¡10 años en activo! Hace ya 10 años que esta comunidad, todavía más antigua, encontró su lugar en OPD. Los tiempos han cambiado y los usuarios más antiguos han dado paso a las nuevas generaciones que hoy rolean, pero siempre con el mismo espíritu que nos vio nacer: Construir juntos la historia más grande jamás contada. Da igual si acabas de llegar o llevas una vida; si te quedas o te vas: Gracias por hacer de este foro un lugar mejor.
27/02La actualización ha terminado con éxito casi completo. Quedan cosas por pulir, pero en breves se solventarán.
27/02Hemos tenido un pequeño problema con las afiliaciones al cambiar de skin. Rogamos comprensión y un poco de paciencia.
27/02La lotería ha terminado. Ya no se pueden intercambiar más premios por este evento; gracias a todos por participar.
Búsquedas
Últimos Temas
Últimos temas
2.0Ayer a las 4:11Christa
Descubriendo el desiertoMiér 8 Mayo 2024 - 19:40Berry
Petición de validación de diariosMar 7 Mayo 2024 - 22:00Raulgamerlol11
Escapando de Spider MilesMar 7 Mayo 2024 - 21:55Raulgamerlol11
Rhea Mar 7 Mayo 2024 - 20:36Raulgamerlol11
El Clan: Tercera parte [Privado]Mar 7 Mayo 2024 - 18:51Christa
Petición de experiencia y premiosMar 7 Mayo 2024 - 14:20El Gremio OPD
El náufragoDom 5 Mayo 2024 - 1:46Raulgamerlol11
Siguiente ronda


Ir abajo
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 5:53}

Iba atrasado. Maldita sea. Taiga me iba a matar por llegar tan tarde… ¿Por qué me había atrasado? Me había quedado dormido luego de celebrar con unos tipos en una isla vecina. Se me había olvidado… No…. No se me olvido, sino que, más bien, entre copas y copas, se me terminó por confundir la fecha del encuentro. De no ser por aquella carta que estaba, perfectamente, ubicada debajo de mi almohada se me habría olvidado y no habría viajado, usando todos mis grandes dotes de navegación, para llegar a mi encuentro con Taiga.

– Un atraso de un día es perdonable. – Dije mientras me bajaba del barco y empezaba a correr a toda velocidad buscando a Taiga. ¿Dónde estaría metido? Sí, mi retraso era de un puto día y seguro se aburrió de esperar y ya se había largado poniendo, de esa forma, fin a nuestra extraña relación de pirata y cazador de recompensas. ¡No! Me negaba a dejar escapar a esa mina de oro… Digo… A mi mejor amigo. ”Si yo fuera Taiga… ¡Estaría apostando! – pensé mientras buscaba con la mirada, cualquier lugar donde alguien pudiera apostar. Tabernas, casinos, casinos ilegales o lo que sea donde alguien pudiera ganar o perder mucho dinero. Incluso, me bastaba con que estuviera jugando en algún callejón.

– ¡Taiga! ¡Taiga! – Empecé a gritar, como si fuera tal novio desesperado, para encontrar a mi amigo. ”Vamos… Aparece” – dudaba que estuviera muerto o algo así, era muy listo para eso… ¿O no? ”¿Por qué siempre pienso que está muerto?” – me encogí de hombros y seguí corriendo, gritando y buscando donde pudiera estar.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 6:11}

Taiga corría como un desesperado por mitad de la isla. Se había quedado dormido en un puto bote y se había desviado por unas veinticuatro horas. Esperaba que su colega no estuviese enfadado. La suerte fue que durante el trayecto no le tiró al mar ninguna ola ni nada parecido. Ya no podía darse el lujo de caerse al agua pues había ingerido una fruta. Casualmente la que buscaba y por ello estaba realmente feliz. Por el momento se desplazaba a toda velocidad dando largas zancadas y mirando en varias direcciones al mismo tiempo. Era complicado hacer eso y en muchas ocasiones parecía ser visco. Estaba agotado de tanto moverse y trató de controlar mejor la respiración.

Ese día llevaba su pelo engominado hacia atrás como de costumbre. Portaba su camiseta blanca de manga larga y por encima la chaqueta negra con las dos hombreras grisáceas. En su espalda llevaba amarrado su precioso taco de villar. Tenía sus pantalones largos oscuros y sus botas. En la cintura llevaba amarrada una vaina negra. Era un regalo para el moreno. La había conseguido en una dura cacería dónde no se había llevado nada de dinero. Todo por el agente Castor Troy que se la había jugado. Sin embargo se había llevado aquella perfecta fruta que le había alegrado la vida.

