crimson vs Kaleth

Little Garden: El nombre de la isla es en sí­ mismo una contradicción. Es una de las islas prehistóricas todavía atrapadas en la edad de piedra con plantas y animales prehistóricos como los dinosaurios.
Turnos: crimson - Kaleth - crimson - Kaleth...

Moderadores: Sawn & ShakiDale

*Se le salta el turno a quien pasadas 36 horas no postea en su turno (al ser reto no se puede perder por descalificacion de saltar turno).
*En caso de ganar crimson se lleva 1000 de Exp y Kaleth 500 de Exp, en caso de perder se lleva unos 500 de Exp y Kaleth se lleva 1500 de Exp
Se valora:
-La caligrafía, las faltas de ortografía y demás.
-Ambientación, y adaptación al escenario
-Rol bélico
-Rol Descriptivo
-Asumir daños respetando la logica
-Acciones cerradas

Tras un largo viaje llegaba an Little Garden, una isla prehistórica, llena de dinosaurios y animales extraños. Había ido a esa isla a cazar, no a pirtas o revolucionarios, si no grandes animales, así de paso le serviría de entrenamiento.

-Me gusta mucho esta isla, está millones de años atrás en la evolución, incluso hay dinosaurios. Simpre he pensado a que sabría la carne de reptil, teniendo en cuenta que los pollos son la evolución de los dinosaurios, debe de tener un sabor parecido, sólo que en ingentes cantidades--pensó.

Seguía dando vueltas por la isla pero simple se encontraba con pequeños sáuridos, pero él buscaba uno más grande algún saurópodo por lo menos. Al continuar caminando se encontró con un pterodáctilo que intentaba coméselo.

-Por fin algo de acción, de momento me tendré que comer esto-dijo.

El dinosaurio se lanzó a por él de cabeza y atacándolo con sus garras y dientes. Stinger respondió parando los golpes con las katanas y el hocico con una patadal, lo que enfadó a la bestia que alzando nuevamente el vuelo volvió a por él, Stinger respondió con un tajo horizontal con una katana hiriendo así letalmente al animal.

Una vez acabado con él empezo a destriparlo para después enceder una hoguera y cocinarlo.

-Tenía razón sabe parecido al pollo, bueno más bien a pavo-dijo Stinger mientras devoraba una de las patas del animal.

Stinger terminada de comer, no había encontrado ningún saurópodo, pero hasta que no encontase uno no se iría, sin embargo encontró algo distinto, aunque probablemente también tendría.

-Ante alguien nuevo siempre hay que estar alerta, pero no voy a atacarle si no sé si es amigo o enemigo-pensó, mientras caminaba hacia aquel sujeto.

El desconocido llevaba una capa por lo que no era imposible saber que arma podría llevar.

-Hay que estar atentos-dijo,- podría ser alguien peligroso, apenas escucho sus pasos, obviamnete es alguien bastante sigiloso y precavido, seguramente ya se haya percatado de mi presencia, es inútil seguirlo-pensó.

Stinger salió directamente hacia el camino y dijo con firmeza:

-¿Quién eres y qué haces aquí?-preguntó al encapuchado

Al darse la vuelta notó la forma de una pistola por debajo de aquella capa negra, por lo que Stinger estaba alerta ante cualquier ataque.

Little Garden, nunca había estado en aquella isla mas había escuchado historias de gente que si que había puesto un pie en aquella isla y había vivido para contarlo. Ahora Kaleth podía por fin observar la belleza de aquella realmente antigua isla. Lentamente su embarcación llegó a la isla y Kaleth bajó de un salto. Tenía muchas ganas de observar las criaturas que se escondían entre la frondosa vegetación. Sin pensarlo mucho se puso su capa por encima, colocó tanto su espada como su pistola en su cinto y comenzó a caminar entre los enormes árboles. No eran tan grandes como los que vio la vez que acabó en el bosque de Skypea pero tampoco tenían un tamaño pequeño.

Mientras caminaba sigilosamente no podía parar de pensar en los dinosaurios que podría llegar a toparse. Había leído mucho sobre ellos en los libros pero verlos iba a ser diferente. Trataba de caminar con calma y tratando de no hacer ruido alguno, sabía que si se cruzaba con una de aquellas criaturas tanto podría ser una inofensiva como un "cariñoso carnívoro que querría abrazarle con sus fauces".

Tras estar un corto periodo de tiempo al fin vio al primero: un majestuoso Triceratops. Kaleth observaba desde cierta distancia prudencial los movimientos de este, no quería que se pusiera nervioso por su presencia y terminara cargando contra el, aunque por suerte la poca presencia que solía tener jugaba a su favor. Un ruido se escuchó en la lejanía, lo cual hizo que el tranquilo dinosaurio huyera rápidamente. El espadachín se mantuvo escondido entre la vegetación y observó como un Pterodáctilo sobrevolaba en círculos una zona mientras profería gritos, había encontrado una presa.

Kaleth comenzó a correr realizando el mínimo sonido posible, no podía perderse aquel espectáculo. En cuanto llegó se mantuvo escondido mientras veía como el Pterodáctilo trataba de comerse a un hombre que estaba ahí, no entendía por que razón estaba llamando la atención de esa forma pero seguramente acabaría muerto. Aquella criatura se lanzo a por su presa a gran velocidad tratando de probar la carne de aquel humano, aunque parecía que aquel hombre no estaba de acuerdo con eso. La presa le demostró a aquel ser que en realidad era el cazador y en una serie de movimiento primero bloqueo el embate de la criatura y después realizando un corte horizontal abatió a la bestia.

-Nada mal... -

Murmuró en voz baja mientras observaba como el vencedor se daba un festín con la carne del vencido. Observando la escena Kaleth dibujó una media sonrisa en su rostro, aquello no se diferenciaba mucho de lo que hubiera pasado si la bestia hubiera vencido eso le hizo pensar quien de los dos era realmente la bestia. Sin más dio la vuelta y comenzó a caminar, quería ver más de aquellos majestuosos seres y no tenía mucho tiempo para perder. Cuando quiso darse cuenta aquel hombre se cruzó en su camino, por su capucha no podía ver su rostro completamente y le había extrañado mucho que le hubiera conseguido detectar, sin duda se había escondido correctamente por lo que no entendía cómo lo había hecho.

-¿Quién eres y qué haces aquí?-

Dijo aquel hombre de forma seca. Pudo observar como observaba su cinto ¿Estaba tratando de ver sus armas?. Kaleth se quitó su capa dejando su rostro al descubierto así como su espada y su pistola.

-Primero deberías de presentarte antes de pedir que me identifique yo. No tengo ningún motivo para tener que explicarte que es lo que estoy haciendo aquí. Y por último.-

Kaleth desenvainó su arma. Acababa de ver como vencía a un Pterodáctilo sin ningún tipo de problemas por lo que no sabía con que intenciones estaba plantándose ahora delante de el.

-Si quieres ver mis armas, deja que te las enseñe.-

Sin más ladeó su cuerpo para dejar menos huecos abiertos y puso su espada en guardia en su típica postura de combate. Si aquel hombre trataba de buscar pelea no se lo iba a poner tan fácil como su anterior presa.

