Robert Hayden

Exp: 0

Nivel: 1

Nombre: Robert Hayden

Apodo: Ninguno por ahora

Edad: 19

Sexo: Hombre

Raza: Humano

Rango/Empleo: Pirata

Rango social: Bajo

Descripción estilo de lucha:
-Nombre: Shi no tenshi

-Ejecución: Este es un estilo de combate orientado completamente a segar la vida del contrincante sin piedad. Basado en ataques con armas blancas como cuchillos, katanas, etc. Sus técnicas se basan en dañar puntos vitales del enemigo hasta que no pueda seguir peleando. También posee técnicas de combate sin armas que tiene como objetivo golpes precisos y dolorosos para inmovilizar al adversario rápidamente.

Descripción física: Robert aparenta la edad de un niño cuando en realidad está rozando los 19 años. De 1,70 de altura y 60kg nadie se imagina que es un diestro asesino entrenado. Tiene el pelo completamente blanco, medio largo y siempre lo lleva suelto. Tiene los ojos de color negro, pero cuando entra en combate suelen dar la impresión al enemigo de que se han vuelto rojos. Siempre viste con ropas de color oscuro ya sea negro o azul muy oscuro. Esto le facilita ocultarse en la oscuridad. Siempre lleva unas botas negras con la suela tratada para no realizar sonido alguno al pisar. Su prenda de ropa más preciada es la chaqueta que consiguió la noche anterior a su graduación. Jamás suele vestir con ropa de colores, nunca lo ha hecho y el nota que desentona completamente con su personalidad. Robert siempre entre los pliegues de la ropa lleva unos cuantos cuchillos pequeños porque, sinceramente, nunca sabes cuando los vas a necesitar.

Imagenes:

Alineamiento:
Caótico Neutral

Descripción psicológica: Robert siempre, absolutamente siempre actuará de forma amable con las personas (siempre y cuando vea que puede sacar provecho de ello), por lo que suele atraer la confianza de los demás.  Robert es una persona despreciable, en lo que a forma de pensar nos referimos, conseguir las cosas a base del sufrimiento de otros es algo que le encanta, ver el rostro desmoronarse cuando traiciona a alguien es algo que lo motiva a seguir. Robert no confía en nada ni en nadie que no le demuestre que merece la pena hacerlo, no teme herir sentimientos si la situación ya no es provechosa para él, es un oportunista de la peor calaña, pero… no lo podemos culpar, la vida le ha enseñado que esta es la forma de conseguir las cosas. Cuando consigue confiar en alguien lo defenderá ciegamente ya que querrá proteger ese lazo ante todo, las personas dignas de confianza escasean.
No le interesa saber quién fue o quiénes son sus padres, lo que le importa es seguir adelante, conseguir compañeros y vivir cada día al límite. Algunos quieren encontrar el One Piece, otros llegar a un alto rango dentro de su facción o conseguir el amor, Robert, bueno Robert solo quiere ver el mundo arder.

Gustos:

Acechar: Le encanta perseguir a la gente sin que esta tenga la más mínima idea de que le están observando. Sentir que tienes completamente el poder sobre la vida de otro es algo que le fascina.

Ganar: Da igual a lo que sea, Robert es una persona tremendamente competitiva y le encanta ganar. Cuando empieces una competición con el prepárate a perder porque hará todo lo posible para ganarte.

Humor negro: Hacer chistes sobre el sufrimiento de otros es la manera de sacarle una sonrisa. Le encanta esta clase de humor y es participe de usarla incluso en las batallas, normalmente cuando su adversario está en el suelo desangrándose.

Leer: Le encanta estar informado. Sabe que cualquier dato que hayas aprendido puede ayudarte en las más inesperadas ocasiones. Si encuentra un libro, da igual el tema, Se apresura a leerlo y aprender todo lo referente a él. La única excepción son los libros de fantasía, estos no pueden enseñarle nada de la realidad, por ello no lee ninguno.

Fuego: Le encanta admirar el poder de este elemento. Para el no hay casi nada más hermoso que ver un edificio, persona, barco… devorado por las llamas.

Desagrados:

Creyentes: Odia la gente que cree en seres superiores. Ver a alguien rezar para que su vida vaya a mejor es algo que detesta. Cuando se encuentra con este tipo de gente normalmente suele terminar con ellos desangrándose suplicándole a su dios, mientras el esboza una sonrisa cínica esperando ver un milagro de ese supuesto dios.

Fanfarrones: Alguien que hace amenazas y luego no tiene medios o coraje para cumplirlas es escoria. Este tipo de gente saca de sus casillas a Robert, que finalmente tiene que enseñarles cómo se cumple una verdadera amenaza.