Después de unos momentos corriendo escuchó como alguien le llamaba por su nombre. No tardó mucho en reconocer la voz y sonrió de forma amplia. El rubio echó a correr tranquilamente hasta que finalmente vio al moreno. Justo cuando estaba llegando tropezó con una piedra y empezó a dar zancadas torpes hacia él a toda velocidad. – ¡Cuidado, Ushio! – Gritó sin poder frenarse. Si no se apartaba caería sobre él, si lo esquivaba se comería el suelo. El pobre no podía frenar y su limpieza en la chaqueta dependía de su querido amigo de espada portentosa.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 7:03}

Seguía corriendo como alma que se la llevaba el diablo. Buscando a mi mina de oro personal o a mi mejor amigo. Estaba en eso, gritando, corriendo y mirando a cada callejón que iba pasando, cuando escuché mi nombre. Me detuve en seco y entonces sentí como si el mundo me empezara a dar vueltas. La voz la había reconocido y era Taiga, lo que no me esperaba era que el maldito me empujara y me terminara botando. ”Como pesas, maldito” – pensé mientras me lo quitaba de encima y me levantaba.

– ¡Taiga! – Luego de meses sin verlo, aparecía de esa forma. Estaba alegre de encontrarlo, le tendí la mano para ayudarlo a levantarse. Me fijé en lo que llevaba puesto y entre sus cosas, en una vaina en su cintura, portaba una espada. ”¿Desde cuándo eres espadachín?” – en todos nuestros combates nunca lo vi emplear ni de lejos un arma con filo. ¿Por qué la tenía? Ignoré eso y me quedé en silencio unos minutos. Pero… Me carcomía la curiosidad, la espada se veía bonita por lo que alcanzaba ver y si aquel idiota no la sabía usar, sería una tortura para el arma. No había nada peor que una espada utilizada por un idiota.

– Taiga, ¿desde cuándo usas una espada? – Apunté a su cintura. Nunca me hubiera imaginado que un tipo que amaba sus puños, pelearía usando un arma que, desde lejos, era para alguien más listo que la mayoría. No era que Taiga fuera un idiota… Pero dejaba mucho que desear. Me lo imaginé usando aquella espada y en todos los escenarios el muy bestia se terminaba cercenando un brazo o se terminaba matando de alguna forma. Suspiré y esperé su respuesta. Luego de esto, tendríamos que organizar nuestro viaje e ir por cosas más grandes. Por verdaderos objetivos y no esas mierdas que estábamos cazando últimamente.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 7:24}

Ambos había rodado un poco pero gracias al cuerpo del moreno, el rubio se había librado de tener que limpiarse la chaqueta. Enseguida tomó la mano de Ushio y se levantó soltando una carcajada para después limpiarse un poco el pantalón. Hacía un tiempo que no veía al chico pero sin embargo no había cambiado mucho. Seguía con el mismo estilo de pelo y demás, justo como él. La diferencia es que ahora el rubio era un cazador de más prestigio y su licencia había mejorado hasta poder cobrar la mitad por un criminal. Aquello le parecía genial y algo que le haría ser muy feliz pues podría conseguir más dinero para él y para el hombre que tenía frente a sus ojos.

Ahora escuchó sus palabras y no pudo evitar echarse a reír mientras miraba la vaina. Jamás usaría las espadas pues amaba las peleas cuerpo a cuerpo desde siempre. Ahora tomó aquella arma del mango y la sacó realizando un sonido metálico. Tenía grabado en la hoja el símbolo del Yin Yang. Ahora la mostró en todo su esplendor y la guardó en su vaina para después tomarla y estirarla hacia el moreno. – Yo nunca usaría un arma que no fueran mis puños o mi taco de villar. Encontré esta espada en la base de unos criminales. Está hecha de kairouseki puro y además es increíble. Si la he traído es por qué es un regalo para mi mejor amigo. – Sonrió diciendo aquello esperando que la cogiera.

