Capitulo 3: La isla tenebrosa

Tras estar un rato tumbado a la espera de que Derek respondiera a mi sugerencia, la cual mi compañero Onizuka había apoyado me levanté espolzando la arena de mi traje pues no me agradaba la idea de que se me estropeara por la arena. Tras levantarme me acerqué a Onizuka y le dije

-Oye vamos a investigar pues no me parece buena idea quedarse quieto en medio de la playa no es la mejor idea-

Tras decirle eso a mi compañero me giro para ver como estaban las cosas por allí, en esto veo que a nuestra izquierda había un sendero, lo miré atento pues no era algo común un sedero como ese en los límites de una playa.

Harto de esperar la respuesta de ambos me dirigí hacía el sendero, era algo extraño notaba como si algo importante se ocultara tras ese sendero, no sabía como pero lo descubriría. Al llegar a la entrada del sendero me paré y pensé “Y si esto es una trampa de aquél sujeto... será mejor que vaya con cuidado”

Fue en ese momento cuando se me ocurrió una idea, de un salto subí a un árbol cercano y observé el sendero, a simple vista no tenía nada extraño pero algo me decía que no era buena idea avanzar solo por allí así que decidí esperar a mis compañeros. Mientras esperaba me apoyé en el árbol sentado en la rama pensando “Vamos chicos que os estoy esperando”

Todos se pusieron en posición y algunos se adelantaron, cogí a los restantes con la mano y los llevé hasta la playa, una vez allí dije:

-Bueno muchachos, mi acompañante se ha adelantado, tendré que encontrarle... id por otro camino.

Entonces me adentré en el bosque, arrancando árboles y tirándolos al suelo, haciendo que toda la tierra temblara, mientras cantaba:

-La lalala lalala soy un jardinero y esta isla es mi jardín... ¡jajaja!
Parecía un completo demente, y lo peor es que me lo estaba pasando bien.

Cuando Dromp comenzó a dejar a todos en la playa pude observar como todos se pusieron en posición y Sami nuestro capitán decidió irse por si solo por el bosque

tras eso escuche lo que dijo dromp.

-Bueno muchachos, mi acompañante se ha adelantado, tendré que encontrarle... id por otro camino.

Tras eso cuando todos se pusieron en camino tras pensarlo durante unos instantes decidí irme junto a Dromp, y corrí rápidamente mientras que esquivaba los arboles que dromp despejava del camino y los lanzaba por el aire cuando llege asta el,alcé la voz...

-¡Dromp voi contigoo grandullon!

dije mientras le oía contar muí alegre.

Todos habían partido ya y Altair se dignó a venir conmigo. Ya se había materializado en su poder de la akuma y ahora era mi turno e hice lo mismo. Me convertí totalmente en aire y fui a la direccion en la que creía que estaba el poblado. Pasé por delante de Altair para darle a entender qe me siguiera, si podía cojerme claro, ya que puedo ir a 300 km/h

Después de desahogarme con un pirata,nos informaron del reciente desembarco en el puerto y del ataque pirata.Tenía ganas de acción y al parecer mis compañeros del CP también tenían ganas de actuar,así que simplemente los seguí.Por una vez parecíamos un equipo.

