[Pasado] [Masivo, cerrado] Aclarando cuentas

Participantes:
- Fásra (continuación de "Se busca").
- Ichigo Elfman Luffy D'Ace.
- Dirk.
- Iro.
- Kenshin.
- Ikaru.


Los soldados me guiaban hacia la base de la isla. Aquellos que se habían adelantado con el cuerpo de Johny, ya habían desaparecido de mi vista. Supuse que lo llevarían a curar, pues estaba muy malherido. Además, simplemente era alguien que protegía un barco mercante, no creo que fuese nadie peligroso.

Llegamos al edificio. No era nada del otro mundo, pero se identificaba desde lejos. En la puerta había dos marines haciendo guardia que saludaron cuando nosotros pasamos al interior.

Me llevaron por muchos pasadizos, subimos varias escaleras, hasta que llegamos a un pasillo muy ancho, con una puerta bastante grande al final, donde estaban vigilando otros dos marines. Estos, al vernos, abrieron la puerta. Entramos. Era un despacho grande. Con libros, mesas y cosas de despachos. Al fondo había un hombre sentado en una cómoda silla que me miraba

- Adelante - Me dijo.

Di un paso, y mis acompañantes salieron y cerraron la puerta a su paso.

- Siéntate - Obedecí.

El asiento era blando, y muy incómodo para alguien que está acostumbrado a dormir en ramas. El marine me acercó un vaso con agua, del cual bebí hasta dejarlo seco. Cogió una botella con el mismo líquido y, mientras rellenaba el vaso de nuevo, empezó a hablar...

Me encontraba en mi pequeño bote explorando el mar en busca de una isla para encontrar un astillero donde poder conseguir un barco capaz de surcar el gran line para llegar a encontar a mis compañeros de banda de nuevo por que hacia ya bastante tiempo que no los veia desde aquel incidente en Impel down donde me perdi yo mismo en un barco siendo navegante la verdad es que hizo mal tiempo y acabe naufragando aunque eso ahora daba igual y debia encontar la isla inmediatamente y cuanto antes mejor aunque el dienro no es me sobrase aunque podia vender algo que tuviese por hay o robar algo aunque tampoco pense que pudise ser necesario.

Ontinue mi ruta marina durante unos 2 o 3 dias mas y no encontrraba ninguna isla por ningun sitio y la comida ya empezaba a escasearme pero aun tenia agua para continuar unso dias mas.No mucho tiempo depues encontre un isla, una isla bastante grande pero no pude distinguir ningun astillero a lo mejor por que estaban por la otra parte pero eso ahora me daba un poco igual a si que remo lo mas fuerte que pude y llegue hacia la costa en poco tiempo deje el bote amarrado y continue mi busqueda.No sabia ni que isla era esta por lo que pregunte a un hombre que vi pasar por el lugar:-Olle emmm ¿cual isla es esta? es que ando un poco perdido jejej
El hombre me respondio que era el Reino de Lvneel la isla donde ejecutaron a Norland el que conto la historia de la isla dorada que mas tarde luffy consigui encontrar.
Segui anando y buscando un astillero.

Estaba yo en un barco pesquero en el que me monté en una isla cercana, los días pasaban y ellos me llevaban de viaje a cambio de que algunas horas les ayudase, también me daban provisiones y aunque estuvieran un poco pasadas por lo menos alimentaban. El barco estaba ya bastante viejo, parecía que solo aguantaría como un año mas o menos pero estos pescadores lo aprovechaban todo, además habían traído pocos cítricos y parecía que no se habían enterado de que les faltaban las frutas para no coger el escorbuto. Gracias a mi consejo paramos en una isla para pillar frutas y otras provisiones, de paso vendieron el pescado y demás.

Ya volvimos a montar y nos marchamos a la mar para seguir pescando, esto era muy aburrido la verdad prefería volver con mis nakamas pero me perdí y ya no pude encontrarlos y como ya estaban acostumbrados a que yo viajase solo ya que me gustaba ir en libertad por la mar seguro que se creían que iba a otra de mis aventuras en solitario. Pero eso daba igual, yo me estaba aburriendo pero mucho aquí en el barco pesquero así que en la siguiente isla me bajaría y miraría haber si alguna cosa interesante pasaba por aquí.