En ese momento soltó un suspiro mientras se cruzaba de brazos. También tenía noticias frescas sobre los enemigos que perseguían y por ello iba a informarle. – Bueno, Ushio. Resulta que la banda que perseguimos es conocida como “Imperium”. Además tienen un grupo de divisiones repartidas por los mares. En esta isla se halla uno de los cabecillas. Se llama Juzai. Al parecer usuario de una fruta zoan de chimpancé. – Una vez dijo eso sonrió con calma esperando a que su amigo pillara la indirecta de ir a por él. – Sé que usa una vara de acero como arma. Pero lo mejor es que mi licencia ha mejorado y ahora cobro el cincuenta por ciento. Ese capullo vale setenta millones. Tocaríamos a diecisiete por cabeza. – Dicho aquello esperó a ver cuál era su reacción con lo dicho.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 7:47}

Taiga me mostró la hoja de aquella espada y yo, como espadachín que era, estaba más que fascinado. Era una hoja preciosa y tenía dibujado el símbolo del ying y el yang y una de sus características era que era de Kairoseki puro. El cazador, según me contaba, la había encontrado en una base de algunos criminales… ”Tengo que hacer algo así algún día” – Sus siguientes palabras me dejaron anonado. Entre otras cosas… ¡Me estaba regalando aquella hermosa espada! La agarré con gusto y luego escuché sus siguientes palabras. Me traía noticias frescas sobre la banda que buscábamos. Se llamaban Imperium y, aparte de tener varias divisiones repartidas por los mares, un cabecilla estaba en esta isla. Valía setenta millones y, gracias a la nueva licencia de Taiga, cobraríamos la mitad. Es decir, diecisiete millones por ese bastardo.

– Primero, mil gracias por la espada – dije mientras la ponía en mi cintura. Tenerla en la espalda iba a ser un caos, y, aparte, así la podía diferenciar del resto. Tenerla  en un lugar reservado… – Supongo que ese tipo nos está gritando que lo arrestemos – empecé a caminar con calma. No tenía idea de donde estaba, pero ya me empezaría a guiar Taiga. Me interesaba el hecho de que tuviera una zoan… Era el momento ideal para comprobar el poder del Kairoseki y ver si podía ser útil contra ellos. – Eso sí, busquemos información, con él, sobre el paradero de su capitán o, al menos, de su sub capitán. – Estaba emocionado. Hace mucho que esperaba alguna pelea divertida y, que aparte de ganar, algo de dinero extra.

– Podríamos tener nuestro propio barco, ¿sabes? – dije con un tono tranquilo. Ya me estaban aburriendo esas mierdas de barcos en las que viajábamos. Necesitábamos algo acorde a nuestras necesidades y uno de esos era uno de lujo. – Juntar todo nuestro dinero y comprar uno increíble. Nuestro viaje, indudablemente, nos llevará a la Grand Line – caminaba a paso lento. Mi idea era tenerlo para que nuestro viaje fuera en mejores condiciones y, aparte, para poder navegar sin problemas por el más peligroso de los mares. – ¿Qué opinas, Taiga? – Le pregunté mientras llevaba mis dos manos a mi nuca.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 8:06}

Taiga sonrió de forma calmada para después alegrarse de que a su compañero le gustase aquel regalo que le había hecho. De aquella forma juntos tendrían un poder impresionante. Las habilidades de espadachín del chico sumadas a los potentes combos de luchador del rubio. Parecía una historia de ficción y todo pero ambos podían conseguirlo. De hecho el cazador no le había contado a su colega las últimas novedades sobre él así que era momento de hacerlo y de paso informarle. Esperaba ver una reacción divertida cuando le dijera que era un usuario de las frutas del diablo, además de una bastante poderosa. Tal y como él decía, aquellos corsarios estaban gritando a voces que les arrestaran y eso es lo que iba a hacer aquel día. Uno de aquellos malnacidos asesinos iba a encontrar el viaje final.

Ahora escuchó lo del barco y empezó a caminar hacia un pequeño templo. Decían que aquella persona se hallaba allí escondida y había usado a los monjes como rehenes. Éstos como era normal no podían decir nada o serían asesinados. Iba a tener que ser un objetivo rápido. Una vez empezase la batalla, las cosas serían más sencillas para ambos. La idea del navío no era nada mala pues de hecho el cazador había ido hasta allí en un triste bote. De modo que ahora soltó una leve carcajada. – Me parece buena idea. Pero son caros, de modo que deberemos ahorrar más. Por cierto por fin hallé la fruta que buscaba, Ushio. Ahora soy un zoan mitológico. – Nada más decirle aquello iluminó sus ojos en un tono dorado intenso que le hacía parecer algo siniestro.