Luego de que lo amenazara y le hiciera preguntas al extraño los miembros de la Cypher Pool hicieron lo mismo hasta que el tritón llamado Shinkai comenzó a amenazar al desconocido estaba a punto de saltar con el filo de mi espada en su cara pero de pronto esta desapareció de mis manos yendo a parar a manos de él, luego la clavo en un punto de un mapa mientras hablaba muchas cosas las cuales no me interesaron en lo mas mínimo hasta que mi espada izquierda desapareció y reapareció en sus manos al igual que un DDM, antes de que pudiese decir algo desapareció diciendo “Podéis llamarme La Sombra Mortal” uno de los miembros de la CP me dijo algo de q no fui lo suficientemente rápida mientras se reía o algo parecido estaba que trinaba de la ira una de mis espadas había desaparecido en manos de esa maldito desconocido, no paso mucho para que llegáramos al destino, mientras todos se movilizaban y hablaban yo pensaba en las mil y un maneras de torturar a ese maldito.
Una vez llegados a la isla saque la espada de la pared enfundándola nuevamente, mientras el tritón arrestaba a un pirata y vi como el nuevo de mi tripulación desaparecía con ayuda de su fruta, yo en cambio solo quería mi espada y la muerte de ese despreciable tipo no me importaba si era superior a mi o a los miembros de la CP, una vez atracado el barco me baje con calma y me dispuse a caminar hacia el barco pirata que se encontraba en el puerto para capturar a cada pirata que encontrase en el además de hundir ese barco en lo más profundo del océano solo para calmar un poco mi furia.

Mis compañeros finalmente desembarcaron y comenzamos a caminar. Pero me llamó la atención aquel barco pirata. Al parecer habían más piratas por allí y deberíamos de saldar cuentas con ellos, en otras palabras, apresarlos.

Entonces observé como la mujer de la Hermandad salía del barco. Gentilmente le tendí mi mano para ayudarla a pasar por la pasarela de desembarco. Su reacción me dejó asombrado...

Tras eso me aproximé a mis camaradas y los tres comenzamos a caminar. Realmente parecíamos una panda de colegas, aun teniendo en cuenta los problemas que habían entre Sinken y yo, lo cual no era un secreto, y rara vez un problema.

Tras ponerme junto a ellos me dirigí a mis compañeros mirando al frente.

- Bueno. ¿Por donde creeis que deberíamos de empezar? diría de separarnos pero en estos momento me encuentro incomunicado sin DDM. Y por poco que me guste viajar con Sinken voto por ir con él, no pienso dejarle solo a sus anchas para que se ponga a matar.

Después de bajar de la embarcación,Azumi como un buen caballero,le tendió la mano a la marine que estaba saliendo.Me sorprendió su reacción,sin duda alguna tenía carácter.

Pasé de ello y seguimos andando,hasta que Azumi comentó el plan de ataque:dividirnos no era un nbuen plan,pues no teníamos DDM,así que decidimos ir todos juntos.

Yo también voto por ir juntos,el poder hace la fuerza y juntos ni la mismísma banda de Sombrero de Paja podría con nosotros.

Animado por la unión del grupo me quedé sonriendo mientras que continuaba siguiendo a Azumi y a Sinken.

Seguía en direccion al poblado y oí a Altair decir que si sabía donde estaba el poblado. Mientras avanzabamos me recompuse en mi forma humana al lado de un árbol si teníamos que preguntar a alguien donde estaba el poblado mejor sería hacerlo en persona y no llamar la atención con las Akuma no mi. No sabía por donde se encontraba pero lo intuía.

Salí del barco de los agentes del gobierno, fuí levitando hasta llegar al barco pirata, allí pude ver un barco muy cuidado, parecía nuevo, pero en realidad se sabía que no lo era, ya que tenía una buena brecha en una de las puertas y en el suelo.

Estando en cubierta, creé unas corrientes de hidrógeno, eso me haría saber al instante si había alguna persona a bordo o el barco estaba solo. No había nadie, no había detectado a nadie en el barco, eso hizo que bajase del barco, materializándome en tierra firme.

Ya en tierra, voy directo hacia mi compañera y sin perder mucho el tiempo, ya que no nos sobraba, le dije:

-¿Nos separamos o vamos los tres juntos?

No me iba a mover de allí hasta que mi compañera me contestase,, miré a mi alrededor, los agentes se estaban marchando de la costa para adentrarse en la isla. Nosotros teníamos que hacer lo mismo.

Seguía mirando aquel lugar, árboles, arena, unos cuantos cangrejos en la orilla del mar, nada más, se podía ver a simple vista que en esta isla nadie vivía, pero podía equivocarme, cosa que no me gustaba nada.