Ya había llegado a una isla, estábamos a escasos metros de atracar y según la información de uno de los pesqueros estábamos llegando al reino de Lvneel. Hum, era un sitio interesante para comenzar una aventura en solitario. Cuando atracamos me bajé de un salto a el muelle, me despedí de los pescadores y me marché en dirección a la playa, mientras iba caminando comiéndome una naranja que me habían dado los pescadores vi como a una joven paseando, llevaba los zapatos en las manos, pero mientras caminaba ella se paró. Yo me quedé observando durante un momento pero al rato seguí mi camino mientras con la palma de mi mano izquierda tocaba la empuñadura de la katana porque regla número uno de mi propia guía de supervivencia. "Nunca te fíes de una mujer que lleva los zapatos en la mano, siempre te los puede tirar y duele"

Caminaba sin cesar por esa isla del mar del norte, solo sin nadie acompàñandome buscando simplemente el astillero para conseguir un barco.Aun tenia l problema de la falta del dinero pero tampoco es que importase mucho podia pdirlo a algun banco y luego darme a la fuga sin devolverlo total no creo que volviese a a la isla de nuevo.
Habia caminado bastante metros cuando me encontre una tarberna donde entre y vi como no habia mucha gente que digamos 2 o tres personas en unas mesas y una persona en la barra comiendo algo.Esa persona me sonaba de algo de antes pero no muy lejano que paso hace poco tiempo pero mi cerebro no queria recordar del todo a si que lo deje en paz y me sente en una silla.

-Algun camarero que me puda servir una bebida fria jejeje Dije un poco en alto para ver si me escucha alguien y eso sucedio y una amigable camarero vino con una cerveza y me la dejo en la mesa.
-Jejeje gracias
Segui observando a la persona que me parecia conocidad durante un rato hasta que termino y se fue de alli entonces llame al tabernero.
-Tu sabes quien es ese
-Sí, es un cazarrecompensas y viene a por un tal kenshin...
nada mas que el tabernero dijo kenshin me imagine a mi compañero de banda entonces antes de que terminara sali corriendo de la taberna pero sin pagar a seguir a l muchacho que conocia de antes.
-Olle que se te olvida pagar
Fue lo ultimo que escuche de aquel tabernero e incluso parecia enfurecido pero sali bastante rapido a si que no me pudo alcanzar.

Estuve buscando por la mayoria de la poblacion hasta que ya consado de andar me transforme en cristalitos y empece a volar por la fuerza del viento, raidamente pude ver la playa en en ella habia dos personas una mujer y un hombre e intente ir lo mas rapido posible hasta alli.
cuando llegue me transforme de nuevo en persona normal y vi como aquel hombre era mi amigo kenshin al que tanto tiempo no habia visto y cerca suya habia una mujer descalza dejando que las olas le diesen.
-Kennn, jejej soy ikaru te acuerdas jejeej.
Rapida mente llegue hasta a el esperando a su respuesta

-Sonreí de medio lado y di media vuelta, sonriendo a aquel hombre dulcemente-

.. Disculpe.. ¿Le puedo ayudar en algo?

-seguí sonriéndole, pero algo en mi sonrisa no iba bien, parecía estar forzada y a la vez ser muy natural. Solté los zapatos, dejando que cayeran sobre la arena, aun sin quitarle el ojo de encima a aquel hombre-

Spoiler:

[Aclaro que Fásra no entiende de ironías]

- ¿Cómo te llamas?

- Fásra - Contesté.

-Supongo que serás consciente del favor y la ayuda que nos has hecho, Fásra. Has encontrado a alguien muy buscado por nosotros. Era alguien con quien la Marina tenía una cita pendiente, y se estaba retrasando demasiado.

Sonreí ligeramente apoyado en el respaldo del asiento. Parecía que le había hecho un favor a aquellos hombres, y a mi compañero Johny, que tantos regalos me hizo justo antes de intentar suicidarse. Una suerte, al menos pude devolverle el favor de alguna forma... aunque estuviese a punto de morir...

