a hablar -Vos... Vos y tu grupo van a ayudarnos a atacar a la alocada cientifica que nos arruino nuestra vida, los vimos pelear contra los Sin-Mente y valen la pena- dicho el silencio se remarco en la enorme cueva a la espera de una respuesta por parte del jefe del gremio.
- Kirigaya:
- A la par que caminaba se podia escuchar como las hojas secas en varias partes se movian formando remolinos y como si nada una onda de choque algo calurosa se asoma por su flanco derecho.
El combate continua en este apartado: https://www.onepiece-definitiverol.com/t3534-capitulo-7-b-vale-meldor-vs-kirito#48304
- Rokudo:
- La mujer Gyojin se giro en su burbuja flotante para ver directo a la cara al joven revolucionario -Vamos, no necesitas armas contra mi yo no pienso hacerte nada solo queria ver si pensabas ayudar a pelear contra algun que otro intruso... pero veo que no queres hacerlo, por ahi tenes la puerta, podes irte sin meterte en lios que te cuesten la vida dicho eso señalo la misma entrada por la que el revolucionario habia llegado y se volvio a girar para estar en su comoda posicion de "francotirador".
- Ikaru & Crimson:
- Ante ellos la puerta fue cruzada por una Ningyo de piel azul y pelo largo que los miraba fijo a la par que soltaba un suspiro -Otra vez causando lios Leo... Bueno, estoy yo para taparlos como siempre...- dicho eso la mujer desaparecio de la vista de ellos y aparecio delante del joven pirata dandole de lleno un golpe en el rostro o al menos lo intento, despues de eso volvio a aparecer al lado del Den Den Mushi sujetandolo y rompiendolo con sus manos.
El combate continua en este apartado: https://www.onepiece-definitiverol.com/t3535-capitulo-7-b-dai-vs-crimson-ikaru#48307
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Aquella mujer pez me responde con evasivas y con desinterés, casi que subestimándome, diciendo que si quería podía irme, señalando la zona por la que había entrado anteriormente, supongo que me estará tomando el pelo, no pienso volver sobre mis pasos, es algo que no me entra en la cabeza, la posibilidad de volver sobre mis pasos, haciendo todo mi esfuerzo inútil, vano y sin valor, esas palabras son ofensivas, pero, no conozco la fuerza de la gyogin, ni tampoco sé nada sobre sus habilidades y torpezas. Carezco de datos para decidir atacarla, mas no retrocederé
Supongo que solo me queda una alternativa
Pienso mientras de mi cintura descuelgo la fukiya, una especie de cerbatana en la que pongo una serie de dardos de madera muy afilados, al lanzarlos, estos salen envueltos en unas llamas rojas, las llamas de la tormenta que conforme van pasando por el bosque van cortando árboles uno tras otro. Al llegar a un pájaro que pasaba por allí este cae muerto con un agujero exacto a la circunferencia de la llama al pasar por él.
¿Quién se supone que es llamado intruso?
Pregunto con mi tono de siempre, me importa más bien poco quien sea esa mujer pez, pero nadie me subestima ni menosprecia así como así, no llego al nivel de atacar sin conocer y menos viendo lo que puede hacer con un arco. Me mantengo en mi posición mientras coloco la fukiya en su sitio, no es buena idea andar con un arma en la mano como si nada, menos aun habiendo destrozado un bosque y matado un pájaro con ella.
Supongo que solo me queda una alternativa
Pienso mientras de mi cintura descuelgo la fukiya, una especie de cerbatana en la que pongo una serie de dardos de madera muy afilados, al lanzarlos, estos salen envueltos en unas llamas rojas, las llamas de la tormenta que conforme van pasando por el bosque van cortando árboles uno tras otro. Al llegar a un pájaro que pasaba por allí este cae muerto con un agujero exacto a la circunferencia de la llama al pasar por él.
¿Quién se supone que es llamado intruso?
Pregunto con mi tono de siempre, me importa más bien poco quien sea esa mujer pez, pero nadie me subestima ni menosprecia así como así, no llego al nivel de atacar sin conocer y menos viendo lo que puede hacer con un arco. Me mantengo en mi posición mientras coloco la fukiya en su sitio, no es buena idea andar con un arma en la mano como si nada, menos aun habiendo destrozado un bosque y matado un pájaro con ella.
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Nos encontramos delante de una manada de lobos, uno de los cuales, el que se encuentra más adelantado a los demás que al parecer es el líder de estos, se encuentra en una forma humanoide, similar a la de un hombre lobo, Lobisón o Licántropo, como quieras llamarlo. Con este es con el cual mantengo un diálogo para tratar de evitar una pelea innecesaria y que seguramente resultaría en una derrota aplastante por parte del gremio. Las cosas están algo tensas, Iku parece estar sufriendo, normal teniendo en cuenta que mi arma asesinó a Shinji delante de sus ojos, Taiko permanece en un silencio en lo que respeta a mi persona, mientras Sinclair está irado con mi actuación anterior, comprensible, nadie imagina a alguien asesinar a su compañero de equipo.
Mientras me encuentro recostado en un árbol cercano, observando a los “lobos”, de pronto estos empiezan a moverse, un gesto en el líder me da a entender que quiere que les sigamos, no estoy seguro de que sea una muy buena idea pero mejor que permanecer afuera a merced de que esos seres, a los que los lobos llaman sin-mente, aparezcan o no.
Me reincorporo, pues mi posición es recostada en un árbol por comodidad, al erguirme mis rodillas crujen un poco, al parecer se habían adaptado rápido a la posición anterior. Me giro y con un gesto indico a todos los miembros de mi gremio que me sigan, para asegurarme de que todos me siguen, sin excepción, grito mientras camino
El que no me siga limpiará las letrinas del gremio durante dos años.
Tras ese gesto sigo el camino, mis pasos sigilosos por el calzado tradicional que porto, además de mi costumbre de caminar con el mayor sigilo posible, hacen de mí una persona ideal para seguir sin ser descubierto, aunque esta vez no sirve pues los que se encuentran delante de mí son animales con un sentido de la audición muy agudo, aproximadamente diez veces más agudo que un humano normal, aunque realmente no sé hasta qué punto está agudizado el sentido auditivo de estos seres.
Los caminos por los que nos movemos son sinuosos y llenos de rocas, algo molestos la verdad, si alguien no tiene un gran equilibrio ni un cuidado al caminar por aquí seguramente se caría, mucho más por la noche cuando los caminos sinuosos apenas son visibles y las rocas se confunden en la oscuridad de la noche. Mis pasos esquivan las rocas con suma facilidad, para alguien que dedica cada mañana a largas sesiones de entrenamiento en diversos escenarios y condiciones diversas eso es un juego de niños.