Stinger se encontraba en el camino y vió como al darse la vuelta automáticamente se quitó la capa. Esto demostró que estaba preparado para pelear, enseñándome claramente sus armas.

Estaba en lo cierto, al quitarse la capa vio claramente como llevaba una pistola y una espada. Stinger observó claramente el rostro de aquel sujeto, sin embargo era un rostro conocido, ya lo había visto antes en el gremio de cazadores "Ghost Leviantans".

-¿Que hace él aquí? -se preguntó- ¿me habrá seguido?

-Primero deberías de presentarte antes de pedir que me identifique yo. No tengo ningún motivo para tener que explicarte que es lo que estoy haciendo aquí. Y por último, si quieres ver mis armas, deja que te las enseñe.

Esta frase claramente era un signo de que estaba dispuesto a luchar y si estaba en el mismo gremio que él no sería un rival fácil. Stinger entonces recordó el nombre era Kaleth y al igual que él había empezado hace poco como cazador por lo que sería una interesante batalla bastante pareja, ambos eran novatos embarcados en el grand line.

-Vaya así que eres Kaleth del gremio, desde que te vi siempre he tenido ganas de luchar contra ti, supongo que ya va siendo hora de conocer las habilidades de los compañeros de gremio-dijo esbozando una irónica gran sonrisa.

Stinger empezó a analizar la situación, su contrincante usaba dos armas muy distintas entre sí, una katana y una pistola, tenía que calcular todas las combinaciones posibles del uso de esas armas además tenía que ver como le ayudaría el entorno, estaban en un amplio camino en una selva con árboles bantante separados.

Entonces, y sin más rodeos, Stinger se abalanzó corriendo en zig-zag (para no tener un punto fijo de golpeo) hacia Kaleth sin desenfundar sus armas, quería proibar la fuerza de su rival y no sabía si este poseía fruta o no, así que una vez estuvo lo suficientemente cerca dio un potente salto y le atacó.

-Doble patada voladora hacia su cabeza y pecho(AF) con hakki.

Mientras lanzaba la patada hacia su contrincante Stinger estaba pendiente de su rival por cómo respondería a uno de sus golpes más simples pero efectivos y listo para cualquier ataque por parte de Kaleth.

Kaleth pudo observar como la cara de aquel hombre cambiaba en el momento que pudo verle sin aquella capa que acababa de quitarse. Aquella mirada... era como si esa persona le conociera de algo. Tampoco disimuló mucho al echar otro vistazo a sus armas, sin duda tenía ganas de pelear aunque no entendía el motivo.

-Vaya así que eres Kaleth del gremio, desde que te vi siempre he tenido ganas de luchar contra ti, supongo que ya va siendo hora de conocer las habilidades de los compañeros de gremio.-

¿Del gremio? No recordaba a aquella persona, aunque este si que parecía conocerle a el. La cara del espadachín esbozó un ligero enfado ante el tono de su rival así como su sonrisa, no sabía si habían sido imaginaciones suyas o su por lo visto compañero estaba menospreciandole y pocas cosas habían en este mundo que pudieran cabrear más al espadachín.

-Si, mi nombre es Kaleth, Akatsuya Kaleth para ser más exactos y pertenezco al gremio de los Ghost Leviatans. Aunque me temo que no sé quien eres tu, me suena ligeramente tu rostro mas no conozco tu nombre. -

Realizó una pausa mientras movía su cabeza hacia los lados haciendo que su cuello crujiera.

-Nunca me ha gustado pelear contra compañeros, aunque contigo haré una excepción.-

Su cara se puso seria aunque por dentro no podía negar que sentía la emoción del combate, no estaría mal observar el nivel de aquella persona.

-Vamos, ven a por mi. Te enseñaré como pelea un autentico cazador. -

Los ojos de Kaleth se centraron en la persona que tenía delante a la vez que su cuerpo se preparaba para el inminente combate. Sabía que como mínimo su rival portaba dos espadas por su combate anterior contra aquella bestia, mas no sabía si llevaba algún tipo de arma más con el. Sin dar muchas señales su impulsivo rival cargó contra el zigzagueando aunque sin desenvainar sus espadas. Kaleth soltó una bocanada de aire sin perder detalle del movimiento del rival, ¿Acaso quería morir? pensó para sí mismo ¿Quien en su sano juicio se lanzaría contra un espadachín con su arma desenvainada sin portar una? Lo único que podría conseguir aquel pobre infeliz era acabar recibiendo una bonita liposucción gratuita por parte de la espada de su rival.

El cuerpo del espadachín cambió su posición defensiva avanzando su pie retrasado y cambiando su espada a la mano izquierda, si quería morir cumpliría con gusto el deseo de aquella persona. en cuanto sus cuerpos estuvieron a la distancia adecuada el asesino de dinosaurios se lanzó contra el de un salto colocando sus piernas por delante tratando de realizar un doble impacto, una rumbo a su pecho y la otra en dirección a su cabeza. ¿Qué clase de Kamikaze era su rival?.

Sin perder un solo segundo movió su brazo derecho para bloquear el golpe al pecho a la vez que levantaba su pierna derecha del suelo y comenzaba a realizar un pequeño giro hacía atrás con la intención de quedar de lado para reducir la potencia del impacto, giraba su cabeza hacia la izquierda y balanceaba su cuerpo para evitar la patada en su rostro. El impacto llego a su destino golpeando donde Kaleth había colocado su brazo a modo de escudo haciendo que su giro fuera más veloz y su otro pie casi rozó su rostro haciendo que este notara una suave brisa en el lado derecho de su rostro. Aquel chico no parecía andar escaso de fuerza, pues a pesar de reducir el impacto dejó ligeramente dolorido el brazo con el cual el espadachín se había protegido. Llegaba la hora del contraataque...

Aprovechando la complicada situación de su rival, quien estaba en el aire, y estando ahora al lado de este gracias al giro de su cuerpo Kaleth alzó su espada con su brazo izquierdo y descargó un veloz corte descendente a la altura del abdomen [AIF] de su enemigo con la intención de partirle por la mitad.

-Vamos, ven a por mi. Te enseñaré como pelea un autentico cazador.-

-Fue lo único que escuché mientras corría hacia él antes de darle una patada voladora.-

Mientras Kaleth paraba la mitad del golpe con un brazo y el otro le rozaba la cabeza Stinger vio claramente como se impulsaba con su propio golpe e intentaba cortarlo con un corte descendiente al abdomen, creyendo que al estar en el aire no podría parar el golpe, sin embargo en mitad del aire empezó su transformación parcial en grifo. Primero desplegó una sola ala para dar un giro de 90º y parar el golpe con las katanas de su espada. Entonces desplegó la otra ala impulsándose hacia arriba amortiguando el golpe para que el impacto no lo estrellara contra el suelo.