Alcohol: Detesta las bebidas alcohólicas. Odia no tener pleno control de su cuerpo y su mente así que evita a cualquier coste beber este tipo de bebidas. Pero le encanta la gente borracha, siempre es más fácil acabar con alguien cuando este pierde reflejos.

Dormir: Para el, este es el momento de mayor debilidad en el que se encuentra durante el día. Por ello intenta dormir lo menos posible y siempre con un sueño ligero para despertarse con el más mínimo ruido o movimiento.

Insectos: Robert odia a los bichos. En la isla donde se crio no existían y al salir de ella descubrió que eso era lo único bueno que tenía aquel maldito lugar. No les tiene miedo pero si un asco repulsivo. Los bichos que más odia de todos son las mantis, es el insecto que más le repugna.


Habilidades:

Esconderse: De niño desarrollo esta habilidad al máximo y ahora es un maestro en lo que a ocultarse se refiere. Le encanta pasar desapercibido y si puede estar en un lugar escondido desde el que pueda observar toda la situación mejor que mejor.

Medicina: Cuando uno es un asesino tan consumado como el, curar es solo acercarse a la vida desde el otro lado. No es una habilidad que use en exceso pero cuando es necesario sabe qué y cómo hacer para curar a alguien. Esto también se atribuye a su gran afición por devorar libros, muchos de ellos de medicina.

Mentir: Robert es un mentiroso consumado. Su rostro nunca revela sus pensamientos mostrando siempre una cara afable. Solo cuando el revela su mentira es cuando puedes apreciar su verdadera cara de sociópata cínico.

Puntería: Gracias al entrenamiento que ha tenido desde niño ha desarrollado una buenísima puntería. Aunque con armas de fuego no destaca mucho, si que lo hace lanzando armas de filo, cuchillos por ejemplo. Puede acertar con un cuchillo a un blanco en movimiento a 15 metros sin concentrarse apenas.

Reparar: Es francamente un chico curioso aunque no lo parezca. Esta curiosidad le lleva a estudiar cada objeto desconocido que llega a sus manos. Gracias a esto es capaz de realizar reparaciones ya que, gracias a su investigación de las cosas, sabe porque y como funciona cada cosa, lo que facilita muchísimo la labor de reparación.


Torpeza:

Cocina: Cualquier comida que Robert intente preparar acabara pareciendo una masa uniforme de color negruzco que sabrá a rayos. Sería mejor comer tierra que intentar comer algo que él te haya preparado. Él lo sabe y hace todo lo posible por no tener que preparar nunca nada de comer.

Capacidades artísticas: Como desde pequeño ha sido entrenado en técnicas de supervivencia y asesinato jamás ha desarrollado nada parecido a ninguna capacidad artística. Baile, pintura, canto… En todas estas materias es peor que un niño de 5 años. Además jamás le han interesado, ya que las considera una pérdida de tiempo.

Hacer amistades: Es una persona tremendamente desconfiada. Puede parecer que te apoya completamente, puede ayudarte, puede llevar meses contigo pero aun así el seguirá esperando que le apuñales por la espalda. Le cuesta muchísimo llegar a confiar realmente en alguien pero una vez que esa persona lo consigue jamás volverá a dudar.

Obsesivamente ordenado: Podríamos decir que ralla el fanatismo en cuanto a orden se refiere. Siempre que está en un lugar tiene sus cosas perfectamente ordenadas, colocadas y accesibles para cualquier situación. Esto se debe a su mentalidad desconfiada, siempre tiene todo preparado por si alguna situación de peligro se presenta. Además odia que la gente use sus cosas. Prefiere no permitir que nadie toque sus pertenencias aunque tenga confianza con esa persona. Ya se sabe, alguna costumbres nunca se pierden.

Navegar: A pesar de lo mucho que lee es completamente inútil a la hora de interpretar un mapa marítimo o navegar en un barco. Suele viajar en barcos de pasajeros o tripulados por alguien ya que él es incapaz de llegar a su destino si tripula el mismo el barco.

Profesiones: Asesino, espía, espía, medico.

Banda:Ninguna

Armas: Una ninjato y cuatro kunais

Historia:

Hola me llamo Robert y esta es la historia de cómo llegue a ser el asesino psicótico que soy hoy. Supongo que podría decir que no he tenido una vida fácil pero no me quejo. Gracias a ella he llegado a ser lo que soy ahora, y prefiero haberla vivido yo a que le hubiese tocado a cualquier otra persona más débil que no hubiese podido sobrellevarla tan bien como yo.