Seguidamente a los sinuosos senderos nos encontramos con una montaña nevada, bueno, la falda de la montaña, por donde empezamos a subir poco a poco con cuidado de no caernos ni de perder de vista a los lobos. Al poco rato de avanzar nos encontramos con una entrada a una cueva, la temperatura empieza a descender, conforma nos acercamos a la entrada de la cueva.
Nos adentramos en ellas, un lugar oscuro, algo poco visible y muy molesto la verdad, activo mi anillo del sol, lo que hace que mis dos guantes pasen de forma X a forma bannin, de las esferas salen una luz asombrosa, que uso para iluminar el camino, frío y húmedo, demasiado para muchos gustos, aunque es normal en la situación en la que estamos, una cueva en una montaña nevada, raro sería que hiciera calor.
Seguimos caminando hasta que los pasillos de la cueva se vuelven cálidos y agradables, algo extraño, que podría producir el calor que ahora nos envuelve, que haría desaparecer el frío del ambiente que nos rodea y la humedad que nos asolaba pocos metros antes.
Esto es extraño Takeshi, no creo que sea buena idea esto
La voz de G suena en mi cabeza, ya me acostumbro a oír su voz de improviso en mi cabeza de modo que no me molesto más que en responderle en mi cabeza
Lo sé, pero mejor esto que arriesgar a que nos ataquen los de antes, sigámosles a ver qué sucede
Sigo el camino hasta llegar a una cueva en la cual varios túneles convergen, son salidas y entradas a la misma cueva, al llegar veo como el lugar está lleno de animales como el que me trajo a este lugar, este me hace una señal y me dice que lucharemos contra la científica que les arruinó la vida, algo que, a mí no me molestaría hacer, pero que he de consultar con los demás.
Espera que lo consulte con los demás, en saberlo te informo
Digo mientras me doy la vuelta.
Takeshi, lleva cuidado con estas decisiones
Dice Myo-o desde su katana, algo que tengo en cuenta, cosa que él habrá notado pues le noto relajarse al momento, me acerco a los demás, quienes se encuentran a mi espalda a unos metros de distancia y les pregunto en un susurro:
¿Qué os parece?¿Les ayudamos contra la científica?
Mientras me encuentro recostado en un árbol cercano, observando a los “lobos”, de pronto estos empiezan a moverse, un gesto en el líder me da a entender que quiere que les sigamos, no estoy seguro de que sea una muy buena idea pero mejor que permanecer afuera a merced de que esos seres, a los que los lobos llaman sin-mente, aparezcan o no.
Me reincorporo, pues mi posición es recostada en un árbol por comodidad, al erguirme mis rodillas crujen un poco, al parecer se habían adaptado rápido a la posición anterior. Me giro y con un gesto indico a todos los miembros de mi gremio que me sigan, para asegurarme de que todos me siguen, sin excepción, grito mientras camino
El que no me siga limpiará las letrinas del gremio durante dos años.
Tras ese gesto sigo el camino, mis pasos sigilosos por el calzado tradicional que porto, además de mi costumbre de caminar con el mayor sigilo posible, hacen de mí una persona ideal para seguir sin ser descubierto, aunque esta vez no sirve pues los que se encuentran delante de mí son animales con un sentido de la audición muy agudo, aproximadamente diez veces más agudo que un humano normal, aunque realmente no sé hasta qué punto está agudizado el sentido auditivo de estos seres.
Los caminos por los que nos movemos son sinuosos y llenos de rocas, algo molestos la verdad, si alguien no tiene un gran equilibrio ni un cuidado al caminar por aquí seguramente se caría, mucho más por la noche cuando los caminos sinuosos apenas son visibles y las rocas se confunden en la oscuridad de la noche. Mis pasos esquivan las rocas con suma facilidad, para alguien que dedica cada mañana a largas sesiones de entrenamiento en diversos escenarios y condiciones diversas eso es un juego de niños.
Seguidamente a los sinuosos senderos nos encontramos con una montaña nevada, bueno, la falda de la montaña, por donde empezamos a subir poco a poco con cuidado de no caernos ni de perder de vista a los lobos. Al poco rato de avanzar nos encontramos con una entrada a una cueva, la temperatura empieza a descender, conforma nos acercamos a la entrada de la cueva.
Nos adentramos en ellas, un lugar oscuro, algo poco visible y muy molesto la verdad, activo mi anillo del sol, lo que hace que mis dos guantes pasen de forma X a forma bannin, de las esferas salen una luz asombrosa, que uso para iluminar el camino, frío y húmedo, demasiado para muchos gustos, aunque es normal en la situación en la que estamos, una cueva en una montaña nevada, raro sería que hiciera calor.
Seguimos caminando hasta que los pasillos de la cueva se vuelven cálidos y agradables, algo extraño, que podría producir el calor que ahora nos envuelve, que haría desaparecer el frío del ambiente que nos rodea y la humedad que nos asolaba pocos metros antes.
Esto es extraño Takeshi, no creo que sea buena idea esto
La voz de G suena en mi cabeza, ya me acostumbro a oír su voz de improviso en mi cabeza de modo que no me molesto más que en responderle en mi cabeza
Lo sé, pero mejor esto que arriesgar a que nos ataquen los de antes, sigámosles a ver qué sucede
Sigo el camino hasta llegar a una cueva en la cual varios túneles convergen, son salidas y entradas a la misma cueva, al llegar veo como el lugar está lleno de animales como el que me trajo a este lugar, este me hace una señal y me dice que lucharemos contra la científica que les arruinó la vida, algo que, a mí no me molestaría hacer, pero que he de consultar con los demás.
Espera que lo consulte con los demás, en saberlo te informo
Digo mientras me doy la vuelta.
Takeshi, lleva cuidado con estas decisiones
Dice Myo-o desde su katana, algo que tengo en cuenta, cosa que él habrá notado pues le noto relajarse al momento, me acerco a los demás, quienes se encuentran a mi espalda a unos metros de distancia y les pregunto en un susurro:
¿Qué os parece?¿Les ayudamos contra la científica?
sinclair moon
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Dentro de mi inconsciencia mantenía una conversación con mi alter ego:
- ¿Por qué demonios has aparecido ahora Dani? no es buen momento, estamos en una situación delicada y peligrosa y no necesito que me maten por tu culpa.
- Vamos Sinclair, si yo salgo podría cargarme a nuestro perseguidores en menos que canta un gallo.
- Eso no te lo crees ni tu Dani porque por muy buen estratega y letal que seas ahora mismo, probablemente, a nuestros perseguidores no les llagamos ni a la suela del zapato.
- Entonces que propones Moon.
