¡10 años en activo! Hace ya 10 años que esta comunidad, todavía más antigua, encontró su lugar en OPD. Los tiempos han cambiado y los usuarios más antiguos han dado paso a las nuevas generaciones que hoy rolean, pero siempre con el mismo espíritu que nos vio nacer: Construir juntos la historia más grande jamás contada. Da igual si acabas de llegar o llevas una vida; si te quedas o te vas: Gracias por hacer de este foro un lugar mejor.
27/02La actualización ha terminado con éxito casi completo. Quedan cosas por pulir, pero en breves se solventarán.
27/02Hemos tenido un pequeño problema con las afiliaciones al cambiar de skin. Rogamos comprensión y un poco de paciencia.
27/02La lotería ha terminado. Ya no se pueden intercambiar más premios por este evento; gracias a todos por participar.
Búsquedas
Últimos Temas
Últimos temas
¿Donde está mi superior? [Pasado]Ayer a las 23:29Elyria Priscraft
Nuevos negocios [Privado Alpha]Ayer a las 21:46Hikari
Regalos de mi caja fuerte. rebalanceo. Ayer a las 18:51Freites D. Alpha
El oasis de la oración [Priv. Grimm]Vie 26 Abr 2024 - 16:30Jaldabaoth D. Caprino
Creación de frutas del diabloVie 26 Abr 2024 - 14:37El Gremio OPD
El zoológico del Dino pt 1Vie 26 Abr 2024 - 13:51El Gremio OPD
Petición de moderación de técnicasVie 26 Abr 2024 - 13:33El Gremio OPD
Sello explosivo, la trampa ninja IIIVie 26 Abr 2024 - 11:37Okada Rokuro
Siguiente ronda


Ir abajo
Dretch
Dretch
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 16:34}

Entre ambos agentes lograron neutralizar una buena parte de los proyectiles que amenazaban al Espíritu del Condoriano. Aunque en un principio el agente dudó de que el iniciado estuviera en sus cabales al situarse frente a la trayectoria de los proyectiles, en seguida se percató de que Shintaro era menos estúpido de lo que a primera vista aparentaba. No sabría decir que era concretamente lo que había hecho, pero juraría que le había escuchado gritar un par de palabras sin demasiado sentido para el joven búho. Un escalofrió recorrió su espalda al imaginárselo en el más sutil de los sigilos, mientras les gritaba a viva voz a sus rivales sus intenciones; si no les mataba su ataque, probablemente lo haría el susto. Sin embargo, pese a su eficiente gestión de la crisis, ninguna señal le hizo presagiar lo que ocurriría en los siguientes minutos.

Los yayos se pusieron manos a la obra, a paso lento pero constante y el velero comenzó a moverse. A moverse de una forma que el agente jamás creería que podía moverse un barco. Justo cuando creía que él había dado toda una lección magistral sobre técnica y autocontrol, el agente recibió la que probablemente fuese la mayor lección de humildad de su vida. La perplejidad de lo que acababa de suceder lo había dejado boquiabierto. Un pequeño anciano comenzó a hablar, justificando así que lo que acababa de suceder había sido obra de la veterana tripulación y lo que decía, iba más allá de una simple salida de tono, casi parecía como si alguien les hubiese retado a hacerlo. Desde luego, una cosa había quedado clara, la defensa del navío nunca había estado en sus manos.

Al norteño le habría gustado felicitar al anciano y a la tripulación por su maniobra, pero en seguida se percató de lo estúpido que resultaría decirle a un vicealmirante un “Buen trabajo” siendo él como era, un simple agente secreto.

- Siempre confié – fue lo único que logró musitar, antes de ir directo hacia el lugar en el que se encontraba Ellie y la comida. Aunque no cogió ninguno de los platos que la tripulación había dispuesto para sus invitados.

De alguna manera que no sabría cómo explicar, Dretch se sentía mucho mejor. Casi parecía como si, el mero hecho de entrar en acción, hubiese dejado en un segundo plano todas las preocupaciones que hasta aquel entonces habían estado atormentándole. Cínico, reservado, serio e incluso soberbio… aquellos eran adjetivos que fácilmente podían haberle encasillado aquella noche y, sin embargo, eran rasgos que jamás le habrían definido en un día cualquiera. Siempre que le habían encargado algo importante había encontrado el modo de meter la pata y echarlo a perder, por difícil o rebuscado que este pudiese ser. Por ello, el miedo a que un escenario como el que padeció en Gray Rock volviese a repetirse había coaccionado cada una de sus decisiones desde que volvió a pisar suelo norteño y, hasta aquel entonces, no había sido consciente.

- Tenemos que hablar – puntualizó, una vez que te todo el grupo se hubiera reunido en torno a los platillos de comida y comentado algunas de las cosas que acababan de suceder – Prefiero ser honesto y quitarme esta losa de encima antes de que acabe por afectaros aún más. Esto es difícil para mí, así que espero que lo tengáis en cuanta a la hora de juzgar todas las decisiones que he tenido que tomar hasta ahora – previno, dedicándoles una mirada a ambos iniciados de la Karasu – La última vez que tuve a más de dos personas a mi cargo, las cosas no salieron como a mí me hubiera gustado. Yo acabé gravemente herido y la otra, la otra no tuvo tanta suerte. En según qué circunstancias, no tengo la experiencia o la sangre fría necesaria para dar por terminada una misión y ese tipo de situaciones hacen que, con más frecuencia de la que a mí me gustaría, ponga en peligro mi vida y la de las personas me rodean sin ninguna necesidad. Me gustaría ser optimista y creer que al final de esta misión todos estaremos a salvo, pero me conozco y por mucho que me contenga llegará algún punto a lo largo de la noche en el que me veré obligado a poneros en peligro – confesó para, poco a poco, arremangarse su manga derecha y quitarse su guante de cuero, dejando al descubierto un antebrazo totalmente metálico y de un cuestionable color amarillo – Llegado el momento, no dejéis que mis errores se conviertan en vuestros errores.
Roland von Klauswitz
Mercenario Famoso
Roland von Klauswitz
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 16:58}