Mi compañero Nathan despendio del barco por lo cual supuse que no habría nadie a bordo así que me disponía irme a la isla por mi misma pero de pronto me pregunto -¿Nos separamos o vamos los tres juntos? - yo sabía que no era conveniente que me metiera sola en la isla -Nos convendría ir juntos al menos nosotros dos si estás de acuerdo claro, vamos a ir por ese camino- dije señalando una entrada a un bosque justo al lado de él -una cosa no había nadie bordo del barco ¿Verdad?- pregunte mientras caminaba directo al camino con paso decidido, si él no me ayudaba no me interesaba estaba dispuesta a cumplir la misión por mi misma además de encontrar mi espada, Nathan no se movía pensé que me iba dejar sola cosa que poco me importaba -Vas a venir o me vas dejar sola-dije mientras echaba la cabeza para atrás y me desabrochaba la espada de la cintura y me la apoyaba contra el hombro derecho.

Permanecí en silencio atento a estos últimos acontecimientos, al parecer el almirante Luchs ha avisado también a los agentes del Cypher Pool, siempre venía bien tener apoyo.

La visita de un sujeto que se llamaba a sí mismo "La sombra mortal", o eso ponia en la nota que dejó en su partida tras arrebatar a Quinty una de sus preciadas espadas azules y un DDM a un agente. Se fué tal y como apareció: de la nada.

Desembarcamos en la isla dispuestos a dar caza al sujeto aquel y a cumplir nuestra misión. Quinty estaba a punto de marcharse cuando nathan la retuvo.

Bueno, ya veo que ya esta todo dicho, Cyprelporianos, no se si me conoceis, pero soy el Capitán Suspiro, vuestro compañero me ha identificado antes, tenemos dos misiones en comun, conseguir una de las Saijō Ō Wazamono, y la otra es la de dar caza al sujeto que se ha llevado la espada y el DDM.

Luego, -y me giré a Nathan y Quinty- Nathan, ve al barco y encontrarás en la cabina de telecomunicaciones, tras saber que en aquel barco no hay amenazas, podermos parti; ve al despacho que esta al lado de mi camarote, un armario grande a la derecha, abres la puerta derecha y encontrarás varios DDM, y coges uno para cada Cyprelporiano y uno para cada uno de nosotros, deja uno a Dirk en cubierta, para cuando se despierte. Una vez tengas todos, nos alcanzas y los repartes.

El resto, partamos.

y tal como dije eso me puse en marcha en dirección al centro de la isla, con la esperanza de encontrarnos pronto con algun pueblo o algo similar.

Habíamos llegado al final de nuestro camino y ya estabamos en el pueblo. Parecía costero y estaba dotado de un puerto. Si teníamos que hablar con alguien que lo haría Altair que ami no me gustaba demasiado hablar y menos con gente desconocida. Mientras andábamos por el pueblo me iba fijando minuciósamente en cada uno de lso edificios del pueblo, por si alguno me resultaba sospechoso.

Tras varios minutos caminando por las cloacas entré a la ciudadela pero como apestaba a cloacas nadie se me acercaba.Ya que necesitaba información decidí ir a algún sitio a lavarme por lo que empezé a caminar por la ciudadela. En mitad de la búsqueda pasé delante de la puerta de la ciudadela y,al verla, pensé

Seré imbécil.

Seguí con mi búsqueda y finalmente encontré un lavadero apartado dónde no había nadie. Me metí en el agua y me lavé todo lo bien que pude y luego salí para secarme y,puesto que hacía algo de frío, pasé algo de frío al estar mojado. Tras varios minutos mi ropa finalmente se secó y pude empezar a investigar aquella ciudadela que estaba metida en un sitio de lo más sospechoso. Empezé por ir a una taberna, ya que allí me encontraría con mucha gente que podría hablarme sobre el lugar. Al llegar a la taberna oí ruidos como si dentro se estuviese disputando una pelea pero entré de todos modos. Una vez dentro me acerqué al tabernero y le pregunté en voz alta

¿Podrías hablarme un poco sobre esta ciudadela?

