[Privado] (Meneror, Karl y Yo) Una cita en las cavernas.

Kiroi no había necesitado mucho tiempo para ponerse en contacto con Karl, pues era un marine bastante conocido. Había escrito una nota firmando como Kiroi, pues Karl conocía su identidad fuera del proyecto, explicando la situación al marine. En la carta, el pez globo había remarcado los posibles beneficios de contar con la ayuda de un importante capo como "Il Bianco" para el proyecto, por lo que instó a Karl a ir a aquella reunión, pues Kiroi no se consideraba lo bastante importante dentro del proyecto como para tomar decisiones como aquellas por su cuenta.

El lugar que había escogido para el encuentro era una de las pequeñas cavernas de la costa de Takenuma. Apenas tendría veinte metros cuadrados, aunque era asombrosamente alta. La cueva estaba formada, en su totalidad, por piedras negras y relucientes, aunque no estaban pulidas. Si Kiroi fuese supersticioso lo hubiera achacado a los fantasmas, pero ese no era el caso.

Todo lo que ocupaba la mente del pez globo era la posibilidad de que Quimera Karl decidiera no presentarse a la cita, molesto por que Kiroi hubiese descubierto su identidad. Si eso sucedía, tendría que rendir cuentas ante "Il Bianco", por lo que se había asegurado de que la entrada de la cueva estuviera a apenas unos diez metros del mar.

Una figura atravesaba volando el tormentoso cielo. Cual pájaro gigantesco, Karl levitaba hacia la entrada de la cueva con su chaqueta de oficial ondeando a su espalda. Era un hombre alto y muy corpulento, de piel bronceada y arrugas precoces, pelo castaño corto, una barba recortada que le rodeaba la boca y imponentes patillas. Un parche tapaba su ojo izquierdo. Karl se posó en la entrada de la cueva y fue al grano.

- Aquí estoy. Os dije que no investigaseis mi identidad, Emperador - dijo Karl, notoriamente enfadado - Si mencionáis algo del Proyecto, os rebanaré el pescuezo. No quiero de momento que este... mafioso, sepa algo del mismo. Por ahora al menos.

Contempló la impresionante cueva, y escuchó atentamente por si detectaba a alguien. No les convenía tener a nadie espiándoles. Pasó a forma híbrida durante unos momentos y escupió una tromba de fuego que inundó la zona interna de la caverna, inundando sus recovecos. Si había alguien oculto, se quemaría. Durante un instante creció de tamaño, y le apareció una segunda cabeza con cuernos. Además bajo la chaqueta había algo que parecía una cola. Sin embargo, estando Karl dándole la espada a Kiroi, este no podía contemplar sus rasgos totalmente. Karl volvió a su forma humana.

- Listo. Si había algún espía, ya debe estar criando malvas.

*En el mismo momento que el fuego desapareció del interior de la cueva, un pequeño punto rojo se dejó ver en el fondo de la cueva, del cual comenzó a salir un hilillo de humo blanco, mientras una sonrisa de blancas perlas rompió la oscuridad del lugar cercano a la entrada de la cueva.

-Si sois tan sagaz de hablar así para ocultar vuestros planes, ni quiérome enterar de como haréis los planes que deben saberse
*rie irónico saliendo de entre la oscuridad dejándose ver. Era "Il Bianco" que esta vez portaba un traje negro con chorrera de color rojo, un pañuelo del mismo color en su chaleco acompañado este por una cadena dorada, su abrigo de gran envergadura ocultaba sus hombro dejando ver su mano mano izquierda un garfio y el otra en el bolsillo*


-Espero que vuestra sagacidad al hablar conmigo no sea tan patente  y sea más concisa y precavida señor Karl.

Kiroi se estremeció de forma imperceptible cuando Karl le amenazó y más aún cuando escupió una llamarada de ese calibre, más no pudo contener una carcajada cuando escuchó las palabras de "Il Bianco".

Ahora se le presentaba un gran dilema al agente del gobierno. Tenia tres opciones, y las tres eran igual de peligrosas. La primera era respaldar a Karl en lo que, posiblemente, acabaría derivando en un enfrentamiento directo entre "Il Bianco" y el. La segunda era apoyar al mafioso en esa empresa. La tercera, y, a opinión del Gyojin, la más peligrosa de todas, era advertir a un agente del gobierno y tratar de capturarlos.

