Nassor & Moja vs. Simo Baker

Off: Dado que han pasado 36 horas sin respuesta de mi rival, procedo a saltar.

¿Humo? Eso era un juego sucio. Sin embargo su ataque y el torbellino que le acompañaban lo despejaron, a tiempo para ver una figura justo bajo el árbol arrebatándole la chaqueta a un pirata y empujándolo contra otros, comenzando una pelea. Extrañamente no percibía su aura... pero tampoco había sentido la del tirador. No llevaba la gabardina ni la máscara, pero no había que ser un genio para sumar dos y dos. Era un hombre capaz de ocultar su presencia al kenbunshoku, igual que su presa, y parecía de la misma complexión. No sabría decir altura porque solo lo había visto un momento sobre el árbol. Esos datos junto con el hecho de que acababa de causar una conmoción (que podría venirle de perlas para escapar, es decir, si no lo hubiera visto) y ponerse una chaqueta robada le indicaban que se trataba del mismo hombre.

Echó un vistazo rápido hacia Moja y trató de llamar su atención con un gesto de la mano, haciendo que los destellos eléctricos que rodeaban esta aumentasen por un momento. En cuanto la tuvo, apuntó con el dedo al fugitivo, que parecía simplemente haber decidido mezclarse con la gente en vez de huir. A continuación le hizo un gesto con la palma de la mano indicándole que aguardase. Era su oportunidad para librarse de él. Era una pena por la gente que estaba en medio, iban a salir mal parados... pero un pirata que se metía en un evento como ese sabía a lo que se exponía. Y no iba a dejar huir a su presa.

Parecía un poco atontado y confiado. ¿Creía que le habían perdido, o se había quedado atontado? Le dio tiempo de sobra a descender un poco y colocarse en un buen ángulo donde pudiera evitar golpear a nadie más. Tras eso cargó el puño derecho hacia atrás, sus músculos tensándose y viéndose sometidos a una gran presión mientras preparaba su más devastadora onda de choque. Además de ser un portento físico por sí mismo, la fuerza del pirata se veía aumentada por su zoan, con lo que su fuerza estaba bastante por encima de la media de los guerreros a su nivel de poder. Las chispas saltaron con mayor intensidad y toda la electricidad se reunió en su puño, y finalmente liberó el brazo en un movimiento en que imprimió el peso de su cuerpo. La onda no solo fue enorme y veloz, sino que iba cargada de electricidad. Algunos árboles jóvenes simplemente fueron hechos trizas, mientras que otros crujieron y cayeron.

- ¡Denken! - gritó mientras liberaba su ataque - ¡Ahora, Moja!

Aquel tipo esquivó nuestros ataques con demasiada facilidad y no solo eso, sino que le dio tiempo a usar un dial de humo para intentar escapar. No hubiera sido mala idea si Nassor y yo fuéramos personas normales, pero ese no era el caso. Aun así no podía sentir su presencia con mi mantra algo que me escaldaba, pues no llegaba a entenderlo. Aun así vimos como caía del árbol e intentaba adueñarse de la identidad de otra persona, robándole la chaqueta. No podía permitir que escapara, así que use mi olfato desarrollado en mi forma hibrida y capté su olor. Eso me permitiría seguir su rastro sin problema si intentaba huir.

Nassor llamó mi atención y me indicó hacia donde estaba el tipo. Ya lo había visto y había grabado su olor en mi mente para seguirle. El capitán se preparó para realizar un ataque contra aquel tipo, yo hice lo mismo y empecé a crear una esfera de rayos, utilizando mi electro. Esta creció hasta alcanzar el tamaño de una pelota de gimnasia.

-Lluvia de relámpagos guau-

La esfera se elevó en el cielo a unos metros de mí. Hice un gesto con la mano señalando el lugar del gentío y de la esfera de electricidad salió un enorme rayo concentrado en dirección hacia donde se encontraba el tipo.

Parecía que cuando no usaba trucos sucios no era tan duro. La onda de choque había logrado cogerle a él sin dañar a nadie más. Además el ataque había despejado una pequeña zona de bosque, creando un claro improvisado con el suelo lleno de ramas, trozos de tronco y maleza arrancada. Se sintió en parte algo mal por plantarse allí y destrozar el hogar de los animales que vivían en ese lugar... pero al menos no eran daños irreparables. La materia vegetal muerta alimentaría el suelo. El pelirrojo volvió a alzar el vuelo en su torbellino, que cada vez giraba con más velocidad, fuerza y una electricidad más intensa. Pronto sería incontrolable; tendría que liberar la técnica cuanto antes. A su ataque le siguió un rayo que impactó también de lleno a su enemigo: el ataque de Moja. Se giró hacia él por un momento y asintió con la cabeza, para luego echarse hacia su enemigo.

Tenía que aprovechar los daños que le habían causado. Tras recibir tanta electricidad de ambos ataques seguramente estaría como mínimo con el cuerpo entumecido, y aprovecharía eso para terminar de rematarlo. Si era rápido, el hombre no sería capaz de recuperarse a tiempo y reaccionar a su ataque. Atravesó el claro levitando a gran velocidad, con el torbellino levantando y arrojando a su paso trozos de madera y hojas. A medida llegaba hacia él el tornado fue decreciendo en tamaño y volviéndose más concentrado, sin perder fuerza, mientras que Nassor fue descendiendo con este. Cuando llegó junto a su enemigo era tan pequeño que solo llegaba para rodear al pirata y Nassor iba ya levitando a ras de suelo.

- Es hora de darte tu merecido.