- Te propongo un trato, déjame controlar la situación a mi y, en un futuro cuando seamos mas fuertes y tengamos mas armas te dejare luchar a ti porque, y aunque me duela reconocerlo tu eres mil veces mejor en la lucha que yo, es más si consiguiéramos combinarnos podríamos llegar a ser los mejores.
- Me has convencido, te dejare a ti esto, pero recuerda tu promesa.
Fui abriendo poco a poco los ojos y pronto me vi atado a un árbol con unos hilos de acero, por suerte era un usuario zoan y no me fue muy difícil romperlos. Los siguiente que vi a mi alrededor fue a mis compañeros de gremio y a esos licántropos. Daba la sensación que fueran amistosos o por lo menos mas amistosos que los sin-mente que supongo que sería la turba enfurecida que nos perseguía. Lo siguiente que escuché fue decir a nuestro líder que quién no le siguiese limpiaría las letrinas del gremio durante una semana y no estaba dispuesto así que me levanté y le empecé a seguir porque parecía que aquellos seres lobunos querían que les siguiéramos. Seguí a Takeshi, que seguía a los licántropos por caminos sinuosos y pedregosos y por si fuera poco, la noche se nos había echado encima y no veía ni un pijo y por tanto tropecé varias veces, pero conseguí seguir a Takeshi. Acabamos entrando a una cueva en la que hacía un frío de mil demonios, pero de repente Takeshi se pone un anillo y sus guantes empiezan a irradiar calor por lo que me pego a él como una lapa, porque la camisa que llevaba no abrigaba mucho que dijéramos:
- No pienses cosas raras Takeshi, solo me pego a ti porque tienes calefacción.
Aunque pronto volví a tener calorcito, ya que, la temperatura empezó a ascender era raro, pero bueno era mejor que morirse de frío, pero seguía teniendo frío. Recordé las palabras del líder que había dicho unos instantes antes. Querían que les ayudáramos a luchar contra una científica, la cual, les había convertido en lo que eran.
- Ufff difícil lo tengo yo por lo menos machote, no estoy de acuerdo con los experimentos de este tipo, pero una de mis grandes pasiones son las mujeres. Aunque si fuera una mujer con cuerpo de león o una mujer horrenda me lo pensaría. Sin embargo, y ante todo estoy a las ordenes de mi jefe Takeshi, que por cierto Take perdoname por hablar yo primero
- ¿Por qué demonios has aparecido ahora Dani? no es buen momento, estamos en una situación delicada y peligrosa y no necesito que me maten por tu culpa.
- Vamos Sinclair, si yo salgo podría cargarme a nuestro perseguidores en menos que canta un gallo.
- Eso no te lo crees ni tu Dani porque por muy buen estratega y letal que seas ahora mismo, probablemente, a nuestros perseguidores no les llagamos ni a la suela del zapato.
- Entonces que propones Moon.
- Te propongo un trato, déjame controlar la situación a mi y, en un futuro cuando seamos mas fuertes y tengamos mas armas te dejare luchar a ti porque, y aunque me duela reconocerlo tu eres mil veces mejor en la lucha que yo, es más si consiguiéramos combinarnos podríamos llegar a ser los mejores.
- Me has convencido, te dejare a ti esto, pero recuerda tu promesa.
Fui abriendo poco a poco los ojos y pronto me vi atado a un árbol con unos hilos de acero, por suerte era un usuario zoan y no me fue muy difícil romperlos. Los siguiente que vi a mi alrededor fue a mis compañeros de gremio y a esos licántropos. Daba la sensación que fueran amistosos o por lo menos mas amistosos que los sin-mente que supongo que sería la turba enfurecida que nos perseguía. Lo siguiente que escuché fue decir a nuestro líder que quién no le siguiese limpiaría las letrinas del gremio durante una semana y no estaba dispuesto así que me levanté y le empecé a seguir porque parecía que aquellos seres lobunos querían que les siguiéramos. Seguí a Takeshi, que seguía a los licántropos por caminos sinuosos y pedregosos y por si fuera poco, la noche se nos había echado encima y no veía ni un pijo y por tanto tropecé varias veces, pero conseguí seguir a Takeshi. Acabamos entrando a una cueva en la que hacía un frío de mil demonios, pero de repente Takeshi se pone un anillo y sus guantes empiezan a irradiar calor por lo que me pego a él como una lapa, porque la camisa que llevaba no abrigaba mucho que dijéramos:
- No pienses cosas raras Takeshi, solo me pego a ti porque tienes calefacción.
Aunque pronto volví a tener calorcito, ya que, la temperatura empezó a ascender era raro, pero bueno era mejor que morirse de frío, pero seguía teniendo frío. Recordé las palabras del líder que había dicho unos instantes antes. Querían que les ayudáramos a luchar contra una científica, la cual, les había convertido en lo que eran.
- Ufff difícil lo tengo yo por lo menos machote, no estoy de acuerdo con los experimentos de este tipo, pero una de mis grandes pasiones son las mujeres. Aunque si fuera una mujer con cuerpo de león o una mujer horrenda me lo pensaría. Sin embargo, y ante todo estoy a las ordenes de mi jefe Takeshi, que por cierto Take perdoname por hablar yo primero
Taiko
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Akuma no mi
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La situación no estaba tranquila del todo. La crispación estaba a la ordend el día y no era para menos: Me había cargado al tercero al mando lo que me convertía en un objetivo bastante claro de algunos de mis compañeros de gremio, estabamos huyendo de unos tipos que querían borrarnos del mapa y ahora nos cortaba el paso una especie de hombres-lobo que nos pedían ayuda para meternos en otra batalla.
Tanto huir no podía ser bueno... Ahora estamos en el fuego cruzado de este conflicto.
Teoricamente no teniamos más opción que participar en el conflicto. Y puestos a hacerlo, mejor con los hombres-lobo, pues sabemos que no van a dirigir su ataque contra nosotros. Desde luego era mejor unirse a uno de los dos bandos que estar en contra de ambos. Cuestión de ser prácticos.
En ese momento Takeshi me reprende diciendome cosas típicas como que no me haga el duro o que no diga que los heroes no existen, me habla de heroes anónimos y de la determinación de no asesinar a alguien es mucho más valiente que hacerlo. Sonrío condescendientemente mientras me suelta ese discurso y asiento con los ojos cerrados.
No entiendes nada
Cuando dejó de hablar, el supuesto lider Takeshi me sorprendió bastante (Cosa que no suele hacer casi nadie) incineró sin escrúpulo alguno a Shinji (El chico que había tratado de atacarme sin éxito y se había desmayado), el cual ardió ante los ojos del gremio. Me quedé mirando melancolico como perdía ottro compañero entre el calor del fuego, y luego miré serio pero sin odio ni furia a Takeshi.