Tras hacerle esta pregunta al tabernero toda la taberna se calló de repente, como si lo que quería saber era un secreto que no se podía desvelar. Pese a todo o que ocurría me senté y le pedí al tabernero algo de comer y un poco de sake. El tabernero me sirvió en silencio y empezé a comer mientras esperaba alguna respuesta a mi pregunta.

Tras un rato largo esperando a que mis compañeros aparecieran vi como Derek marchaba hacía el bote junto a Okami, supuse de ello que no se encontraba bien dado que antes de llegar lo vi muy agotado como si no durmiera. Esperé entonces a que apareciera Onizuka, un joven que se había unido al gremio recientemente, pero este no aparecía y no se le veía desde mi posición.

Con todo esto en mente bajé del árbol en el que estaba y empecé a caminar, por el camino lo vigilaba todo al mínimo detalle, no quería que por un despiste me cogieran desprevenido y por ello saliera mal parado. El camino era un sendero estrecho, cosa que dificultaba el tránsito de grandes números de personas, por lo que como mucho podrían pasar dos personas a la vez.

Por lo tanto solo debía de fijarme bien en que no me atacaran por la espalda ni por los laterales que era por donde había mas terreno y más formas de ocultarse, mientras vigilaba todo mi alrededor había una pregunta que me rondaba la cabeza, algo en lo que no podía evitar pensar esa pregunta era “¿Quién era la Sombra Mortal y por qué nos ayudaba?”

Todo estaba muy tranquilo, demasiado para mi gusto, de mi poca experiencia en los mares la gran tranquilidad reinante era presagio de algo problemático. Mientras caminaba otra pregunta cruzó mi mente “¿Que hacía aquél sendero al borde de la playa y a donde llevaba?”.

Luego del descenso del barco yo estuve a punto de partir sola o con Nathan si es que quería, pero mi capitán apareció y después de no haber dicho nada durante un rato le revelo la misión a los de la Cypher Pool y comenzó a dictarle ordenes al probé de Nathan que bien confundido debía de estar, me di media vuelta a la vez que encendía un cigarro y me acercaba al pequeño grupo que se dirigía al centro de la isla.
Un extraño hombre apareció reclamando al “pirata”, que al parecer no lo era, que habían arrestado los de la Cypher Pool al parecer lo habían liberado porque era un trabajador del muelle, yo me acerque al pequeño grupo que ya había decido ir en grupo, por mi estaba bien mientras encontrase al ladrón de mi espada, para esas alturas la misión la teníamos más que cumplida solo era recuperar una simple espada que se encontraba en esa misma isla –Una pregunta señor, tendría idea de la ubicación de una Saijō Ō Wazamono que se encontraría en esta misma isla- le dije al hombre que vino a buscar al trabajador, al parecer no me había escuchado ya que no se dio vuelta ni nada por el estilo, ya un poco más calmada por la pérdida de mi espada –Perdón Azumi por no aceptar tu ayuda en el desembarco- le dije al miembro de la Cypher Pool del cual no acepte su ayuda -Estaba un poco enojada por la pérdida de mi espada.

Uracha vino conmigo, ¡perfecto! Menos ameno se haría el viaje... ahora lo que quería era ir al pueblo. Alcé un poco la mirada y lo pude ver de lejos... pero estos árboles... estos árboles me tenían enfadado.

-Agárrate a mi Uracha. -Le dije muy serio.

Entonces desenfundé a Ashura y la incrusté en la tierra, la moví rápidamente y cuando la saqué estaba en llamas y ardiendo. Empecé a pegar cortes a aquel frondoso bosque, quemándolo casi entero...

-Bueeeeeeeeeeeno, ahora el camino es más llano. -Dije mientras avanzaba y a la vez iba quemando el bosque.

Pasó un buen rato y al final llegué al pueblo y ande hasta la plaza.

-¿Ahora donde vamos Uracha? -Le pregunté animado a mi acompañante.