Pero aquella opción no le interesaba nada, pues prefería seguir con el Proyecto. Tras pensarlo un instante, decidió que lo más prudente era tratar de llevarse bien con los dos, pues "Il Bianco" podía ser un gran fichaje para su empresa.

Se acercó al mafioso y le hizo una respetuosa reverencia.

-Mis disculpas, "Il Bianco", no os he contado toda la verdad sobre mi relación con este sujeto. Para ser concisos, trabajo para el. Creo que trabajar juntos podría suponer un gran beneficio para ambas partes. -"Y para mi integridad física", pensó Kiroi.- Y os pido mis más sinceras disculpas por haberos ocultado la verdad.

Ahora Kiroi no podía hacer más que esperar y rezar para que "Il Bianco" no se enfadara demasiado y Karl no se enfadara por algún extraño motivo.

Karl no se sintió ofendido por las palabras del mafioso. Es más, esbozó una sonrisa enigmática al ver al mafioso salir indemne de las profundidades de la caverna. Había sobrevivido a la llamarada sin ningún daño, hazaña suficiente para llamar la atención del marine. La verdad es que ahora quería probar el poder del capo. Observó sin mucho interés cómo Kiroi saludaba respetuosamente a Il Bianco. Era increíble cómo de falso podía llegar a ser alguien que odiaba tanto a los humanos.

- En realidad no habéis escuchado nada relevante, Il Bianco. Nada que pueda influirme, vaya. No temáis, soy una persona lo bastante precavida como para cuidar mis pasos.

Meneror había escuchado el nombre de Kiroi. Eso implicaba que si dudaba de su lealtad o no lo admitía en el Proyecto en un futuro debía liquidarlo, así como mantenerlo espiado y con vigilancia para asegurarse de que no mencionaba absolutamente nada de lo que había oído. Si bien no había mencionado nada relevante, los nombres "Proyecto" y "Emperador" podrían hacerse famosos en un futuro y asociados a Lion D. Karl harían a más de un miembro del CP sumar uno más uno y darse cuenta de quién lo lideraba. Perdería su carrera de marine y un plan de años. No iba a dejar cabos sin atar. O "Il Bianco" colaboraba con él o moría.

- Decidme pues, "Il Bianco". Me habéis convocado a este... lugar. ¿Qué buscáis de un humilde oficial de la Marina? - dijo, con sarcasmo. Estaba claro que no era un oficial corriente.

*Il Bianco escuchó con especial atención las palabras del señor Kiroi, pasando por su lado con el puro en la boca mientras miraba a Karl a la vez que hablaba dirigiéndose a Kiroi en un susurro a su oreja*

-Si volveis a mentirme tened a bien que yo mismo os incineraré el corazón mientras recordais lo que es la ...verdad *dijo esbozando una sonrisa de medio lado a la par que lo decía*

-Sin embargo disculpas aceptadas para vos.


*Tras eso observó a Karl mientras lo observaba de arriba a abajo serio*

-Lo que haya escuchado o no y si es de relevancia lo judgaré yo, pues hasta un nombre es capaz de hacer brecha en las mentes mas cerradas...no espero que lo entendais *exhala un poco de humo de su puro y sostenerlo en  su mano  para proseguir*

-Pedido audiencia he con vos por un motivo simple...negocios..conveniencia...colaboración....tengo un proyecto en mente que nos hará más ricos y famosos en los 7 mares por no decir que un camino libre a nuestras ambiciones más justificadas
*golpea el puro con el meñique para quitar la ceniza y segir hablando*

-Y se que vos os gustan tanto la palabra fama como  riqueza....¿no?

Kiroi había tratado el tiempo suficiente con Karl como para saber como reaccionaría su "jefe", así que, en cuanto recibió el perdón de "Il Bianco", se apresuró a situarse al lado del marine y, en cuanto el capo mafioso acabó de hablar, se acercó para susurrarle sin que este le escuchara.

-Karl, tranquilo, este hombre nos puede ser realmente útil, así que, por favor, contrólate y no le ataques. Aunque estoy seguro de que lo matarías sin demasiado esfuerzo, echarías a perder una de las mejores oportunidades que se nos ha presentado en mucho tiempo.