Aquel acto no sabía si me transmitía seguridad, en el sentido de que tenía un capullo menos que quería matarme del que preocuparme o por otra parte me transmitía seguridad en el sentido de que podría ser el siguiente. En todo caso el lider y hombre que antes me pidió calma acababa de quemar vivo a un miembro del gremio. No sería yo quien lo cuestionase, no sería honesto hacerlo.
Con dos cojones
Iku volvía a sentirse incomoda y eso no me gustaba. La situación volvía a complicarse para los Ghost Leviatans. Iku se dirigió a mi y me dijo que no hablase, que nadie estaba perdido.
Tampoco entiende nada...
Mi estado era callado y bastante más calmado que antes. En aquel instante, Sinclair parecía poseido por un alter ego molesto y violento. No era el momento de tonterías. Fruncí el ceño y cerré el puño a punto de sacudirle con mi agigantado brazo, pero Takeshi se me adelantó, le sacudió y lo ató.
Volvió a mi lado y le susurré a mi lider.
Has estado rápido
Los hombres lobo nos indicaron que les siguiesemos, orden que secundó Takeshi, por lo que consideré hacerlo y así fue. Fuimos por un camino frio, oscuro y sinuoso, poco me importaba eso, en peores me había visto y personalmente, miedo y frío eran sensaciones que no experimentaba desde hace tiempo.
El lider licántropo se dirigió a Takeshi diciendole que él y su grupo (nosotros, los Ghost Leviatans) ibamos a ayudarles contra los sinmente. Takeshi se dirigió a nosotros para preguntarnos que que nos patrecía la idea.
Me crucé de brazos y encogí de hombros.
¿Acaso tenemos otra alternativa?
Cerré los ojos y suspiré, el camino y la calma que se respiraba ahora era mucho mayor que la de antes y me había invadido por completo. Abrí los ojos y me pronuncié ante mis compañeros, mirando a Takeshi aprovechando que Sinclair ya lo había hecho.
Por mi vale. Lo que importa ahora es salir de aquí, como sea, y esta parece la manera más directa y rápida.
Moví mi cuello y hombros relajandolos y haciendolos crujir. Probablemente me esperaba una batalla dura.
Decide tu, Takeshi.
Dije muy tranquilo y serio. Había que tomar una decisión y habriamos de hacerlo pronto.
Tanto huir no podía ser bueno... Ahora estamos en el fuego cruzado de este conflicto.
Teoricamente no teniamos más opción que participar en el conflicto. Y puestos a hacerlo, mejor con los hombres-lobo, pues sabemos que no van a dirigir su ataque contra nosotros. Desde luego era mejor unirse a uno de los dos bandos que estar en contra de ambos. Cuestión de ser prácticos.
En ese momento Takeshi me reprende diciendome cosas típicas como que no me haga el duro o que no diga que los heroes no existen, me habla de heroes anónimos y de la determinación de no asesinar a alguien es mucho más valiente que hacerlo. Sonrío condescendientemente mientras me suelta ese discurso y asiento con los ojos cerrados.
No entiendes nada
Cuando dejó de hablar, el supuesto lider Takeshi me sorprendió bastante (Cosa que no suele hacer casi nadie) incineró sin escrúpulo alguno a Shinji (El chico que había tratado de atacarme sin éxito y se había desmayado), el cual ardió ante los ojos del gremio. Me quedé mirando melancolico como perdía ottro compañero entre el calor del fuego, y luego miré serio pero sin odio ni furia a Takeshi.
Aquel acto no sabía si me transmitía seguridad, en el sentido de que tenía un capullo menos que quería matarme del que preocuparme o por otra parte me transmitía seguridad en el sentido de que podría ser el siguiente. En todo caso el lider y hombre que antes me pidió calma acababa de quemar vivo a un miembro del gremio. No sería yo quien lo cuestionase, no sería honesto hacerlo.
Con dos cojones
Iku volvía a sentirse incomoda y eso no me gustaba. La situación volvía a complicarse para los Ghost Leviatans. Iku se dirigió a mi y me dijo que no hablase, que nadie estaba perdido.
Tampoco entiende nada...
Mi estado era callado y bastante más calmado que antes. En aquel instante, Sinclair parecía poseido por un alter ego molesto y violento. No era el momento de tonterías. Fruncí el ceño y cerré el puño a punto de sacudirle con mi agigantado brazo, pero Takeshi se me adelantó, le sacudió y lo ató.
Volvió a mi lado y le susurré a mi lider.
Has estado rápido
Los hombres lobo nos indicaron que les siguiesemos, orden que secundó Takeshi, por lo que consideré hacerlo y así fue. Fuimos por un camino frio, oscuro y sinuoso, poco me importaba eso, en peores me había visto y personalmente, miedo y frío eran sensaciones que no experimentaba desde hace tiempo.
El lider licántropo se dirigió a Takeshi diciendole que él y su grupo (nosotros, los Ghost Leviatans) ibamos a ayudarles contra los sinmente. Takeshi se dirigió a nosotros para preguntarnos que que nos patrecía la idea.
Me crucé de brazos y encogí de hombros.
¿Acaso tenemos otra alternativa?
Cerré los ojos y suspiré, el camino y la calma que se respiraba ahora era mucho mayor que la de antes y me había invadido por completo. Abrí los ojos y me pronuncié ante mis compañeros, mirando a Takeshi aprovechando que Sinclair ya lo había hecho.
Por mi vale. Lo que importa ahora es salir de aquí, como sea, y esta parece la manera más directa y rápida.
Moví mi cuello y hombros relajandolos y haciendolos crujir. Probablemente me esperaba una batalla dura.
Decide tu, Takeshi.
Dije muy tranquilo y serio. Había que tomar una decisión y habriamos de hacerlo pronto.
Digo || Pienso || Narro|| Ataco/Uso habilidad
Nivel: 29
Exp: 14600
Berries: 4663
Nombre: Taiko Kato
Bando: Pirata
Akuma no mi: Size Size no mi
Profesiones: Luchador - Músico - Navegante
Si no quieres correr riesgos en la vida, ya has decidido que no deseas crecer
- Chibi Taiko:
- Mi patria es mi bandera:
Iku Hanna
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Sinclair me habló y dijo:
- Iku tienes una sonrisa preciosa y si para verla mas tengo que defenderte lo hare sin importar lo poderoso que sea aquel que te haga daño.
Me sonrojé pero no dije absolutamente nada, solamente me quede algo pensativa.
Que tierno que es a veces… lástima que sea tan bipolar.
