Matt

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Akuma no mi
Varios
07:45 AM
El día era soleado, no había muchas nubes en el cielo que taparan ese azul claro pero si se notaba un viento algo fuerte que dotaba a los barcos de un par de nudos más. Era una corriente de aire bastante fuerte, lo suficiente como para alborotar cabellos y volar sombreros, pero soportable. Las gaviotas graznaban y las olas que llegaban a la playa picaban en el rompe olas como una buena bofetada de una mujer despechada.
En el puerto sur, justamente en el muelle dos, había un barco del gobierno, de la unidad veintisiete. Tanto en el muelle uno, como en el tres, no habían barcos y estaba todo vacío, ni cajas de carga, ni civiles, diferentes agentes del gobierno estaban esparcidos por esos tres muelles protegiendo una carga claramente importante. En el barco número veintisiete, justo en la bodega, habían tres antiguos revolucionarios que habían sido apresados, bueno, dos de ellos, el tercero se había entregado antes de que se le arrestase pero era inminente su final, la diferencia es que el tercero iba a colaborar con el gobierno. No solo habían esos tres despojos de la revolución, dos antiguos marines que pasaban información al enemigo, tanto piratas como criminales, también habían sido apresados. Justamente en una redada del gobierno cayeron los cinco mientras estos intercambiaban información por dinero.
El barco estaba bien protegido, siendo este algo pequeño, dentro de él habían, los cinco "VIPs" como así los llamaban y cincuenta soldados, alrededor del muelle dos, habían otros treinta soldados y tanto en el muelle uno, como en el tres, unos ochenta en total. Estaban ahí a la espera de un barco de la legión, ya que la captura de los delincuentes no habría podido ser llevada a cabo sin la información de la que la Legión dotó al gobierno. Por lo que se decidió que los marines pasaran a cargo de la Legión y los revolucionarios del gobierno. En principio, el barco debía atracar en una hora en el muelle número uno, con el objetivo de llevarse e interrogar a esos dos Ex-marines. Lo más inteligente habría sido devolver a dichos soldados a su cuerpo respectivamente, pero la Legión había ayudado en la captura y tenían más motivación para hacer hablar a esos dos.
07:52 AM
De la calle central que comunica la plaza de la ciudad al muelle, aparecían cuatro sujetos importantes para esa misión. Uno era el encargado del traslado de prisioneros, otro era el superior del pelotón de defensa, como tercer lugar había un hombre, pelo alborotado, gafas de culo de botella y bata blanca, caminando algo torpe y llamando la atención entre tanto hombre trajeado de color azabache pero detrás de él alguien llamaba más la atención. Con el cuerpo cubierto totalmente por vendas blancas y tapado con andrajos en forma de chaqueta larga negros, sombrero de paja antiguo y roído por el tiempo, a más a más de una espada enorme en su espalda estaba Matt. Dicho soldado sospechoso era el encargado de una "protección" extra ya que había llegado a oídos de los expertos que podrían intentar rescatar a dichos presos. Aún que la protección ya era optima para el nivel de peligrosidad de esos cinco, tenían a Matt cogiendo polvo en una esquina y era buen momento para usar todo el dinero invertido en su cuerpo...
08:00 AM
A lo lejos, en el horizonte, se veía un barco, daba la sensación de una fragata, tenían entendido que vendría una calavera de la Legión pero a medida que se acercaba el barco, parecía ser el indicado. Se empezaron los preparativos para el traslado de prisioneros de una cubierta a otra -¿No es muy pronto?- Comentó el encargado del traslado, el superior del pelotón afirmó con la cabeza -Querrán dar buena imagen- Aportó como escusa a su temprana apariencia.
Las cosas empezaron a ser más sospechosas, cuando el barco, a una distancia peligrosa, empezó a virar y una vez se posicionó de costado al muelle, las trampillas de los cañones se abrieron y dispararon una salva entera de las tres filas de cañones hacia el muelle, evitando el barco del gobierno pero haciendo polvo los dos muelles y creando agujeros en los edificios más cercanos a estos...
Los cañones que impactaron en los muelles uno y dos mataron a unos diez soldados, entre la bala de cañón, la explosión de estos y las astillas de los tablones del suelo al reventar ante la explosión. Rápidamente los demás soldados empezaron a ponerse a cubierto. Les pilló desprevenidos pero actuaron rápido pues el barco anclado en el puerto tenía dos cañones que podían rotar sobre su eje para disparar en diferentes direcciones (como los de los barcos marines) Los cuales apuntaron al barco que había abierto fuego y respondieron de la misma forma...
Información:
(Aliados)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 36 por banda
-160 soldados - 7 por los ataques = 153
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 64 cañones por banda
-No se sabe más información
El día era soleado, no había muchas nubes en el cielo que taparan ese azul claro pero si se notaba un viento algo fuerte que dotaba a los barcos de un par de nudos más. Era una corriente de aire bastante fuerte, lo suficiente como para alborotar cabellos y volar sombreros, pero soportable. Las gaviotas graznaban y las olas que llegaban a la playa picaban en el rompe olas como una buena bofetada de una mujer despechada.
En el puerto sur, justamente en el muelle dos, había un barco del gobierno, de la unidad veintisiete. Tanto en el muelle uno, como en el tres, no habían barcos y estaba todo vacío, ni cajas de carga, ni civiles, diferentes agentes del gobierno estaban esparcidos por esos tres muelles protegiendo una carga claramente importante. En el barco número veintisiete, justo en la bodega, habían tres antiguos revolucionarios que habían sido apresados, bueno, dos de ellos, el tercero se había entregado antes de que se le arrestase pero era inminente su final, la diferencia es que el tercero iba a colaborar con el gobierno. No solo habían esos tres despojos de la revolución, dos antiguos marines que pasaban información al enemigo, tanto piratas como criminales, también habían sido apresados. Justamente en una redada del gobierno cayeron los cinco mientras estos intercambiaban información por dinero.
