[Privado]Un paseo por la villa [Ruxer-Dayane]

Habíamos desembarcado allí y decidí ir a explorar un poco, como de costumbre. Me encantaban los lugares nuevos, y éste parecía muy tranquilo y agradable.
Encontré una villa a la que sólo se podía acceder por dos cuestas ya que hay altos acantilados... Me recuerdan a.... Bueno, mejor ni pensarlo.

Mi estómago rugió, hambriento, y decidí ir a buscar algún sitio donde saciar mi apetito.
Cada uno de la Brisa Carmesí nos habíamos ido por nuestro lado, así que no me esperaba encontrarme a nadie por ahora... Aunque el sitio era pequeño y sólo sería cuestión de tiempo que nos aburríeramos y nos echáramos a la mar, de nuevo.
Vagando por las calles de la pequeña villa, encontré un restaurante.
-"Meshi"-susurré. Tenía buena pinta, y era mejor que ir en busca de otro lugar, así que entré, para hacer callar a mis tripas de una vez.

Habíamos tomado ese desembarco como unas vacaciones, por así decirlo, y supongo que para desconectar un poco, o quizás no, ya que a mi la sed de aventuras nunca se me acaba. Pensé en ir a algún sitio para sentarme en algún lugar a tomar algo de beber. Vi una villa en la que seguramente habría algún lugar para beber algo. Yo lo que buscaba era sentarme y disfrutar pensando que mi sueño se hacía poco a poco realidad. Vi un buen lugar y me dispuse a entrar, parecía un buen lugar, así que sin esperar un segundo entré y me senté en una mesa a la vez que pedía una cola.

Me senté en una mesa muerta de hambre, en otra ocasión me habría parado a ver las caras de las personas que estaban allí, pero esta vez no, necesitaba urgentemente comida. El camarero me atendió rápido, y pedí un plato de carne al azar, ya que había sido lo primero que había visto en la carta.
Esperé impacientemente a que el camarero trajera mi comida, lo que hizo que no apartara la vista de la puerta que daba a la cocina, por la que el camarero había desaparecido.

Cuando me estaba relajando unos tipos los cuales al entrar todo el mundo se callaron, pidieron sake. Parecía como si la gente de allí les tuviese miedo. Lo siguiente que hicieron fue buscar una mesa, pero estaban todas libres. Sabía que iban a querer una mesa, y como los problemas siempre vienen a mi pues probablemente iban a ir a mi mesa. Y así fue.

Hombre: Oye compañero, que tal si te levantas y nos dejas sentarnos.

Me parecía que iba a tener problemas.

Ruxer: Lo siento "compañero", no me voy a mover a si que te puedes tomar tu sake de pie.

Parecía que el tipo estaba muy enfadado y entonces me apunto con una pistola y me lo volvio a repetir más bruscamente.

Cuando me estaba relajando unos tipos los cuales al entrar todo el mundo se callaron, pidieron sake. Parecía como si la gente de allí les tuviese miedo. Lo siguiente que hicieron fue buscar una mesa, pero estaban todas libres. Sabía que iban a querer una mesa, y como los problemas siempre vienen a mi pues probablemente iban a ir a mi mesa. Y así fue.

Hombre: Oye compañero, que tal si te levantas y nos dejas sentarnos.

Me parecía que iba a tener problemas.

Ruxer: Lo siento "compañero", no me voy a mover a si que te puedes tomar tu sake de pie.

Parecía que el tipo estaba muy enfadado y entonces me apunto con una pistola y me lo volvio a repetir más bruscamente.

El silencio se hizo en la taberna cuando unos hombres entraron. Eran bastante feos, la cosas hay que decirlas.
A mi me daba un poco igual, ya que el camarero llegó con mi plato de carne y empecé a comer, saciando un poco mi apetito.

-Lo siento "compañero", no me voy a mover así que te puedes tomar tu sake de pie.

Esa voz... -me giré para ver si mis sospechas eran ciertas y así fue : Ruxer, mi capitán, ya se había metido en problemas de nuevo.
Suspiré. Esos tipos no me gustaban, y como se les ocurriera ponerle un dedo encima a mi capitán serían la cena de Riu, la cual ya había empezado a deslizarse de mi mochila y se dirigía hacia ellos, en silencio.

El tipo estaba muy nervioso y muy enfadado con lo que seguramente aquel tipo podría disparar en cualquier momento. Me acercó un poco más la pistola a mi cabeza y me dijo.

Hombre: Más vale que te disculpes o te volaré la cabeza de maldito disparo.

Mientras me estaba diciendo eso sus compañeros se empezaron a reír mientras él se volvía a dirigir a mi.

Hombre: Es que ¿no sabes quien soy? Soy el mayor bandido de esta isla, y tu solo eres un gusano.

Ese comentario no me molesto nada, pero cuando un tipo esta tan cabreado y tan nervioso es más fácil vencerlo.

Ruxer: Oye amigo, te doy tres segundos para apartarte de mi camino, o sino...

Hombre: ¿O sino que?

Dijo en tono de burla.

Ruxer: Bueno, estaba pensando en cogerte la cabeza y estampar tela contra la mesa, y luego te iba a lanzar contra tus amigos.

Escuché la conversación con interés. No me preocupaba que me pillaran escuchando, ya que eso era poco probable.

"Es que ¿no sabes quien soy? Soy el mayor bandido de esta isla, y tu solo eres un gusano."

Al oír eso no pude evitar una leve risita. Se notaba que no conocían a mi capitán.
Continué escuchando y me giré para continuar observando la pelea, con interés. Tenía ganas de ver cómo Ruxer les daba una lección a esos pobres hombres tan debiluchos. En cierto modo, me daban pena. Incluso yo podría vencerles con facilidad... Y eso que no puedo usar haki.

Justo cuando iba a disparar le estampe su cabeza contra la mesa como había dicho y le lancé contra sus amigos tal y como había dicho. Se callé ron pero se levantaron rápidamente y sacaron cada uno su espada. El supuesto van bandido estaba inconsciente y sus compañeros parecían nervioso. No pude evitar escuchar una carcajada que inmediatamente supe de quien era.

Ruxer: Bueno, ¿les sacas de este lugar tu o yo, Dayane?

-Gracias por tenerme en cuenta, capitán. Yo también quiero entretenerme.-le sonreí a Ruxer.-¿Qué tal si los compartimos? La mitad para cada uno.

Me levanté de la silla y automáticamente Riu se enroscó en mi brazo, preparada para atacar.