El marine termino de llenarme el vaso de agua y me lo entregó. Tapó la botella y la puso sobre la mesa.

- Él llegó antes que tú a la base, y los médicos le han puesto en observación. Su primera impresión les dice que sobrevivirá... mejor así, pues tengo pensado destinarlo a un sitio mucho más grande, para darle su merecido.

Esto era genial ¡A Johny le iban a dar una gran recompensa! Sí sobrevivía que, además, era lo más seguro. Seguramente su intento de suicidio se debiera a su presión. Con tantas congratulaciones, se le quitaría esa idea de la cabeza y estaría mucho más seguro de él mismo.

- Después de todo esto, déjame darte las gracias, Fásra. Probablemente tu ayuda nos sirva para avanzar una barbaridad en este mundo. Y por eso, querría pedirte que aceptases este Den Den Mushi en forma de colgante para que la Marina pueda contactar contigo cuando lo necesite hacer. muy caro, por lo que esta y algún dinero serán tus recompensas esta vez.

Me puse el DDM en el cuello y metí la bolsa con dinero en uno de los bolsillos de mi apañado traje para tenerlo controlado.

Spoiler:

- Por cierto, unos guardias me han avisado de que unos cuantos piratas han llegado a la isla. Quizás podrías ayudarnos y capturarlos. El informador es un anónimo, pero sabemos que estaba situado cerca de una taberna en este puerto. Cerca de la orilla. Búscala, no se escapa demasiado lejos.

El alto cargo se levantó y yo con él. Me tendió la mano y se la di como signo de amistad.

- Una vez más, déjame darte las gracias

Me acompañó hasta la puerta de su despacho y, una vez fuera de él, los mismos guardias me guiaron fuera de aquel laberinto al que llamaban "base". Y yo salí de él con una sonrisa de oreja a oreja, por haber ayudado a un amigo y por estar en camino de ayudar a los que acababa de hacer. En camino, tenía que ser hacia la orilla.

Seguía caminando por la playa después de pararme a mirar a la mujer, mientras seguía caminando ella me miró y me preguntó que si quería algo. La pregunta era un poco extraña ya que parecía estar sonriendo pero saltaba a la vista que era una sonrisa falsa. Ella sin dejar de mirarme soltó sus zapatos y allí se quedó, aún no me fiaba mucho de ella podría ser una marine camuflada o una cazadora de piratas. Me paré de nuevo y la miré, después de mirarla para analizar si estaba planeando una ataque o algo parecido le contesté.

-No nada... lo único que veo es que esta usted muy sola por aquí, tenga cuidado no se sabe si alguna persona te puede atacar, estamos en una era de piratas. Si necesita ayuda para algo yo podría ayudarla.

Contesté con una sonrisa para responder la suya, miré por último momento y seguí caminando sin destino por la playa al dar 3 pasos tropecé y me caí, no había dado ni unos 10 pasos más de después de levantarme y de repente un montón de cristal se paró enfrente mía, este cristal me resultaba familiar. No podía ser... ¡sí, era mi nakama Ikaru! justo estaba enfrente mía y había pasado bastante tiempo sin vernos.

-¡Ikaru! Hacía bastante tiempo que no nos veíamos y si que me acuerdo, cómo voy a olvidar a
un nakama. Y bueno, ¿Que haces por aquí? She, je, je, je.

Pregunté mientras me quitaba un poco de tierra que se me había quedado en la ropa al yo tropezar antes, al quitármela esperé la respuesta de mi nakama y no dejé de mirar a la mujer de antes.

-Observé a aquellos dos hombres delante de mi, ¿Era una visión mía o uno de ellos había utilizado uno de los poderes de las frutas del diablo? No pretendía dejarme sorprender, y mucho menos que intentaran nada conmigo-

..Disculpad.. ese cristal.. ¿Qué era?