Después de parar el golpe quedó con la espalda adolorido, ya que evitó un corte pero incluso parándolo el golpe le llegó hasta la espalda, provocando un moratón en las zona lumbar de la espalda, impidiendo ligeramente su movilidad. Sin embargo, y sin tocar el suelo, se dio cuenta que Kaleth era un espadachín bastante hábil y no permitiría que tomara mucha distancia.

-Tengo que acercarme evitando las distancias medias y largas, le atacaré en forma parcial entre grifo y hombre-pensó Stinger.-

Una vez parado el golpe, empujando la katana con el impacto hacia la izquierda de Kaleth, se creó una abertura en la guardia que aprovecharía ya que tenía el brazo derecho dañado por la anterior pataday la katana en la mano izquierda. En mitad del aire Stinger se puso a la derecha de sus rival con ayuda de sus alas y desenfundó rápidamente su wakizashi (mientras se convertía su cuerpo en la un león aumentando enormemente su fuerza y sus ojo en los de águila permitiédole ver los movimientos de su adversario detenidamente y mucho más claros), con la firme intención de destrozarle el hígado con un corte oblicuo ascendente y terminar ahí la pelea [AMF]

-¿Quién enseñará a quién a ser un buen cazador?-pensó mientras realizaba el corte .-

Su espada volaba rauda a sesgar la carne de su rival y compañero mas este no parecía estar dispuesto a terminar con aquella "Prueba de habilidades" de forma tan rápida. En el aire el espadachín observó como el asesino de dinosaurios hacia aparecer de su espalda primero un ala para voltear su cuerpo y bloquear el impacto con las espadas que portaba en su espalda y después la otra para evitar que su cuerpo se estampara contra el suelo debido al impacto y ya de paso apartar la espada de su enemigo hacia la izquierda de este.

Los ojos de Kaleth se abrieron como platos ante tal bloqueo, no esperaba una reacción tan rápida ante su ataque, aunque aun así debía de reconocer la habilidad de su compañero, al parecer era bastante más habilidoso de lo que esperaba pero no había tiempo para quedarse admirando los movimientos de su rival dado que al parecer este no se había conformado simplemente con evitar su ataque.

En un veloz movimiento Stinger se colocó a su derecha a la vez que transformaba más su cuerpo, adoptando lo que parecía un cuerpo de león y por el brillo y color de sus ojos diría que ojos de águila ¿Acaso aquello era posible? ¿Existía tal animal?. Una vez en esa posición descargó un corte ascendente a la altura de su hígado con lo que parecía una Wakizashi aprovechando la apertura creada anteriormente. Tan rápido como pudo Kaleth se llevó, con algo de dolor por el golpe anterior, el brazo derecho a su cinto para coger la vaina de su espada y tratar de interponerla en el ataque a la vez que saltaba hacía su izquierda para evadirlo. A pesar de no tenerlas todas con el movió la vaina para tratar de bloquear el corte. En el momento en que la vaina chocó con el arma de su rival Kaleth entendió que no iba a ser suficiente para bloquear aquel poderoso impacto. La vaina pareció contener el impacto durante unos segundos aunque finalmente fue cortada por la mitad dejando avanzar el peligroso filo que atentaba contra la vida de su portador. El cuerpo del espadachín sintió una sensación por desgracia no desconocida para el. El frió metal del arma de su rival comenzó a cortar su costado aunque de una forma superficial gracias al salto y a los pocos segundos que había obtenido sacrificando su vaina. Mientras se alejaba por el salto observó el arma de su rival y dio un pequeño suspiro, si continuaba de pie y vivo era gracias a la longitud de aquella Wakizashi, si tuviera la longitud de una Katana sin duda habría llegado a algún órgano vital y habría acabado con el.

Al caer al suelo rodó sobre si mismo alejándose ligeramente, no quería sorpresas. Sin tener tiempo para pensar en el dolor que le estaba causando la herida se alzó y observó a su rival. Aquello no tenía nada de un cruce de espadas para comprobar habilidades, ambos estaban peleando como si fueran a eliminar al otro y eso estaba bien, cualquier otra cosa se tomaría como una falta de respeto para su rival.

- Buenos reflejos... Muy buenos reflejos. -

Comentó sinceramente mientras rompía la manga derecha de su camisa para improvisar con ella una venda para la herida. Tal y como imaginaba la herida no era gran cosa, parecía bastante superficial y no salía mucha sangre de ella. Pero a pesar de que no sangraba mucho una herida era una herida y tendría problemas si no hacía algo. Tras aplicarse la venda en unos pocos segundos, sacó la pequeña bolsa de pólvora que utilizaba para reponer la de su pistola.

- Si te soy sincero te había subestimado, no pensaba que fueras tan hábil pero con ese movimiento tuyo me has demostrado lo equivocado que estaba. Ruego que disculpes tal actitud, a partir de ahora te trataré como mereces. -

Puso su espada en su mano derecha y tras realizar un par de movimientos para asegurarse de que el brazo no le supondría un problema al mover su espada comenzó su ritual. Colocó su espada en horizontal y con su brazo izquierdo esparció la pólvora por el filo de su espada y sacó su pistola.

- Y la única forma que se me ocurre de hacerlo es la siguiente: Ir con todo. -

Kaleth apoyó la pistola en el filo de la espada y sin apuntar a su rival efectuó un disparo que sirvió como encendedor haciendo que la espada se prendiera en llamas.

-Kayaku Ken (Espada de pólvora). -

Susurró mientras movía la espada a una posición más cómoda, al fin y al cabo era su hora de atacar. Sin previo aviso se lanzó a por su rival tan rápido como pudo, sentía las pequeñas punzadas de dolor en su costado pero bloqueó ese pensamiento, no podía perder el tiempo pensando en aquellas cosas. Cuando no quedaban mucho más de 3 zancadas para llegar a su rival de los labios de Kaleth salió el nombre de la técnica que estaba a punto de realizar.

-Tsuya(Destello).-

El espadachín hizo que su cuerpo se abalanzara hacia adelante inclinándose casi como si estuviera cayendo y tras eso se movió en diagonal hacia la izquierda como realizando una finta. Después utilizó todo el impulso de caída a la vez que cambiaba su dirección súbitamente para moverse al lado contrario. A distancias tan cortas como aquella, el cambio de dirección repentino a ambos lados hacía que fuera imposible de seguir para el ojo creando la ilusión en el enemigo de que había desaparecido y creaba una apertura que no iba a dejar pasar. Desde la izquierda de su rival Kaleth agarró su espada con ambas manos y descargó un potente corte descendente sobre la cabeza de su rival con aquella espada llameante que caía con fuerza sobre su presa.

"Ittouryuu Joudan: oriru no sora (Estilo de una espada, Guardia de fuego: Descenso de los cielos) [AMF]"

Pensó para el mientras no perdía la esperanza de golpear con aquella técnica. Esta vez algo tenía un par de cosas claras: No había golpeado con poca fuerza como para que su rival bloqueara de la misma forma que antes y que en caso de que bloqueara el corte, la pólvora ardiendo se desprendería de su espada causándole serias quemaduras.