Kodama suspiró profundamente cuando por fin se hizo el silencio. No tenía necesidad, claro, pero era un gesto un tanto teatral que había adoptado. Como lo de carraspear para llamar la atención o quedarse muy quieto y callado cuando pillaba a alguien teniendo relaciones sexuales. Eso ocurría con bastante frecuencia en los buques de los marines, aunque el folleto de reclutamiento no lo contara. Pero no suspiraba por nada de eso. Estaba agradecido porque allí, sumergidos a no demasiada profundidad, los ruidos de la batalla les llegaban amortiguados en gran medida.

-Qué tranquilito se ha quedado todo, ¿eh?

No era la primera vez que navegaba bajo el mar, y suponía que muchos de sus hombres allí presentes también habrían tenido experiencias similares. Era posible que otros no hubiesen pasado nunca al Nuevo Mundo o que, y tuvo un leve escalofrío más mental que físico, hubiesen accedido a él por encima de la Red Line y a través de Tierra Santa. Kodama odiaba ese lugar desde la guerra, y lo que oía sobre los habitantes de esa ciudad le hacía detestarla aún más. Su primer día como almirante le explicaron, entre otras muchas cosas, que tendría que responder si alguien ponía la mano encima de un Noble Mundial, a lo que el Roble se echó a reír creyendo que no iba en serio. Creía recordar que una vez le llamaron por eso, pero se quitó el uniforme y se escondió en el jardín en forma de árbol para que le dejasen en paz.

-Bueno, ¿estamos todos bien? ¿Heridas? ¿Mareos? ¿Alguien quiere un té? Traedme mi mesita, haced el favor -pidió con educación.

En lo que los escasos enemigos que aún deambulaban por su cubierta eran reducidos eficazmente, alguien fue a cumplir su pequeño encargo. Cuando un recluta se la trajo, vio complacido que también le habían llevado sillas, una tetera, unas cuantas tazas y un pequeño cacharro que no sabía cómo se llamaba con el que hervir el agua. Arrancó un par de hojas de su copa mientras el agua se calentaba.

-Siempre llevan una mesa de té en los todos barcos -comentó como de pasada. Era una norma que instauró él mismo, porque le gustaba sentarse cuando tomaba el té. Un pequeño capricho-. ¿Alguien quiere? -Preparó unas cuantas tazas por si acaso.

Sí, realmente se estaba muy bien allí abajo.

-¡Oh! -de repente se acordó, tonto de él. ¡Si no se estaban moviendo!

Crear burbujas y controlarlas solía ser casi una única acción para él, pero era inevitable distraerse de vez en cuando. Sobre todo cuando estaba pendiente del diminuto chalado desnudo que cruzaba el mar en un extraño vehículo. Le habría preguntado a Naion si eso era normal en sus subordinados, pero prefirió no saberlo. Por mucho que le sorprendiera, la Marina estaba siempre llena de bichos raros.

En cualquier caso, comenzó a mover la burbuja. Era fácil manipular el jabón que él mismo creaba, sobre todo porque, en el agua, solo tenía que aplicar la fuerza equivalente a un empujoncito. Bueno, un empujoncito grande. De todos modos, sin necesidad de sacar remos a través de la pompa, disfrutarían de un apacible descanso tras solo unos minutos de combate. ¿Qué más podían pedir?

-Ah, sí. ¿A alguien le sobra una espada?

Cosas:
Rainbow662
Supernova
Rainbow662
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 17:44}

-Vale... Eso es raro.

Arribor no tenía lo que podría calificarse como una gran experiencia con cosas voladoras. Su barco podía desplegar un globo aerostático que daba para unas cuantas horas de vuelo, y una vez lo había aparcado en un artefacto flotante del tamaño de un castillo. También había sido arrastrado por pájaros, le cayó encima una isla del cielo y tenía el hobby de saltar al vacío desde lugares espeluznantemente altos. Ah, y una vez fue disparado por un cañón de circo y voló varias millas a través del East Blue. Pero nada parecido a lo que tenía frente a su ojo.

-Oye -le dijo a Zack-, ¿tú también lo ves?

Si estaba alucinando, era una de las cosas más raras que nunca había visto. Ni siquiera los endiablados brebajes que salían de la cocina de los Neus le habían afectado tanto. Es decir, una cosa era ver un vehículo volador, de esos había cada vez más. E incluso el mono tenía cierta gracia. Pero, ¿los nunchakus? Todas esas cosas juntas eran, sencillamente, demasiado.

-¿Crees que ha elegido él el traje? Es que parece... un plátano.

El simio, que no parecía en absoluto incómodo llevando esa ropa tan apretada, parecía danzar con sus armas, moviéndolas a un lado y a otro como un auténtico maestro. No hizo ningún sonido, ni les tiró heces ni se rascó sus partes como solían hacer los monos. Se limitó a hacerles ese pequeño espectáculo de artes marciales como si tal cosa. En cierto momento sujetó los extremos colgantes de los nunchakus sobre sus hombros y se detuvo.