No podía hacer mucho más para frenar a Karl. Si este decidía atacar, no iba a ser el quien se interpusiera. Se apartó unos pasos del marine. Ahora solo podía esperar.

Esta vez sí que se sintió ofendido. Y Karl era una persona a la que no convenía ofender. Se le borró la sonrisa del rostro y frunció el ceño. Activó su Kuro no Arm, y su brazo derecho comenzó a volverse negro. Sin embargo, esto quedaba tapado por la blusa. Hasta que la masa negra no le llegase a la mano no quedaría a la vista, delatando sus intenciones ofensivas. Sin embargo no había nada que ocultar. El aire a su alrededor vibraba a causa de su intensa energía. Un aura roja, amarilla y naranja le rodeó, y la vibración aumentó. Sin embargo en ese momento el gyojin intervino, incitándole a calmarse. El marine respiró hondo y paró. El aura desapareció y su brazo volvió a ser normal. Miró con cierta irritación a Meneror.

- Il Bianco, he aceptado venir a aquí por petición vuestra. No estáis en condiciones de provocarme. Recordad vuestro lugar. Sois un pez gordo en un estanque pequeño, pero en el océano hay tiburones. Procurad no ofender a aliados potenciales.

Se frotó las manos y le miró con cierta irritación aun, tratando de calmarse. A pesar de la provocación, no cabía duda de que sus palabras eran interesantes. Decidió que a pesar de todo escucharía sus palabras.

- Hablad pues. Os escucho.

*Meneror había logrado su objetivo, provocar a Karl para ver su temperamento ante un simple comentario, y por lo tanto, le sería fácil manejarle, pues comenzó a ver de donde cojeaba, el orgullo*

-Señor Karl... *toma asiento en una roca con la pierna cruzada y el puro de nuevo tocaba sus labios*.....como dije vengo a proponeros negocios fructíderos....quiero hacer trabajo junto a vos y ganar beneficios productivos para ambos....mas bien para los 3 *mirando a Kiroi*


-De todos es sabido que la Marina está podrida hasta sus cimientos, mas no os ofendáis por este comentarios pues sabeis que digo la verdad...al igual que los piratas, por ello he puesto mis ojos en Sons of Anarchy la cual estoy seguro que conoceréis de buena tinta....

*exhala humo al interior de la cueva*

- Está en marcha un secuestro hacia su capitana D.Rose..y me gustaría teneros a mi lado...pues ganaríamos ambos, vos por quitaros escoria del medio y lograr más famas aparte de un buen compendio por recompensa..y yo...el libre tráfico de mercancía robada. ¿Alguna duda?


*Tras eso exhaló una gran bocanada de humo que tocó el techo de la cueva, y este al contacto con el mismo provocó que una pequeña zona del techo comenzara a derretirse como si de una estalactita se tratara*

Gracias a dios había logrado calmar a Quimera Karl y evitar la carnicería. Pero las palabras de Meneror hicieron que se le olvidara todo y que su mente se llenara en su totalidad por una sola idea... El Gyojin sabía que, aunque ahora estaban en horas bajas, Sons of Anarchy había estado liderada, en sus tiempos, por Red Stinger "Crimson, y contaba con un buen número de simpatizantes y aliados.

-Eso podría suponer la guerra. La banda tiene muchos amigos y podrían acudir a ayudarlos si la mujer desaparece.- En ese momento una sonrisa enorme cruzó el rostro de Kiroi.-... Me encanta la idea de una lucha sin cuartel entre nosotros y ellos. Creo que es una gran idea, Karl.- Añadió en bajo para que solo lo escuchara el marine.- Además, si la cosa se pone fea, tenemos al resto respaldándonos.

Karl se mesó la barba mientras entrecerraba los ojos. La idea era terriblemente tentadora. Sons of Anarchy era la banda de sus dos rivales, Crimson y Allen. Ambos habían desaparecido del mapa, pero la idea de aplastar su banda era muy apetecibles. Sería un duro golpe para ambos, además de ganar fama. Por no hablar de que los provocaría y tal vez a alguno de los dos se le diese por salir de su escondrijo.

- ¿Atacar a Sons of Anarchy, provocando seguramente a un buen número de aliados poderosos? Me gusta.

