The Forgotten Trans [Fukase - ID]

Trasfondo

¿De verdad debo hablar sobre mi pasado? O sea ¿Acaso eso importa?

Está bien, creo que lo haré, después de todo no es como que la aburrida vida que he tenido hasta ahora sea muy relevante, pero si lo necesitan saber, se las haré saber. Espero presten atención...

Nací en alta mar abordo de una nave pesquera propiedad de mi difunto padre, era una noche tormentosa como de costumbre, el mar furioso intentaba recuperar sus preciados hijos haciendo esfuerzos imposibles para volcar la nave, mi padre timoneaba con audacia y sus tripulantes luchaban contra la marea y la lluvia para no perder la vida en medio del trabajo. Mi madre acompañada de un par de jóvenes, criadas de la familia, dio a luz en el camarote principal, tan solo con la asistencia de aquellas damas. El resto de la noche transcurrió con pasividad una vez la lluvia cesó y los tripulantes pudieron tomar un respiro. Mi padre no aguardó a que todo normalizara para acudir al socorro de mi débil madre y así sostenerme en brazos.

Ese día fui nombrado como Fukaze Ree, único hijo del señor Kuzunoha Ree y la señorita Aoi Ree. Luego de un par de días mas en alta mar, la nave llegó a tierra firme para descargar el botín en los almacenes de la compañía pesquera de mi padre, fui llevado al que sería mi hogar y dejado bajo el cuidado de mi madre y las criadas de la familia Ree.

Una vida normal ¿No lo creen? Claro, si todo hubiese sido así, no sería lo que hoy soy.

Varios años pasaron, mi crianza no fue nada fuera de lo común; modales, buen hablar, pulcritud, respeto, estudios, todo lo que un joven necesitaba para formar parte de aquella familia que a pesar de ser pescadores tenían un apellido que representar frente a los demás. Asistí en mas de una oportunidad a pequeñas reuniones de gala junto a mi madre, vestía ropas un tanto bochornosas a pesar de ser hombre ¿Qué madre en su sano juicio viste a un hijo barón con vestidos largos, tacones, listones, gorros ridículos y guantes de tela? Así era mi madre conmigo y para colmo, me gustaba esa ropa.

El día de mi cumpleaños diecisiete llegó, una fiesta de absurda proporción y costo se realizó en la residencia de mis padres, muchos invitados llegaban con regalos de todas clases, muchos de esos regalos dirigidos a mi como si fuera yo una mujer; lencería de dama, joyería fina, artículos de maquillaje, y más, era ridículo pensar que todo aquello era regalo para un barón, pero mas ridículo era que a mi me encantaban esas cosas.

Durante la noche muchas madres presentaban a sus hijos como prospectos ¿No estaban conscientes de que yo era barón? Quizá nunca se les pasó eso por la mente, menos cuando mi aspecto dejaba mucho a la imaginación y poco a la percepción de mi genero. Mi madre aceptaba cada propuesta con una sonrisa pícara mientras yo solo ignoraba aquella situación para mezclarme con la muchedumbre.

Fue entonces cuando un agudo grito se escuchó; no debí voltear en ese momento... El cuerpo sin vida de mi madre yacía en el suelo, un sujeto tras de ella amenazó a los presentes con arrebatarles la vida si no hacían lo que él pedía, y en menos de los que un gallo canta los secuaces de aquel criminal abordaron la mansión. Fue una noche de terror para todos y un noche en la que mi rencor y odio nació.

Todos mis regalos, todo lo de valor, el dinero de la familia y de los invitados, todo fue robado a costa de la vida de mi madre y a causa de la ausencia de mi fallecido padre. Fui raptado por los bandalos quienes me usaron para amedrentar a las familias que habían llegado como invitados a mi fiesta ¿Qué pretendían hacer conmigo?

Creo que dar mas detalles sobre el asunto después de mi secuestro dejaría este relato muy fuera de tono, pero, la verdad tras todo esto es que después de un mes bajo custodia de aquellos enfermos captores, fui liberado en una pequeña balsa salvavidas, tirada a la deriva en alta mar en medio de una noche igual de tormentosa a la noche de mi nacimiento...

No estoy completamente seguro como ocurrió ni como es que aún sigo con vida, pero, tras perder el conocimiento al quinto día en alta mar, desperté bajo el cuidado de un anciano, estaba en una casa muy humilde y custodiado por él quien veló por mi salud. Aquel hombre relató el como me encontró y dijo que asombrosamente pude sobrevivir, cosa que para el resultó milagroso. A mi me dio absolutamente igual, agradecí su ayuda y apenas tuve la oportunidad de escapar, lo hice... pero... ¿Porque?