-¿Ahora tocan malabares? Igual si le damos un cacahuete o algo se...

Las armas se abrieron. Arribor se quedó boquiabierto al ver la multitud de pequeños cañones que les apuntaban, preparados para vomitar fuego contra ellos. Cuando las balas empezaron a volar, casi no podía creérselo. ¡El maldito mono les disparaba! No hizo amago de esquivar los proyectiles porque... en fin, porque solo eran balas, no eran nada que no pudiese aguantar. Las ametralladoras del mono serían como cosquillas que le servirían para desentumecer un poco los músculos. Solo esperaba que no tuviesen piojos...

Aun así, era molesto. Es decir, estaba en medio.

-Oye, Zack, ¿y si...? -le hizo un gesto con el que quería darle a entender que el mono era todo suyo. Ya había recibido una denuncia de una asociación proanimales que le vio atizar a Franklin, y de todos modos los simios y los roedores siempre habían estado enfrentados. Creó unas cuantas bases más para que pudiese moverse y echó un vistazo a su compañero/rehén -¿Qué tal vas, guaperas?
Ryuichi Ichiban
Cadete
Ryuichi Ichiban
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 18:41}

—Mambru se fue a la guerra —cantaba el cazarrecompensas mientras trepaba la cubierta del barco—, mire usted, mire usted que pena. No sé cuando vendrá. Do Re Mi Do Re Fa. Si viene por la pascua, mire usted... —llegó arriba y se puso de pie en la baranda.

—¡Tú! ¿Quién eres? ¿Qué quieres? ¿Por qué llevas el rabo al aire?

Braud alzó la vista. Espera... ¿la alzó? Sí, la alzó. Estaba tan poco acostumbrado a mirar hacia arriba que le dolía el cuello. Un hombre con uniforme marine se alzaba ante él, midiendo el doble de lo que él medía. ¡Claro! Cuando el ogro era pequeño escuchaba historias de gente mucho más grande que la gente de su clan. Gente a la que Braud deseaba encontrar y enfrentar. Sin embargo...

—Ah... Hola. Mi nombre es Braudbrüthgael Gledgeirbuf, cazarrecompensas. Quiero... no sé, no estar en el mar. Y es que la ropa me molestaba para nadar. Lo cierto es que así estoy más cómodo.

El cazador entonces chocó los puños y agitó su cuerpo para quitarse el agua de encima como un perro. Volvió a mirar al gigante, rascándose la nuca.

—¿De dónde eres? —preguntó—. Siempre he querido conocer gente tan grande como tú. Oye, ¿quieres pelear cuando todo esto termine? Así de colegueo, ya sabes. Cuando acabemos puedo invitarte a unas birras. ¿Bebes en barril? Yo sí, porque las jarras me son pequeñas, pero para ti el barril será pequeño también, ¿no? —se rió a carcajadas—. Ahora en serio, vengo a luchar y estoy de vuestro lado. ¿Dónde voy?
Galhard
Héroe de la marina
Galhard
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 19:02}

Todo había sucedido de una forma muy fugaz, demasiado fugaz, Galhard que apenas se había presentado al almirante Al presenció una caótica escena, un eufórico chico pelirrojo montado en una extraña maquina casi arrolla a los demás soldados que estaban alrededor del superior de la marina. Al parecer, la sorpresa era para todos pues hasta el mismo almirante pareció sorprendido por unos instantes. Al aceptó a un Galhard aún en shock por la escena, tomándolo por el cuello de la camisa y arrastrándole con rapidez.

Hacer de bulto es una de mis especialidades señor. Era lo que más solí- Fue interrumpido ante la velocidad del almirante.

Llegaron a un lugar donde varios de esos vehículos, de distintos colores, estaban estacionados. El almirante abstraído le soltó de repente encima de el que parecía ser el vehículo personal de él. Galhard en un intento de saber que era lo ocurrido se agarró a la parte trasera del vehículo del almirante que segundos después salio del lugar a gran velocidad en dirección hacía donde el alegre pelirrojo había tomado rumbo.

¡¡Saaaaacreeebleuuuu!!— El grito de estupor del marine no tardó en quedar ahogado entre el ruido del agua y el motor, mientras él mismo hacía un esfuerzo hercúleo por tal de mantenerse agarrado al trasto. "Si me suelto ahora no lo cuento" Pensaba angustiado Galhard, mientras daba lo mejor de sí para tratar de incorporarse mejor en el vehículo. Durante el forcejeo el vehículo se movió de forma brusca por unos instantes, los cuales el apurado marine pudo aprovechar para salir de su aprieto y encontrarse al almirante, el cual, estaba tocando el violín, mientras unos extraños pinchos de hielo estaban alrededor del lugar, actuando como roperos.

Ahg...Aff... Pensaba que no salía de esta... ¿Que demonios es todo esto?— Dijo entre jadeos, escuchó a Al saludar a alguien e instintivamente como pudo trató de hacer lo mismo mientras se tomaba la libertad de agarrarse a la chaqueta del almirante. —Buenas... noches...¿señor Kodama?...Creo que necesito un pequeño respiro...