Se paró a pensarlo. Dark D. Rose por lo que había leído en los informes del CP no era capitana... el capitán tras la desaparición de Crimson era Zarlet. Sin embargo hacía ya una temporada que Zarlet había desaparecido, o al menos ni un alma lo había visto en semanas.

- A menos que vuestra información sea más reciente que la mía, el capitán elegido tras la desaparición de "Red Stinger" Crimson fue Zarlet. ¿Qué sabéis del tema, Il Bianco?

*Sonrío  de lado tras que ambos les gustase la idea, para luego levantarme y mirarles con el puro en la mano, ya acabándose este para luego tirarlo y sacar un fajo de papeles de su chaleco dándoselos a cada uno de aquellos hombres*

-D.Rose es ahora la encargada de la banda...novata...escoria..más faci de capturar y provocar la llegada de Sons al completo *Enciende otro puro con el mechero  mientras habla*

-Mi intención es beneficiosa para todos...secuestrar a Rose...atraer a los líderes hasta mi y entablar un parlamento provechoso...y sabiendo que la intelectualidad de dicha banda se basa en -10...digamos que *exhala humo* Nos atacarán y por ello quiero cubrirme las espaldas, pues si logro convencerles de que colaboren con mis negocios, evitaremos luchas innecesarias y obtendremos beneficios a costa de Sons... un trato de lo más justo ¿no creen caballeros?


*Exhala Humo para luego volver a sentarse*


-Sladreis famosos y victoriosos y si acuden los grandes..será una fiesta curiosa, mas de todos es sabido que si esta alianza sale..quiero de vos Karl información del gobierno y yo os daré lo que gusteis, al igual os lo digo a vos Kiroi.

Aquello iba viento en popa y Kiroi estaba orgulloso de haber desempeñado bien su papel. Sabía perfectamente que ninguna de sus opiniones había sido tomada realmente en cuenta, pues, al ser "subordinado" de Karl, el que realmente decidía era el. Pese a saber todo esto, el Gyojin había hecho lo que se proponía, evitar el combate para que los dos hombres pudieran llegar a un acuerdo.

Satisfecho por su esfuerzo, el Gyojin sonrió con sorna y se sentó cruzando las piernas sin moverse de su sitio.

-Sería muy fácil que aceptaran vuestras proposiciones, "Il Bianco", y muy aburrido. No pienso hacer nada para dificultar las negociaciones, pero realmente espero que salgan mal para poder explayarme a mis anchas por una vez.- Se acercó, decidido a no seguir con aquella farsa, al mafioso, y lo encaró.- Mira, "Il Bianco",-comenzó el Gyojin, tuteándolo.- Yo soy un Gyojin y odio a la mayoría de humanos por su debilidad. La única razón por la que trabajo para Karl es su desmesurada fuerza, aunque no dudo que tu también eres poderoso. Quiero que quede claro, yo no trabajo para ti, sino para el.- Dijo señalando al marine con un dedo.- No te tomes esto como un insulto o una falta de respeto. Nunca he respetado a ningún humano lo bastante como para tratarle de usted seriamente, y tu no serás la excepción.

Tras acabar de hablar, Kiroi comprendió que se había excedido. Aun no habían sellado el trato definitivamente. Se maldijo a si mismo un instante, pero no lo dejó ver. No se arrepentía de lo que había dicho y, si tenía que pelear, pelearía a muerte.

Karl rebuscó dentro de su chaqueta de oficial y sacó un puro y un zippo. Pronto un segundo hilillo de humo ascendió hacia el techo. La propuesta era interesante, pero de esa manera a menos que apareciesen los aliados de la banda, Karl no ganaba nada. Il Bianco quería a los Sons of Anarchy vivos para controlarlos. Con eso Karl no lograba fama, cobrar recompensas ni siquiera atraer a Crimson o Allen.

- Sois consciente de que si los aliados no aparecen, yo no gano nada, ¿no?

Karl se quedó pensativo. ¿Qué podía exigirle a Il Bianco como recompensa? Semejante hombre se negaría a trabajar para él. La verdad es que todo aquel jueguecito le interesaba mucho sacase o no provecho, pero prefería no irse con las manos vacías. Entonces llegó a la conclusión obvia.

