[Pasado] Un tiempo en Loguetown (grupal. Ryuto, Tensa, Zangetsiu y Kirigaya)

Me encontraba caminando por las ciudades de Loguetown, junto a mi perro Lux, ambos, estaba aun un poco deprimido, aun no había superado la muerte de mi maestro, aun así, había decidido seguir adelante.
Estaba allí acompañando a mi padre, que había ido para comprar suministros para la taberna, además, como ese año nos había ido muy bien aprovechó el viaje para también a comprar pescado para ofrecer una carta más selecta a nuestros clientes.Ese día iba vestido con una chaqueta negra con botones dorados, sin camisa por debajo, unos pantalones y unas botas negras, además, llevaba la bandana azul puesta en mi cuello.

Yo había escuchado y leído grandes cosas de Loguetown, allí tenían una venta de armas muy interesante y estaba dispuesto a comprar me una segunda espada, para complementar la que llevaba encima. Además, me encontraba en la plaza central, donde se hallaba el patíbulo donde había sido ejecutado Gold Roger, apodado "El Rey de los piratas", sin embargo, mis planes también eran otros, dentro de mi, sabía que el verdadero y único objetivo del por que estaba allí, pero eso es otra cosa.

Ya era mayor y por lo tanto, tenía libertad para hacer lo que quisiera y tenía unos cuantos berries que había ahorrado yo y me había dado mi padre, así que me seguí caminando y pasé por una taberna en la cual, parecía haber bastante jolgorio dentro, tras pensarlo un par de segundos decidí entrar y lo que vi era exactamente igual que la taberna de mi padre, un montón de piratas y borrachos comiendo y bebiendo sin parar, al ver eso, esbocé una pequeña sonrisa, me acerqué a la barra y pedí una ronda de ron y me dejé envolver por aquel ambiente fiestero, aunque podía llegar a ser un tanto conflictivo.

Otra vez fuera del agua, era extraño. En una de mis incursiones a la superficie terrestre terminé en Loguetown.
La ciudad era grande, colorida, pero sólo veía humanos...

Me pregunto como se tomarán mi presencia

Estaba paseando por sus amplias calles llenas de puestos de comida, armas y baratijas cuando alcancé la plaza, santuario para todos los piratas pues allí había caido el famoso "Rey de los piratas" y era un cúmulo de aficionados a la piratería.

Una sonrisa alcanzó mi enorme boca cuando a mis oídos llegó un sonido peculiar, era una taberna llena de gente y con ánimos de mucha fiesta. Sin pensarlo dos veces, fui con un paso más que ligero para volver a probar la cerveza terrestre.

Me detuve en la puerta ya que en mi mente aparecció un problema:

Esperemos que no haya ningún problema con los humanos...aquí estoy solo

Al restaurar la imagen de fiesta y cerveza otra vez en mi mente, entré, era un bar curioso, grande y con mucho ambiente. El bar entero enmudeció al verme entrar. No era lógico ver como un gyojin de tres metros entraba en un bar...fuera del agua. Las miradas me apuñalaban, los susurros conmenzaron y empezaba a sentirme incómodo, asi que me abrí de brazos poniendome como estuviera en una cruz y dije:

-¿Es que un gyojin no puede tomar una cerveza rica y animar la fiesta?

Tras ese discurso me reí a carcajada limpia y simplemente escuché las voces y gritos de la taberna entera al ver mis ánimos de fiesta.

Me acerqué a la barra y con toda mi sonrisa dije:

-Señor, póngame una señora cerveza y un buen pincho...

Al imaginarme la cara del tabernero al haberle pedido un pincho y ya que estamos en una isla, provablemente me diera pescado y a carcajada limpia le dije:

-¡No te preocupes y pónme tu mejor pescado! JAJAJAJAJAJAJA

Agarré la jarra, di un buen trago y comí un trozo de aquel suculento pescado.

