[Privado][Luth y Rocket] Hora de Aventuras~

Caminaba tranquilamente por la playa, al fin y al cabo no había prisa. Rocket, que permanecía subido a mi hombro, y yo habíamos llegado a la isla en busca de más información sobre un pirata. O mejor dicho... en busca de un posible tesoro. Sonreí al pensar en la maravillosa idea de llegar hasta nuestro grupo con un montón de dinero y joyas en nuestras manos. Seríamos la envidia de todos. Pero de momento vagábamos sin rumbo, la idea de ir a la playa había sido mía. ¿Dónde estaban los piratas? En el mar. ¿Dónde escondían sus tesoros? En la playa. O eso había aprendido con mi antiguo capitán.

-Relájate, no grites, no quiero tener que matar a nadie porque se entere de lo que hacemos y empiece a seguirnos para quitarnos lo que es nuestro ¿de acuerdo?

Suspiré y me paré, la verdad es que llevábamos un rato caminando y todavía no habíamos encontrado ni a un alma por allí. Realmente la culpa era mía por no prestar atención cuando, en mi antigua banda pirata, hablaban de viejas leyendas sobre tesoros o de las muchas islas en las que ellos habían estado. Seguro que alguna vez habían comentado algo sobre ésta. Me maldije internamente, tampoco había hecho mucho caso al rumor, siempre había pensado que todas esas cosas eran tonterías, exageraciones.

-Por aquí tiene que haber alguien que nos pueda decir algo... además siempre se ha dicho que los piratas esconden los tesoros en la playa-realmente era la más indicada para que alguien guardara allí su tesoro, parecía un lugar tranquilo, al menos hasta que habíamos llegado nosotros. Alcé el brazo y comencé a rascarle tras la oreja como hacía con Kenai, era algo que hasta a mi si me lo hacían me relajaba aunque ninguno de mis amigos, a excepción de Kiler, lo supiera- ¿Pero tú estás seguro de que las habladurías se referían a esta isla? A ver si era otra y estamos dando palos de ciego aquí...

Miré en dirección al pueblo, si estábamos en el lugar correcto tenía que haber alguien que supiera algo del tema sí o sí. Era imposible que el rumor hubiera surgido sin que ninguno de los habitantes de la isla se hubiera enterado y, si les había llegado, seguro que se habían puesto a investigar. Tal vez incluso hubieran relacionado los rumores y las investigaciones con historias de antaño que les hubieran contado sus abuelos.

-¿Tu crees que vamos a encontrar algo por la playa? Porque sino votaría por ir al pueblo, así al menos si no encontramos nada nos vamos a algún sitio a comer.