- Si te ayudo, me deberás un favor - sonrió malévolamente - Y yo siempre me aseguro de cobrar los favores que me deben. Si quieres información del Gobierno deberás pagarla, dado que yo no saco nada.

*Una sombra cubre los ojos de Meneror , el cual, gira la cabeza a Kiroi*

-Vos trabajais para mí , solo que aun no lo sabeis...tsk *le mira con desprecio pasando por si lado para acercarse a Karl*

-Veo que vos teneis mas cerebro que vuestro compañero que expone sus intenciones a la primera de cambio, mas debo deciros que consciente soy...*exhala humo* sin embargo... solo pretendo atraer la atención de aquellos que necesito favores ¿acaso pensais que sons of anarchy interésame lo más mínimo?, son simples peones en esta partida...*mira a Kiroi* ¿Verdad señor Kiroi?*Sonríe de lado*

-Caballeros cierto es provecho saco más yo mas que ustedes puedo sacar, mas de todos es sabido que ante tal ofensa hasta los mas poderosos vendrán y cuando mi parlamento haya tenido éxito...os aseguro que Sons no será ni la cuarta parte de lo que es ahora y que sus líderes saldrán de sus madrigueras.



Y...Señor Kiroi.. podéis estar tranquilo...yo tampoco muestro respeto a no ser de aquellos que lo merezca, y estoy seguro que el Señor Karl verá a buenos ojo mi plan.

El Gyojin no pudo evitar sonreír ante las palabras del mafioso. Era evidente que era una persona sagaz y avispada, pero no dejaba de ser un humano. En cuanto "Il Bianco" terminó de hablar, Kiroi miró a Karl a los ojos. Los dos se conocían lo suficiente como para que el Gyojin no tuviera que expresarse con palabras. Le estaba pidiendo permiso a Karl para atacar a "Il Bianco". Su intención, obviamente, no era la de matarlo, sino la de enseñarle una lección pero, pese a estar convencido de que podía medirse con Meneror, sabía que no podría hacer nada si Karl desaprobaba aquello, por lo que las palabras del marine decidirían la suerte del mafioso.

Karl captó la mirada Kiroi. Sonrió sin soltar el puro y se cruzó de brazos. Observó de arriba a abajo al mafioso. Era un tipo alto y corpulento, y le faltaba una mano que sustituía por un poderoso garfio. Parecía curtido, aunque bien podía ser sólo apariencia. Era un buen momento para probar el poder de aquel extraño hombre ignífugo.

- Bien, señor "Il Bianco". Antes de nada debo probar vuestro poder... comprenderéis que no quiero aliarme con alguien incapaz de enfrentarse siquiera a mi subordinado.

Esperaba que mordiese el anzuelo. De todos modos, no le quedaba remedio si quería la ayuda de Karl. En el mundo de la mafia la apariencia de poder lo era todo. Y las muestras de cobardía podían suponer perderlo todo. Se serviría de eso para forzar a "Il Bianco" a luchar contra Kiroi. Si mostraba debilidad, lo mataría. Había escuchado demasiado sobre el Proyecto, y si no le valía como aliado le compensaba más tenerlo muerto.

- Enfrentaos a mi subordinado. Si aguantáis un par de asaltos contra él os daré el honor de medir fuerzas conmigo y concederos mi palabra de que os ayudaré. Si considero que sois débil, estáis solo.

*Meneror miró sentado a Karl con cierta seriedad, sin pestañear para luego sonreír de lado*

-Je..es harto meritorio que me hagáis jugar a vuestro juego...sin embargo ahora que ya se como jugáis, permitidme que acepte vuestro reto. Mas espero que este timorato esté a la altura de mi espada...mas no desearía perder el tiempo en niñedades.

*Se incorporó lentamente para luego sacar de la funda de su bastón una espada fina, la cualformaba su propio bastón. La colocó a su lado agarrándola con firmeza mientras que con la boca sostenía su habano y esperaba paciente a que Emperador moviera pieza*

-Espero que este combate sea de vuestro agrado, más os prometo una cosa...acertad en darme pues no os daré segunda oportunidad....

*Clavó la espada en el suelo y con su mano sacó un reloj de aena de su bolsillo, lanzándolo al suelo y clavándose este en la tierra, tras eso empuña el arma de nuevo*

-3 minutos teneis para tumbarme.