Convencido de que su golpe sería fatal fatal para su adversario, quedó muy sorprendido al ver que su contrincante quedó bastante bien parado de su contragolpe. Kaleth consiguió parar el gran corte de la wakizashi de Stinger con la vaina de su katana, a la vez que saltaba para intentar no ser rebanado por el filo de acero del sable.
Tras el ataque Kaleth salió rodando sobre si mismo hacia un lateral, Stinger no pudo seguir con el ataque ya que aún notaba el primer golpe recibido en la zona baja de la espalda y con su anterior maniobra había necesitado de mucha concentración para reaccionar a esa velocidad, no es fácil hacer dos movimientos así seguidos.

- Buenos reflejos... Muy buenos reflejos-dijo Kaleth rompiendo la manga de su camisa para hacerse una venda. -

Tras aplicarse la venda en unos pocos segundos, sacó la pequeña bolsa de pólvora que utilizaba para reponer la de su pistola.

- Si te soy sincero te había subestimado, no pensaba que fueras tan hábil pero con ese movimiento tuyo me has demostrado lo equivocado que estaba. Ruego que disculpes tal actitud, a partir de ahora te trataré como mereces. -

-Lo siento, ya que yo también estaba probando tu nivel con mi primera patada. Esto es justamente lo que esperaba que dijeras. No esperaba que te mantuvieras en pie después de mi anterior ataque, esto sólo demuestra tu gran valía como espadachín usando la vaina para detener el golpe. Sólo espero que tu siguiente golpe sea más poderoso-dijo Stinger feliz por el nivel de su adversario, al ver que no sería una pelea fácil como supuso al principio.

Mientras le decía esto Stinger volvió a guardar su wakizashi dentro de su abrigo. para poder sacar ambas espadas a la vez colocándose en posicón defensiva. Sabía que su rival se prepararía para un gran movimiento.

Stinger vió como Kaleth sacudía el brazo derecho, como comprobando su estado tras la primera patada, y cómo colocaba la pólvora en la katana. Después, uso un disparo para encender el arma en llamas

-Al parecer vendrá con todo a por mí, esto es exactamente lo que quiero-pensó.-

-Kayaku Ken (Espada de pólvora)-susurro hacia sus adentros Kaleth. -

Justo al susurrar esto se lanzó directamente con una asombrosa agilidad a pesar de sus heridas

-Tsuya(Destello)-susurró Kaleth.-

"Ittouryuu Joudan: oriru no sora (Estilo de una espada, Guardia de fuego: Descenso de los cielos) [AMF]"

De pronto y casi instantáneamente cambió de posición atacando desde un lado hacia la cabeza de Stinger con una potente espada llameante. sino fuera por que tenía los ojos de águila y los rápidos movimientos que en su estado animal le permitía realizar, seguramente habría sucumbido ante tal ataque, siendo quemado y cortado a la vez.

Pero en cambio pudo detener el golpe cubriéndose con ambas katanas colocadas no en forma de equis, si no con ambas en forma horizontal una encima de otra, de manera que parecía unas tijeras, para parar el impacto de la katana en un único punto intentando partirla, ya que el acero a altas temperaturas pierde un 60% de su resistecia. Stinger rodeó a su rival con sus alas con una delante de sus ojos dificultándole la visión y con la otra por detrás de su espalda.. Sin embargo las llamas de la espada le saltaron encima quemándole las alas y el cuello rodeado por su larga melena leonina.

-Si no fuera por que la espada esta en llamas causando que me facilite su localización seguramente no lo habría parado-pensó mientras su melena y sus alas empezaban a arder.

Al arder sus alas tambíén empezó a quemarse su adversario, Kaleth. Stinger tenía que librarse rapidamente del fuego que le envolvía si no quería morir quemado. Dio un gran salto y extendió sus alas haciendo que varias cayesen alrededor de Kaleth

-Gran círculo sagrado-gritó mientras salía disparado hacía arriba.-

Girando sobre si mismo lanzando varias plumas hacia los alrededores quemando la hierba y los árboles provocando un gran circulo de fuego del que salir sin quemaduras sería muy difícil, entonces en mitad del aire a ,aproximadamente a unos 15 metros, se volvió a transformar en humano haciendo desaparecer sus alas y melena y con ellos el fuego, aunque había resultado quemado en sus cuello y espalda debido a la velocidad con la que se propagaba el fuego. Seguro de que su enemigo había tenido unas quemaduras similares y de que el sol se encontraba encima de él imposibilitando que se le vea con claridad Stinger atacó desde el aire guardando una katana y colocando la otra katana en la mano derecha apuntando hacia abajo, mientras ponía la palma de la mano izquierda en el final del mango para dar mayor impulso a la estocada que preparaba.

-Fuerte como un buitre, rápido como un halcón, ágil como un azor, letal como un águila-susurró.
-Ittoryu: Taka no Tsume. (Estilo de una espada garras de halcón)- [AMF]

Se lanzó hacia su rival dispuesto a atravesarle, su contrincante tenía muy pocas opciones de huir ante el veloz ataque y si lo esquivaba se quemaría por las altas llamas que rodeaban el lugar donde combatían, aquello se había vuelto el infierno.

En la cara de Kaleth ya podía verse reflejado el brillo de la victoria que creía que iba a obtener mediante aquella combinación de técnicas, aunque una vez más aquello no iba a ser suficiente. Su espada llameante fue bloqueada mediante un extraño movimiento de su rival. Este, mediante un rápido movimiento se colocó en posición defensiva con sus espadas. No entendía como su rival había conseguido adivinar su posición pero ahí estaba empuñando sus espadas cual tijeras bloqueando el impacto de su espada. En ese mismo momento pudo escuchar un extraño sonido metálico proveniente de su espada, lo cual no le gustó para nada aunque se contentó con ver como las llamas de la espada caían sobre su rival causándole quemaduras en el cuello y aunque no estaba seguro también en las alas.

Stinger puso una de sus alas delante de el para dificultarle la visión y trató de encerrarle colocando su segunda ala tras el, aunque esta vez Kaleth fue más rápido.

Tan pronto como vio la primera ala cerniéndose sobre el se lanzó hacia un lado tratando de hacer caso omiso al dolor que provenía de su costado. Pudo notar como evitó por segundos quedar atrapado en aquella prisión de plumas ardiente, lo cual hubiera sido una experiencia agónica que por suerte no experimentaría, no al menos esa vez. Desde el suelo observó como aquella figura de alas ardientes saltaba y extendía las alas para tratar de que sus plumas, las cuales ardían en llamas, cayeran sobre Kaleth para tratar de hacerle arder. Haciendo uso de toda la precisión de la que disponía realizó unos rápidos movimientos con su espada consiguiendo evitar todas las plumas salvo una o dos que consiguieron pasar cerca de su rostro y pecho realizándole pequeñas quemaduras en la barbilla y bajo el pectoral izquierdo aunque ninguna lo suficiente seria como para preocuparse.