-Me puse frente a ellos, a un par de pasos. Mi sonrisa se había borrado de mi cara y estaba más seria que antes, mucho más. Los dedos de mi mano derecha acariciaban con suavidad la empuñadura de una daga dorada que se sujetaba a mi muslo con una correa. Si eran enemigos al menos les dejaría contestar a algunas preguntas-

Al fin llegué a la tal taberna. No demasiado vieja, ni demasiado cuidada. Estaba bien para tomarse una cerveza. Tenía un cartel con lo que supuse sería su nombre... pero como yo no sé leer...

Entré suavemente. La gente estaba muy alterada, aunque no había muchos clientes, todos hablaban en sus mesas con sus respectivos compañeros. El tabernero estaba tras la barra, apoyado en esta y mirando hacia el cielo. Entonces me di cuenta de que alguien se acercaba detrás mío.

Me giré. No era uno, eran tres, y uno de ellos, el más avanzado, empuñaba un puñal en su puño derecho. Al ver que me percaté de ellos, sonrieron y el armado me dijo:

- Danos todo lo que tengas, ricachón de mierda

¿Ricachón? ¡Que estupidez! Seguro que se habían confundido de clase social debido a la ropa que llevaba... bueno, no era problema. No quería alargar demasiado la tensión, y quería probar las armas que mi recompensado Johny me había regalado. Saqué una esfera y se la tiré al atacante. Este recibió una descarga que lo tiró al suelo. La esfera volvió a mí, y parecía levitar... me gustaba esa cosa.

La volví a atar a mi cinturón. El hombre se levantó. Sus cómplices cambiaron el gesto de su cara y retrocedieron un paso.

- ¡Hijo de p*ta! Te voy a matar... ¡¡Cabr*n!!

Se abalanzó sobre mí. Yo, simplemente lo esquivé, cayó al suelo. Me puse a su lado izquierdo , me agaché y, de un golpe certero con el lado de la mano izquierda, le golpeé en la nuca, dejándolo inconsciente. Sus compañeros huyeron.

La gente se asustó, y yo, que no quería tal reacción, fruncí el ceño [TQD]. Algo preocupado, me dirigí hacia la barra, donde aguardaba el tabernero que, ahora me miraba a mí. Saqué la bolsa de berries que me habían dado antes y le dije al hombre:

- Bebida... agua... comida... cerdo... Marina, quiere... piratas... ¿Dónde?

Las palabras me salieron peor que de costumbre. Me sirvió el vaso de agua, que enseguida terminé, y me echó otro.

- Los piratas... vaya, creo que uno de ellos ha estado antes en la taberna y se ha ido sin pagar... Será hijo de... Creo que están en la playa, pues un cazador antes también vino y dijo que buscaba a un tal Kenshin.

Los piratas no pagaban. Mala reputación se estaban formando a mi parecer. Pero bueno, quizá no tuviese otro remedio, así que le contesté al tabernero:

- Yo pago el... pirata... coge el... dinero...

Tras esto, empecé a comer. Pues uno de los ayudantes me había servido con gran velocidad la comida... exactamente con la misma velocidad con la que yo me la comía... me sirvieron otro plato.

Tras bajar a tierra firme y volverme a transformar en mi cuerpo de persona normal fui corriendo hacia kenshin a la vez que le dije lo ultimo.
Ken me roconocio perfectamente aunque eso era normal y se puso a limpiarse un poco el polvo pues parecia que se habia caido en la playa.
-Pero que patoso eres mira que tropezarte jejejje.
le dije y depués conteste a su pregunta que era que que hacia aqui.
-Pues nada estaba buscando un barco para volver al grand line y encontraros llevo bastante tiempo intentando encontrar vuestro paradero, pero una cosa ¿esta la banda contigo?
La verdad es que creia que kenshin habia venido a la isla con la banda a lo mejor a buscarme quien sabe pero tempoco estaba tan seguro de ello.
Entonces vi como la mujer que vi anteriormente se acerco a nosotros y no pregunto:

..Disculpad.. ese cristal.. ¿Qué era?
Naturalmente sabia que era yo por que me habia transformado hace poco tiempo
-¿cristal? que cristal
Me hice un poco el loco por si acaso no sabia si era alguna eneima o era una pirata o una cazarrecompensas preferia callarme sobre mi akuma y el poder que tenia.
-Bueno ken ahora lo importante, hace poco tiempo he estado en una taberna y he visto a un cazarrecompensas y a preguntado por ti a si que estate atento se que podris contra el pero a ver si va a tener kaeroseki o algo por el estilo jejeje.