Además sus colmillos se afilaron bastante. Nada más hacer aquello volvió a poner sus orbes en un tono azulado tranquilo y volvió a sus dientes a la normalidad. No pudo evitar mostrar una expresión tranquila mientras caminaba a su lado divisando el templo a unos cuarenta metros. – En ese templo de ahí reside el causante de todos los problemas de la isla. Tiene rehenes, de modo que habrá que ir con mucho cuidado. – Una vez dijo aquello mostró una sonrisa calmada para después llevar la mano derecha a su taco de villar azul. Era el momento de la acción y para él no sería un rival muy difícil. Su fuerza era impresionante ahora y quería demostrárselo a su compañero.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 8:22}

Taiga, como me esperaba, empezó a guiarme a la ubicación de aquel sujeto. Escuché con atención lo que me decía y me sorprendió el hecho de que ahora fuera un usuario de las frutas. No se había tardado nada en encontrar la que él buscaba. Me explicó en que era una zoan mitológica y me mostró algunos de sus cambios. Sus ojos cambiaron a ser dorados intensos y sus dientes más afilados. ¿Qué otras sorpresas estaba escondiendo? Muchas cosas habían cambiado en pocos meses y, aunque en la práctica seguía igual, estaba más experimentado en batallas y mi dominio de la espada había avanzado. Y ahora poseía una espada para contrarrestar los efectos de las Akuma no mi. Lentamente, nos estábamos fortaleciendo.

Al parecer, le había agradado la idea de tener un barco de primera mano. Y luego, siguió con la explicación de lo que pasaba en la isla. Al parecer, el maldito que buscábamos, tenía de rehenes a unos monjes y se quedaba en un templo. Lo que significaba dos cosas: una, tendríamos que ir con más cuidado y dos, en cualquier momento, podíamos perder el control de la situación. Teníamos que idear algún plan y, por suerte, ya tenía uno que, seguramente, iba a funcionar a la perfección.

– Usemos el factor sorpresa, Taiga – empecé a decir con total tranquilidad. – Al llegar al templo, dividámonos. Tú, enfrentarías a ese sujeto, yo me encargo de los rehenes – aunque también debíamos considerar que podía tener a sus nakamas en cualquier lugar de la isla y que la pelea se volviera más difícil. – También, deberíamos pensar en la posibilidad de que aquel tipo tenga nakamas en el mismo templo o en lugares cercanos – lentamente empezábamos a ver el templo más de cerca. Suspiré y me fui concentrando. – La prioridad, en todo caso, son los rehenes. Si las cosas se empiezan a poner difíciles, deberíamos huir y hacer otra estrategia – no, no era un cobarde y estaba lejos de serlo, pero me gustaba tener todos los posibles escenarios cubiertos. – Ya quiero ver que tan fuerte te has hecho, amigo. – Finalicé dándole pequeños golpecitos en la espalda a modo de aliento.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Dom 28 Feb 2016 - 8:42}

El moreno quizás tenía razón y allí había más enemigos escondidos. Con su nuevo olfato podía oler a las personas pero no sabía el número de rehenes que había y eso era una putada muy grande pues no podía entender cuantos enemigos había. No tardó en soltar un suspiro mientras mantenía ahora la sonrisa calmada en todo momento. Recordó su combate con el jodido comandante revolucionario. De no ser por Castor seguramente habría muerto. Menos mal que el agente pese a ser codicioso era buen compañero. Aunque el hecho de que usase pistolas hacía que el rubio se sintiera incómodo luchando junto a él. Cada cual tenía sus gustos en cuanto a armas y debía comprenderlo. Después de unos momentos dejó de pensar en el castaño y volvió al mundo real.

Escuchó lentamente las palabras del chico y le dejó ingeniar aquella estrategia. Ya habían llegado y frente al rubio se hallaba la entrada. Ahora no pudo evitar entrecerrar los ojos para después relamerse despacio. – Es un buen plan. Trataré de entretenerle el tiempo suficiente mientras liberas a esos pobres monjes. – Dijo sintiendo los golpecitos en la espalda. A continuación le dio otro suave en el hombro y empezó a caminar hacia el lugar tranquilamente. Pasó por aquellas columnas carmesíes para después entrar en una enorme sala dónde había una estatua de buda y algunas alfombrillas. Supuso que allí era dónde los pobres hombres rezaban.