Todo parecía perfecto, genial, sonaba buena música cantada por todos y yo, con el subidón de la música, agarré al tipo que tenía al lado, un tipo con una chaqueta, pantalones y botas negras con una bandana azul en el cuello y me uní al coro musical.



Al terminar la canción le dije:

-Perdona por haberte agarrado así, de repente, pero esta canción es genial.
Me llamo Ryuto Kaminari y espero no haberte incomodado mucho

Tras esa breve presentación, le invité a sentarse de nuevo en su sitio y comenzar una conversación agradable.

Espero que no se haya tomado nada a mal...

off:

Seguía tan tranquilo en aquella taberna, bebiendo la cerveza recién servida, dejándome llevar por aquel ambiente festivo, animándome cada vez más a unirme a ellos, pues sus canciones eran bastante pegadizas a la par que divertidas y rítmicas. Mientras escuchaba y me embriagaba de la taberna, seguía bebiendo tan tranquilo cuando escuché entrar a alguien, a la par que los murmuros de la gente por lo que, curioso, me volteé a ver que era lo que pasaba y, para mi sorpresa, se trataba de un gran gyojin, había escuchado muchas cosas de ellos, entre ellos, que eran seres con formas antropomórficas de enorme tamaño, que como no, eran habitantes del mar y que dominaban un arte marcial propio.

La gente parecía tener un poco de prejuicios ante esa clase, además de ser raro ver criaturas terrestres en plena tierra firme, aunque eso eran cosas que a mi no me interesaban ni tampoco me importaban, era una persona sin prejuicios y más ese mismo día que lo único que buscaba era un poco de diversión y un par de cervezas en mi cuerpo, aunque eso acarrease una muy posible bronca de mi padre.

Estando ya el gyojin sentado a mi lado, empezó la siguiente canción este nuevo vecino me agarró del cuello a causa del énfasis del momento sin embargo, no me molestó todo lo contrario, pasé mi brazo por donde pude y seguí también la canción, uniéndome también a cantar dicha melodía, pese a que eso no fuese mi fuerte, aunque eso me importaba lo más mínimo, escuchando una vez esta terminó, como el otro se disculpaba y presentaba.

jaja, no pasa nada, me llamo Teil Nathman, encantado

Dije sonriendo y tendiéndole la mano y sentándome de nuevo en el asiento de la taberna, viendo como nueva gente entraba, una de ellas comentando algo que ciertamente era verdad, eso estaba lleno a rebosar, por lo que el símil era correcto para aquella ocasión, cada vez parecía haber gente más variopinta, aunque a medida de que pasaba el tiempo se emborrachaban más y no todos eran borrachos agradables, sobretodo, siendo piratas.

Posteriormente a aquel chico, pocos minutos después al ser más concretos y precisos, hizo acto de presencia otro hombre el cual parecía ser alguien de importancia, o al menos eso parecía, ya que podía ver como la gente se acercaba entre si a murmurar, por lo que, en un afán de deducción pensé que así sería. Vi como dicho chico se acercaba a la barra, a lo que le hice un leve gesto de saludo, levantando mi copa y asintiendo con la cabeza.

Aun con todo, aquella alegría se vio interrumpida a causa de una pelea de unos cuantos embriagados, cosa que era de esperar la verdad, la gente estaba cada vez más y más borracha y era más que normal que eso terminase sucediendo, sin embargo, no por ello era algo desagradable que sucediese.

Iba a entrar en acción, pero aquellos hombres que provocaban la discusión cayeron al suelo probablemente noqueados por lo mismo que les había hecho comportarse así, el alcohol, por lo que no le presté tampoco mucha atención. Mientras seguía mirando a los que montaron aquella gresca como sonaba una silla arrastrarse en uno de los lugares más apartados de la taberna y pude ver curioso como se empezaban a escuchar pasos, supuestamente de una persona que se marchaba de su sitio, a saber para que.