El barco estaba bien protegido, siendo este algo pequeño, dentro de él habían, los cinco "VIPs" como así los llamaban y cincuenta soldados, alrededor del muelle dos, habían otros treinta soldados y tanto en el muelle uno, como en el tres, unos ochenta en total. Estaban ahí a la espera de un barco de la legión, ya que la captura de los delincuentes no habría podido ser llevada a cabo sin la información de la que la Legión dotó al gobierno. Por lo que se decidió que los marines pasaran a cargo de la Legión y los revolucionarios del gobierno. En principio, el barco debía atracar en una hora en el muelle número uno, con el objetivo de llevarse e interrogar a esos dos Ex-marines. Lo más inteligente habría sido devolver a dichos soldados a su cuerpo respectivamente, pero la Legión había ayudado en la captura y tenían más motivación para hacer hablar a esos dos.
07:52 AM
De la calle central que comunica la plaza de la ciudad al muelle, aparecían cuatro sujetos importantes para esa misión. Uno era el encargado del traslado de prisioneros, otro era el superior del pelotón de defensa, como tercer lugar había un hombre, pelo alborotado, gafas de culo de botella y bata blanca, caminando algo torpe y llamando la atención entre tanto hombre trajeado de color azabache pero detrás de él alguien llamaba más la atención. Con el cuerpo cubierto totalmente por vendas blancas y tapado con andrajos en forma de chaqueta larga negros, sombrero de paja antiguo y roído por el tiempo, a más a más de una espada enorme en su espalda estaba Matt. Dicho soldado sospechoso era el encargado de una "protección" extra ya que había llegado a oídos de los expertos que podrían intentar rescatar a dichos presos. Aún que la protección ya era optima para el nivel de peligrosidad de esos cinco, tenían a Matt cogiendo polvo en una esquina y era buen momento para usar todo el dinero invertido en su cuerpo...
08:00 AM
A lo lejos, en el horizonte, se veía un barco, daba la sensación de una fragata, tenían entendido que vendría una calavera de la Legión pero a medida que se acercaba el barco, parecía ser el indicado. Se empezaron los preparativos para el traslado de prisioneros de una cubierta a otra -¿No es muy pronto?- Comentó el encargado del traslado, el superior del pelotón afirmó con la cabeza -Querrán dar buena imagen- Aportó como escusa a su temprana apariencia.
Las cosas empezaron a ser más sospechosas, cuando el barco, a una distancia peligrosa, empezó a virar y una vez se posicionó de costado al muelle, las trampillas de los cañones se abrieron y dispararon una salva entera de las tres filas de cañones hacia el muelle, evitando el barco del gobierno pero haciendo polvo los dos muelles y creando agujeros en los edificios más cercanos a estos...
Los cañones que impactaron en los muelles uno y dos mataron a unos diez soldados, entre la bala de cañón, la explosión de estos y las astillas de los tablones del suelo al reventar ante la explosión. Rápidamente los demás soldados empezaron a ponerse a cubierto. Les pilló desprevenidos pero actuaron rápido pues el barco anclado en el puerto tenía dos cañones que podían rotar sobre su eje para disparar en diferentes direcciones (como los de los barcos marines) Los cuales apuntaron al barco que había abierto fuego y respondieron de la misma forma...
Información:
(Aliados)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 36 por banda
-160 soldados - 7 por los ataques = 153
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 64 cañones por banda
-No se sabe más información
Darvius

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Características
fuerza
Fortaleza
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Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
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Saberes
Akuma no mi
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Parecía ser que todo había salido de perlas, o al menos eso fue lo que se nos había reportado en el cuartel general cuando llegaron las nuevas de los capturados. El subcomandante Antares había ordenado ir al punto de encuentro para la recogida de los objetivos para llevarlos de vuelta para ser interrogados. Para ello se dotó de un pequeño navío, de clase bergantín, algo pequeño y rápido, con una dotación de 15 cañones por banda y 45 almas, para una misión de estas características de llegada, coger paquete y volver. Yo era un mero soldado, pero también sabía que no era del todo cierto, puesto que solo había que verme para saber que, si bien mi graduación era rasa, mi nuevo físico no lo era. De hecho había logrado hacerme "respetar" entre la marinería, peor aún así estaba sujeto a las órdenes del capitán del bergantín, el señor Krakes, veterano legionario. Durante nuestro trayecto hacia la isla no dudó en llamarnos a formar en la cubierta, cosa que hicimos todos, yo incluido sin demora alguna.
Allí mismo, sobre las negras tablas de cubierta se nos expuso lo que debíamos hacer un vez llegáramos a la bahía. Debíamos recoger a los objetivos, subirlos y volver poner viento al cuartel. Aún así mi capitán me sorprendió al nombrarme jefe de un pequeño grupo de marineros, no más de ocho, para bajar del navío y llevar a cabo el traslado entre barcos de los prisioneros. Era una tarea muy modesta, pero sabía perfectamente porque el capitán lo hacía. ¿Qué acojonaría más, un legionario flemillas uniformado o un maldito ciborg de dos metros quince? La respuesta es obvia.
También por mi parte estaba deseoso de charlar con alguno de los científicos que estaban en la comitiva legionaria, aunque sabía que no iba a ser posible debido a la presteza de la misión. Fuera como fuera habíamos llegado antes de lo esperado a la bahía, donde ya pudimos ver de cerca la fragata anclada. Las órdenes fueron dadas y pegamos el navío al costado del gran buque. Nada más colocar las escalas y pasarelas salí de la cubierta inferior del bergantín, con paso decidido como si fuera un velociraptor, pues mis pies se asemejaban al movimiento de un dinosaurio....quizás fuera por las garras. Detrás de mi venían los ocho hombres a mi cargo, y nada más legar a la cubierta de la fragata me reuní con la autoridad al mando, el encargado del traslado. Yo me presenté como Darvius, y sin más demora se procedió al traspaso.