Esperaba que el jodido pirata les dejase. Entonces fue cuando de la nada surgió una voz bastante grave. – ¿Quién te ha dado permiso para venir? – Aquella voz pertenecía sin duda al cabrón que buscaba. Se trataba de un hombre de dos metros. Carecía de pelo y sus ojos eran oscuros como la noche. Portaba una túnica dorada y en su mano derecha había un largo tuvo de hierro. Su nariz era bastante gruesa. Portaba un par de sandalias de madera y además parecía mosqueado. Una cicatriz traspasaba su ojo derecho. Ahora empezó a caminar hacia el rubio con el ceño fruncido. Al parecer la diversión no había hecho más que comenzar en aquella enorme sala.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Lun 29 Feb 2016 - 3:58}

Suspiré y una vez Taiga me confirmó que mi plan era bueno y que lo iba a entretener el tiempo suficiente, me fui por otro camino. Era un templo, seguro que tenía alguna otra entrada y, aparte, si era yo el secuestrador, no tendría a los rehenes en la sala de siempre. Los escondería en las habitaciones que, usualmente, tenían aquellos monjes. Después de todo, vivían aquí y su día lo pasaban aquí. Entre meditaciones y meditaciones… ”No tienen la culpa…” – no me demoré mucho en dar la vuelta y encontrar, efectivamente, la entrada trasera. Una pequeña puerta de madera que, por su aspecto, llevaba años sin que alguien la reparara. Me concentré y entré con cuidado… ”Buena suerte, Taiga” – pensaba mientras revisaba habitación tras habitación. Buscando a los rehenes y liberarlos.

– ¿Dónde mierda están? – finalmente… en la decimoquinta habitación que revisaba, los encontré. Todos estaban igual: atados de pies y manos y una venda en los ojos y boca. Me acerqué a ellos y, noté que estaban heridos… ¿Torturados? Negué con la cabeza y esperaba que solo fuesen heridas de combate por defender aquel sitio sagrado para ellos. Le saqué ambas vendas a uno, esperando información… No había mucha diferencia entre como vestían y como eran, todos calvos. Al menos, al que le había sacado todas las cosas, tenía los ojos verdes y una barba larga. – Tranquilo, no te haré daño. Vinimos a rescatarlos. Mi amigo ahora está divirtiendo a aquel tipo y así yo les consigo tiempo para que escapen. – El monje asintió con fuerza y sonrió de manera amable.

– Tengan cuidado, escuché algo de una bomba y… Son cinco, contando a aquel tipo – con una de mis espadas, le corté las cuerdas que los ataban y este se levantó. – Llegaron sin previo aviso… ¿Por qué nos hicieron esto? – Me di media vuelta. Él, seguramente, sabría qué hacer con sus compañeros y en qué dirección huir. Me dirigí a la puerta a paso raudo.

– No sé porque lo hicieron ni que razones tendrían… Pero los detendremos. Pase lo que pase, no se dirijan a los ruidos de la batalla y alerten a los que estén cerca. No queremos más víctimas. Esa es tu misión… – tomé una leve pausa y salí al pasillo. En este ya había un tipo con una maza gigante en sus manos. – La mía es acabar con estas mierdas. – Saqué mi otra espada normal y me preparé para la batalla. Tenía que acabar rápido con ellos, encontrar la bomba, desactivarla de alguna manera y luego, si tenía tiempo, ir a ayudar a Taiga. ¿Cuánto tiempo tendríamos?
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Lun 29 Feb 2016 - 6:46}

El puño derecho el rubio impactó contra el de aquel tipo. Sin embargo el criminal cayó de espaldas al sentir la tremenda potencia del cazador. La fuerza de aquel chico era tremendamente exagerada debido a que su fruta le había colmado de poderes increíbles. Las cacerías iban a ser algo muy diferente a partir de ese día. – Lo mejor sería que te rindieses. No puedes derrotarme. – Dijo ahora con toda la calma del mundo mientras mostraba una sonrisa ladeada. Tan solo se había hecho un ataque entre los dos. Aquel combate apenas había empezado. El calvo ahora frunció el ceño y comenzó a correr hacia su oponente con aquel tuvo en la mano. – ¡No eres más que un crío! – El taco de villar azul acabó clavándose en el pecho de aquel inútil tirándolo de nuevo. Estaba siendo demasiado fácil. Una ligera sonrisa se mostró en el rostro de aquel luchador, que enseguida suspiró pensando en la fama que tenía aquella persona.