Seguía mirando a la mujer, no me fiaba un pelo de ella ya que seguramente no era una ciudadana normal, podría ser una marine camuflada o una cazadora o mil cosas más. De repente algo llamó mi atención, era que mi nakama comenzó a hablarme y yo sin dejar descuidada a la mujer escuché todo lo que mi nakama tenía que decirme. Después de escuchar me quedé bastante sorprendido ya que él también estaba perdido como yo, una risa salió de mi boca pero la mujer hizo una pregunta algo sobre que era ese cristal. Seguramente se refería al cristal de mi nakama y cuando yo iba a responder Ikaru se adelantó y contestó con una evasiva. Seguramente no quería filtrar información a la mujer por si la mujer buscaba información para usarla en su contra, bueno pero ahora Ikaru siguió hablando, pero esta vez parecía más importante. Para mi sorpresa comentó algo muy interesante, un cazador de piratas preguntaba por mí. Seguramente mi recompensa ya estaba llamando la atención de los cazadores pero si él se creía que era un blanco fácil le daría bastante guerra.

She, je, je, je, je... No te preocupes hombre, si ese cree que me podrá capturar lo tiene bien claro y si trae kaeroseki no me importa. Si son más de uno tu mismo podrías ayudarme pero bueno no te preocupes. Ahora hay que ver que hacemos que me aburro mucho.

Después de hablar con Ikaru me giré en todas direcciones ya que si me estaban persiguiendo para cazarme deberían estar observándome. Me pareció ver algo pero tampoco le di mucha importancia ya que podía ser un animal perfectamente. Me volví hacia Ikaru y la mujer y me llevé la mano derecha al mentón, después de un rato pensando y observando a la mujer llegué a la conclusión de que no podría ser un cazador aunque podría fallar pero eso ahora no importaba. Miré a la mujer otra vez y me dispuse a presentarme.

-Bueno no me he presentado antes, me llamo Kenshin y este es mi nakama Ikaru. Bueno, yo me voy a dar una vuelta, Ikaru si te interesa venir y así buscamos algo interesante por aquí y si a usted le interesa se podría venir también.

Después de hablar a las dos personas presentes me marché en dirección a la ciudad, no sabía si mi nakama o la mujer me estaban acompañando aunque no le dí mucha importancia, mientras me iba estaba atento a todos los lados aunque disimuladamente miraba. Quería ver si el cazador estaba siguiéndome o algo parecido hasta que se me ocurrió una idea. Sin saber siquiera quien me seguía o algo parecido grité.

-¡Cazador, se que estás hay siguiéndome. Sal y deja de esconderte!

Después de estas palabras coloqué mi mano izquierda en la empuñadura de mi katana, si el cazador se encontraba cerca y tenía algo de honor saldría a luchar limpiamente. Si veía que nadie salía seguiría caminando pero siempre atento por si mi rival era un hombre sin honor y solo quería ganar información y tener la ventaja de atacar por la espalda.

-Escuché cada palabra que decían ambos hombres. ¿Nakamas? Seguramente se conocieran de tiempo. Al escuchar ''cazador'' comprendí que aquellos hombres eran de alguna banda de piratas, así que esbocé medie sonrisa. Caminé lentamente hasta colocarme tras las espaldas de aquel hombre, Kenshin, y pasé mi mano lentamente por encima de sus hombros-.

.. Debes ser alguien con bastante fama entre los piratas.. ya tienes recompensa por tu cabeza... ¿Qué podría hacer contigo? Sería interesante conocerte.. Pareces tener algo de honor al retar a alguien que no es seguro que esté aquí. Y estar muy seguro de ti mismo..

