Había desembarcado en aquella peculiar isla llamada Towerbridge, concretamente en su zona de atraque, Floodport. El lugar la verdad que no era para tirar cohetes, pero bueno...al menos había tiendas y astilleros, algo habría para hacer por ahi. Bajé del primer navío junto al resto de pasajeros de un pequeño ferry. Todavía me quedaban algunas monedas para comprarme algo típico de allí, y en vista de que English Garden eran un lugar de alto copete, había que vestir a la altura. A pesar de que me encontraba con mi esmoquin habitual, acompañado de chorrera y puños plateados, me hacía falta un objeto esencial en aquella isla: Un sombrero. Así que sin dudarlo me puse a pasear por la calle en la búsqueda de una sombrerería, la cual pude atisbar a lo lejos de una de las calles. Lo bonito de deslumbrar a la gente con mi elegante ropa era que todos se iban apartando de mi camino, pero como era obvio no les iba a decir el nombre de mi sastre.
Una vez llegada a la sombrerería me dispuse a entrar y a tocar el pequeño timbre del mostrador, donde un hombre ya anciano salió a recibirme. Su primera impresión fue confusa ya que se quedó algo helado al verme....quizás era porque estaba jugando a pulsar el timbre de llamada una y otra vez.
-Buenos días señor ¿ En que puedo ayudarle?- dijo amablemente el sombrerero mientras le caía una pequeña gota de sudor por la sien.
Yo seguía pulsando el botón del timbre como quien no quería la cosa, absorto y sonriente, me gustaba el sonido.
-¿Señor? ¿ Ha visto algún sombrero que le interese?.
Fue entonces cuando paré de tocar el timbre, giré la cabeza lentamente manteniendo una sonrisa de mejilla a mejilla dejando ver mis dientes amarillos.
-La verdad....es que si.
Pasaron los minutos y acabé saliendo de aquel establecimiento con un gorro de ala ancha de color negro, a juego con el traje que llevaba. Mientras me lo ajustaba con las manos a la cabeza pude ver que tenía algo de sangre en los dedos.
-Oins...ya lo he manchado...
-Nadie te dijo que tuvieras que meterle un sombrero al viejo por la garganta...
-Si bueno, al menos esta vez no entró golpeando la puerta con dinamita en mano.
-Callaos- dije para mi- Pff...manchado no me gusta, a la porra.
Lancé el sombrero contra la pared del establecimiento, para luego sacar un bote de píldoras del bolsillo del pantalón y tomarme de golpe unas cuatro. Tras eso me llevé las manos a los bolsillos y me puse a caminar por las calles nuevamente, pensando que hacer....quizás era buena idea echar un vistazo por la zona de los astilleros.
Una vez llegada a la sombrerería me dispuse a entrar y a tocar el pequeño timbre del mostrador, donde un hombre ya anciano salió a recibirme. Su primera impresión fue confusa ya que se quedó algo helado al verme....quizás era porque estaba jugando a pulsar el timbre de llamada una y otra vez.
-Buenos días señor ¿ En que puedo ayudarle?- dijo amablemente el sombrerero mientras le caía una pequeña gota de sudor por la sien.
Yo seguía pulsando el botón del timbre como quien no quería la cosa, absorto y sonriente, me gustaba el sonido.
-¿Señor? ¿ Ha visto algún sombrero que le interese?.
Fue entonces cuando paré de tocar el timbre, giré la cabeza lentamente manteniendo una sonrisa de mejilla a mejilla dejando ver mis dientes amarillos.
-La verdad....es que si.
Pasaron los minutos y acabé saliendo de aquel establecimiento con un gorro de ala ancha de color negro, a juego con el traje que llevaba. Mientras me lo ajustaba con las manos a la cabeza pude ver que tenía algo de sangre en los dedos.
-Oins...ya lo he manchado...
-Nadie te dijo que tuvieras que meterle un sombrero al viejo por la garganta...
-Si bueno, al menos esta vez no entró golpeando la puerta con dinamita en mano.
-Callaos- dije para mi- Pff...manchado no me gusta, a la porra.
Lancé el sombrero contra la pared del establecimiento, para luego sacar un bote de píldoras del bolsillo del pantalón y tomarme de golpe unas cuatro. Tras eso me llevé las manos a los bolsillos y me puse a caminar por las calles nuevamente, pensando que hacer....quizás era buena idea echar un vistazo por la zona de los astilleros.