Mi historia empieza en una isla perdida del North Blue. Allí existía la base de una llamémosla “Orden”. Era una especie de fortaleza en medio de la nada rodeada de montañas heladas y bosques eternamente blancos. En ella se entrenaban desde pequeños a niños para que fuesen asesinos. En ese bonito lugar fue donde pase mi infancia y adolescencia.

No tengo ni idea de cómo llegue a para allí pero desde que tengo memoria vivía allí. Desde que aprendías a caminar te enseñaban a correr, saltar, agacharse esquivar. Cuando ya poseías la suficiente destreza digital para usar objetos te enseñaban en el uso de armas de filo. No voy a mentir, no todos los niños que llegaban allí se convertían en adultos, por no decir que la mayoría no. El método de entrenamiento era despiadado y la competición feroz. La mayoría no pasaba de los 10 años.

A mi ,desde que recuerdo, siempre se me dieron bien los entrenamientos. Aprendía todo a la primera y no recibía más palizas de las que los maestros querían darte sin razón alguna. También recuerdo estar con otro niño, sé que éramos muy amigos y brillantes los dos en los entrenamientos. No se cómo se llamaba, ya que hasta que te graduabas no te daban un nombre. Simplemente estábamos juntos siempre. En los entrenamientos, en las comidas, en los dormitorios…

Él era mucho más alegre que yo. Se tomaba todo a risa y siempre trataba de alegrarme. Con los años nos hicimos buenos amigos llegando a compartirlo todo. Al ser prácticamente parejos en los entrenamientos ninguno se sentía en peligro con el otro, cosa que no pasaba con los alumnos que eran inferiores a nosotros que siempre nos miraron con odio.

Podría decirse que a la tierna edad de 8 años el entrenamiento habría hecho mella en mí. Y era cierto, tenía unos reflejos más afilados que un cuchillo y era diestro con la mayoría de armas blancas. Recuerdo muy bien ese año. Fue el año que me quede solo.

Al llegar a los 8 años te asignaban un maestro para que te iniciase en técnicas de asesinato reales. A mí me asignaron a uno de los mejores asesinos de la orden como maestro, al igual que a mi amigo. Mi maestro y yo nos ausentábamos de la Orden a veces hasta varios días seguidos para que yo hiciese prácticas de asesinato en la isla. No se quiénes eran los pobres desgraciados que traían para nuestras prácticas, pero sé que ninguno salía vivo de ellas. Era el o yo. Al volver de una de las sesiones de práctica me comunicaron que mi amigo había muerto en mi ausencia. Muerte natural dijeron. Claro, naturalmente te mueres si alguien te apuñala en el corazón.

Yo sabía que no podía haber sido ningún alumno. Ninguno estaba al nivel de mi amigo. La mayoría de nuestra generación había muerto o lo habría hecho de haberlo intentado. Sabía que había sido uno de los maestros, pero no sabía cual. Desde ese momento no volví a fiarme de nadie. No entendía el porqué de su muerte. ¿Tan brillante era que había que matarlo antes de que se convirtiese en una amenaza? ¿Me pasaría lo mismo a mí? ¿Intentarían matarme también?

Creo que fue unos cuantos días después cuando decidí que me vengaría de la orden por quitarme a la única persona que valoraba de allí. Los aniquilaría a todos y lo haría con lo que ellos me enseñasen.

A partir de ese momento me concentre en entrenar, sobresalía en ello. Al no tener mi amigo emplee mi tiempo en aprender cosas del mundo exterior. Casi se podría decir que cuando no entrenaba vivía en la biblioteca. Leí muchísimo pero lo que más me fascinaban eran las crónicas de piratería. Anhelaba ser como ellos, tener esa libertad y no permanecer siempre en esa helada isla.

A los 14 años termine mi entrenamiento con mi maestro. Ya era tan ducho en el asesinato como el, y era mejor en mil cosas más. Desde ese momento empecé a planear mi venganza. Tenía cuatro años por delante para planearla por ahí ya había decidido que sería la noche anterior a mi graduación cuando lo haría.

Seguí devorando libros y continúe entrenando para ser el mejor allí dentro. Durante cuatro años lleve mi cuerpo al límite exigiéndome más cada día. Devore libros de medicina, ciencias, física, biología, cultura… vivía en una habitación muy cercana a la biblioteca así que prácticamente vivía dentro. Aprendí a tener mis cosas siempre ordenadas y tener siempre armas encima y a mi alrededor. Y durante esos cuatro años intentaron matarme 2 veces.