O eso se hubiera hecho, si el vigía no hubiera gritado desde la cofa del bergantín que un navío se aproximaba a la bahía donde estábamos anclados. Estaba confuso, no había orden de llegada de ningún navío más al intercambio. Así que le pedí información al vigía con un gran grito chirriante mecánico, y este me respondió que era una fragata, pero no llevaba insignias de la legión o marina. Entonces cuando vi que el navío empezaba adentrarse y a torcer el rumbo hasta ponerse de costado a los muelles, mi reacción fue inmediata.
-¡CABEZA A TIERRA!
Pues una salva pasó entre los dos navíos sin tocarlos, sufriendo grandes daños los muelles y llevándose por delante a unos cuantos desgraciados que estaban en ellos. La confusión era máxima, y mis propios marineros empezaron a hacer preguntas chorras.
-¡¿Quien cojones son?!
A lo que yo tirado aún en el suelo le respondí.
-ESPERA QUE AHORA SE LO PREGUNTO. ¿QUE DEMONIOS HACÉIS AÚN MIRANDO LAS TABLAS, VAMOS MUCHACHOS MOVEOS!
Rápidamente mis compañeros trataron de volver al bergantín, sin embargo cuando yo me disponía a cruzar la pasarela una andana nos dio de llevo al costado de ambos navíos, dañando gravemente a nuestro navío. Mi capitán por su aparte estaba pegando voces para que los marineros se pusieran a los cañones, mientras que un sinfín de hombres iban de una lado para a otro en ambos navíos.
-¡Darvius!no de mis oficiales superiores cuando logró vislumbrarme en entre la humareda- ¡Usted y sus compañeros vayan al otro navío, cojan a los prisioneros y llévenlos a tierra! ¡Muévase!
-¡Pero señor, tenemos que transpórtalos en navío para sacarlos de la bahía!- le repliqué confuso.
-¡Haga lo que le digo soldado, en tierra podremos cubrirnos mejor, porque me da a mi que no tardaremos en hacer compañía a los peces. Muévase, les ganaremos tiempo, júntese con las tropas de tierra ya!
No hubo ni un rechiste más por mi parte, agarré a uno de mis compañeros, que iba a cebar un cañón por la camisa y lo tiré hacia adelante de la pasarela para ir al otro navío. Los demás captaron la idea y no dudaron en seguirme, de los ocho legionarios conseguimos pasar a la fragata de dos cañones siete con vida, pues uno de nuestros compañeros ante el fogonazo de un cañón enemigo, una bala le partió la crisma.
Mientras tanto mis superiores y el capitán disponían proa con el bergantín para hacer frente a aquella fragata. Era un suicidio, si la fragata amiga nuestra no le daba apoyo, solo conseguirían un tiempo ínfimo, ahora bien, conocía a mi capitán, y si lograba caer en la cubierta enemiga, pobre de los hijos de puta que nos estaban atacando.
Yo por mi parte seguí las órdenes y mientras los marineros de la fragata nos ayudan a subir pude ver como el bergantín comenzó a abrir fuego casco a casco contra la fragata.
![Misión "Ave Rapaz" [Pasado] ?imw=5000&imh=5000&ima=fit&impolicy=Letterbox&imcolor=%23000000&letterbox=false](https://steamuserimages-a.akamaihd.net/ugc/842586141061338924/A693EF390E7F80D2AD9AD193EF748F0BCB8CD98C/?imw=5000&imh=5000&ima=fit&impolicy=Letterbox&imcolor=%23000000&letterbox=false)
Bufé y agarrando a uno de los marineros de aquel barco le ordené.
-Lléveme a los prisioneros ¡ya!
Allí mismo, sobre las negras tablas de cubierta se nos expuso lo que debíamos hacer un vez llegáramos a la bahía. Debíamos recoger a los objetivos, subirlos y volver poner viento al cuartel. Aún así mi capitán me sorprendió al nombrarme jefe de un pequeño grupo de marineros, no más de ocho, para bajar del navío y llevar a cabo el traslado entre barcos de los prisioneros. Era una tarea muy modesta, pero sabía perfectamente porque el capitán lo hacía. ¿Qué acojonaría más, un legionario flemillas uniformado o un maldito ciborg de dos metros quince? La respuesta es obvia.
También por mi parte estaba deseoso de charlar con alguno de los científicos que estaban en la comitiva legionaria, aunque sabía que no iba a ser posible debido a la presteza de la misión. Fuera como fuera habíamos llegado antes de lo esperado a la bahía, donde ya pudimos ver de cerca la fragata anclada. Las órdenes fueron dadas y pegamos el navío al costado del gran buque. Nada más colocar las escalas y pasarelas salí de la cubierta inferior del bergantín, con paso decidido como si fuera un velociraptor, pues mis pies se asemejaban al movimiento de un dinosaurio....quizás fuera por las garras. Detrás de mi venían los ocho hombres a mi cargo, y nada más legar a la cubierta de la fragata me reuní con la autoridad al mando, el encargado del traslado. Yo me presenté como Darvius, y sin más demora se procedió al traspaso.
O eso se hubiera hecho, si el vigía no hubiera gritado desde la cofa del bergantín que un navío se aproximaba a la bahía donde estábamos anclados. Estaba confuso, no había orden de llegada de ningún navío más al intercambio. Así que le pedí información al vigía con un gran grito chirriante mecánico, y este me respondió que era una fragata, pero no llevaba insignias de la legión o marina. Entonces cuando vi que el navío empezaba adentrarse y a torcer el rumbo hasta ponerse de costado a los muelles, mi reacción fue inmediata.
-¡CABEZA A TIERRA!
Pues una salva pasó entre los dos navíos sin tocarlos, sufriendo grandes daños los muelles y llevándose por delante a unos cuantos desgraciados que estaban en ellos. La confusión era máxima, y mis propios marineros empezaron a hacer preguntas chorras.
-¡¿Quien cojones son?!
A lo que yo tirado aún en el suelo le respondí.