Cuando el marine parecía que había salido de una situación horrible otra recién comenzaba a hornearse. Un fuerte ruido proveniente de detrás de ellos hizo que Galhard mirase hacía allí, podía ver a los otros miembros de lo que parecía ser la curiosa brigada. "Donde me he metido" Mas atrás de ellos un enorme rey marino con cara de perro emergía del hielo, esta debía ser la guinda del pastel.

¿Porque diablos no gitaneé un fusil cuando tuve ocasión...? Señor Al, lamento ser el capitán obvio pero tenemos un pequeño problema detrás..— Se podía decir que Galhard estaba al limite de acontecimientos inesperados pues su tono pasó de ser el de alguien nervioso y tímido al de alguien completamente resignado.

Galhard volvió a poner la vista al frente para encontrar a un corpulento pelirrojo y a una atractiva mujer de tez morena. Confuso pensó que se tratarían de más miembros de la brigada hasta que les escuchó hablar. Desde luego esto era empezar por lo alto. Por unos instantes las palabras de la mujer le pusieron en alerta por un intercambio de rehenes, desde luego él tenía la palabra prescindible en la cara, fuesen quienes fuesen esos dos extraños al menos la mujer mencionó hacer el intercambio por el movido pelirrojo, lo cual relajó a Galhard que hizo un pequeño suspiro de alivio.

Hey... ¿Alguien puede hacerme un resumen de todo esto? ¿Quienes son Señor Al? ¿Podemos hablar una vez nos aseguremos que el bicho que hay detrás no se toma un granizado con nosotros?— Dijo completamente confuso Galhard.

Al menos parecía que la cosa no se complicaría más, venían en son de paz, o eso parecía. ¿Que serían? ¿Piratas?. Por lo pronto parecían tener sentido común, solo quedaba encargarse del bicho que tenían detrás.







Ichizake
Maleante
Ichizake
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 19:22}

Gerald hizo un esfuerzo sobrehumano para no revelar su expresión. Dejó que la indignación, la ira y una leve humillación hirviesen en su interior. No había esperado eso, en absoluto. Había dado por hecho que todas las copias compartían la misma mente, o que al menos también ésta era copiada. Pero no. Al parecer no conservaban más que los escasos recuerdos de su ridículamente corta existencia. No quiso entrar a preguntarse cómo funcionaba aquella habilidad, solo quería destruirla. Adiós a su plan. Había recorrido todo ese camino para descubrir que Elrik no estaba allí, para quedarse sin acceso a su plan y para que ese prepotente y despreciable hijo de una hiena se pavonease en su cara como si fuese el amo del mundo.

La aparición de otra mujer, aparentemente una nueva invitada a aquel esperpento de reunión, no le cogió por sorpresa. No es que Gerald fuese alguien especialmente honorable, pero sí que cuidaba los detalles. Convertir su encuentro en una especie de picnic para toda la chusma que le apeteciese colarse allí le parecía muy poco formal y aún menos cortés, y la rabia por su propio fracaso tampoco ayudaba a  espolear su tolerancia.

¿Y qué era eso de la vida eterna? Más mamarrachadas sin sentido, otra pérdida de tiempo, seguro, otro tema de conversación para que los clones pudiesen dar rienda suelta a su conversación consigo mismo. Gerald no soportaba esa masturbatoria cháchara. De hecho, empezaba a no soportar nada de aquello. Habría podido controlar sus emociones de haber querido, manipularse a sí mismo para calmarse, pero, ¿qué motivo tenía? ¿Entrar en la torre para cumplir las metas de Elrik? ¿Dejarse manipular por él, bailar al son que unas burdas copias, meras masas de carne, le marcaban? No permitiría, ni en un millón de años, ser utilizado por un hombre que ni se presentaba ante él. Si Viktor Elrik creía que podía manipularle...

Respiró hondo y se relajó. Eliminó de sí mismo la furia y la indignación, malos compañeros en situaciones en las que convenía mantenerse frío. Se concedió el lujo de unos segundos de preparación. Aflojó la presión en la empuñadura de su espada, que agarraba con tanta fuerza que tenía los nudillos blancos. Dejó escapar el aire, desenvainó y su negro acero surcó el aire para decapitar a una o, sí podía, a ambas copias de Viktor Elrik.

Al mismo tiempo, su mente ya volaba hacia el agente Smith. Iba a arrancar todos los recuerdos que pudiese del proyecto Matriz al tiempo que inyectaba en su cabeza un pitido tan insoportablemente agudo que de haber sido audible habría reventado todas las copas del bar abarrotado de la carpa. Se acabaron las negociaciones y las contemplaciones. Mataría a las copias, al agente y al mafioso, así como a todo aquel que intentase detenerle. Entraría en la aguja, por supuesto, pero no sería por Elrik ni por nadie más. Lo que hubiera allí dentro, si tan valioso era, sería suyo. Y si Elrik tenía algún problema... bueno, no sería el primer rey con el que entraba en guerra.

Chupasangre y compis de reservado, ya sabéis:


A tener en cuenta:
Midorima Shintaro
Midorima Shintaro
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Vie 15 Feb 2019 - 20:00}

Entre su barrera y la ayuda de Dretch, habían protegido el barco. No tardó mucho en volver al barco una vez notó que todo estaba bajo control y que no era necesario que estuviera en el aire. Suspiró, se cruzó de brazos y se apoyó en la baranda del barco mientras veía el espectáculo que estaban haciendo Ellie y Giotto, no parecían tener muchos inconvenientes y no veía necesario que alguien los fuera a ayudar. Se quedó tranquilo y solo guardó silencio. Taylor y Simo estaban en el puesto de vigía, haciendo sus  cosas y dando apoyo de ser suficiente. Aunque, ¿qué tanto podrían hacer si los enemigos aún estaban lejos? Quizás subestimaba su habilidad de tirador y podían hacer tiros imposibles.