-Gran círculo sagrado-

Gritó su rival antes de girar sobre sí mismo haciendo que algunas plumas salieran disparadas haciendo que casi todos los árboles que le rodeaban así como la hierba se prendieran en llamas creando un circulo ígneo que al parecer sería su ring. No pudo evitar preguntarse qué tan lejos llegaría aquel combate ¿Acabarían ambos muertos por una simple disputa para ver quien era mejor? Sin tener tiempo para pensar en ello observó su espada,ya sin llama alguna, aquel último ataque le había causado bastantes daños la parte inferior de la espada estaba en perfecto estado aunque a partir de la mitad de esta la cosa cambiaba. Desde ahí la espada se podía ver como tenía muescas y pequeñas partes rotas, posiblemente debido a las altas temperaturas a las que la había sometido y a la defensa que había realizado su rival, seguramente de no ser por su habilidad como espadachín la espada estaría ya rota, aunque sabía que no le quedaría mucho.

Aquel infierno de llamas sin dudas estaba caldeando el ambiente más de lo normal haciendo que aquella zona fuera realmente agobiante. Kaleth se concentró preparando su cuerpo como nunca, no sabía exactamente la posición del rival pero si tenía algo claro: Atacaría desde arriba.

Entrecerrando los ojos para que la luz del tan oportuno sol no le cegara en demasía pudo observar como algo parecido a una sombra bajaba a gran velocidad hacía su posición. No estaba seguro de que fuera su rival pero no iba a quedarse quieto para comprobarlo. Para evitar aquel posible ataque realizó un veloz salto hacia atrás aunque sin alejarse demasiado para no quemarse con las llamas, además no quería perder la oportunidad de realizar un ataque si tenía opción.

Su rival cayó desde el aire realizando una estocada que de haber llegado unos segundos antes habría dañado seriamente a Kaleth. Sin darle opción a recuperar su posición, el espadachín inclinó su cuerpo para ganar velocidad, a pesar de que la distancia que los separaba era corta, y se lanzó a por el. Desde el flanco derecho de su rival realizó una estocada con su brazo izquierdo a la altura de las costillas mientras echaba su otro brazo hacía detrás, podía sentir como tanto el corte del costado como el brazo se quejaban por tal postura pero no podía echarse atrás ahora, debía acabar con eso en aquel mismo momento. La estocada quedó a corta distancia del enemigo mas eso era exactamente lo que debía de pasar. De forma inmediata y sin perder un segundo soltó su espada y la golpeo con la palma de su otra mano mientras la giraba para añadir a su ataque rotación, haciendo que aquello más que una espada pareciera una perforadora haciendo que aquel ataque superara por mucho el daño de una estocada. A pesar de ello la parte superior de la espada debido a la rotación extrema se fracturó soltando los fragmentos de espada cual metralla contra su rival a gran velocidad, aunque la parte que estaba intacta de esta continuó con su ataque desviándose ligeramente, aunque de todas formas rumbo a atravesar los pulmones de su victima.

- Ittouryuu: Tanken no Tsuki (Estilo de una espada: Puñal Lunar) [AB] -

Esta vez estaba seguro de que funcionaría, su rival acababa de caer del cielo y tenía ambas manos en su espada, una con su palma empujando el mango por lo que dudaba que fuera capaz de realizar algún movimiento como los anteriores y mucho menos de esquivar la lluvia de metralla que había generado su espada.

Stinger caía dispuesto a atravesarle con la katana, sin embargo al faltar escasos metros para el impacto vio como Kaleth se echaba hacia atrás esquivando así su ataque. Ante esto Stinger empezó a transformarse para que el impacto sobre el suelo sea menor en su cuerpo, a la velocidad con la que bajaba se podría haber roto el brazo al chocar contra el suelo con su katana. No usó sus alas para reducir el impacto porque después de encenderse había quedado muy dañadas como para detener su caída tan alta velocidad.

Al caer al suelo vio como su adversario, pese a sus heridas, seguía dispuesto a continuar con la pelea, atacando dispuesto a finalizar la lucha de una vez, siendo esta corta pero muy intensa.

-Parece que esto va a terminar-pensó, viendo como ese gran anillo de fuego se extendía tanto hacia adentro, como hacia afuera y arriba.-

El calor se estaba volviendo asfixiante, y el oxígeno dentro de estas llamas era muy reducido y se iba consumiendo poco a poco, además debido al intenso sol el fuego se extendía con mucha facilidad.

Kaleth se movió rápidamente, era sorprendente la velocidad de este, colocándose a su derecha, buscando el flanco más débil, Stinger todavía tenía sus manos en su katana, aunque podía mover su mano izquierda no tenía tiempo para detener el golpe, sobretodo desde la posición con la que había sido atacado. Kaleth se dispuso a lanzar una gran estocada con su debilitada espada, aunque haciendo un extraña técnica.

Haciendo una estocada al aire y después impulsando y rotando la espada golpeando a una velocidad muy alta además la espada de hacía trozos debido ala fuerza del ataque lo cual hizo que además disparase metrallas cual granada.

- Ittouryuu: Tanken no Tsuki (Estilo de una espada: Puñal Lunar) [AB] -

Apenas tenía tiempo estaba muy cerca, no podía esquivar ese golpe a la velocidad con la que venía, se encontró en una situación muy complicada si ese ataque le daba seguramente moriría.

-Tengo que hacerlo es la única forma de no morir, incluso así no estoy seguro de poder detener el ataque-pensó no muy convencido.-

Utilizando el ala derecha como escudo paró la metralla y la katana, esta sin embargo la perforó fácilmente , atravesándola causando un gran dolor. Deteniendo levemente la velocidad de esta y desviándola lo suficiente para que no le destrozara el pulmón derecho. La espada le perforó dos costillas incrustándose en su cuerpo girando y haciendo trizas sus costillas e hiriéndole gravemente. La sangre del ala le salpicó a la cara pintándole cara de rojo y lado derecho del cuerpo quedó también cubierto de sangre tras la carnicería hecha en sus costillas. El ala tapaba la visión a Kaleth de la parte inferior del cuerpo de Stinger.

-Por lo menos he parado la metralla y su katana lo suficiente para no morir-pensó tosiendo, mientras expulsaba el líquido vital por la boca.-

Cada vez el circulo de fuego se iba cerrando más reduciendo su "cuadrilátero" a aproximadamente una circuferecnia de 7 metros de diámetro. Por lo que ninguno de los dos podía tomar mucha distancia del otro.

-Me caes bien Kaleth, no sé quién ganará este combate, pero quien lo haga tiene muy jodido salir de este infierno sin morir quemado o ahogado por la falta de oxígeno. Yo ni siquiera puedo volar, tendré el ala destrozada por lo menos un mes. Sólo puedo decir una cosa de este combate: -dijo sacándose la katana de su contrincante de sus costillas.-Gracias por esto.-dijo sonriente totalmente feliz por aquella intensa batalla y cogiendo su escondida wakizashi con la cola de debajo de su abrigo sin hacer ruido.-

Casi instantáneamente y sin moverse de su sitio Stinger lanzó repetidos golpes con la cola en la que tenía su wakizashi desde abajo de su ala para que su rival no pudiese ver los golpes hasta que no estuviese lo suficientemente cerca de él apuntando a varias partes de su cuerpo, especialmente su brazo y su costado derechos que tenía dañado de antes.