-ESPERA QUE AHORA SE LO PREGUNTO. ¿QUE DEMONIOS HACÉIS AÚN MIRANDO LAS TABLAS, VAMOS MUCHACHOS MOVEOS!
Rápidamente mis compañeros trataron de volver al bergantín, sin embargo cuando yo me disponía a cruzar la pasarela una andana nos dio de llevo al costado de ambos navíos, dañando gravemente a nuestro navío. Mi capitán por su aparte estaba pegando voces para que los marineros se pusieran a los cañones, mientras que un sinfín de hombres iban de una lado para a otro en ambos navíos.
-¡Darvius!no de mis oficiales superiores cuando logró vislumbrarme en entre la humareda- ¡Usted y sus compañeros vayan al otro navío, cojan a los prisioneros y llévenlos a tierra! ¡Muévase!
-¡Pero señor, tenemos que transpórtalos en navío para sacarlos de la bahía!- le repliqué confuso.
-¡Haga lo que le digo soldado, en tierra podremos cubrirnos mejor, porque me da a mi que no tardaremos en hacer compañía a los peces. Muévase, les ganaremos tiempo, júntese con las tropas de tierra ya!
No hubo ni un rechiste más por mi parte, agarré a uno de mis compañeros, que iba a cebar un cañón por la camisa y lo tiré hacia adelante de la pasarela para ir al otro navío. Los demás captaron la idea y no dudaron en seguirme, de los ocho legionarios conseguimos pasar a la fragata de dos cañones siete con vida, pues uno de nuestros compañeros ante el fogonazo de un cañón enemigo, una bala le partió la crisma.
Mientras tanto mis superiores y el capitán disponían proa con el bergantín para hacer frente a aquella fragata. Era un suicidio, si la fragata amiga nuestra no le daba apoyo, solo conseguirían un tiempo ínfimo, ahora bien, conocía a mi capitán, y si lograba caer en la cubierta enemiga, pobre de los hijos de puta que nos estaban atacando.
Yo por mi parte seguí las órdenes y mientras los marineros de la fragata nos ayudan a subir pude ver como el bergantín comenzó a abrir fuego casco a casco contra la fragata.
Bufé y agarrando a uno de los marineros de aquel barco le ordené.
-Lléveme a los prisioneros ¡ya!
Matt

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Todo era un poco confuso, la mitad de los soldados de negro ahí presentes podría decirse que hacía poco que les habían reclutado, era una simple misión de custodia por lo que no hacía falta un gran despliegue de medios, pero claramente alguno de los prisioneros sabía más de lo que admitía pues era un gran grupo de rescate por parte de la revolución. El barco de la legión empezó a moverse, iba a hacerle frente y el gubernamental no se iba a quedar atrás pero antes necesitaban recuperar la información que en este caso venía en forma de cinco hombres. -¡Matt, sácalos del barco!- Ordenó el superior, a lo que el cyborg respondió en el acto, salio corriendo en dirección a los presos mientras el superior informaba a los que estaban dentro por Den Den Mushi.
8:12 AM
Matt llegó al interior del barco, se podía observar que todos se preparaban para salir a hundir la cascara de nuez enemiga hasta que tocara el fondo del mar, pero a parte reconoció a los ocho legionarios que entraron en el barco por la insignia que portaban, por eso y por que los demás compañeros de negro no parecían estar alerta ante su presencia por lo que entendió que era la comitiva de recibimiento. -Me llevo. A los cinco presos- Dijo sin emoción alguna con su sonido típico metálico y sin mover más que las vendas que salían de su cuerpo. Por un momento se quedó observando a uno de los legionarios, la curiosidad aún que no era muy típica en Matt, era evidente.
8:23 AM
Para cuando la embarcación se quiso poner en marcha y ayudar al barco aliado, los prisioneros estaban nuevamente en tierra firme protegidos por ocho legionarios y un soldado del gobierno. Aún que muchos digan lo contrario, el gobierno y la revolución son lo mismo, son diferentes caras de una misma moneda por lo que aún usando diferentes formatos piensan igual, ¿Por qué menciono dicho dato? Pues nada más el barco salió del muelle tras el enfrentamiento naval, en el puerto se empezaron a escuchar gritos que daban a entender una batalla.
Desde la ciudad, aparecieron diferentes pequeños grupos de revolucionarios dispuestos a cortar cabezas trajeadas, la intención era clara, el barco era el cebo, solo querían que bajaran a los prisioneros a tierra firme donde desde hace días empezaron a acumularse soldados revolucionarios para la salvación de dichos personajes. Una acción temeraria por su parte pues la isla estaba protegida y dirigida por la facción contraria, pero ese ego que mantenía dicha protección fue tan alto que no se dio cuenta que se acumulaban fuerzas de la resistencia en su interior...
Los guerreros trajeados respondieron lentos al ataque sorpresa, pues el factor sorpresa golpeó duro pero aún así no fue suficiente para eliminarlos a todos y una batalla campal emergió en dicho puerto... Nadie esperaba que tras el ataque del barco al muelle, este escondiera enemigos pero fue suficiente engaño como para que todos estuvieran centrados en el agua y no en sus espaldas...
Matt, empuñó su espadón y rápidamente le quitó las vendas mostrando así la gran hoja -Prioridad, proteger, prioridad, proteger- Ordenó aún que no tuviera el menor rango para ejercer autoridad, pero quedaba claro a lo que se refería. Fuese como fuese esos cinco enemigos apresados tenían que sobrevivir a este día. El enemigo aún no había sobrepasado la fuerza aliada en el muelle pero iban con toda la intención de hacer lo que hiciera falta para sacar a sus cinco soldados de las garras de la ley.