La primera fue al año de dejar a mi maestro. Un estudiante menor intento asesinarme para así ganarse el respeto de los maestro y conseguir una buena posición. Decir que fracaso fue quedarse corto. Hacia tanto ruido al entrar en mi habitación por la noche que hasta estando drogado me habría despertado. Incluso deje que alzase su cuchillo encima de mí antes de degollarlo. El ni siquiera supo que le mato. Eso sirvió de advertencia a los demás.

El segundo intento fue un poco más elaborado, ya que no fue un simple estudiante el que intento matarme. Fue unos pocos meses antes de mi graduación. Estaba en la biblioteca buscando un libro cuando al llegar a mi mesa note que alguien había tocado mis libros. Es lo que tiene ser un psicótico de la organización. Sabiéndome presa de alguien me senté como si no pasase nada. Sabía que mi asesino estaba cerca esperando el momento para asesinarme. Una ráfaga de aire en mi coronilla me indico que estaba detrás de mí y antes de que reaccionase tire la silla hacia atrás mientras me daba la vuelta. Ahí estaba mi asesino pillado por sorpresa, se esperaba una presa completamente descuidada. Antes de que apartase la silla ya le había cortado el cuello. Que sorpresa al percatarme de que era mi antiguo maestro. Bueno, uno menos para mí graduación pensé.

Finalmente llego la noche posterior a mi graduación y la de dos alumnos más. Esa noche ya tenía decidido que libraría al mundo de la lacra que representaba esa orden. Así que me equipe y vague por el recinto de la orden. Había estudiado a conciencia los planos del edificio y sabia quien, donde y cuando dormía cada residente allí. No fue difícil hacerlo.
Empecé con los maestros. Ninguno fue ningún problema ya que no se esperaban ningún ataque, lógicamente los atacados eran los alumnos. Los mate a todos y cada uno mientras dormían o leían. Ninguno supo que fue lo que le mato, no por nada me había especializado en el Shi no tenshi.  El estilo más silencioso y complicado que la orden enseñaba.

Después de matar a los maestros fui a por los alumnos. Todos estaban mancillados y ninguno podría vivir ya fuera de estos muros. Algunos incluso adoraban este sistema. Idiotas. Mate a todos y cada uno de ellos independientemente de la edad. Era mejor eso que dejarlos vivos y arrepentirme en el futuro.

Por ultimo fui al maestro de la orden, se encontraba en el salón de ceremonias como bien sabía yo, preparando la graduación del día siguiente. Me acerque a él y le apuñale en el corazón por la espalda. Fue tan fácil. Tantos años de entrenamiento para purgar esa orden y a todos los miembros presentes en menos de una hora. Cuando fui a salir del salón de ceremonias me fije en la chaqueta que se le regalaba al alumno al graduarse. Cogí la mía y ponía en plateado en la chaqueta “Robert Hayden”. Me gustaba ese nombre. Me lleve la chaqueta como recuerdo de esa noche y partí de la orden esa misma noche, pero no antes de prenderle fuego y ver como ardía hasta los cimientos. Lamente el destino de la gran biblioteca que ardía igual que el resto del edificio, pero no podía llevarla conmigo en mi viaje.

Mi venganza estaba cumplida. Mi amigo podría descansar ya en paz y yo era libre. Era un pensamiento extraño eso de ser libre. Libre para volverme un pirata. Me dirigí a la orilla donde la orden disponía de barcos y me monte en uno y zarpe para no volver jamás a aquella isla. Todavía quedaban miembros de la orden por el mundo cumpliendo trabajos y yo no quería permitir que volvieran a fundarla. La caza había comenzado y yo era el cazador.

Y esta es mi historia. La de como he llegado a ser el psicópata que soy hoy. Ahora sigo en busca de mis antiguos compañeros de la orden, pero no me privo de destruir, quemar, arrasar o matar a cualquier cosa que se interponga entre mi objetivo y yo. Simplemente disfruto de mi libertad. Me lo he ganado.

Mar de origen: Mar del norte.

Pertenencias: Sus armas y una chaqueta de cuero negra.

Botín de partidas:Ninguno

Sueños: Su objetivo es acabar hasta con el último miembro de la orden. Aparte de eso su sueño es ser libre, vagar por donde le plazca sin que nadie pueda impedírselo. Si puede ser unirse a una banda en la que realmente confié y que le ayude en su objetivo de caza de sus antiguos compañeros y maestros.

Referido por: Nadie

Buenos días, disculpa el retraso. La ficha es aceptable, tan sólo corrige la ortografía y pasa por censo y registro de físicos.

Echo, muchas gracias por corregirmela :)