Y de nuevo… una vez más aquí. Si, Alpha. Has vuelto a donde todo comenzó. Un dia como hoy estas en English Garden. Aquí fue tu primera parada como pirata hace tiempo ya. Recordabas con nostalgia mientras cabalgabas sobre la plumífera. Recorrías las mismas calles. Parecía… que estuvieras viajando un poco en el tiempo. Las calles apenas estaban cambiadas. Su gente seguía siendo la misma de siempre. Pero algo si deferencia esta visita a otras. La primera vez, eres un novato que no tenía ninguna recompensa. Un principiante que soñaba muchas cosas. En esos momentos no tenias que cubrirte con ningún tipo de máscara y capa con capucha como tienes que hacerlo hoy en día.
Es normal, este lugar ahora era territorio del gobierno mundial. No querías bajar la guardia. No querías ser identificado con nadie que pudiera causarte algún tipo de problema. Al menos para ti, tener problemas en un Blue no merece mucho la pena. Muy poco que sacar de una situación así.
Además, de ser descubierto, probablemente las alarmas salten y te toque defenderte. Y tú mejor que nadie sabe lo que ocurre cuando eso pasa.
- Es un día maravilloso ¿ No lo crees, Suzaku? - Ella solo se limita a sentir con la cabeza. Logi y Thor se encuentran cerca de ti. Moviéndose entre las sombras de los callejones y edificios vigilando los alrededores. Tú tan solo te limitaste a llegar a donde conociste a tu maestra por primera vez, en el área del mercado.
-Muy poco de aquí ha cambiado. - Dijiste para ti mismo. Te pareció ver un montón de gente reunida en un lugar. Al parecer acababa de ocurrir un asesinato en una tienda de sombreros. “¿Quién habrá hecho algo tan horrible?” No quisiste acercarte mucho. Seguiste tu camino y llegaste a un cruce de cuatro calles.
- ¿Qué hacemos aquí, Alpha? - Preguntó la plumífera, quien se limitó a preguntar aprovechando la oportunidad de que no había mucha gente cerca.
- Tengo algo en mente. Aquí venden las mejores telas del North blue. Necesito un material para completar uno de mis trabajos.
- Espero que valga la pena. - Dijo ella mostrandose totalemente aburrida.
- Lo valdrá.
Es normal, este lugar ahora era territorio del gobierno mundial. No querías bajar la guardia. No querías ser identificado con nadie que pudiera causarte algún tipo de problema. Al menos para ti, tener problemas en un Blue no merece mucho la pena. Muy poco que sacar de una situación así.
Además, de ser descubierto, probablemente las alarmas salten y te toque defenderte. Y tú mejor que nadie sabe lo que ocurre cuando eso pasa.
- Es un día maravilloso ¿ No lo crees, Suzaku? - Ella solo se limita a sentir con la cabeza. Logi y Thor se encuentran cerca de ti. Moviéndose entre las sombras de los callejones y edificios vigilando los alrededores. Tú tan solo te limitaste a llegar a donde conociste a tu maestra por primera vez, en el área del mercado.
-Muy poco de aquí ha cambiado. - Dijiste para ti mismo. Te pareció ver un montón de gente reunida en un lugar. Al parecer acababa de ocurrir un asesinato en una tienda de sombreros. “¿Quién habrá hecho algo tan horrible?” No quisiste acercarte mucho. Seguiste tu camino y llegaste a un cruce de cuatro calles.
- ¿Qué hacemos aquí, Alpha? - Preguntó la plumífera, quien se limitó a preguntar aprovechando la oportunidad de que no había mucha gente cerca.
- Tengo algo en mente. Aquí venden las mejores telas del North blue. Necesito un material para completar uno de mis trabajos.
- Espero que valga la pena. - Dijo ella mostrandose totalemente aburrida.
- Lo valdrá.
Definitivamente lo del sombrero no había salido del todo bien, y ahora me encontraba hasta algo triste por ello. Lo bien que me hubiera quedado un buen sombrero de ala ancha con purpurina y algunas piedras preciosas en el. Bueno, no se podía tener todo en esta vida siempre, pero al menos me alegré al ver que había brotado de mi mente, o al menos de una de ellas una idea que me gustaba bastante.
-Si te ha salido mal lo del sombrero ¿ Porqué no un traje? Siempre vas con el mismo y así no luces.