Y después de aquello le gritó a Takeshi por haber asesinado a Shinji tan brutalmente, y, se acercó a mí abrazándome diciéndome que con dos muertes no podría y que me protegerá con su cuerpo si es necesario. La verdad es que me quede algo patidifusa y estupefacta ante aquellas palabras. Lo mire a los ojos con una mirada muy seria, puede que demasiado aun que mis ojos siguen expresando dolor… un dolor que tardará en pasar, le comencé a hablar con una voz seria y fría:
Sinclair, ya sé sabes lo duro que me es sobrellevar la muerte de un nakama, y la de dos aún más por que para mi sois todos como mis hermanos a los que protegería con mi vida si hace falta, y por el simple hecho de sentir que debo protegeros, ni tu ni yo vamos a derrumbarnos ahora ya que estamos todos en peligro, las depresiones y los sentimientos cuando toda esta puñetera pesadilla pase.
Mi rostro y mi voz seguían igual, y de pronto noté como a Sinclair le pasaba algo raro, y pude deducir que era su segunda personalidad ya que a Takeshi le pasa algo parecido.
Vaya… ahora entiendo ciertas cosas…
Takeshi al ver aquello le golpeó en el estómago con el mango de la katana y una atadura de acero con Kami no katana lo inmovilizó de forma que no pueda moverse y después se dirigió a mí diciendo:
Perdona, he de mantenerme aislado, procura que no sucedan más incidentes así
A lo que asentí y sonreí levemente a pesar de que en ese momento mi respeto y aprecio por Takeshi bajó por los suelos… cocinó a un nakama y sigue tan feliz, eso era algo que no conseguía entender.
Pasado unos instantes, aquella monada de lobos, licántropos o lo que sean comenzaron a caminar y el jefe le hace un gesto a Takeshi como si quisiera que le siga, este se incorpora y dice:
El que no me siga limpiará las letrinas del gremio durante dos años.
Lo miro de reojo, con algo de indiferencia, en ese momento lo que dijera Takeshi me lo iba a pasar por donde yo me sé, literalmente, pero a pesar de eso, tenía ganas de patear algún trasero para descargar toda la furia que tengo dentro por la muerte de mis compañeros, sentía tantas emociones a la vez… furia, ira, pena, tristeza, nostalgia, indiferencia… bueno, de todo menos indiferencia. Comencé a seguirlo sin decir palabra pero a cada paso que daba, mi mente se inundaba de recuerdos… algo que hacía que más sentimientos diferentes inunden mi corazón. De mi boca salió un profundo suspiro de dolor y me metí las manos en los bolsillos de mi pantalón vaquero bastante ajustado mientras le dí una patada a una piedra que me encontré por el camino. Miré al horizonte, el Sol comenzaba a ocultarse tras las montañas y el calor iba descendiendo por lo que se me puso la piel de gallina. Me desate mi sudadera negra de la cintura y me la puse aun que no la abroché, por lo cual se podía divisar mi camiseta ajustada u escotada recalcando mi figura, y, tras esto me volví a meter las manos en los bolsillos.
Tras un rato caminando llegamos a una especie de cueva en la cual hay varios túneles, y de pronto el jefe de aquellos lobos nos pide que luchemos contra una especie de científica loca, sonreí y antes de que pudiera responder Takeshi preguntó nuestra opinión. El primero en contestar fue Sinclair:
Ufff difícil lo tengo yo por lo menos machote, no estoy de acuerdo con los experimentos de este tipo, pero una de mis grandes pasiones son las mujeres. Aunque si fuera una mujer con cuerpo de león o una mujer horrenda me lo pensaría. Sin embargo, y ante todo estoy a las ordenes de mi jefe Takeshi, que por cierto Take perdoname por hablar yo primero
No entiendo por qué cada vez que me empiezo a pensar que Sinclair no es tan mujeriego como aparenta siempre termina fastidiándolo…
El siguiente en hablar fue Taiko, y le me paré a escuchar atentamente lo que dice, a lo que estoy totalmente de acuerdo.
Estoy de acuerdo con Taiko, cuanto antes acabemos con todo esto mucho mejor para todos.
Dije con una voz seca y baja esperando las próximas órdenes del jefe.
- Iku tienes una sonrisa preciosa y si para verla mas tengo que defenderte lo hare sin importar lo poderoso que sea aquel que te haga daño.
Me sonrojé pero no dije absolutamente nada, solamente me quede algo pensativa.
Que tierno que es a veces… lástima que sea tan bipolar.
Y después de aquello le gritó a Takeshi por haber asesinado a Shinji tan brutalmente, y, se acercó a mí abrazándome diciéndome que con dos muertes no podría y que me protegerá con su cuerpo si es necesario. La verdad es que me quede algo patidifusa y estupefacta ante aquellas palabras. Lo mire a los ojos con una mirada muy seria, puede que demasiado aun que mis ojos siguen expresando dolor… un dolor que tardará en pasar, le comencé a hablar con una voz seria y fría:
Sinclair, ya sé sabes lo duro que me es sobrellevar la muerte de un nakama, y la de dos aún más por que para mi sois todos como mis hermanos a los que protegería con mi vida si hace falta, y por el simple hecho de sentir que debo protegeros, ni tu ni yo vamos a derrumbarnos ahora ya que estamos todos en peligro, las depresiones y los sentimientos cuando toda esta puñetera pesadilla pase.
Mi rostro y mi voz seguían igual, y de pronto noté como a Sinclair le pasaba algo raro, y pude deducir que era su segunda personalidad ya que a Takeshi le pasa algo parecido.
Vaya… ahora entiendo ciertas cosas…
Takeshi al ver aquello le golpeó en el estómago con el mango de la katana y una atadura de acero con Kami no katana lo inmovilizó de forma que no pueda moverse y después se dirigió a mí diciendo:
Perdona, he de mantenerme aislado, procura que no sucedan más incidentes así
A lo que asentí y sonreí levemente a pesar de que en ese momento mi respeto y aprecio por Takeshi bajó por los suelos… cocinó a un nakama y sigue tan feliz, eso era algo que no conseguía entender.
Pasado unos instantes, aquella monada de lobos, licántropos o lo que sean comenzaron a caminar y el jefe le hace un gesto a Takeshi como si quisiera que le siga, este se incorpora y dice:
El que no me siga limpiará las letrinas del gremio durante dos años.