Kiroi no daba crédito a la arrogancia de "Il Bianco". Es cierto que tenía fama de ser un hombre poderoso, pero no entendía como podía comportarse con tal arrogancia cuando era él quien estaba siendo sometido a prueba. Kiroi dudaba que aquel triste humano fuera tan poderoso, pero Karl lo era, así que decidió andarse con cuidado y tantear el terreno primero.

-Creo que no has entendido como funciona esto, "Il Bianco". Eres tu quien está a prueba aquí, no yo. Pero si así lo deseas, cumpliré tu deseo. Besaras la piedra antes de que el último grano de arena caiga.

Kiroi se separó un par de pasos más y levantó la mano. Utilizando su energía creo una pequeña cantidad de agua salada en su mano y luego la lanzó dispersa en pequeñas gotas que avanzaban hacia Meneror como puntas de flechas.

-Gyojin Karate... Yabusame! (AF)

*Meneror observó el ataque del gyojin con especial atención, al ver que aquellas flechas de agua iban directamente hacia él, empuñó la espada para hacer un veloz corte horizontal destruyendo algunas, lo que no evitó que algunas le dieran en el hombro haciendo que Meneror esbozara un leve quejido de enfado a la vez que la sangre comenzó a brotar el mismo haciendo que Meneror retrocediera un par de pasos*

-Bastardo como osáis...Puntura del serpente...(AI)

*Meneror se lanzó velozmente contra el Gyojin para  dar  rápida estocadare en el vient precedida por un par de fintas meintras avanzaba, buscando lisiar a su enemigo o enfadarlo con un rápido pinchazo. Realiza este golpes retrocediendo y avanzando con un hábil juego de pies mientras apunta al otro con el florete, con un juego de muñeca para no dejar claro hacia dónde va a atacar con el arma . Realizando  la estocada estirándose hacia delante lo más rápido posible y si llegaba a acertar, retrocediendo al momento*.

Karl observó todo aquello con una sonrisa en el rostro. Kiroi era increíblemente fuerte, y su poder no había hecho más que aumentar en los últimos tiempos. Dudaba que Meneror lograse hacerle daño, aunque a lo mejor le sorprendía. Con arrogancia, el mafioso sacó un reloj y dijo que le daba tres minutos al gyojin. Tras eso desenvainó una espada fina y elegante de su bastón. "Esgrima, creo adivinar por la clase de espada. Interesante."

- Demostrad lo que podéis hacer, Meneror. No debería costaros derrotar a mi subordinado si tan poderoso sois, ¿no? - dijo, en un tono burlón que daba a indicar claramente que pensaba lo contrario.

Se cruzó de brazos. Kiroi comenzó el combate con la apertura típica que solía emplear: un yabusame antes de pasar a cosas más serias. En lugar de extraer el agua de una botella o de algún lugar, la generó con su propio cuerpo. La sonrisa de Karl se ensanchó. "Esto es nuevo. A lo mejor puedo disfrutar de un par de sorpresillas en este combate." El marine fumó otra calada de su puro y comenzó a hacer anillos de humo. Un veloz movimiento de la espada del mafioso cortó algunos de los disparos del yabusame, pero los restantes le dieron en el hombro, haciéndole sangrar. Entonces, con un gran juego de pies y fintando, el mafioso le lanzó una estocada al gyojin.

- Interesante movimiento, Il Bianco.

Kiroi se sorprendió gratamente al ver a su rival defenderse de su Yabusame. En lugar de tratar de esquivarlo había cortado la mayoría de su ataque con un florete. Era la primera vez que un espadachín le hacía aquello a Kiroi. Al parecer "Il Bianco", pese a no ser tan temible como Karl en aquel momento, era un peligro a tener en cuenta.

En cuanto el ataque de Il Bianco comenzó Kiroi se dio cuenta de que no podría reaccionar a tiempo ante los veloces cambios de muñeca que estaba dando. Retrocedió un paso tras uno de los amagos y, enfadado, resolvió que esquivar aquel ataque no sería posible dada su envergadura y velocidad. El Gyojin ancló bien sus pies en la tierra y sonrió mientras endurecía su cuerpo.

-¡Tekkai!