-Sonreí dulcemente desde su espalda, echando mi pelo hacia atrás, dejándolo ondear suavemente-

Observaba cada movimiento de los piratas, vi como Kenshin y el otro hablaban con la mujer aunque no lograba entender lo que decían pues estaba algo lejos. Vi como hablaban tan tranquilos hasta que el que se recompuso de cristal le dijo algo a Kenshin y este al escucharlo se giró a todos lados para ver si estaba cerca observándolo. Luego dirigió unas palabras a las otras dos personas y se marchó en dirección al pueblo.

Emprendí camino un poco apartado para no perderle de vista, le seguía en silencio cuando de pronto Kenshin no se sabe por que gritó

-¡Cazador, se que estás hay siguiéndome. Sal y deja de esconderte!

Tras estas palabras llevó su mano a su katana, se ve que quería comprobar mi honor, para ver si salía a un combate a iguales o si me quedaba en silencio y atacaba por sorpresa.

La mujer parecía estar atenta a los que decían los dos y tras estas palabras sonrió mirando a Kenshin, para luego pasar la mano por encima de su hombro desde la espalda de Kenshin. Desde esa posición le dijo algo sonriendo y dejó su pelo ondear suavemente al viento.

Al oír las palabras de Kenshin sonreí y en silencio me acerqué a ellos con mi vestimenta tapando mi identidad. Caminaba tranquilo hasta ubicarme delante de ellos y dije

-¿Me buscabas Kenshin?-

Mantenía mi rostro tapado por mi vestimenta para evitar la luz solar. Bajo esta sonreía aunque no se apreciase.

Me sirvieron otro vaso de agua. La comida se podía comer, pero yo estaba acostumbrado a comerla menos hecha. Terminé el plato y pagué lo mío además de lo del pirata que se había ido. El tabernero me dio las gracias y recogí mis cosas.

Me dirigía hacia la puerta, cuando de pronto, una voz que sobresalía entre la multitud, voz de mujer, invitó a todo a aquel que supiese frotar una cuerda, soplar una boquilla o golpear un parche a subir a aquel escenario. Sonreí. Saqué mi Tin Whistle que siempre llevo conmigo y fui andando con algo de alteración hacia el grupo de músicos que se había organizado en un momento.

La verdad es que no conocía absolutamente nada de música, pero me gustaba llevar mi instrumento, por ser sencillo de tocar y pequeño, para no aburrirme en los largos días que suelo pasar en mi bote para ir de isla en isla. Algunos marineros me habían enseñado canciones populares de algunos sitios, y las había sacado de oído.

Entre tanto pensamiento y telaraña, llegué a estar entre los músicos. La mujer que había dado la voz me dijo unas palabras al oido:

- Tocas el Whistle ¿no? ¿Conoces Tri Martolod?

Sonreí emocionado y asentí con la cabeza. De mi poco amplio repertorio, esa caía. Me gustaba aquella canción. No era la primera vez que interpretaba en grupo, pero sí una de las pocas, y la última fue hace tiempo. Mi emoción no dejaba que se notase mi nerviosismo.

Un hombre dio la entrada golpeando con unos palillos y, sin más preámbulo comenzamos a tocar y a dar ambiente a aquella taberna que, sin música, no parecía tal cosa.

Tri Martolod (Fásra toca el Win Whistle, cuyo sonido se asemeja a una flauta. Es el más agudo de los instrumentos de la canción y el que lleva la melodía nada más comenzar la canción).

-Al oír aquella voz, miré a aquel hombre. ¿Un cazador? Así que Kenshin no se equivocaba. Me puse delante de él, mirando fijamente a aquel nuevo hombre y levanté mi mano derecha hasta la altura del pecho.-

..Disculpe, pero, ¿usted es un cazarrecopensas? Se que es obvio, pero necesito saberlo con seguridad.

-Sonreí dulcemente, aun con la mano en alto-

Kenshin no se preocupaba por el posible cazador, incluso creo que se preocupaa mas por la misteriosa mujer que habia a su espalda pues la verdad no se ni de donde habia salido ella pero eso tampoco importaba mucho ahora pues creo que lo mas importante era el cazarrecompensas que podia ser alguna amenaza consderable.
-Hombre, cuando lo vi estaba solo a si que no creo que venga acompañado pero no se
Conteste a su propuesta de que si alguien venia mas con el le ayudase aunque conociendo a ken creo que podria contra 2 o tres cazarrecompensas.