La sucesión de los siguientes eventos fue… Demasiado rápida. Se tuvo que agarrar con todas su fuerzas ante lo que estaba pasando. ¿El barco había derrapado? ¿En serio? No solo eso, también con la ayuda de los cañones se había impulsado de forma imposible, dado un giro y estrellándose en un barco, donde antes estaba Giotto haciendo de las suyas, partiéndolo por la mitad. Luego empezó a disparar con todos los cañones a bocajarro al otro, donde Ellie se había divertido momento antes, hundiéndolo en cuestión de segundos. ¿Qué les pasaba a esos ancianos? Pero una cosa había quedado claro, eran más de confiar de lo que pensaba y la defensa del navío nunca había supuesto un problema. El anciano vicealmirante dijo que iban a llegar a su destino, que siempre lo iba a hacer y, por un instante, se sintió lleno de confianza. Ya no parecía una misión tan suicida con esos vejetes dándoles algunas clases de humildad.

La comida llegó y él no tardó en agarrar un plato empezando a comer. Todo el grupo se había reunido, miró a Dretch unos segundos y casi parecía en otro mundo, como pensando en algo profundamente. Finalmente, habló. Se estaba confesando y dando los motivos por los que había actuado como lo había hecho. Al parecer, en algo similar, había perdido a una compañera. Él sabía lo mucho que dolía perder a alguien y podía empatizar con él, no había ninguna razón para crucificarlo, lo entendía muy bien y ahora quizás podía comprender mejor sus futuras decisiones. Mostró el resultado de su anterior batalla, había perdido el antebrazo y ahora usaba una prótesis. Suspiró con calma y solo siguió comiendo, por mucho que lo intentara, no sabía qué decir y tampoco sabía si era lo que buscaba Dretch. Así que optó por solo guardar silencio, a veces, era mejor no decir nada y en ese momento, le parecía lo idóneo.



La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 N9BDX50
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 9s2Dy7f

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 NGbQmHY
AEG93
Shichibukai
AEG93
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Sáb 16 Feb 2019 - 23:49}

El grupo de harapientos fanáticos vitoreaba con los brazos en alto. El discurso del enmascarado había logrado encender sus corazones, y daba la sensación de que ardían en deseos de entrar en la Aguja. En ese momento el camello que había llamado su atención inicialmente apareció, anunciando que la llegada a su objetivo era inminente. Y casi al mismo tiempo se unieron al grupo dos nuevos individuos con indumentarias casi tan extrañas como las de los allí presentes. El primero de ellos iba completamente cubierto por vendas, como si de una momia se tratase, y con un peculiar sombrero sobre su cabeza. Pero el que más llamó la atención de Dakuhebi fue el segundo, ataviado con una túnica de camuflaje y con los brazos también rodeados de vendas. Su rostro quedaba oculto por una siniestra máscara que, en ciertos aspectos, a Kirtash le recordaba pese a las notables diferencias a la que él mismo portaba. La diferencia estribaba en que él, a diferencia del resto de personas, realmente no la necesitaba. Podía hacer que sus facciones cambiasen por completo siempre que quisiera, pero la máscara de serpiente era parte del personaje. Dotaba de cierta personalidad al alcalde y, de hecho, le había otorgado su apodo.

Marles se acercó entonces a su posición para comentar que la mayoría de sus acólitos no estaban preparados para una incursión tan peligrosa como aquella, por lo que solo se llevarían consigo a sus tres mejores hombres. El comerciante se mostró de acuerdo, asintiendo con firmeza. Mejor pocos y bien preparados que muchos e inútiles, eso desde luego. Acto seguido decidió dirigirse a los recién llegados con el objetivo de averiguar qué hacían allí. Dio tres rápidos pasos hacia ellos y, con voz clara pero grave y amenazante, les preguntó:

- ¿Quiénes sois y qué intenciones tenéis?

Durante todo el tiempo que durase la conversación, Kirtash mantendría sus cinco sentidos alerta, fijándose en cada palabra, en cada gesto y en cada mínimo detalle del comportamiento de los dos recién llegados. Si alguno de los dos contestaba, el alcalde continuaría
diciéndoles:

- Yo también debo presentarme, aunque es posible que hayáis oído hablar de mí. Respondo al nombre de "Dakuhebi no" Kirtash, líder de la organización comercial Hebi no Kiba y alcalde electo de Water Seven. Y voy a comandar a estos hombres al interior de la Gran Aguja, buscando desentrañar sus secretos y encontrar la forma en la que mejor pueda servir a nuestros intereses. Debéis saber que, si pretendéis uniros a nosotros en este viaje, tendréis que acatar mis órdenes. La jerarquía debe quedar muy clara si queremos sobrevivir allí dentro, ya que la más mínima duda podría resultar letal. ¿Lo habéis entendido?

En caso de que su concienzuda observación le hiciese sospechar el más mínimo atisbo de peligro, usaría el Soru para cubrir en apenas un instante la distancia que le separaba de sus interlocutores y buscaría atravesar sus corazones con su dedo índice imbuido en Haki. Esperaba no tener que recurrir a medidas tan drásticas, pero de verse obligado a ello lo haría sin el menor instante de duda.