Aquel tipo comenzó a cambiar de repente. Su rostro se llenó de pelo y su camiseta estalló por los aires. Sus orejas crecieron algo más y su se recubrió de un intenso pelaje negro. Llegó a medir los tres metros y a ponerse más fornido. Se había transformado en su forma híbrida y aquello provocó que el joven suspirase. Sin verlo se llevó un potente puñetazo en el rostro y acabó tirado contra el suelo y sangrando por la boca. Aquella cosa tenía una velocidad impresionante para ser verdad. El cazador se levantó ahora un poco mareado tratando de recobrar la postura cuando en ese momento vio como dos hombres más aparecían junto al maldito simio. Portaban tanto capuchas como espadas. En ese momento el chico frunció el ceño y chasqueó la lengua. Enseguida se quitó la chaqueta quedando con aquella camiseta blanca para después apretar los puños con fuerza. Un aura oscura empezó a rodearle de forma intensa.

Parecía una pequeña humareda que se movía a su alrededor. En aquel momento frunció el ceño mientras tomaba aire y apretaba los dientes. A continuación dio un paso hacia adelante mientras gritaba con fuerza. – ¡Kemono! – Una terrible onda de choque surgió de su puño en cuanto golpeó el aire. Tanto el simio como los dos idiotas salieron disparados por los aires atravesando una estatua y quedando tirados en el suelo. Los encapuchados habían quedado inconscientes y ya solo faltaba el capullo del usuario, que volvía a estar en pie. Sin embargo se notaba que estaba cansado y no tardó en escupir a un lado mientras agarraba la barra con fuerza. – ¡Tan solo he usado un cinco por ciento de mi poder! ¡Vamos! – El cazador se había vuelto mucho más fuerte que la vez anterior y ni siquiera se estaba esforzando en aquella pelea. El aura oscura continuaba rodeándole y él no parecía molestarse por ella.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Lun 29 Feb 2016 - 7:13}

La pelea había sido realmente rápida. Escuché los ruidos provenientes desde donde estaba Taiga y, por momentos, me preocupaba. Tanto así que, con dos simples ataques el tipo del mazo ya estaba tirado en el suelo. Tenía un hermoso tajo en su pecho y otro cerca de su hombro, por poco no le había cortado su extremidad derecha. ”Tienes suerte” – Empecé a correr por los pasillos, esperando que Taiga estuviera aún con vida y que hubiera ganado. No sabía que tan fuerte era aquel tipo, pero si activaba la bomba todos nos iríamos al carajo y no, no quería pagar por remodelar aquel maldito templo. ¿En qué me estaba convirtiendo? Un poco de dinero me estaba cambiando, suspiré y seguí mi camino con tranquilidad.

– Odio estar contra el tiempo y con tanta incertidumbre. – Susurraba con frustración. Lo bueno, por ahora, nadie sabía de mi existencia y, de momento, todo estaba yendo bien. Las probabilidades de encontrarme con alguien más eran, más bien, escasas. Estaba seguro que todos los idiotas se centrarían en Taiga. Giré a la izquierda en un pasillo y una bala casi me deja sin ojo. ”Pudo ser tu nakama, maldito” – pensé a la par que sentía una pequeña herida por  arriba de mi ceja izquierda. Solo me había rozado… De milagro.

– Menudo inútil. No pudo cumplir la simple tarea de cuidar a los rehenes – suspiró de forma pesada. Portaba dos pistolas, en cada mano, una escopeta en su espalda, tres pistolas cortas en su cintura y, veía uno que otro cuchillo en cada pierna. ”Wow… Eso es estar armado” – Era una artillería hecha hombre y sonreía de forma arrogante. – Mi líder acabara con el otro y yo… Contigo. – Seguramente tenía algo más que decir, pero mientras hablaba y presumía, yo ya estaba adelante suyo con ambas espadas en su cuello, listo para decapitarlo.

– Bien… O me dices donde está la bomba… O tu cabeza rueda. Tú eliges, my friend. – Mi tono fue frío y aquel castaño de ojos rojos, no tardó en tirar sus armas. Asintió, con mucho miedo, con la cabeza y noté que tragaba saliva.