Lo miro de reojo, con algo de indiferencia, en ese momento lo que dijera Takeshi me lo iba a pasar por donde yo me sé, literalmente, pero a pesar de eso, tenía ganas de patear algún trasero para descargar toda la furia que tengo dentro por la muerte de mis compañeros, sentía tantas emociones a la vez… furia, ira, pena, tristeza, nostalgia, indiferencia… bueno, de todo menos indiferencia. Comencé a seguirlo sin decir palabra pero a cada paso que daba, mi mente se inundaba de recuerdos… algo que hacía que más sentimientos diferentes inunden mi corazón. De mi boca salió un profundo suspiro de dolor y me metí las manos en los bolsillos de mi pantalón vaquero bastante ajustado mientras le dí una patada a una piedra que me encontré por el camino. Miré al horizonte, el Sol comenzaba a ocultarse tras las montañas y el calor iba descendiendo por lo que se me puso la piel de gallina. Me desate mi sudadera negra de la cintura y me la puse aun que no la abroché, por lo cual se podía divisar mi camiseta ajustada u escotada recalcando mi figura, y, tras esto me volví a meter las manos en los bolsillos.
Tras un rato caminando llegamos a una especie de cueva en la cual hay varios túneles, y de pronto el jefe de aquellos lobos nos pide que luchemos contra una especie de científica loca, sonreí y antes de que pudiera responder Takeshi preguntó nuestra opinión. El primero en contestar fue Sinclair:
Ufff difícil lo tengo yo por lo menos machote, no estoy de acuerdo con los experimentos de este tipo, pero una de mis grandes pasiones son las mujeres. Aunque si fuera una mujer con cuerpo de león o una mujer horrenda me lo pensaría. Sin embargo, y ante todo estoy a las ordenes de mi jefe Takeshi, que por cierto Take perdoname por hablar yo primero
No entiendo por qué cada vez que me empiezo a pensar que Sinclair no es tan mujeriego como aparenta siempre termina fastidiándolo…
El siguiente en hablar fue Taiko, y le me paré a escuchar atentamente lo que dice, a lo que estoy totalmente de acuerdo.
Estoy de acuerdo con Taiko, cuanto antes acabemos con todo esto mucho mejor para todos.
Dije con una voz seca y baja esperando las próximas órdenes del jefe.
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Poco a poco íbamos conquistando aquel pueblo fantasma sin dificultad... pero hacía falta la marca de los del Doblón, así que sin mediar palabra con ninguno de los presentes usé el Soru y en un abrir y cerrar de ojos aparecí al lado de nuestro barco que aún estaba encallado en la fina arena de la playa.
-Mmmhh... ¿dónde la habré metido? -susurré hacia mis adentros. -¡AHÁ! La encontré...
Saqué de la bodega una gran bandera que guardaba por si se estropeaba la que usábamos siempre y un gran mástil de unos seis o siete metros de altura.
Volví a usar el Soru para aparecer en el pueblo, cuando llegué alcé la bandera y con furia la clavé en el tejado de la casa más alta que vi... y por lo que se podía ver era la más resistente porque no se derrumbó como las otras.
-Ahora si que si... ¡YAAAAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA! Éste pueblo es de los Piratas del Doblón y que nadie diga lo contrario.
La bandera se podía ver desde varios puntos de la isla y a bastante distancia... así todo el mundo sabría que el pueblo me pertenecía.
-Mmmhh... ¿dónde la habré metido? -susurré hacia mis adentros. -¡AHÁ! La encontré...
Saqué de la bodega una gran bandera que guardaba por si se estropeaba la que usábamos siempre y un gran mástil de unos seis o siete metros de altura.
Volví a usar el Soru para aparecer en el pueblo, cuando llegué alcé la bandera y con furia la clavé en el tejado de la casa más alta que vi... y por lo que se podía ver era la más resistente porque no se derrumbó como las otras.
-Ahora si que si... ¡YAAAAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA! Éste pueblo es de los Piratas del Doblón y que nadie diga lo contrario.
La bandera se podía ver desde varios puntos de la isla y a bastante distancia... así todo el mundo sabría que el pueblo me pertenecía.
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Al parecer no había nada de valor en la casa, tan solo polvo y muebles viejos. Salí de ahí y me di la vuelta para quedarme mirando aquel lugar. Todo indicaba a que era un pueblo fantasma, que ahora era nuestro según el capitán y la bandera improvisada que había conseguido. De repente sentí que comenzaba a enfadarme, pero no sabía muy bien por qué ¿Sería cosa del humo de la planta que había respirado hace un rato? Solo tenía ganas de destrozar todo ese sitio, de reducirlo a escombros. Aún me costaba pensar con claridad, no podía controlarme, quería destrozar y quería hacerlo ya. Hice que del suelo de las casas más cercanas crecieran unas plantas que atravesaron las paredes e hicieron que los edificios se derrumbaran.
No sabía si en aquel sitio había alguien más, pero tenía que quedar claro que aquella era nuestra isla, aunque todo fuera un sueño, ahora podía disfrutar por completo, sin temor a equivocarme, porque cuando despertara nada de eso habría ocurrido.
-¡Y que quede claro! ¡Esta isla ahora pertenece a Los Piratas del Doblón!
Me dirigí velozmente hasta donde el capitán había colocado la bandera e hice que las mismas plantas de antes que nos habían sumergido en aquel sueño crecieran a su alrededor. Solo faltaba el fuego, que no tardó en producirse gracias al roce continuo de dos ramas secas. Pronto aquello comenzó a arder, volviendo a crear aquel humo extraño, que se elevó a una gran altura.
Si había alguien más en la isla podría verlo seguramente, aunque en ese caso también era posible que vieran al capitán. Sin decir nada más, respiré un poco de ese humo y volví a hacer que unas cuantas casas más cayeran.
-Capi ¿Me subes a tus hombros? Me gusta jugar con mis amigas las llamas desde las alturas -le dije con una boba sonrisa.
No sabía si en aquel sitio había alguien más, pero tenía que quedar claro que aquella era nuestra isla, aunque todo fuera un sueño, ahora podía disfrutar por completo, sin temor a equivocarme, porque cuando despertara nada de eso habría ocurrido.
-¡Y que quede claro! ¡Esta isla ahora pertenece a Los Piratas del Doblón!
Me dirigí velozmente hasta donde el capitán había colocado la bandera e hice que las mismas plantas de antes que nos habían sumergido en aquel sueño crecieran a su alrededor. Solo faltaba el fuego, que no tardó en producirse gracias al roce continuo de dos ramas secas. Pronto aquello comenzó a arder, volviendo a crear aquel humo extraño, que se elevó a una gran altura.
Si había alguien más en la isla podría verlo seguramente, aunque en ese caso también era posible que vieran al capitán. Sin decir nada más, respiré un poco de ese humo y volví a hacer que unas cuantas casas más cayeran.
-Capi ¿Me subes a tus hombros? Me gusta jugar con mis amigas las llamas desde las alturas -le dije con una boba sonrisa.
- Spoiler:
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Akuma no mi: Shizen-Shizen no mi: El portador puede crear plantas de todo tipo, tanto a partir de su cuerpo como a distancia, además de manejar las plantas ya existentes.