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 36 por banda
-153 soldados - 23 por los ataques = 130 (60 soldados en el barco y 70 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 15 cañones por banda
-45 soldados - 7 por los ataques = 38
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 64 cañones por banda
-No se sabe más información de la fragata
-50 soldados en tierra
8:12 AM
Matt llegó al interior del barco, se podía observar que todos se preparaban para salir a hundir la cascara de nuez enemiga hasta que tocara el fondo del mar, pero a parte reconoció a los ocho legionarios que entraron en el barco por la insignia que portaban, por eso y por que los demás compañeros de negro no parecían estar alerta ante su presencia por lo que entendió que era la comitiva de recibimiento. -Me llevo. A los cinco presos- Dijo sin emoción alguna con su sonido típico metálico y sin mover más que las vendas que salían de su cuerpo. Por un momento se quedó observando a uno de los legionarios, la curiosidad aún que no era muy típica en Matt, era evidente.
8:23 AM
Para cuando la embarcación se quiso poner en marcha y ayudar al barco aliado, los prisioneros estaban nuevamente en tierra firme protegidos por ocho legionarios y un soldado del gobierno. Aún que muchos digan lo contrario, el gobierno y la revolución son lo mismo, son diferentes caras de una misma moneda por lo que aún usando diferentes formatos piensan igual, ¿Por qué menciono dicho dato? Pues nada más el barco salió del muelle tras el enfrentamiento naval, en el puerto se empezaron a escuchar gritos que daban a entender una batalla.
Desde la ciudad, aparecieron diferentes pequeños grupos de revolucionarios dispuestos a cortar cabezas trajeadas, la intención era clara, el barco era el cebo, solo querían que bajaran a los prisioneros a tierra firme donde desde hace días empezaron a acumularse soldados revolucionarios para la salvación de dichos personajes. Una acción temeraria por su parte pues la isla estaba protegida y dirigida por la facción contraria, pero ese ego que mantenía dicha protección fue tan alto que no se dio cuenta que se acumulaban fuerzas de la resistencia en su interior...
Los guerreros trajeados respondieron lentos al ataque sorpresa, pues el factor sorpresa golpeó duro pero aún así no fue suficiente para eliminarlos a todos y una batalla campal emergió en dicho puerto... Nadie esperaba que tras el ataque del barco al muelle, este escondiera enemigos pero fue suficiente engaño como para que todos estuvieran centrados en el agua y no en sus espaldas...
Matt, empuñó su espadón y rápidamente le quitó las vendas mostrando así la gran hoja -Prioridad, proteger, prioridad, proteger- Ordenó aún que no tuviera el menor rango para ejercer autoridad, pero quedaba claro a lo que se refería. Fuese como fuese esos cinco enemigos apresados tenían que sobrevivir a este día. El enemigo aún no había sobrepasado la fuerza aliada en el muelle pero iban con toda la intención de hacer lo que hiciera falta para sacar a sus cinco soldados de las garras de la ley.
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 36 por banda
-153 soldados - 23 por los ataques = 130 (60 soldados en el barco y 70 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 15 cañones por banda
-45 soldados - 7 por los ataques = 38
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 64 cañones por banda
-No se sabe más información de la fragata
-50 soldados en tierra
Darvius

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Características
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Fortaleza
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Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
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Saberes
Akuma no mi
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Maldita sea mi estampa ¿ Cuánto tiempo teníamos ante aquel ataque? La revolución, esos hippies pestilentes no tenían tanta cabeza como para pillar a La Legión por la espalda. ¿ Que ha pasado para que nos la metieran doblada? Alguien ha tenido que colaborar con ellos y darles el chivatazo, sino esto no se explica, Si tienen una fragata armada, me apostaría el brazo de uno de mis compañeros a que esta no había venido sola. Bueno, da igual, la misión debe completarse, así que hay que llevar a los prisioneros a tierra.
Justo cuando habíamos llegad o ellos bajo cubierta, y tras haberle pedido a los oficiales de guardia que me los entregaran en nombre de La Legión, hasta que vi a un tipo de lo más peculiar, y si bien me quedé detenido por unos segundos con cierto semblante curioso, mis compañeros de armas no tardaron en darme un toque al hombro para que espabilara.
-Darvius muévete ¿ a que esperas? -dijo uno de los compañeros tratando de coger a los prisioneros, pero a su vez, aquel hombre misterioso, que imaginaba era de los nuestros también quería llevárselos. -¿Este es de los nuestros no?
-¿Tu que crees¿ ¡Vamos!- le repliqué con una voz mecánica seguida de dos tosidos.
Agarré personalmente a uno de los prisioneros hasta llevarlos a tierra junto a aquel acompañante, que sin duda alguna, era de los nuestros. La batalla parecía encrudecerse, sobre todo porque la contienda ya no era solo en el mar, sino que parecía que los revolucionarios habían tocado tierra, y es más, salieron igual que hormigas de un hormiguero en llamas por todas las callejuelas y zonas del muelle disponibles. Esto era una trampa, y vive Dios que no iba a caer en ella. Mientras tanto mi capitán parecía luchar con furia de titán contra aquella fragata, e incluso la otra fragata donde habían estado los prisioneros izó velas para echar una mano al bergantín.
Mientras tanto, en tierra, mis compañeros protegieron a los prisioneros, mientras que yo vi como un grupo de esos hippies aparecía de entre uno de los muelles y comenzaba a cargar contra nosotros. Yo me eché unos pasos hacia adelante, y con una risa mecánica el primero se abalanzó sobre mi con un golpe de sable; el arma al impactar contra mi pechos se partió por la mitad, haciendo un chirriante estruendo. El revolucionario se quedó con cara de sorpresa, hasta que se dio cuenta que debajo de mi capa era...metal. Le miré y con cierta malicia le dije:
-Mi turno.