– La bomba la tiene mi líder. Él es la bomba, tiene un botón en su mano derecha que pone en marcha todo. Si lo enojan mucho, activará todo y todos volaremos en pedazos… – Por su tono de voz, dudaba que estuviera mintiendo. ”Y mi amigo tiene la facilidad de hacer enojar a los tipos equivocados” – lo golpeé con el mango de la espada en su estómago y cayó inconsciente. Tenía que llegar rápido a donde mi compañero. Por suerte, estaba cerca… O lo suficiente para escuchar los gritos de mi compañero. Era mi oportunidad. Entré al sitio de la pelea y aquel mono hombre, hombre mono o lo que sea estaba de pie, con heridas bastante feas… Pero estaba agotado, se notaba y, al mirar al cazador, vi que apenas tenía algún rasguño. ”Oportunidad perfecta para usar eso” – Envainé ambas espadas y saqué la de Kairoseki…

– Se acabó. – Susurré mientras corría hacía él, aprovechando que no me estaba viendo y que, por su cara, solo miraba a Taiga. Cuando se dio cuenta de mí, yo ya estaba en su costado izquierdo, sin dudar, le hice un tajo en horizontal por encima de su cintura. La idea era hacer un corte superficial, luego con velocidad agarré su mano izquierda y, usando la espada de Kairoseki, se la enterré a la pared. Gritos de dolor iban y venían, acompañados de diferentes insultos de todo tipo, saqué mi espada negra y… Le corté la mano derecha.

– Haz el interrogatorio, Taiga. Yo ya te salve de volar por los aires.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Mar 1 Mar 2016 - 8:02}

Taiga observaba al mono de forma calmada mientras su habilidad Kemono continuaba activada a su alrededor en forma de aquella aura oscura. Sus ondas de choque resultaban ser monstruosas cuando activaba aquella habilidad. Sus azulados ojos miraban al simio con toda la calma del mundo y ahora fue cuando se preparó para darle otro golpe de los suyos. No pensaba recurrir a los poderes de su fruta si no era estrictamente necesario. De hecho ahora agarró su taco de villar y empezó a moverlo de un lado a otro preparando su ataque. Iba a pegarle en todo el centro de la cara y tratar de dejarlo aturdido con aquello. Lo que si debía evitar era la maldita vara pues el hierro era más potente que la madera y no quería perder su amada arma de color azul.

Cuando estaba a punto de realizar su ataque notó como el simio lanzaba hacia él un puñetazo. Rápidamente puso los brazos en equis y notó el impacto retrocediendo varios metros. Sintió un dolor bastante intenso en sus huesos y fue cuando frunció el ceño susurrando. – Ice Punch… – Preparó su pierna derecha para tratar de realizar otro ataque más potente cuando de repente observó como el moreno aparecía. A una velocidad impresionante hizo un corte en aquel tipo y además de dejarlo tonto con el kairouseki, le había cortado la mano. Después le dijo que ya le había salvado de volar por los aires y que le interrogara. No entendió nada hasta que miró la zona cortada y vio una especie de dispositivo en la palma. Entonces lo entendió todo y frunció el ceño. Aquel cabrón quería estallar y llevarse consigo a los dos y a los monjes. No pudo evitar fruncir el ceño para después colocar la punta de su taco de villar en el cuello del enemigo.

Éste frunció el ceño mientras gruñía volviendo a la forma humana y sin poder moverse. – No pienso decir nada idiotas. Cuando mi capitán se enteré de esto vais a morir imbéciles. – Aquel payaso comenzó a reírse de forma exagerada para después mirar al rubio. El cazador simplemente le pegó un golpe en la cara con su taco para después fruncir el ceño. – Tu capitán será el próximo. Lo mejor será que hables de una vez o lo vas a pasar bastante mal. – Aquel desgraciado en aquel momento mordió con fuerza una especie de capsula que llevaba en la boca y tragó algo. El luchador pensó que por muchas cosas que se metiera no iba a librarse del kairouseki. Pero cuando vio la espuma salir de su boca y sus ojos cerrarse entendió que se había suicidado con veneno. Al parecer aquellos tipos tenían una lealtad impresionante hacia su capitán. – Eso no me lo esperaba ¿Qué podemos hacer ahora? Estos cabrones tienen devoción por su capitán. – Soltó un suspiro para después cruzarse de brazos y pones una expresión un poco seria. Además guardó su taco de villar en la espalda.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Jue 3 Mar 2016 - 3:21}

Definitivamente, teníamos mala suerte… ¿Por qué todos los tipos que encontrábamos se suicidaban? Había pasado con el tipo en Nanami y ahora pasó con el hombre mono. Suspiré y saqué la espada de Kairouseki de su mano y la volví a envainar. Al menos, no iba a estallar nada y todo estaría a salvo. Miré a Taiga y escuché sus preguntas. Me crucé de brazos esperando alguna clase de iluminación… Nos estábamos quedando sin pistas y lo único que se me ocurría era ir por las divisiones en todos los mares. Solo así encontraríamos al capitán o alguna pista que nos guiara ante él. ”Debería existir alguna forma de que ellos se comunicasen…” – pensé y fue entonces que…