Si los dos nuevos aceptaban adentrarse en la Aguja bajo su mando, les llevaría junto a Marles y a los tres hombres elegidos por él a un rincón algo más apartado. Allí crearía seis vínculos telepáticos, uno con cada uno de ellos, y valiéndose de dicho canal de comunicación diría a los seis al mismo tiempo:

- No os asustéis al escuchar mi voz en vuestra cabeza. Una de las ventajas de que yo lidere este grupo es que en todo momento podremos estar comunicados a través de estos vínculos telepáticos que acabo de establecer con vosotros. De este modo ningún posible enemigo podrá saber lo que planeamos, y mientras no os alejéis en demasía de mí podréis utilizarlos para comentarme cualquier cosa que creáis necesaria.

Tras estas palabras dedicaría unos segundos a estudiar las reacciones de sus compañeros. Lo habitual era que la gente inicialmente se asustara, para pocos segundos después pasar simplemente a la sorpresa. En principio, y dado que él solo les había dado a conocer aquella parte de sus poderes mentales, no tendrían por qué sospechar que fuese capaz de leer sus pensamientos. Y de hecho en parte tendrían razón: telepatía y lectura de mentes eran dos cosas diferentes, la cara y la cruz de un poder que para él era único, aunque había oído que existían más telépatas que no eran capaces de acceder a las mentes de los demás salvo para la comunicación. De hecho, trataría de aprovechar aquella otra vertiente de su poder para adentrarse en los pensamientos de Marles y sus tres adeptos. Su objetivo no sería otro que intentar averiguar por qué ansiaban tan fervientemente llegar al corazón de la Aguja y, sobre todo, por qué habían exigido que esta no resultase dañada. Si lo lograba obtendría una valiosa información que seguramente le resultaría de gran utilidad, y si no... bueno, no perdería nada, pues ninguno de ellos tendría forma de saber que había intentado leerles la mente.

Finalmente, una vez llegasen a la Gran Aguja indicaría a su pequeño grupo que le siguieran e intentaría encontrar una entrada al interior de esta.

Resumen (Lance):

Cosas:



A Tener En Cuenta (Evento):
Marc Kiedis
Lobo de los 7 mares
Marc Kiedis
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 1:05}

- No te preocupes, lo tengo todo bajo control capi. - respondió un sonriente Marc cuando el pelirrojo le preguntó si necesaitaba ayuda con el timón. Y la verdad era que así era. El semigigante tal vez no fuese tan diestro como su capitán, capaz de las más increíbles virguerías, pero se manejaba con gran soltura incluso en aguas muy turbulentas.

La siguiente instrucción de Zane llegó tras divisar a lo lejos algo que el grandullón no alcanzó a ver a aquella distancia. Viró ligeramente la trayectoria de la embarcación y, una vez Therax hubo reducido la intensidad del viento, ralentizó el avance del navío hasta adecuarse a lo solicitado por su capitán. Entonces este explicó lo que ocurría. Al parecer el marine que había atrapado a Legim, y por tanto, precipitado los hechos acaecidos en Gray Rock unos meses atrás, se hallaba muy cerca de su posición. Por lo visto ahora era nada más y nada menos que uno de los tres Almirantes, y el pelirrojo tenía intención de parlamentar con él. El cocinero asintió, sonriente. No podía estar más de acuerdo con la decisión de su capitán. Muchísima gente estaba en peligro, y era momento de dejar atrás las diferencias entre la Marina y ellos por un tiempo para tratar de impedir que aquel mar entero acabase como el West Blue.

Finalmente el descamisetado y Nailah abandonaron volando el barco, dirigiéndose al encuentro del Almirante mientras Luka, no del todo conforme con el rumbo que había tomado la situación, saltaba al mar para nadar un rato y así tranquilizarse. Tras unos minutos, una llamada a través de un DDM fue el método usado por su capitán y la ladronzuela para transmitir al resto de la banda que quedaba temporalmente prohibido atacar a cualquier miembro de la Marina.

Marc, alegre, continuó dirigiendo el barco hacia la Gran Aguja mientras sonreía. Aquella aventura iba a ser realmente intensa, eso seguro. Muy pocas cosas podían conseguir que un Señor de la Piratería y un Almirante de la Marina firmasen una tregua en pos de un objetivo común, y aquella situación era una de ellas. El mundo necesitaba de todos ellos, y debían responder.

Resumen:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 BHfLPQ4

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 OdLLFTt

A Tener en Cuenta:
Kenzo Nakajima
Comandante
Kenzo Nakajima
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 1:23}

El plan del Almirante había salido, al parecer, a pedir de boca. El acorazado se hundió por completo en el mar sin que una solagota de agua fuese capaz de penetrar la gran burbuja creada por el árbol. En un principio simplemente descendieron, pero antes de que nadie pudiese empezar a preguntarse si aquello no habría sido una locura el oficial comenzó a hacer que la pompa se desplazase hacia delante, llevando la embarcación bajo las líneas de defensa enemigas.

Además, la otra gran ventaja era que los pocos asaltantes que seguían con vida se habían quedado aislados de sus compañeros, atrapados en un navío lleno de marines. El brazos largos continuó desplazándose por cubierta a gran velocidad y lanzando tajos a diestro y siniestro a los enemigos que aún quedaban en pie. Las hojas de Amida y Shinigami se hallaban ya teñidas de sangre, que las dotaba de un tono carmesí muy similar al de sus mangos.