Me encuentro actualmente vagando por las islas y cada rincón de este podrido mundo buscando a aquellos captores para hacerlos pagar por lo que me han hecho, erradicar sus vidas con igual crueldad y hacerles saber que es el sufrimiento real, aunque tenga que arrancar cada parte de sus cuerpos con una pinza de cejas.

La pregunta final a mi relato y con la cual cerraré esta historia aburrida ¿Qué es lo que me ha llevado a convertirme en un criminal? El motivo es simple y sencillo, debo de involucrarme en esos ambientes para poder encontrar pistas de mis captores, codearme con gente de su calaña y ganarme la confianza de todos ellos para así poder socavar de forma mas fácil la información, ni mas ni menos.

Personalidad

Déjenme hablar un poco de como podría ser ante ustedes, claro, como persona.

Soy un chico de gustos muy fijos, la encarnación viva de un egocéntrico con aires de grandeza, pues no es para menos, soy único y no hay nadie igual a mi en el mundo, además, jamás existirá ser vivo capaz de igualarme.

No poseo vulgaridades atadas a mi habla, me considero refinado y de modales correctos, alguien que a pesar de ser egocéntrico, es modesto y sabe como amoldarse al entorno en el que se encuentra. Pero, no todo es color de rosas, si no ¿Qué de divertido tendría la vida?

Odio con la fuerza de todo el mundo a los depresivos, por no decir que me repugnan, no tolero el contacto físico no concedido, a decir verdad, si tengo la oportunidad pasaré un pañuelo limpio sobre el lugar que me han tocado, me gustan las cosas hechas a la medida que a mi mejor me convenga, pues, si no es como yo digo, entonces no está correcto y no me gustará.

Se me da fatal el comunicarme de manera correcta al formar equipos, pero, eso no quiere decir que no pueda trabajar con alguien, claro, solo si está dispuesto a que le mande a hacer todo mientras disfruto del sol o de la noche estrellada en soledad.

Resumiendo, soy un chico bonito con comportamientos de noble ricachón malcriado.

Apariencia

¿Hablamos ahora de mi apariencia? Creo que aclarar lo que ya se ha dado a conocer en parte en mi relato no estaría mal después de todo...

Mi guardarropas es muy poco usual en un joven, mucho menos en un barón. Consta de prendas femeninas muy llamativas, vestidos largos, zapatillas de tacón, guantes de tela blancos, listones, gorros, moños y corbatines, toda clase de prendas que poco son usadas en hombres y que es mas usual admirar en chicas de buen vestir y de gustos refinados.

Fuera de mi vestimenta, y por mucho que me apene decirlo; tras estar bajo la custodia de aquellos captores mi pequeño cuerpo recibió frecuentemente el maltrato y abuso de ellos, perdí la visión de mi ojo izquierdo, mi pierna izquierda dejó de funcionar correctamente e incluso perdí completamente la capacidad auditiva de mi oído izquierdo, pero, no todo fue por obra de golpes, si no por la abominación que trataron de hacer conmigo usando ciertos ácidos y líquidos corrosivos que, corroyeron mi cuerpo y lo dejaron en el estado actual.

Un bastón de madera ha sido entonces mi fiel compañero, un parche adornado y sutil fue colocado para tapar mi ojo desfigurado, un pié de madera y unas cuantas correas que sostienen mi pierna han ayudado a mantenerla en su lugar, pero, me han dejado con la capacidad motora un poco escueta, todo por culpa de aquello hombres que se han vuelto mi motivo de venganza total.

Ahora hablemos un poco de mis aspectos fuertes y notables; soy un joven de baja estatura que logró mantener pese a todo su hermosa figura y rostro precioso, de cabello liso y un tanto rebelde a tono rojizo, tez pálida cual hoja de escritura, iris carmín poco común y una figura poco fornida debido a que me es actualmente imposible realizar mucho esfuerzo para mejorar mi fuerza.

Estilo de lucha

Estoque Del Monarca

Consiste en el combate a una mano usando un estoque como arma principal, se rige especialmente en el arte de la evasión de ataques directos para contraatacar estos buscando el desequilibrio del enemigo curvando las posturas subsiguientes al ataque, en resumen, un estilo de combate que busca el desequilibrio del rival para aprovecharlo en pro de acertar una o varias estocadas en zonas vitales.

Esta no es un arte de combate brutal ni contundente que requiera de fuerza sin igual, mas si necesita de una destreza y agilidad considerable para poder ejecutar los movimientos necesarios que den pie al desequilibrio de los enemigos, además, se debe conocer los métodos de combate del enemigo para poder ejecutar maniobras contraofensivas certeras.

Armas

Bastón de estoque: Bastón hueco por dentro que lleva oculto un estoque sujeto al puño como sirviéndole de vaina.

Saberes

Sigilo, Infiltración.

Pertenencias

Reloj de bolsillo antiguo.