Le agarré con mi brazo derecho por el cuello y alzándolo en el aire lo lancé contra un grupo de rebeldes que venían en su auxilio, tirándolos a todos al suelo. Otros tres aparecieron de detrás de un edificio, armados con mosquetes y no tardaron en abrir fuego contra mi. Las tres balas de sus mosquetes rebotaron en mi armadura. Aún así, y a pesar de que podía aguantar algunos tiros, no podía estar a descubierto mucho tiempo, así que, igual que una araña, comencé a caminar por el suelo a toda velocidad hasta saltar sobre dos de aquellos agresores. Les coloqué las garras sobre la cabeza, y apreté hasta estrujárselas. El tercero de estos sacó su sable e intentó clavármelo en la cabeza desde mi espalda, pero al igual que el del otro rebelde, este se partió, pero me había dolido. Así que me giré lentamente mientras me levantaba hasta que le agarré la muñeca al rebelde, y con un rápido giro se la rompí, haciéndole gritar y caer al suelo. Fue entonces cuando la cosa se puso peor, pues seguían apareciendo más y más de estos tipos. Así que miré al compañero robótico que nos habíamos encontrado en el barco y le grité:
-TU, ¿hay algún otro barco por aquí?
Esperaba que al menos la fragata sobreviviera a la emboscada, pero nunca estaba mal tener un plan B. De momento solo se estaban colando algunos de los rebeldes a la zona donde estábamos, pero por suerte, nuestros hombres todavía mantenían los muelles bajo nuestra bandera, tan sólo habría que preguntarse por cuanto tiempo.
Justo cuando habíamos llegad o ellos bajo cubierta, y tras haberle pedido a los oficiales de guardia que me los entregaran en nombre de La Legión, hasta que vi a un tipo de lo más peculiar, y si bien me quedé detenido por unos segundos con cierto semblante curioso, mis compañeros de armas no tardaron en darme un toque al hombro para que espabilara.
-Darvius muévete ¿ a que esperas? -dijo uno de los compañeros tratando de coger a los prisioneros, pero a su vez, aquel hombre misterioso, que imaginaba era de los nuestros también quería llevárselos. -¿Este es de los nuestros no?
-¿Tu que crees¿ ¡Vamos!- le repliqué con una voz mecánica seguida de dos tosidos.
Agarré personalmente a uno de los prisioneros hasta llevarlos a tierra junto a aquel acompañante, que sin duda alguna, era de los nuestros. La batalla parecía encrudecerse, sobre todo porque la contienda ya no era solo en el mar, sino que parecía que los revolucionarios habían tocado tierra, y es más, salieron igual que hormigas de un hormiguero en llamas por todas las callejuelas y zonas del muelle disponibles. Esto era una trampa, y vive Dios que no iba a caer en ella. Mientras tanto mi capitán parecía luchar con furia de titán contra aquella fragata, e incluso la otra fragata donde habían estado los prisioneros izó velas para echar una mano al bergantín.
Mientras tanto, en tierra, mis compañeros protegieron a los prisioneros, mientras que yo vi como un grupo de esos hippies aparecía de entre uno de los muelles y comenzaba a cargar contra nosotros. Yo me eché unos pasos hacia adelante, y con una risa mecánica el primero se abalanzó sobre mi con un golpe de sable; el arma al impactar contra mi pechos se partió por la mitad, haciendo un chirriante estruendo. El revolucionario se quedó con cara de sorpresa, hasta que se dio cuenta que debajo de mi capa era...metal. Le miré y con cierta malicia le dije:
-Mi turno.
Le agarré con mi brazo derecho por el cuello y alzándolo en el aire lo lancé contra un grupo de rebeldes que venían en su auxilio, tirándolos a todos al suelo. Otros tres aparecieron de detrás de un edificio, armados con mosquetes y no tardaron en abrir fuego contra mi. Las tres balas de sus mosquetes rebotaron en mi armadura. Aún así, y a pesar de que podía aguantar algunos tiros, no podía estar a descubierto mucho tiempo, así que, igual que una araña, comencé a caminar por el suelo a toda velocidad hasta saltar sobre dos de aquellos agresores. Les coloqué las garras sobre la cabeza, y apreté hasta estrujárselas. El tercero de estos sacó su sable e intentó clavármelo en la cabeza desde mi espalda, pero al igual que el del otro rebelde, este se partió, pero me había dolido. Así que me giré lentamente mientras me levantaba hasta que le agarré la muñeca al rebelde, y con un rápido giro se la rompí, haciéndole gritar y caer al suelo. Fue entonces cuando la cosa se puso peor, pues seguían apareciendo más y más de estos tipos. Así que miré al compañero robótico que nos habíamos encontrado en el barco y le grité:
-TU, ¿hay algún otro barco por aquí?
Esperaba que al menos la fragata sobreviviera a la emboscada, pero nunca estaba mal tener un plan B. De momento solo se estaban colando algunos de los rebeldes a la zona donde estábamos, pero por suerte, nuestros hombres todavía mantenían los muelles bajo nuestra bandera, tan sólo habría que preguntarse por cuanto tiempo.
Matt

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Matt observó al hombre de la legión y tras analizar fácilmente las peleas que estaba teniendo comprendió que no era alguien común y que siguiera al rebaño, pues parecía que, o iba bien protegido o no era un soldado corriente. El CP no hizo ningún movimiento, simplemente observó hasta que el legionario le hizo una pregunta -No hay barcos. Aliados. Barcos civiles sí- Contestó, no era una mala idea usar uno de los barcos pesqueros pero no estaban preparados para una batalla naval y tampoco es que fueran rápidos -Mi objetivo es. Custodiar prisioneros. Mejor forma de. Cumplir misión. Eliminar al enemigo- Sí, ya sea por "X" o por "B" la mejor manera de hacer su trabajo era matando a alguien, no preguntéis a Matt, si no al científico que lo programó.