-Si, pero esta vez no mates al sastre por favor.
-Y paga las telas al menos...se algo civilizado por favor.
-Si ilgi civilizidi mimimi....sois un muermo, pero vale, trataré de sacar mi mejor sonrisa y solicitar que me hagan un traje. - Dije mientras caminaba hacia una tienda que parecía ser una sastrería, allí de seguro venderían telas y me podrían confeccionar algo a mi altura, y si no bueno....me puedo marcar un sombrerero nuevamente.
Fue entonces cuando en aquel cruce, de todas las personas que había pululando por la zona, una llamó mi atención especialmente, lanzando un gran grito en mitad de la calle.
-¡UN POLLO GIGANTE!- dije todo ilusionado mientras me acercaba a aquel ser, y a su lado había un tipo. Debía ser el dueño, al cual obviamente me dirigí, todavía manteniendo mi énfasis- Oye ¿ es tuyo? ¿ Donde lo conseguiste?¿ Donde puedo encontrar uno?¿ Va a pilas o es es eléctrico?
-Idiota no lo asustes, preséntate.
"Oh cierto". Así que le cogí la mano a aquel chico y moviédola hacia arriba y abajo rápidamente le dije- ¡Hola, tu no me conoces, pero ahora si , me llamo Estéfano!, hechas las presentaciones, ¿de donde sacaste este bicho tan bonito?
*Facepalm dentro mi cabeza*
Durante todo aquello, la gente se nos había quedando mirando con cara perpleja, confusa y hasta con pena por aquel hombre que había sido abordado por el payaso. Fue entonces cuando un hombre de la multitud se dio cuenta de me conocía...y dioses...yo también le conocía a él.
-¿Naipe?.
Me quedé quieto como un muerto, y lentamente fui girando la cabeza hasta mirar a aquel tipo mientras le decía.
-Ohhh....ya decía yo que esa voz me sonaba de algo...
No pretendía que nadie supiera lo que estaba pasando, ni siquiera aquel tipo del pollo. Yo conocía a ese tipo y él me conocía a mi, y la verdad, para mi era un golpe de suerte encontrármelo...no tanto para él.
-Si te ha salido mal lo del sombrero ¿ Porqué no un traje? Siempre vas con el mismo y así no luces.
-Si, pero esta vez no mates al sastre por favor.
-Y paga las telas al menos...se algo civilizado por favor.
-Si ilgi civilizidi mimimi....sois un muermo, pero vale, trataré de sacar mi mejor sonrisa y solicitar que me hagan un traje. - Dije mientras caminaba hacia una tienda que parecía ser una sastrería, allí de seguro venderían telas y me podrían confeccionar algo a mi altura, y si no bueno....me puedo marcar un sombrerero nuevamente.
Fue entonces cuando en aquel cruce, de todas las personas que había pululando por la zona, una llamó mi atención especialmente, lanzando un gran grito en mitad de la calle.
-¡UN POLLO GIGANTE!- dije todo ilusionado mientras me acercaba a aquel ser, y a su lado había un tipo. Debía ser el dueño, al cual obviamente me dirigí, todavía manteniendo mi énfasis- Oye ¿ es tuyo? ¿ Donde lo conseguiste?¿ Donde puedo encontrar uno?¿ Va a pilas o es es eléctrico?
-Idiota no lo asustes, preséntate.
"Oh cierto". Así que le cogí la mano a aquel chico y moviédola hacia arriba y abajo rápidamente le dije- ¡Hola, tu no me conoces, pero ahora si , me llamo Estéfano!, hechas las presentaciones, ¿de donde sacaste este bicho tan bonito?
*Facepalm dentro mi cabeza*
Durante todo aquello, la gente se nos había quedando mirando con cara perpleja, confusa y hasta con pena por aquel hombre que había sido abordado por el payaso. Fue entonces cuando un hombre de la multitud se dio cuenta de me conocía...y dioses...yo también le conocía a él.
-¿Naipe?.
Me quedé quieto como un muerto, y lentamente fui girando la cabeza hasta mirar a aquel tipo mientras le decía.
-Ohhh....ya decía yo que esa voz me sonaba de algo...
No pretendía que nadie supiera lo que estaba pasando, ni siquiera aquel tipo del pollo. Yo conocía a ese tipo y él me conocía a mi, y la verdad, para mi era un golpe de suerte encontrármelo...no tanto para él.
Contenido patrocinado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|