El frenesí del combate poseía al espadachín. Si luchar le apasionaba, hacerlo con un objetivo lo hacía aún más. Y no había objetivo más noble y válido que acabar con criminales, delincuentes que no sentían el menor respeto por las leyes ni por las vidas ajenas. Así que se dejó llevar por sus instintos, tratando de terminar con el mayor número de enemigos posible. Incluso había cierto punto competitivo que le impulsaba a esforzarse más, a ser el marine que más asaltantes abatiese de cuantos se hallaban en el barco.

Finalmente, cuando entre él y el resto de sus compañeros se hubiesen encargado de todos los enemigos envainaría las espadas gemelas, guardándolas para rivales más dignos. Caminaría hasta la posición de Zuko, el líder de su Brigada, y se situaría a su izquierda. Una vez allí le miraría a los ojos, sonreiría y diría:

- Se acerca el momento, Comodoro. El destino del mundo está en juego y los Justice Riders debemos destacarnos entre todos los defensores de la justicia y la libertad. Yo estoy preparado.

Resumen:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Nb12NCA
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 KL8yDrd

A Tener en Cuenta:
Valar Morghul
Cazador Desconocido
Valar Morghul
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 1:25}

-Yo estoy sin barco- contesté a Valeria justo antes de ver por el rabillo del ojo como el mink felino recibía un poderoso puñetazo del gracioso perrito-. Parece que los peludos no nos darán mucha conversación ahora mismo -en ese momento me habría gustado acercarme algo más a la zona del combate para no perderme ni un sólo detalle de aquella batalla, pero dos enormes minks caninos se pusieron en medio con la clara intención de impedirnos ayudar al gatito.

El inicio de la pelea había llamado la atención de esa zona de la carpa y, como era de esperar en aquel ambiente, no habían tardado mucho en formar un circulo alrededor de los peludos contendientes mientras vitoreaban y animaban a ambos minks. Aunque había un pequeño grupo de sujetos que parecían mas pendientes de intentar abrir una misteriosa caja que de presenciar el fabuloso combate entre el perro y el gato, lo que llamó en extremo mi atención e hizo que una picara sonrisa apareciese en mis labios fugazmente, desapareciendo de ellos mientras me despedía de Valeria y Max con un simple "Ahora vengo".

-Grandullones- avisé a los enormes minks mientras me acercaba a ellos con cara de preocupación-. Siento molestaros y puede que no sea de mi incumbencia, pero no me sentiría bien si no os dijese que esos tipos de ahí, los que están con esa caja, han estado hablando de vengarse de ese chucho asqueroso- inicié con un tono de preocupación y sinceridad, señalando con la cabeza al pequeño grupo que seguía concentrado con la misteriosa caja y dejando una breve pausa para que se fijasen-. Por lo que me han contado, ese grupo se dedica a la caza de minks, y su líder es tan repulsivo que arranca sus pieles y las usa como alfombras en sus barcos-una nueva pausa breve para dar efecto a mis palabras y que la sangre de aquellas bestias empezase a calentarse por lo que oían-. No me extrañaría que atacasen a vuestro jefe por la espalda en cuanto termine su combate, pero no creo que tengan nada que hacer ante vosotros si les atacáis ahora y, todo sea dicho, así podréis ganar unos cuantos puntos con vuestro jefe- concluí mientras les guiñaba el ojo derecho a modo de complicidad justo antes de darles la espalda y dirigirme de vuelta al lado de mis dos compañeros.

Si mis venenosas palabras surtían efecto, no sólo disfrutaría de un combate extra, también podría hacerme con la caja que llamaba tanto la atención de ese misterioso grupo y que les hacía ignorar el espectáculo que estaban dando los dos minks.

-Al león le dije lo que necesitaba oir, Valeria- respondí a la pregunta que me había hecho anteriormente mientras le dedicaba una gran sonrisa al mismo tiempo que me balanceaba inocentemente sobre mis talones.

resumen (Valeria, Dijon, Max, Zay:
Erik Carter
Cadete
Erik Carter
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 4:30}

Primero embestir, luego ser embestidos y ahora bucear, el día estaba lleno de sorpresas cada vez mejores, y Erik, aunque sorprendido, estaba totalmente ansioso por continuar, exultante de felicidad.

El Almirante Kodama ofreció un té. ¿De donde había salido esa mesa y esas sillas? Debía de haberse distraído unos instantes con el navío sumergido y tal. En cualquier caso, no había mucho más que hacer, dado que los demás marines habían asesinado a los demás criminales al abordaje, así que el joven, intentando no pensar en ese último hecho, se dejó caer cerca de la mesa.

-Si no le molesta, almirante Kodama, estaría encantado de compartir con usted una taza de té. -Erik no era bueno con las formalidades, pero aquel extraño e imponente ser era uno de los almirantes, muy famoso y poderoso. Aun así, la emoción de encontrarse junto a una leyenda le hacía temblar. -Mi nombre es Erik, me alisté hace una semana y este ha sido mi primer despliegue oficial, me alegro de poder trabajar con usted para proteger mi tierra, señor.