Un par de revolucionarios se acercaron a Matt, este simplemente de un movimiento empuño su espada, la cual se "desnudó" fácilmente (ya que las vendas que la ocultaban perdieron la presión y estas cayeron al suelo) Y mostró el espadón afilado y limpio que siempre portaba, de un simple movimiento lateral de derecha a izquierda, por mucho que se protegieron los dos condenados, fueron repelidos. El ataque partió los finos sables de los "humanos", les hizo un corte en el pecho a los dos y los lanzó hacia atrás -Hay que, salir de campo abierto- Comentó. Por mucho que observara a su alrededor no veía por donde ir, pero a sus pies estaba la respuesta para él. Miró hacia abajo, luego al prisionero que tenía con él quien negaba con la cabeza de forma brusca y repetida, para luego clavar su espada en la tapa de la alcantarilla (después lanzó dicha tapa hacia un revolucionario pero eso no tiene importancia) -Entra- Ordeno, pero el preso no quería, Matt le arreó un cabezazo y lo tiró hacia el agujero -Da igual ocho que ochenta. En los túneles, vendrán de dos en dos- Cierto y el no se cansaba, pero los demás... ¿Que harían? También nuestro cyborg gubernamental era consciente que ahí abajo su espadón no podría ser blandido...
En la plaza cuatro balas de cañón que no impactaron en el navío aliado volvieron a golpear el muelle causando bajas tanto en un bando como en otro... No estaba planificado, pero por mucho que fuera un ataque sorpresa, la revolución tampoco tenía en mente que la legión se adelantara dando así apoyo al gobierno.
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 30 por banda (-6)
-130 soldados - 17 por los ataques = 113 (53 soldados en el barco y 60 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 12 cañones por banda (-3)
-38 soldados - 5 por los ataques = 33
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 53 cañones por banda (-11)
-No se sabe más información de la fragata
-50 soldados en tierra - 14 por los ataques = 36
Un par de revolucionarios se acercaron a Matt, este simplemente de un movimiento empuño su espada, la cual se "desnudó" fácilmente (ya que las vendas que la ocultaban perdieron la presión y estas cayeron al suelo) Y mostró el espadón afilado y limpio que siempre portaba, de un simple movimiento lateral de derecha a izquierda, por mucho que se protegieron los dos condenados, fueron repelidos. El ataque partió los finos sables de los "humanos", les hizo un corte en el pecho a los dos y los lanzó hacia atrás -Hay que, salir de campo abierto- Comentó. Por mucho que observara a su alrededor no veía por donde ir, pero a sus pies estaba la respuesta para él. Miró hacia abajo, luego al prisionero que tenía con él quien negaba con la cabeza de forma brusca y repetida, para luego clavar su espada en la tapa de la alcantarilla (después lanzó dicha tapa hacia un revolucionario pero eso no tiene importancia) -Entra- Ordeno, pero el preso no quería, Matt le arreó un cabezazo y lo tiró hacia el agujero -Da igual ocho que ochenta. En los túneles, vendrán de dos en dos- Cierto y el no se cansaba, pero los demás... ¿Que harían? También nuestro cyborg gubernamental era consciente que ahí abajo su espadón no podría ser blandido...
En la plaza cuatro balas de cañón que no impactaron en el navío aliado volvieron a golpear el muelle causando bajas tanto en un bando como en otro... No estaba planificado, pero por mucho que fuera un ataque sorpresa, la revolución tampoco tenía en mente que la legión se adelantara dando así apoyo al gobierno.
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con dos cañones en cubierta móviles y 30 por banda (-6)
-130 soldados - 17 por los ataques = 113 (53 soldados en el barco y 60 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 12 cañones por banda (-3)
-38 soldados - 5 por los ataques = 33
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 53 cañones por banda (-11)
-No se sabe más información de la fragata
-50 soldados en tierra - 14 por los ataques = 36
Darvius

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¿Qué? ¿Tan sólo hay barcos civiles? ¿Pero en que demonios estaba pensando el Gobierno? Definitivamente estaban perdiendo facultades. Madre de todos los santos, inútiles. ¿Ahora que?. Estamos en un fuego cruzado atrapados como ratas, y aún así parece que vamos ganando a pesar del navío que ataca el puerto y el bergantín. Algo no me estaba cuadrando para nada, o sea, están enviando una fuerza no demasiado grande para llevarse a los prisioneros, y sin embargo, no están haciendo foco en ellos precisamente. La distracción del puerto es obvia, tenernos entretenidos en el puerto evita que enviemos ayuda al mar y vice versa, pero esto también propia que pequeños grupúsculos rebeldes se cuelen con mayor facilidad a nuestra retaguardia. Ahora mismo da igual, pero que por mis muertos más frescos voy a llevar a esos desgraciados al cuartel.
Así que escuché las palabras de aquel tipo deol gobierno, lanzando un leve quejido por la boca mecánica mientras otro rebelde se abalanzaba sobre mi empuñando un sable. Lo agarré con la mano en el aire, y estrenando las mejoras del doctor en mi cuerpo, la muñeca comenzó a rotar haciéndolo girar como la hélice de un helicóptero hasta lanzarlo contra una pared de un edificio de la plaza. Tras esto miré nuevamente al compañero, el cual estaba quitando la tapa de una alcantarilla. No era la mejor idea del mundo, pero era una idea, por lo menos podríamos aislar a los presos ahi abajo hasta que la cosa mejorara, ya que aqui arriba, somos blanco fácil. Así que me dirigí a mis compañeros y les dije:
- ¡Muchachos, venga, por aqui! -dije antes de ver como las cuatro balas de cañón impactaban en la plaza- ¡ Y SI ES PARA HOY MEJOR!
Mis compañeros no dudaron, y tras haber entrado los prisioneros con los escoltas del Gobierno, entramos los legionarios propiamente. Olía mal como era de esperar, pero al menos la zona estaba tranquila. Igualmente mis muchachos se llevaron las manos a la nariz, yo sin embargo, miré al compañero que había tenido la idea de la alcantarilla.
-Espero que tengas un buen plan para que acabemos aquí con los prisioneros. Está claro que al puerto no podemos ir, ¿que sugieres?. Mis órdenes son sacarlos de esta isla, aunque ahora creo que pueden traducirse por "mantener a estos con vida". Por cierto, soldado Darvius. ¿Y usted es?-dije con un carraspeo mecánico mientras me llevaba las manos a la espalda.