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Asesina Lvl. 40 / Guardabosques Lvl. 40 / Arqueóloga Lvl. 40
https://www.onepiece-definitiverol.com/t945-elizabeth-jane-evol#12796
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Me encontraba caminando aún por aque sombrío pasillo que parecía nunca acabar. Poco a poco la luz que desprendían las esferas se hacía más tenue, hasta llegar al punto que se hacía difícil caminar debido a la falta de iluminación. Al mismo tiempo que la luz desaparecía, aquellas risas comenzaban a oirse más fuerte y ya noparecían pertenecer a varias personas, sino a una. Poco a poco iba adentrándome en aquel pasillo tan oscuro como el interior de un rey del mar y mi vista se iba acondicionando y acostumbrando a aquella oscuridad hasta tal punto de poder ver y orientarme e intuir lo que eran las miles de figuras y sombras que aparecían por el camino.
- Ya te tengo hijo de puta, ahora te voy a meter una de esas balitas que nos has lanzado por el culo.
Al final llegué a lo que sería una especie de habitación, pero no entré, me quedé en la puerta intentando intuir de que lugar exacto provenía aquella voz y matarlo desde allí sin necesidad de entrar, para evitar ser emboscado.
- Ya te tengo hijo de puta, ahora te voy a meter una de esas balitas que nos has lanzado por el culo.
Al final llegué a lo que sería una especie de habitación, pero no entré, me quedé en la puerta intentando intuir de que lugar exacto provenía aquella voz y matarlo desde allí sin necesidad de entrar, para evitar ser emboscado.
Camus forma normal | Camus Akuma no mi
Nivel: 29
EXP: 13950
Berris: 2650
Nombre: Camus Killer
Bando: Pirata
Banda: Akai Ryu
Poder Carácteristico: [Logia]Uran-Uran (ウラン, Uranio-Uranio): Esta fruta permite a quien la ingiera el poder de convertir su cuerpo en Uranio y moldearlo a su voluntad siempre que éste haya sido creado desde su cuerpo.
Profesiones: Tirador - Espía - Ingeniero
Frase Preferida: "Algún día la guerra será mi tumba. Pero no tengo prisa en morir."
El periódico OPD
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DEBIDO AL CONSTANTE CAMBIO DE MODERADORES DE ESTE CAPÍTULO, LAS SIGUIENTES ACCIONES SERÁN UN POCO TOSCAS Y POCO FLUIDAS, PERO ES OBLIGATORIO QUE SE SIGA OTRA TRAMA. DISCULPEN LAS MOLESTIAS.
- Ikaru & Crimson:
- Nada más derribar la puerta, y tras lo acontecido con la sirena, sin saber por que, sentís que nada de eso fue real, que fue un espejismo y observáis como la habitación a la que llegas está cubierta de agua, que se derrama fuera de la habitación y ya os llega por los tobillos. Varios agujeros en las paredes hacen que el agua entre a mansalva. Parece ser un mecanismo de defensa activado al romper la puerta.
Por la sensación de debilidad que os da, empiezais a pensar que el agua del mar. La habitación se llena cada vez más de agua a mucha velocidad y ésta va saliendo hacia vosotros y llenando el túnel poco a poco
- Peporro:
- Mientras esperas, pegado a la pared cerca de la puerta escuchando las risas, notas la caricia de una melena rozándote la mejilla izquierda, y a la vez, una mano fría y delicada en un tobillo, seguido de más carcajadas que identifícas como las de una mujer o un infante, por su tono agudo.
- Kirito:
- Tras matar a la mujer escuchas un gran crujido seguido de un pequeño temblor. Si te fijas en las piedrecitas del camino y en la arena del sendero, observas que ruedan hacia abajo y tiemblan. Si alzas tu mirada, el sol te ciega sin compasión, pero distingues ver algo parecido a un pájaro grande, o a un ave gorda algo deforme, que surca el cielo hacia ti con no muy buenas intenciones. Lo único que tienes claro es que es una gran mancha que se te acerca.
- Ghost Leviatans:
- Esperando vuestra respuesta los hombres lobo se impacientaban y en el preciso instante en el que el líder volvió a preguntar a Takeshi, una enorme sacudida hizo temblar todo lo presente. Parecía ser cosa de la montaña y no tenía muy buena pinta.
Los hombres lobo parecían tan sorprendidos como asustados.
- Rokudo:
- La mujer Gyojin chasqueó los dedos y produjo un fuerte ruido, como un derrumbe, y tu pareciste salir de un sueño.
Ella ya no estaba ahí cuando abriste los ojos, y tu estabas tirado boca arriba en una habitación que se estaba llenando de agua a una elevada velocidad. El como acabaste ahí no lo sabes, pero no era momento de cuestionarlo.
Si girabas la cabeza podías ver a dos personas en la puerta, pero veías borroso debido al agua y a que te debilitaba.
Tendrías que salir deprisa de ahí, el agua era del mar, llenaba la habitación a mucha velocidad y lo estabas empezando a notar negativamente.
A tu lado tienes un Den Den, pero no está tu división.
- Piratas del Doblón:
- Veis llegar a la costa tres acorazados de la marina, y anclar. Las tropas comienzan a bajar de los barcos, y son bastantes cientos.
Fijándoos bien, hay un nuevo barco amarrado, una fragata pequeña con las velas rojas, sin bandera ni signos de tripulación.
Notáis un fuerte temblor por toda la isla.
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No esperé la respuesta del capitán y me subí yo misma a sus hombros gracias a una planta que me elevó hasta allí. Me encontraba en un estado de relajación extremo, pero algo perturbó mi clama.
Entre el humo de las plantas quemándose pude apreciar unas tenues siluetas que se aproximaban hacia nosotros. No pude ver bien de quiénes se trataba, pero supuse que querrían compartir nuestra felicidad, así que hice que más plantas crecieran junto al fuego, provocando que los alrededores se vieran cubiertos por una espesa capa de humo.
No era consciente del peligro que se os venía encima, solo sabía que al acercarse a nosotros, esas personas sucumbirían al efecto alucinógeno de las plantas.
Entre el humo de las plantas quemándose pude apreciar unas tenues siluetas que se aproximaban hacia nosotros. No pude ver bien de quiénes se trataba, pero supuse que querrían compartir nuestra felicidad, así que hice que más plantas crecieran junto al fuego, provocando que los alrededores se vieran cubiertos por una espesa capa de humo.
No era consciente del peligro que se os venía encima, solo sabía que al acercarse a nosotros, esas personas sucumbirían al efecto alucinógeno de las plantas.