La estocada de su oponente, que normalmente hubiera penetrado su vientre con facilidad, se detuvo al entrar en contacto con su piel. Pero el hombre pez no pudo aprovechar para contraatacar, pues "Il Bianco" se retiró tan rápidamente como había atacado, lo que indicó a Kiroi que no le había atacado con todo lo que tenía.

-Cuidado, "Il Bianco", si no os lo tomáis en serio, en cuanto ese reloj marque la hora no estaréis besando el suelo, sino la tumba.

Utilizando el Semei Kikan se arrancó ocho espinas, que medían unos treinta centímetros de largo, y lanzó dos a su oponente mientras tiraba las otras seis al suelo entre los dos.

Espinas envenenadas. (AIF)

*Meneror simplemente sonrió y se relajó y dejó que aquellas espinas tocaran su cuerpo, pero al mismo contacto con este, las espinas pasaron de lado a lado dejándose ver grandes boquetes de humo en su cuerpo, mientras que Meneror sonreía y las espinas se clavaban en la roca, para luego ver como los boquetes de humo se cerraban*

-Oh mi buen muchacho....¿quién dice que no lo estoy haciendo?..es más....mirad el suelo porque estáis besándolo...

*en ese preciso momento el bianco se lanzó de nuevo contra el Gyojin con motivo de darle un estoque, al estar lo suficientemente cerca  su cuerpo adoptó la forma de una gran espiral de humo negro desapareciendo Il Bianco al momento y   que a grandiosa velocidad pretendía atravesar de lado a lado al gyojin quemándolo internamente saliendo Meneror por su espalda y reaciendose si lograba asestar el inminente golpe, y procurando así que su oponente fuera quemado salvajemente desde dentro*

El hábil golpe del Il Bianco no pudo romper el tekkai del agente del Cipher Pol. Sin embargo logró ponerse fuera del alcance del gyojin velozmente, aprovechando su agilidad. Para su edad, Il Bianco no sólo estaba en una admirable forma física (algo no tan extraño dado que no era tan mayor aun), si no que conservaba una increíble agilidad y flexibilidad propias de una persona joven.

Sin embargo el gyojin era su subordinado por algo. Velozmente Kiroi lanzó al suelo una serie de espinas, tras lo cual tiró dos directas hacia Il Bianco. Un movimiento peligroso y probablemente letal si le daba. "Si Kiroi logra impactarle, se acabó el combate. Su veneno es letal." Il Bianco no parecía hacer nada para esquivarle. "¿Qué narices hace? Está a punto de perder." Entonces las espinas lo atravesaron y se clavaron en la pared de atrás. Las partes donde le habían dado se habían vuelto humo negro. "Logia..." Los logia eran particularmente poderosos. Alguien como Meneror con semejante fruta podía ser un oponente temible. El mafioso cargó sobre el gyojin de nuevo, con su estoque hacia delante. Repentinamente se convirtió en una espiral de humo que avanzó al gyojin, amenazando con impactarle... ¿qué podía tener aquel humo de especial?

En cuanto las espinas atravesaron a su oponente Kiroi lo entendió todo. De ahí provenía la insultante arrogancia de aquel triste e inferior insecto. Las frutas del tipo Logia, además de ser realmente poderosas, era muy raras. Pero Kiroi ya había combatido antes contra Logias, especialmente contra Logias etéreas, así que sabía como hacer para anular sus ventajas. En cuanto vio la habilidad de su enemigo, comenzó a segregar agua por sus pies, creando una fina capa de agua a su alrededor. Ya había observado que el agua si le hacía daño, así que solo tenía que repetir la jugada.

Su enemigo se lanzó hacia el con el estoque por delante y, de pronto, se deshizo en humo y aumentó su velocidad. Esa fue la señal para que Kiroi actuara. Con un fluido movimiento levantó la fina capa de agua de golpe. Aquel ataque tenía una intención triple. La primera era mojar a su rival para que recibiera los golpes, la segunda era tratar de intimidarlo, pues era posible que, al ver el agua, se echara para atrás. La tercera era levantar las agujas que había tirado al suelo pues, al ir empapadas, sí afectarían al mafioso. De cualquier modo Kiroi tuvo que alzar el brazo para detener el estoque de "Il Bianco", pues no le dio tiempo a utilizar su tekkai.

Agua y Espinas. (AF)