– ¡Somos idiotas! – grité mientras empezaba a examinar el cuerpo, sin vida, de aquel hombre. Revisé cada bolsillo y, al final, lo encontré. El den den mushi que, seguramente, nos podía dar un enlace directo con su capitán. Saber su nombre o, por lo menos, darle el aviso de que pronto iba a ser asesinado… – Si tenemos algo de suerte, seremos capaces de comunicarnos con el capitán – tomé una pausa y traté de buscar el número de aquel bastardo… Pero… ¡No lo tenía! Definitivamente estábamos malditos y una nube de mala suerte nos rodeaba. ¿Por qué tanta mala suerte? El destino era cruel… – Maldita sea, no tiene su número. – Mencioné en un tono apagado… No entendía cómo nuestra mala suerte era tan grande… ”Y se supone que somos los buenos” – Suspiré y me levanté con calma, con den den mushi en mano.

– Tenemos una única alternativa… Tendremos que ir derrotando todas sus divisiones – me crucé de brazos mientras miraba a los ojos a mi compañero. – Es imposible que no se dieran cuenta que sus nakamas han desaparecido. – en eso… El den den mushi empezó a sonar. Sonreí de alegría y se lo extendí a Taiga. – Responde… Básicamente, eres algo así como el líder y el que empezó con esta alianza…. Adelante. – Estaba seguro que era el capitán buscando respuestas o, quizás y más probable, solo saber cómo estaban las cosas en sus bases y esas cosas. O, en otro escenario, era el subcapitán haciendo de secretario para ese idiota. Sea como sea, solo debía responder y hablar.
Invitado
Anonymous
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {Jue 3 Mar 2016 - 3:52}

El rubio observaba ahora como su compañero buscaba algo por los bolsillos de aquel tipo. Esperaba que no fuese dinero o empezaría a creer que había creado un monstruo. En pocos instantes el espadachín encontró un caracol pero no hallaba el número que estaban buscando. Aquello hizo suspirar ahora al cazador. La verdad es que cazar todas las divisiones de aquellos tipos iba a ser realmente complicado pero de todas formas estaban haciendo un bien al mundo. No tardó en llevarse ambas manos a los bolsillos y cerrar los ojos despacio escuchando todas y cada una de las palabras de su amigo. La verdad es que se le veía emocionado para ni siquiera ser un cazador. En ese momento el jodido bicho se puso a sonar dando a entender que alguien estaba llamando. El capullo del espadachín le dio el aparato tras decir que era como el líder, cosa que Taiga no opinaba igual pues entre colegas no había jefes.

En ese momento cogió aquella cosa pegándosela al oído para después escuchar la voz del que estaba llamándolos. – Aquí el capitán. Dime como vas las cosas por ahí, mono inepto. – El rubio sonrió de lado al escuchar como llamaba aquel tipo a sus propios hombres. En ese momento contestó tranquilamente. – Hola, preciosa. Me temo que el monito está muerto. Tú eres el siguiente. – Un leve silencio se hizo entonces. Acto seguido una enorme carcajada empezó a escucharse de forma exagerada. El rubio frunció el ceño para después apretar los puños y gruñir un poco. – Ríete lo que te dé la gana, insecto. Ushio te va a dar para el pelo. – Una vez dijo aquello estampó el objeto contra el suelo haciéndolo pedazos.

Le había puesto de mal humor que aquel idiota tratase a su propio hombre como basura. A continuación soltó un enorme suspiro y cogió el cuerpo de aquel tío. Se lo puso en los hombros como si no pesara nada y empezó a caminar. – Vámonos a entregar esto, socio. Aquí ya hemos acabado. Ya sabremos de ese imbécil cuando nos arrestamos a todos los miembros de su banda. – Dijo aquello tan calmado que ni se había coscado de que había dicho el nombre de su compañero y no el suyo. Al parecer el cabrón era bastante listo para las cosas que quería y seguro que su colega asumía aquello con valentía y honor. Acto seguido salió del templo con toda la calma del mundo.
Contenido patrocinado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] Empty Re: Hey, eso que traes ahí, ¿es mío? [Taiga - Ushio] {}

Volver arriba
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.