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Mientras esperaba apuntando hacia la sala desde la puerta, pude notar la leve sensación de cosquilleo que deja el cabello cuando acaricia la piel. Esta sensación se manifestó en el lado izquierdo de mi cara, la cual me recordaba a cuando mi madre me abrazaba y su cabello me rozaba la piel. Esa sensación me dejó petrificado, pero fue cuando una mano me agarró por el tobillo derecho, cuando me alerté y volví a escuchar esas risas. Entonces hice que toda mi piel y todo mi cuerpo se transformara en uranio compacto y me puse en posición defensiva. Me di la vuelta pero no veía nada, así que decidí entrar en aquella habitación de una maldita vez, y acabar con quien fuese que nos había disparado.
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Mi invasión se vio interrumpida por un gran estruendo. Giré rápido la vista y pude ver como se acercaban tres buques acorazados de la marina a la playa, en cada buque habían cientos de marines... parecía que había estallado la guerra.
Casi al momento, Elizabeth creó un montón de hojas más. Con tal cantidad de esas plantas alucinógenas sería imposible no terminar drogado... y no hacía falta estar necesariamente cerca para caer en las garras del flipe absoluto.
Por suerte yo era gigante, y la cantidad de María que tenía que inhalar debía ser bastante superior a la que había ahora mismo, eso no quiere decir que estuviera con una risilla tonta... pero no me podía comparar con mis camaradas, tambaleándose entre la espesa niebla y alucinando en colores.
-¡MARINES! Vienen a por lo que nos pertenece... ¡PREPARAOS PARA LA BATALLA! -dije desenfundando mi gran sable. -¡LA GUERRA HA ESTALLADO!
Dicho esto empecé a cargar mi sable con energía espiritual y lancé un corte energético de cinco metros de largo, aproximadamente... y lanzado a una distancia de treinta o cuarenta metros. Por suerte la gran capa de humo creada a partir de la combustión de las hojas tapaba por completo mi persona. Cualquiera que se acercara un mínimo estaría en peligro de caer bajo los efectos de la planta ''milagrosa'' [AF]
Casi al momento, Elizabeth creó un montón de hojas más. Con tal cantidad de esas plantas alucinógenas sería imposible no terminar drogado... y no hacía falta estar necesariamente cerca para caer en las garras del flipe absoluto.
Por suerte yo era gigante, y la cantidad de María que tenía que inhalar debía ser bastante superior a la que había ahora mismo, eso no quiere decir que estuviera con una risilla tonta... pero no me podía comparar con mis camaradas, tambaleándose entre la espesa niebla y alucinando en colores.
-¡MARINES! Vienen a por lo que nos pertenece... ¡PREPARAOS PARA LA BATALLA! -dije desenfundando mi gran sable. -¡LA GUERRA HA ESTALLADO!
Dicho esto empecé a cargar mi sable con energía espiritual y lancé un corte energético de cinco metros de largo, aproximadamente... y lanzado a una distancia de treinta o cuarenta metros. Por suerte la gran capa de humo creada a partir de la combustión de las hojas tapaba por completo mi persona. Cualquiera que se acercara un mínimo estaría en peligro de caer bajo los efectos de la planta ''milagrosa'' [AF]
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- IKARU & CRIMSON:
- El agua sale con tanta potencia que desprende ciertas rocas, las cuales suben por el tunel, empujando vuestros cuerpos, inmovilizados por el agua.
La presión del agua os expulsa hasta fuera, llevándoos al exterior, creando un gran charco de agua, con pedazos de roca, y vuestros cuerpos, recuperándose de dicho suceso.
Frente a vosotros, vuestros barcos anclados y al lado, otros hombres.
Estais a pocos pasos de los barcos
- PEPORRO:
- Un temblor sacude la sala y se llena de agua de pronto por algunas grietas.
El agua sale con tanta potencia que desprende ciertas rocas, las cuales suben por el tunel, empujando tu cuerpo, inmovilizado por el agua.
La presión del agua te expulsa hasta fuera, llevándote al exterior, creando un gran charco de agua, con pedazos de roca, y tu cuerpos, recuperándose de dicho suceso.
Frente a ti, tu barco anclado y al lado, otros hombres.
Estás a pocos pasos de los barcos
- KIRITO:
- La figura del aire te golpea, es una gran roca. Parece ser que la montaña sufre una avalancha, y esta te arrastra hasta el suelo, provocándote daños leves, rasguños y algún moratón.
Caes en un pequeño charco de agua y frente a ti, tienes tu barco anclado y al lado, otros hombres.
Estás a pocos pasos de los barcos
- GHOST LEVIATANS:
- El humo asciende por las construcciones subterraneas de los hombres lobo, y comienza a hacer calor, los temblores siguen, y tras varias grietas en las paredes, la plataforma que pisáis empieza a ascender, con un calor extremo. Los hombres lobo de alrededor caen al vacío, a una lava que emerge.
Resulta que la montaña es un volcán, y está en erupción.
Agarrados como podéis a lo que encontráis, la plataforma, sujeta a un buen pedazo de tierra asciende sin piedad.
Tras salir a la superficie, algunas rocas os golpean levemente y desvían vuestra trayectoria, evitando así que la lava que sale os abrase.
Caéis rodando por la montaña y llegáis a las faldas de la montaña, un gran charco de agua, casi ilesos.
Frente a vosotros, teneis vuestros barcos anclados y al lado, a otros hombres.
Estáis a pocos pasos de los barcos
- ROKUDO:
- El agua sale con tanta potencia que desprende ciertas rocas, las cuales suben por el tunel, empujando tu cuerpo, inmovilizado por el agua.
La presión del agua te expulsa hasta fuera, llevándote al exterior, creando un gran charco de agua, con pedazos de roca, y tu cuerpo, recuperándose de dicho suceso.
Frente a ti, tu barco anclado y al lado, otros hombres.
Estás a pocos pasos de los barcos
- PIRATAS DEL DOBLÓN:
- Los terremotos son cada vez más potentes y hacen que Dromp falle en su ataque.
Ciertos vapores cálidos salen de las grietas del suelo y anulan el efecto del humo que ya existía.
De pronto veis como los barcos acorazados cambian de trayectoria y los Marines han desaparecido. Es vuestra oportunidad de escapar.
Si os fijais en la montaña, podéis ver que es un volcán en erupción
- TODOS:
- Al mirar a la montaña veis que es un volcán en erupción y que está descendiendo por la ladera, y para mayor preocupación, enormes grietas surgen en el terreno de la isla y de estas comienza a surgir mas lava, sepultando poco a poco el pueblo.
Si no huis ya, estáis muertos por la lava.
En el mar, podéis ver tres acorazados de Marine que se van, y una fragata con velas moradas, en la cual se distingue a un hombre pelirrojo cubriendo su retaguardia, se alejan a bastante velocidad como para alcanzarlos.
CAPITULO CERRADO.
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