Así que escuché las palabras de aquel tipo deol gobierno, lanzando un leve quejido por la boca mecánica mientras otro rebelde se abalanzaba sobre mi empuñando un sable. Lo agarré con la mano en el aire, y estrenando las mejoras del doctor en mi cuerpo, la muñeca comenzó a rotar haciéndolo girar como la hélice de un helicóptero hasta lanzarlo contra una pared de un edificio de la plaza. Tras esto miré nuevamente al compañero, el cual estaba quitando la tapa de una alcantarilla. No era la mejor idea del mundo, pero era una idea, por lo menos podríamos aislar a los presos ahi abajo hasta que la cosa mejorara, ya que aqui arriba, somos blanco fácil. Así que me dirigí a mis compañeros y les dije:
- ¡Muchachos, venga, por aqui! -dije antes de ver como las cuatro balas de cañón impactaban en la plaza- ¡ Y SI ES PARA HOY MEJOR!
Mis compañeros no dudaron, y tras haber entrado los prisioneros con los escoltas del Gobierno, entramos los legionarios propiamente. Olía mal como era de esperar, pero al menos la zona estaba tranquila. Igualmente mis muchachos se llevaron las manos a la nariz, yo sin embargo, miré al compañero que había tenido la idea de la alcantarilla.
-Espero que tengas un buen plan para que acabemos aquí con los prisioneros. Está claro que al puerto no podemos ir, ¿que sugieres?. Mis órdenes son sacarlos de esta isla, aunque ahora creo que pueden traducirse por "mantener a estos con vida". Por cierto, soldado Darvius. ¿Y usted es?-dije con un carraspeo mecánico mientras me llevaba las manos a la espalda.
Matt

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Precisión
Intelecto
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Tras entrar en las alcantarillas, Matt no hizo ningún gesto, notaba el olor, podía entrar hasta por esas vendas secas y ásperas pero no quiso darle más importancia, había estado en situaciones peores. Tras entrar en los túneles de desagües, pudieron confirmar lo que el CP pudo intuir y es que, ahí abajo, las balas de cañón no eran más que polvo. Los acueductos de la ciudad tenían una buena estructura, estaban bien asentadas, los proyectiles lanzados desde el barco que impactaban en puerto, no eran más que pequeños temblores. Tras la colisión del último ataque, las ratas de la zona empezaron a correr de un lado hacia otro asustadas, hasta que todas tomaron una dirección -Cuando un barco. Está apunto de. Hundirse, ratas huir. Seguir Ratas, llevarnos hasta centro ciudad. Ahí reclusos estar a salvo- Lo que bien se traducía en, si llegan a algún cuartel de la ciudad, ni el barco ni los revolucionarios podrían hacerse con el "paquete valioso" vamos la vida de los presos...
Matt colocó el espadón a su espalda tras comprobar que era demasiado grande para un lugar tan angosto, no podría defenderse con su arma pero no le hacía falta tampoco, tenía más ases bajo la manga -Matt- Contestó a la presentación de Darvius. Aún no tenía controlado como socializar con los demás, por lo que se quedó estático sin moverse ni dar la mano. De pronto sin avisar, empezó a caminar el primero siguiendo el rastro de ratas.
Tras caminar unos pocos pasillos, Matt se detuvo al ver que un grupo de ratas volvía de donde había venido. Esos animales eran listos y no se equivocaban a la hora de escapar, por no decir que caben por cualquier rendija y un pequeño riachuelo se formaba a los pies de los presentes en dirección al mar, por lo que alguna salida había. Matt alargo el brazo en forma de barrera, le daba mala espina (Si es que se le podía llamar así a lo que sea que sintiera el pobre homb...robot...) -No seguro- Agregó con su voz metálica resonando en el eco del túnel...
En el mar las cosas no mejoraban, la batalla naval era más cruda a cada minuto y en el muelle no mejoraba, la batalla se alargaba pero parecía que el bando "bueno" tenía la sartén por el mango e iban ganando. Del barco del gobierno mundial, empezó a sonar la campana, nadie entendía por qué, ya que se sabía que estaba en combate pero parecían alertar de algo...
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con un cañón en cubierta móvil y 24 por banda
-90 soldados (41 soldados en el barco y 49 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 9 cañones por banda
-30 soldados
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 47 cañones por banda
-No se sabe más información de la fragata
-25 soldados en tierra
Matt colocó el espadón a su espalda tras comprobar que era demasiado grande para un lugar tan angosto, no podría defenderse con su arma pero no le hacía falta tampoco, tenía más ases bajo la manga -Matt- Contestó a la presentación de Darvius. Aún no tenía controlado como socializar con los demás, por lo que se quedó estático sin moverse ni dar la mano. De pronto sin avisar, empezó a caminar el primero siguiendo el rastro de ratas.
Tras caminar unos pocos pasillos, Matt se detuvo al ver que un grupo de ratas volvía de donde había venido. Esos animales eran listos y no se equivocaban a la hora de escapar, por no decir que caben por cualquier rendija y un pequeño riachuelo se formaba a los pies de los presentes en dirección al mar, por lo que alguna salida había. Matt alargo el brazo en forma de barrera, le daba mala espina (Si es que se le podía llamar así a lo que sea que sintiera el pobre homb...robot...) -No seguro- Agregó con su voz metálica resonando en el eco del túnel...
En el mar las cosas no mejoraban, la batalla naval era más cruda a cada minuto y en el muelle no mejoraba, la batalla se alargaba pero parecía que el bando "bueno" tenía la sartén por el mango e iban ganando. Del barco del gobierno mundial, empezó a sonar la campana, nadie entendía por qué, ya que se sabía que estaba en combate pero parecían alertar de algo...
Información:
(Gobierno)
-Un barco gubernamental con un cañón en cubierta móvil y 24 por banda
-90 soldados (41 soldados en el barco y 49 en tierra)
-2 Superiores al cargo
-1 científico
-Matt
(Legión)
-Bergantín con 9 cañones por banda
-30 soldados
(Enemigos)
-Una fragata con un total de 47 cañones por banda
-No se sabe más información de la fragata
-25 soldados en tierra
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