Asderdeker vs Shion

Turnos: Asderdeker-Rose-Asderdeker...

Escenario: Hace unos cuantos años la isla era una isla verde llena de vida, en ella había construidos unos laboratorios del Gobierno Mundial y de los Marines. Tras explotar el arma que estaba desarrollando Caesar Clown, dos de los Centros de Investigación se destruyeron y el gas acabó con toda la vida de la isla transformándola en un desierto, sólo el tercer edificio quedó en pie. Actualmente, la isla está rodeada por un mar de fuego en un lado y en el otro de icebergs. En el centro hay un agujero por donde el agua del mar fluye dentro de él, que separa las dos mitades de la isla y cuenta con tiburones que viven en su interior.


Condiciones:
- Exp según las normas.
- Isla que no de ventaja a ninguno.
- Daños on rol.
- Sin límite de tiempo ni saltos de turno.
- Lucha a ko, decidida por bélico.

Me encontraba en una isla, o mas bien en la mitad de una isla, donde hacía una calor inmensa. No había para nada vegetación, ni tampoco había nada de agua. Llevaba mis típicas ropas, Mi gabardina de rayas y mis pantalones azules, pero tenía tanta calor que me quité toda la ropa, quedándome solo en boxer de color negro. Empecé a caminar mientras sudaba como un pollo, tenía mis pantalones envueltos en la gabardina y esta atada al cuello desde la espalda. No podía con ese calor, era insoportable. Lucía mi cuerpo sudoroso y de músculos bien marcados, con mi abdominales al aire. La verdad, no se que hacía en esa isla ni como había llegado, el calor me había nublado la mente y no era capaz de recordar nada. Seguía mi instinto y mi olfato, pudiendo oler poco a poco el agua. Llegué a un pequeño lago que estaba infestado de tiburones y al otro lado, estaba la otra mitad de la isla, una isla helada. Una parte de mi se alegraba por estar en la parte caliente, el frío hacía que mi olfato no rindiese al máximo. Me pegué un pequeño chapuzón para refrescarme y volví a subir, tumbándome en el ardiente suelo y echándome una pequeña siesta.

Me quedé dormido estirado en aquella calurosa isla. Soñaba que estaba en un horno gigante, donde se estaban cocinando unos enormes monstruos del mar de unos 10 kilómetros de largo. Estaba en ese horno, dentro, observando como se tostaba la carne de aquellas bestias, cuando de pronto un pequeño pez tostado en su punto apareció rozando mi cuello, así que no dude en morderlo, pero al morderlo, estaba duro, no era un pez corriente.. Y entonces desperté. Era el arma de una bella pelirroja lo que tenía en la boca, así que me aparté de ella haciendo la croqueta y me levanté cabreado mientras le señalaba con el dedo indice de la mano derecha.

- ¿A caso estás loca o que? ¿Por que me metes tu arma en la boca? ¿Quieres matarme? Uno aquí durmiendo tranquilamente y vienen a molestarlo, ni que hubiera hecho algo malo..- Le decía indignado a la bruja pelirroja.

Me miré y vi que estaba en calzoncillos, esa maldita bruja que había hecho con mi cuerpo. ¿Me habría violado? Estaba super enfadado y el calor no me dejaba recordar nada. Miré a aquella bruja y le empecé a gritar.

- ¡¡Tú!! ¡Maldita bruja pelirroja! ¡¿Que me has hecho?! No me digas que me has violado y me querías matar.. Maldita pervertida. ¡¡Te daré una lección por violar mi precioso cuerpo!!- Le gritaba enfadado a aquella mujer, mientras mi cara se sonrojaba de la vergüenza y la calor.

Me puse a cuatro patas y empecé a avanzar hacia aquella chica. Me coloqué casi entre sus piernas y le lancé desde abajo un fuerte puñetazo con el brazo derecho, cogiendo impulso del sprint y de levantarme. Fui directo a su mandíbula, por la parte de su izquierda, pretendiendo tumbarla en seco.

- ¡Toma bruja pervertida! - [AF]

Cuando fui a golpearla se defendió con sus dos armas, provocando que mi puño retrocediese, ya que si no lo hubiese hecho estaría sin mano. Consiguió herirme la muñeca y de ese modo no podía mover la mano como quería. De repente aquella mujer se transformó en un tigre negro bastante temible. Me lanzó pequeños pinchos de hielo con su poderosa magia, lo que me hizo defenderme con mis brazos poniéndolos en cruz. Los pinchos impactaron en mis brazos y alguno que otro estaba en mi hombro, otros habían rozado mi cara y estómago provocandome pequeños cortes. Los brazos cayeron muertos, no podía moverlos, posiblemente por culpa de los pinchos y notaba un dolor infernal. De mis brazos se deslizaba la sangre hasta mis dedos, que acto seguido caerían al suelo como pequeñas gotas rojas. Mis brazos se habían quedado totalmente inservibles, pero no podía terminar así, así que cogí fueras en las piernas y corrí hacia ella semidesnudo, con el cuerpo ensangrentado. Aquella bruja de hielo me había cabreado, usaba su magia en beneficio propio y eso no me gustaba. Me lancé a morderle la yugular con gran fuerza por su lado izquierdo, pero en el último momento mi cuerpo por culpa de la pérdida de sangre se abalanzó hacia el otro lado, provocando que en un instante le atacase a su lado derecho con mi mejor mordisco, con intenciones de arrancarle la carne y tragar.

- Maldita bruja de hielo. - [AB]

Conseguí hacer que retrocediera y guardó sus armas, pero sacó dos katanas con filo y yo no podía mas. Alzó las dos armas, creando una valkyria desde ellas de unos cuantos metros y la lanzó. Me cubrí poniendo los brazos en cruz, pero no me dio. De repente escuché un sonido extraño y me fije que se caían árboles hacia mi. Intente saltar por encima de ellos, me vino una gran avalancha y pude esquivar un tronco enorme, pero otro pasó por encima mío, obligándome a agacharme. En ese momento las rocas me golpearon en las piernas y me tiraron al suelo, cuando me di cuenta estaba entre los escombros y no podía moverme. Me había enfrentado a una Shichibukai y tal vez viviese para contarlo. Una mas en mi lista de venganzas. Había perdido, pero la próxima vez ganaría yo.

Gana sweety

Shion: 1.500 de exp.

Asd: 1.110 de exp.

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