Empece a ver como Ken empezaba a dar vueltas para ver si encontraba a alguien que nos siguiese pero igualmente no creo que me haya visto volando pues no creia que tuviese una vista tan buena para ver cristalñitos semitransparentes y encima muy pequeños.
Kenshin se presento a la mujer que le acompañaba y tambien me presento a mi
-Olle que puedo presentarme yo solito jejeje.Soy Ikaru,bueno ams bien Joda ikaru pero ya me han quitado el primer nombre jejeje.
Tambien kenshin nos invito a dar uan vuelta pro la ciudad para divertirnos un rato pues la playa era muy aburrida pero muy aburrida.

Empezamos a andar un ratito y la mujer misteriosa puso sus manos sobre lo hombros de ken en tono amistoso y dijo

-.. Debes ser alguien con bastante fama entre los piratas.. ya tienes recompensa por tu cabeza... ¿Qué podría hacer contigo? Sería interesante conocerte.. Pareces tener algo de honor al retar a alguien que no es seguro que esté aquí. Y estar muy seguro de ti mismo..

''Pero que confianzas son esas no joe ya le va preguntando de todo y ni la conocemos''
Entonces un hombre que llebaba la cara tapada salio de su escondrijo era el cazarrecompensas que pregunto si ken le buscaba no escuche la repuesta pero entonces la mujer se acerco al cazarrecompensas y le pregunto si era un cazarrecompensas.
-Pero esta tia de que va por dios es tonta o que.

Tras mis palabras la chica que estaba detrás del pirata Kenshin se adelantó al grupo y levantando la mano a la altura del pecho diciendo sonriente

..Disculpe, pero, ¿usted es un cazarrecopensas? Se que es obvio, pero necesito saberlo con seguridad.

Ikaru parecía sorprendido por la actitud de la chica pero al mismo tiempo parecía intrigado en mi persona. Bajo la capa sonreía aunque ellos no lo percibían, mis ojos reflejaban seguridad en mi mismo y conocimiento de causa.

Miré a la chica sin desvelar mi rostro ni destapar mi cuerpo por la luz. Al rato de mirarla y analizar la situación me decidí a responderle

-En efecto soy cazarrecompensas, he venido en busca de un pirata llamado Kenshin Himura, que resulta ser el chico que se encuentra detrás tuyo ahora mismo. Pero, ¿a qué viene tanto interés por tu parte?-

Dije con una sonrisa en el rostro y listo para utilizar mis katanas o mi habilidad para defenderme de mis contrincantes, aunque estaba seguro de que Kenshin querría un combate 1 vs 1 con honor. Me puse en pié con la cabeza agachada pero mirando a Kenshin y demás.

Bueno, no me lo podía creer mi táctica de gritar había funcionado y mi rival apareció con unas vestimentas algo extrañas. La verdad es que creía que no iba ha aparecer nadie pero bueno, al menos este cazador tenía algo de honor. Antes de que yo hiciera nada la mujer que nos acompañaba se adelantó y le preguntó si era un cazador para asegurarse. Me pareció una pregunta un tanto extraña ya que se notaba que ese hombre era un cazador pero mi nakama no dudó en decir que esa pregunta era una tontería. Con un gesto de la mano le dije a Ikaru que no hablase y me quedé mirando a mi rival listo para hablar.

-Parece que tienes honor y quieres luchar, tendrás que luchar 1 contra 1. Mi nakama ni la mujer interrumpirán y si veo que tienes algún amiguito por aquí mi nakama Ikaru se encargará de él.

Seguidamente después de hablar comencé ha desenvainar mi katana que esta hizo el típico ruido de desenvainar que me gustaba bastante ya que me había acostumbrado de tanto desenvainar. Con la katana apunté hacia mi rival y le hice un signo de que empezara él.

.. No soy tan débil como crees Pirata Kenshin.. No soy como las mujeres a las que estarás acostumbrado. Y si tu también tienes algún poder como tu amiguito.. dado seguramente por alguna fruta.. será mejor que nos alejemos del agua..