-Ittoryu: Reon no kiba (Estilo de una espada: colmillos de león). [AIF]

Mientras lanzaba repetidos golpes con la cola desenfundó una katana y sacó la otra, que se encontraba bastante dañada, del suelo provocándole un gran dolor haciendo brotar aún más sangre de sus costado. Pero tenía que estar atento a cualquier golpe de su rival, ya que sería fatal si le impactase otro golpe de lleno.

Stinger no dejaba de sorprenderle. Incluso en aquella complicada situación consiguió evitar estamparse completamente contra el suelo y utilizó su ala derecha como escudo para tratar de reducir daños. Kaleth observó jadeando por el cansancio y el calor extremo como la metralla fue parada por el ala de su rival dañándole seriamente pero no acababa ahí. Su fracturada espada chocó también con gran fuerza contra el improvisado escudo de su rival, aunque no se limitó a dañar superficialmente la zona. La espada traspaso cual perforadora la defensa de su rival abriendo un agujero en su ala y alcanzó el costado de este dañando seriamente a su rival creándole una importante herida que debería de ser tratada cuanto antes.

"El combate debe de terminar ya, si esto continua perderemos la vida ambos."

Pensó mientras observaba como la sangre de su rival caía al suelo, pero parecía que a pesar de sus heridas Stinger se negaba a perder. Era increíble que después de encajar una técnica como esa fuera capaz si quiera de mantenerse en pie, aunque aquello demostraba la fuerza de la que disponía, una fuerza que impresionó a Kaleth.

-Me caes bien Kaleth, no sé quién ganará este combate, pero quien lo haga tiene muy jodido salir de este infierno sin morir quemado o ahogado por la falta de oxígeno. Yo ni siquiera puedo volar, tendré el ala destrozada por lo menos un mes. Sólo puedo decir una cosa de este combate: Gracias por esto. -

Tras escuchar decir eso a su rival una tremenda culpabilidad embargó a Kaleth. No le gustaba nada ver a un compañero suyo tan herido y menos aun saber que aquellas heridas habían sido provocadas por él. Y no solo eso, aquel paraje de ensueño, hábitat de criaturas nunca vistas, al cual había llegado ahora era un infierno de llamas en el que pocos seres podrían ser capaces de salir con vida.

Saliendo del interior de su mente y volviendo a la realidad pudo escuchar algo más qué su rival acababa de decir.

-Ittoryu: Reon no kiba (Estilo de una espada: colmillos de león)[AIF] -

"Eso suena como una técnica"

No fue capaz de pensar mucho más pues por la parte inferior del ala surgió de nuevo la Wakizashi soltando un recital de cortes siendo empuñada por raro que pareciera por la cola de este. El primer ataque realizó un corte bastante profundo en su pierna, aunque no fue el único que consiguió golpearle. No portaba su espada por lo que la posibilidad de bloquear los cortes era nula tan solo podía esquivar. Los golpes a pesar de la aleatoriedad que parecían tener a simple vista parecían estar enfocados en dañar todavía más las zonas que ya tenía heridas, centrándose sobre todo en su costado y en su brazo derecho. Haciendo lo imposible por no sufrir daños demasiado serios. El cuerpo del espadachín danzaba tratando de evadir los cortes todo lo posible aunque no podía evitar sentir como el cansancio limitaba sus movimientos haciendo que cada cierto tiempo un corte alcanzara su ya dañado cuerpo. Uno de los cortes golpeó apenas con la punta su herida del costado, aunque fue lo suficiente para abrir más dicha herida y que la improvisada venda se volviera inútil. Kaleth soltó un grito ante tal impacto, los ataques que estaba recibiendo no tenían nada que ver con la potencia de los anteriores dado que su cola no era capaz de igualar el fuerte cuerpo de aquel híbrido, pero aquel último había reabierto una herida más dolorosa. No podía limitarse a esquivar ataques o el combate terminaría ahí, debía de actuar y ya.

Con rapidez pensó en sus posibilidades. No portaba su espada por lo que la posibilidad de defenderse ante tal ataque quedaba descartada, además que en caso de tenerla no habría vuelto a atacar a su enemigo por la parte filosa dado que eso posiblemente supondría la muerte de este. Pensó en su pistola, pero no iba a dispararle a bocajarro, no solo por ser su compañero, si no por haber demostrado ser un gran adversario. La cara del espadachín cambió a una de gran concentración al fin se había decidido. Tras evadir por milímetros un ataque lanzado a su pecho que rasgó su camisa y acarició su piel se lanzó saltando como pudo por la pequeña abertura creada mientras gritaba de dolor al sentir como su dañado cuerpo le gritaba que dejara de moverse.

Apenas quedaba espacio para moverse por culpa de las ya demasiado cercanas llamas, pero estaba en un lugar ventajoso y relativamente a salvo de aquella peligrosa arma de filo que tantos problemas le estaba causando. Ambos estaban heridos y sabía que la velocidad de reacción de su rival no sería tan alta como antes así que sin perder un instante preparó su ofensiva. En cuanto pudo, su mente se centró al máximo recordando un ataque que había visto hacía ya un tiempo. En el momento que su cuerpo debería de tocar el suelo, Kaleth puso su mano izquierda en el suelo y giró su cuerpo totalmente balanceándolo mientras doblaba la rodilla derecha. El giro puso el cuerpo de este en una tremenda presión haciendo que la herida del costado se abriera todavía más, pero ya no había vuelta atrás. Con un grito de dolor desplegó su pierna derecha y lanzó un potente golpe a la altura de la herida de su rival con todas las fuerzas que le quedaban.

- ¡Pulso de los dioses! [AF] -

La perdida de sangre comenzaba a hacer que su vista se nublara ligeramente aunque sabía que su rival no estaría mejor. No quería acabar con él si no que se desmayara del mismo dolor, pues sabía que si aquello no acaba pronto él mismo también caería rendido y ambos serían pasto de las llamas.

Stinger seguía en el centro de aquel infierno en llamas azotando con cortes de a su rival con distintos y rápidos golpes con su wakizashi, mi contrincante lo esquivaba con dificultad debido a sus heridas. De repente uno de los cortess le dio justo donde Stinger quería en la herida, reabriéndola y profundizando en ella.

-Esto provocará que al menos se desangre igual que yo-pensé.-Sin embargo me extraña que no use su arma, pensaba que intentaría ganarme, se estará rinidendo.-

Sin embargo rápidamente Kaleth con rápidos movimientos esquivó el ultimo de sus cortes acercándose a él con una potente patada apuntando a la parte derecha de Stinger, desde una posición de la que sería muy difícil cubrir.