Con un rápido movimiento intentó agarrarlo por la chaqueta para evitar que se escabullera. Realmente era solo un preámbulo, pues no tenía intención de dejar pasar ni medio segundo: lograse aferrarlo o no, a continuación liberaría su técnica: todo el viento y la electricidad acumulados fueron liberados violentamente en todas direcciones en forma de decenas de brazos. Había cargado el tornado durante tiempo suficiente como para lanzar la técnica a máxima potencia, con lo que la explosión abarcó ocho metros de radio, con una potencia considerable y descargas eléctricas capaces de acabar con una persona corriente. Claro que su rival no era corriente; no moriría por eso. Pero probablemente tras recibir de lleno los ataques anteriores, si recibía estas nuevas tandas acabaría realmente mal.

- Sabaku no Arashi, ¡Raimei to Tatsumaki!

Off: Entiendo el primer salto, ni siquiera había visto que abrieron combate,pero por favor chicos dadme un poco de tiempo entre post y post que no ando muy libre y no creo poder postear todos los días. Gracias por la comprensión.

Pdt.: No tengo ningún rifle, es una pistola especial que tiene la potencia y precisión de uno y que es bastante vistosa.

A pesar de haberlo hecho a toda velocidad Simo no tuvo tiempo de terminar de disfrazarse y escabullirse antes de que sus enemigos le alcanzaran. Ya había fallado dos veces, una cuando unos pájaros le cortaron el paso y ahora por no vestirse lo suficientemente rápido. Se preocupó pensando que estaba perdiendo capacidades, pero aun así no se rindió. El primer ataque en llegarle fue el del pelirrojo, una onda amplia y potente que se acercó imperdonable hacia él arrasando árboles y piratas por igual. La electricidad impidió al agente activar su Tekkai para protegerse del impacto, lo cual produjo que este saliera volando. Terminó estampado contra un árbol varios metros más atrás, dónde una bola eléctrica lanzada por Moja le alcanzó antes de que pudiera volver en sí. Las ropas de Simo estaban muy desgarradas, lo cual dejaba ver una gran cantidad de cortes y un gran moratón producidos por la onda. Trato de levantarse, lo cual hizo que las corrientes eléctricas que le habían pasado por el cuerpo le dieran un latigazo. Notó al instante el entumecimiento y las quemaduras, así como el humo que salía de él. “Me han dado bien”, pensó sonriendo antes de escupir sangre. No era una persona positiva que pensara que iba a salir fácilmente de esa, odiaba a la gente que pensaba así, pero tampoco pensaba rendirse.

-Maiky, el regenerador-, susurró a su robotito rezando porque este no hubiera quedado frito. Por suerte para él este parecía encontrarse con más energías que nunca, como si la electricidad le hubiera recargado. Sintió el pinchazo, y al instante empezó a sentirse algo mejor. -Ocúltate, si cuando esto acabe no me levanto intenta despertarme-, volvió a susurrarle disimuladamente sin ponerse todavía de pie. El pelirrojo había comenzado a alzarse en un torbellino amenazando con atacar de nuevo, pero esta vez iba a reaccionar. Se levantó y activó tanto su Tekkai como su haki de observación centrado en el que parecía ser su enemigo principal. No se olvidaba del capitán Moja, pero el supernova era una prioridad. Este levitó a gran velocidad hacia su posición, dándole el tiempo justo para reaccionar. Llegó a agarrarle por la chaqueta, pero no logró a cerrar la presa. Haciendo uso de su Soru y Kami-e, Simo, logró realizar una pirueta hacia atrás apoyándose en el pecho descubierto del pirata que trataba de agarrarlo. Con esto logró sacar las mangas y rodar hacia atrás ganando distancia. No la suficiente para evitar la tremenda tormenta devastadora que aquel monstro lanzó, pero si para ponerse en guardia, mitigando junto con la técnica de Rokushiki el daño que podría haber llegado a recibir. Tras el impacto aterrizó a unos 10 metros, donde clavó una rodilla en el suelo. -Mierda, otra vez echando humo-, dijo antes de escupir un chorro de sangre mientras abría y cerraba las manos comprobando cuanto le afectaba el entumecimiento esta vez. Menos que antes, pero aun así… No era un estado que conviniera a alguien que basaba su estilo de combate en movimientos rápidos y agiles. Necesitaba dejar de recibir chispazos para poder hacer algo.

Tan hábilmente como pudo tras los ataques recibidos se levantó y utilizó el Soru para volver a ganar distancia mientras recuperaba su movilidad. Sabía que con las piernas la técnica de velocidad no sería suficiente para zafarse de aquellas bestias, así que a la vez que empezaba la carrera lanzó dos diales ensordecedores a su posición con intención de aturdirlos. Ahí sacó su pistola con silenciador y balas antitanque. Disparó un par de veces en carrera antes de seguir la huida. Estando ellos en el claro formado por el pelirrojo mientras que el agente ya casi estaba bajo la cobertura de los árboles. Lo tenía fácil para forzarles a esquivar o recibir daño para ganar tiempo.

Bueno… Simo, parece que tu segunda defensa es sueño. ¿Por qué? Te estarás preguntando, pues yo te explico: La onda de choque que ha generado Nassor con todas sus fuerzas, podría dejar hecho papilla, literalmente hablando, a cualquier persona normal (Y te recuerdo que eres una persona con resistencia cero). Asimismo, la lluvia de relámpagos vertida sobre ti por el mink, también hace mella en tu cuerpo y dejándote unas marcas muy feas en el cuerpo.

El combate ha terminado. Así que vuestra historia continuará en la moderación general de esta noche.