-Miré por encima del hombro del cazarrecompensas a la espesura verde frente a mi. Al oír la espada de Kenshin, me aparte suavemente, con lentitud. Mi sonrisa se había borrado, y mi aspecto parecía más cuidadoso ante todos aquellos hombres-

La gente nos aplaudió al terminar la canción. Yo, al quitarme el Whistle de la boca, no pude evitar sonreir y reir un poco. Los integrantes del grupo levantaban sus instrumentos, aunque algunos estuviesen sentados. La mujer que cantaba me dijo, ahora no al oído (aprovechando el sonido de los aplausos para que no se oyese) que si me sabía algunas canciones más. Le dije el título de cuatro o cinco que en ese momento recordaba y me propuso tocarlas. Por supuesto, yo acepté.

La primera fue The Morrison's Jig, una canción bailable hasta poder aburrir. La que antes había cantado, se sentó y cogió un Bodhrán que tenía apoyado a la silla. Me maravillé con ese instrumento. Una pena que, por su tamaño y (como más tarde me explicó la chica) delicadeza, no pudiese llevarme uno igual para mí.

Al acabar, le pedí al tabernero un vaso de Whiskey ¡Que locura! Nunca bebía alcohol, y a saber como acababa aquella noche. Le di un trago y pagué, para que no se me olvidase. Ahora no esperé a que me preguntasen la canción: la grité yo directamente, a un público que empezaba a estar bebido. Para esta, solté el Whistle y, simplemente, canté.

- ¡¡Whiskey in the jar!!

Al terminar, di otro trago. Levanté ambos brazos, gritando alguna vocal y sonreía. Estaba feliz, y se empezaba a notar el exceso de sentimientos positivos. Mi guardia bajaba y cada vez me lo pasaba mejor.

La siguiente canción la escogió el público, dando golpes en las mesas "malmarcando" un pulso, y tarareando la melodía de la canción. La reconocí al instante, y mis compañeros también. Nos miramos, asentimos, y agarré mi instrumento. La canción de los animales sonaba.

Y así continuamos incluso pasada la media noche.

Spoiler:

Kenshin parecía sorprendido por el hecho de que hubiera salido a su encuentro. Cuándo su nakama habló le dijo que se mantuviera en silencio con un gesto y seguidamente me miró diciendome

-Parece que tienes honor y quieres luchar, tendrás que luchar 1 contra 1. Mi nakama ni la mujer interrumpirán y si veo que tienes algún amiguito por aquí mi nakama Ikaru se encargará de él.

Al escucharle no pude evitar sonreír, pues iba solo ningún compañero de los Ragnarok Hunters había venido conmigo. De modo que le miré sin mostrar mi rostro, pues me molestaría el sol, respondiendo a sus palabras

-He venido solo Kenshin Himura y soy persona de combate 1 vs 1 así gana el mejor y ambos demuestran honor en combate.-

Vi como desenvainaba su katana para empezar el combate, sabía que quería provocarme pero tenía que ser más listo y luchar en terreno favorable. De modo que desenvaine a Zangetsu, mi mayor katana y apunté a mi rival tal y como hacía él.

-¿Qué te parece si nos vamos a un lugar más aislado para luchar? Así nadie nos molestará-

Propuse cuando aquella mujer habló con Kenshin diciéndole

.. No soy tan débil como crees Pirata Kenshin.. No soy como las mujeres a las que estarás acostumbrado. Y si tu también tienes algún poder como tu amiguito.. dado seguramente por alguna fruta.. será mejor que nos alejemos del agua..

Al oír sus palabras supe que al menos dos de ellos eran usuarios de las habilidades, de forma que teníamos una debilidad en común. Vi como la mujer miraba por encima de mi hombro y como se apartaba al oír la katana de Kenshin seria cambiando completamente su actitud.

-¿Pasa algo señorita?-

Pregunté volviendo la mirada a Kenshin por si aprovechaba mi despiste para atacarme. Le miré fijamente esperando a su respuesta.