- ¡Pulso de los dioses! [AF] -

-Al parecer si que quiere terminar esta épica batalla-pensó feliz.-

Stinger al ver cómo venía a por el estaba dispuesto a detener el ataque con las katanas. Stinger levantó ambos brazos arqueando los codos poniendo sus antebrazos hacia su derecha, esto le permitiría para el golpe, pero no era una posición cómoda,sobretodo en su situación, con la que parar la patada. La pierna del atacante chocó con las katanas, confiaba en que le estuviese cortando, ya que no podía ver como era el impacto por el intenso dolor,cerrando los ojos por un instante, que le provocó en las costillas saliendo aún más sangre (ya había derramado al menos medio litro) al detener el golpe y apenas pudiendo respirar (también debido a que el fuego estaba consumiendo todo el aire respirable). No obstante, no logró parar en seco el ataque patada se desvió, sólo desviarlo. El golpe se dirigió a su pierna impactando en el muslo haciéndole hincar la rodilla en el suelo.

-No tengo tiempo de sentir dolor, piensa rápido Stinger-pensó mientras habría los ojos.- Tienes que moverte analiza la situación detenidamente.

Entonces encogió la otra pierna para rodar y alejarse de su rival unos pocos metros estirando la cola al hacerlo para que la wakizashi se calentara en el fuego. Al detenerse se levantó con dificultad y con la cola se puso la wakizashi en la herida quemándola y cerrándola para parar aquella intensa hemorragia con lo cuál soltó un gran alarido.

-¡¡¡Aaahhh!!! ¡Siempre pensé que dolería menos!- gritó Stinger apretando los dientes mientras se cerraba la herida.

-Kaleth, siento que esto está tardando mucho-dijo tosiendo por el humo y la falta de aire.- Creo que va siendo hora de terminar, estoy ya bastante cansado y probablemente no aguantaré ningún ataque más, ni mío ni tuyo-dijo sonriente mientras clavaba ambas katanas al suelo.

Tenía la cara totalmente de rojo y una gran sonrisa, sabía que ese sería el ataque final. Se lo jugaría todo, aunque convencido de que su rival en el estado y a la distancia (unos 3,5 metros) en el que se encontraba no debería poder esquivarlo ni detenerlo.
Inmediatamente después de su corta frase extendió su única ala que todavía podía mover y sin más preámbulos la metió en el fuego sacándola rápidamente poniendo sus manos sobre las katanas para tomar impulso dispuesto a lanzar su, posiblemente, último ataque. Tomó impulso saltando con las piernas y tirando de las katanas con los brazos y salió disparado a pesar del intenso dolor. En el aire se envolvió con su ala en llamas, formando una gran bola de fuego, sacando la wakizashi por delante de la bola de modo que sería lo primero en impactar y girando sobre sí mismo para aumentar el impacto.

-¡Técnica ígnea: Meteoro! - gritó en el aire mientras se dirigía hacia su adversario dispuesto a terminar la lucha después de aquella intensa y larga lucha. [AB].

Los gruesos y rubios pelos en su forma híbrida lo protegerían el suficiente tiempo (unos dos segundos) del fuego para poder darle el impacto y después convertirse en humano librándose parcialmente de las quemaduras-

El golpe impactó, aunque no de la forma esperada. De alguna forma su rival fue capaz de bloquear el golpe de su pierna pero no se contentó con bloquearlo de forma normal no, lo hizo con sus espadas. Al golpear las espadas Kaleth pudo notar como la suela de su bota derecha era cortada por aquel bloqueo para pasar a cortar de forma no muy profunda su pie. En el rostro de este se dibujo una mueca de dolor. El propio ataque ya generaba en el bastante dolor por lo que aquel plus no suponía un gran cambio. Sintiendo como el filo de las espadas se clavaba en la suela de su pie decidió hacer un poco más de fuerza. Su golpe no poseía una fuerza monstruosa por lo que a pesar del daño que le estaba causando no atravesaría completamente su pie. Al fin el esfuerzo dio sus frutos.

Gritando mientras sentía el intenso dolor que le estaban provocando tanto las heridas anteriores como el corte en su pie, consiguió romper parcialmente el bloqueo de su rival. El golpe fue desviado yendo dirección al muslo de su contrincante haciéndole que hincara la rodilla, lo cual no le pareció justo debido al sacrificio que había tenido que hacer para realizar ese ataque. En el momento en el que iba a rematar la jugada golpeándole para tratar de noquearle, Stinger rodó por el suelo. Kaleth no entendía de dónde sacaba las fuerzas su rival, tanto sus heridas como los ataques que había realizado deberían de haberle dejado exhausto y sin capaz de moverse.

El fuego estaba demasiado cerca de sus cuerpos ya apenas quedaba un pequeño circulo en el que estaban ambos. Podía sentir en su cara el sofocante calor de las llamas quemar ligeramente su piel. Sentía como en sus pulmones comenzaba a entrar más humo que oxígeno y su vista se nublaba tanto por el humo como por la perdida de sangre. Ya no conseguía pensar con claridad aunque un grito de Stinger le hizo volver en sí, al menos por unos instantes. Al fijarse vio como este había tratado de cauterizar la herida mediante su Wakizashi, la cual parecía haber sido calentada al rojo vivo.

-Kaleth, siento que esto está tardando mucho- El espadachín pudo escuchar la tos de su rival, no parecía estar mejor que el. - Creo que va siendo hora de terminar, estoy ya bastante cansado y probablemente no aguantaré ningún ataque más, ni mío ni tuyo-

Por un momento pensó que su rival había entrado en razón y había optado al fin por terminar con aquel combate que estaba a punto de terminar con las vidas de ambos, que al fina acabarían con aquella majadería y tratarían de salir con vida de aquel infierno, pero parecía que aquel no era el día de las suposiciones correctas. En un veloz movimiento su rival metió el ala, que aunque quemada se encontraba en un estado por así decirlo "decente" en comparación a la otra, en las llamas quemándola todavía más. Rodeó su propio cuerpo y se lanzó contra su rival sacando la Wakizashi por la apertura a la vez que giraba sobre si mismo para aumentar el daño de la espada, lo cual le recordó en gran medida su propia técnica.

Los labios de su enemigo se abrieron mas Kaleth no escuchó nada. El cansancio estaba haciendo mella en su cuerpo, veía todo como si fuera a cámara lenta aunque su cuerpo se movía a la misma velocidad. Podía observar como la bola de fuego se acercaba peligrosamente hacia el. En condiciones normales simplemente se haría a un lado a la mayor velocidad posible pero no estaba en condiciones de moverse a esa velocidad y el terreno había ido poco a poco haciéndose más pequeño limitando sus posibilidades, solo tenía una opción encajar el golpe de la mejor forma posible y no dejar que se fuera de rositas, si caía el caerían ambos.

Cuando vio como el impacto estaba cercano a golpearle se movió hacia la izquierda lo suficiente para evitar ser empalado por la hoja de su rival. Sin tener tiempo para más colocó sus brazos en posición defensiva a modo de cruz y dejo caer su cuerpo hacia atrás. Sabía que el golpe iba a ser demasiado fuerte para que aquella caída consiguiera reducir suficiente el golpe pero debía de hacerlo si esperaba contraatacar de alguna forma. Kaleth recibió el impacto como mejor pudo. Era como si un muro de fuego hubiera decidido que era momento de moverse y le hubiera parecido una genial idea estamparse a gran velocidad contra el. No recordaba haber recibido nunca un golpe como ese.

Pudo sentir como sus brazos se mantenían enteros por poco a pesar de recibir grandes daños por el impacto aunque su cuerpo no recibió de la misma forma el daño. En el momento en que los brazos cedieron sintió como al hacer contacto con aquel "Meteorito" varias de sus costillas no aguantaron el impacto y se quebraron causándole un dolor inhumano. Las llamas tampoco ayudaban mucho haciendo que en su cuerpo aparecieran numerosas quemaduras cada cual más dolorosa que la anterior. Durante un instante Kaleth juraría que perdió el conocimiento al recibir tal impacto pero algo dentro de el le devolvió al mundo real de nuevo, no podía permitir que aquello terminara así.

Haciendo uso de las últimas fuerzas de las que disponía colocó las manos sobre su rival quemándose las manos todavía más y gritando de puro extendió su pierna para tratar de realizar sobre su enemigo la característica llave de Judo lanzándole sobre el a aquel mar de llamas que les rodeaba [AIF].

Sin poder respirar de forma correcta cayó en el suelo como un peso muerto. Estaba en la única parcela a la vista que todavía no estaba consumida por las llamas. No entendía como todavía continuaba consciente pero si que notaba que no era capaz de mover su cuerpo, había llegado a su límite. El espadachín observó el cielo en su posición, estaba completamente negro debido al humo.

- Menuda mierda de última vista antes de morir. -

Comentó en voz baja con una sonrisa irónica. Había pensado varias veces en su muerte y no era algo que le asustara. Siempre había pensado que acabaría sus días en medio de un combate con algún reconocido pirata, claramente llevándoselo a el también por delante, o de viejo tranquilo en su casa pero no de esa forma... no peleando con un compañero.

- Lo siento chico... Me costó darme cuenta pero traté de evitarlo al final, llevamos esto demasiado lejos... No quería que esto terminara así... -

No sabía dónde estaba su compañero, ni si quiera sabía si todavía estaría con vida o si le escucharía pero se sintió mejor al expresar su pensamientos en forma de palabras. Sin poder aguantar más consciente sus ojos se cerraron lentamente sin saber si volvería a abrirlos.

Se había formado un pequeño infierno en Little Garden en el que se econtraban luchando dos jóvenes guerreros. Continuaba esta la feroz batalla entre dos compañeros de gremio, ambos se habían ganado un respeto mutuo tras ese combate, a pesar de eso no se contenían al luchar, eso sería un insulto para el rival y ambos estaban dando todo de si. Aunque el combate quizá había llegado demasiado lejos.

En el aire seguía girando con velocidad rodeado de llamas, ya no le parecía tan buena idea ese ataque, el dolor y el calor era inaguantable, aunque sabía que duraría escasos segundos y que sería su último ataque. Kaleth también estaba muy dañado y apenas podía moverse tras sus rápidos cortes con la cola. No estaba seguro de como pararía aquel impacto meteórico, pero Stinger confiaba en la habilidad de su rival y quería que de alguna forma sobreviviese.

Entonces chocaron, llegando a amortiguar el impacto dejándose caer hacia atrás y deteniendo el golpe con sus brazos, aunque estos flaquearon e impactó contra sus cuerpo, aunque no con toda la potencia deseada. Aquel cañón ígneo causó graves quemaduras y daños internos en el cuerpo de su rival. No obstante, Kaleth haciendo uso de una asombrosa proyección de judo, teniendo en cuenta las circunstancias en las que se encontraba, logró lanzar a Stinger, todavía girando, contra las llamas.

Este entró de lleno en las llamas, él ya estaba envuelto en ellas, lo que causó que las quemaduras fueran más profundas en su ala. La rotación anterior le ayudó a no quedarse dentro, lo que habría sido fatal ya que si se quedaba dentro acabaría friéndole hasta los huesos. Siguió girando con fuerza dentro de las llamas, estas le envolvían el ala, que no se recuperaría en mucho tiempo. Cayó a aproximadamente dos metros fuera del círculo. No podía moverse y lo único que debía hacer es convertirse otra vez en humano completamente, así desaparecerían las llamas de sus ala y pelos.

Los gruesos pelos de león lograron frenar gran parte de la quemaduras, sin embargo sentía como le ardía todo el cuerpo, el dolor era intenso en toda la piel que le ardía en casi su totalidad, pero el único dolor que sentía en ese momento era en las costillas, por la herida y la posterior cauterización provocando intensos gritos, alaridos más bien, de dolor en Stinger que no podía moverse tras la angustiosa batalla, retumbando por gran parte de la espesa selva.

Había quedado boca abajo, con la cabeza mirando hacia el fuego, no sabía que podría hacer su compañero, se ahogaría dentro del anillo o moriría incinerado, pero si le disparaba con las pistola, simplemente lo mataría, en aquel estado, sólo podría recibir gustosamente las balas, para terminar su agonía y esta pelea. Detrás de él todavía había algunos árboles que no se habían quemado, con las hojas aún verdes. Stinger respiraba con dificultad, pero tras salir, sentía aquel aire como el más limpio que había respirado jamás, era un auténtico alivio respirar oxígeno y no humo.

-Al menos lo animales han huido por el fuego. Sino simplemente seríamos devorados por ellos. Aún quedan mis dos katanas dentro. Si él logra levantarse seguramente gane, yo estoy acabado, no puedo moverme, aunque me gustaría sacarlo de las llamas. Que idiota soy, si yo no puedo ni siquiera rodar cómo voy a sacarle. Bueno sólo puedo hacer una cosa, creo que sería lo mejor para los dos-pensó bastante feliz tosiendo y expulsando el humo que quedaba en sus pulmones.

-¡¡Kaleth!!-gritó llamando a su contrincante confiado en captar su atención.

-No sé como estarás tú, pero no puedo moverme y tampoco quiero que mueras. Si puedes, podrás eliminarme con la pistola. Yo doy el combate por terminado, me da igual el resultado-dijo casi gritando y esforzándose en no quedar inconsciente, todavía era muy alto el dolor en el costadoy ya empezaba a sentir el ardor en la piel, provocando que vuelva a gritar aunque esta vez el sonido de su garganta era mucho menor, apenas le quedaba fuerza incluso para gritar.-

Stinger se quedó callado y con el cuerpo rendido, esperando la respuesta de su rival, desplomado en el suelo. Esperaba que aceptara el acuerdo y que le respondiera diciéndole que quería salir, aunque no sabía como lo haría al estar totalmente inmóvil sobre aquella hierba con un tono amarillento, muy distinta de su isla, al ver que estaba amarillenta sabía que en no mucho tiempo aquel incendio acabaría por envolverlo de nuevo. Su cabeza pensaba con rapidez intentando buscar respuestas, aunque quizás sólo era la adrenalina generada en todo su cuerpo al haber vivido esa experiencia. pero no podía morir ahí no sin haber capturado ningún pirata o revolucionario importante. No estaba dispuesto a morir. Era una promesa.