Tras rematar la presentación con una reverencia más o menos formal, Erik dejó su mochila a un lado y se sentó. La mochila tenía todo lo que podría ser útil de sus pertenencias en aquel viaje: la bola de pinchos, la muda normal, las herramientas de herrero portátiles, 5 kilos de dinamita, el uniforme de la marina... Espera ¿¡Qué!? En qué momento se había quitado el uniforme y lo había guardado en la mochila. Se miró y, efectivamente, confirmó que estaba ataviado con el uniforme de su equipo fabricado por él mismo, de una aleación más resistente de lo normal. Olvidando por completo los explosivos de su bolsa, la dejó caer como si estuviera vacía a su lado y se acomodó en la silla, deseando que no le dijeran nada por el atuendo, y esperó la respuesta de Kodama... y el té.

Resumen:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Imagen10

Ficha de Erik

En tierra de hienas, aprende a reír.
Bizvan
Teniente Comandante
Bizvan
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 8:32}

Más marines se unían a la lucha contra los criminales. No parecía que fuese a ser un problema la presencia de estos sujetos, de hecho hasta se podría decir que tenían mala suerte por encontrarse en este lugar.

El agua comenzaba a colarse en el barco, por lo que dejé lo que estaba haciendo y me acerqué hasta la zona dañada. Mis esqueletos intentaban realizar reparaciones básicas, las cuales eran insuficientes para frenar el ingreso del agua.

* Cuando salgamos de esto voy a comprobar si es posible que aprendan lo básico de las profesiones *habían muchas cosas que necesitaba poner a prueba, pero la capacidad de evolución de estos chicos era bastante lento y solo podía poner a prueba mis experimentos cada cierto tiempo.

Antes de comenzar a intentar hacer algo con el daño, una enorme burbuja comenzó a cubrir al barco, solucionando así el problema del agua y el abordaje de enemigos. Sin embargo comenzó a sumergirse.

Esta era la primera vez que veía algo así, era una mezcla de fascinación y miedo. No quería imaginar que podía ocurrir si la burbuja estallaba por la presión del agua o por algún otro factor. No tenía idea de cómo funcionaba esta burbuja, que tanta resistencia tenía, como nos moveríamos o cuanto tiempo de oxigeno teníamos. Probablemente su creador sabía qué hacer con todos esas cuestiones y solo me estaba preocupando sin necesidad.

No parecía haber problema por los pocos criminales que quedaban, el resto se estaba encargando de ellos con facilidad.

- Joh, bueno, supongo que no queda nada por hacer… Muhhh, quedan pocos o casi nada de enemigos, vayan y enfréntense a los enemigos que se encuentren, si encuentran algún objeto interesante tómenlo… siempre y cuando sea de un enemigo muerto.

Los esqueletos obedecieron y se marcharon.

Por mi parte comencé a buscar a Tobias, prefería estar cerca suyo en caso de que la burbuja reventara. No quería pensar que algo así sucediera, pero era mejor estar listo para ayudar a mi compañero a salir del agua.

* Muhh, donde se habrá metido ese chico Erik, parece bastante animado, solo espero no se meta en problemas futuros por ello mismo. *lo más probable es que no hubiese necesidad de preocuparme, Erik debería saber cuidarse y esa confianza suya debía ser un reflejo de ello.

Mientras caminaba, noté al almirante ofrecer té y cerca suyo a Erik.

* Al menos está bien.

Un toque en mi hombro me detuvo y al girarme vi a Zero llevando en sus brazos un par de espadas comunes y corrientes. A pesar de que todos mis esqueletos ocultaban su apariencia con el mismo disfraz, cada uno llevaba un arma distinta en su cintura, por ello era fácil saber quien era quien.

El enmascarado la extendió las armas esperando que las tomara, justo me pareció escuchar que el almirante preguntaba si alguien tenía una de sobra.

- Llevasela al hombre árbol que está ahí. -señale con un movimiento de mi cabeza.- No olvides realizar el saludo.

Nuevamente el esqueleto obedeció y se encaminó hacia la mesa.

Tenía curiosidad por saber si mi chico sería sería capaz de entregar el arma o su presencia pasaría desapercibida por el hecho de no poder hablar o si el arma común y corriente era capaz de cumplir con el objetivo del… ¿Hombre?… ¿Árbol?.
Resumen :
.


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Pl65rt10
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Xu6QWVF
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 343rak1

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 NGbQmHY
Kaito Takumi
Ciudadano
Kaito Takumi
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 10:53}

Antes de el caótico discurso entre los dos clones, o más bien entremedio, aparecieron nuevos personajes en la escena. El hombre y la mujer, demasiado cerca de la normalidad y belleza canónicas, no suscitaron gran interés en la ocupada mente de Kaito… pero la enorme sombra que iba detrás de ellos, sí.

El coloso de piel de beluga había sido construido con bloques duros y angulosos, y como un monstruo desproporcionado de asedio, solo podía crear una única emoción en el ningyo. Por supuesto, expresar aquella emoción con una única palabra queda reservado a lenguas perdidas con muchas “k” y términos acabados en nasales “-en”, por lo que solo podemos acercarnos a ella definiéndola como una admiración con partes de envidia, curiosidad y asombro mezcladas con una pizca de un diminuto rechazo inicial —el mismo que tenía por el cuadrangular y aburrido minimalismo— cuyo sabor no tardó en perderse en la mezcla para aportar nada más que un sutil matiz.

Dejando los zapatos bajo el sillón de William mientras terminaban los farfulleos clónicos y finalmente los Viktor Elrik daban una interesante respuesta a los recién llegados y una mediocre a los ya presentes, Kaito fue retrocediendo sigilosamente para acercarse a ver mejor al pálido semigigante. ¿Sería aquel hermoso engendro, bello solo para él, el portador de la vida eterna que había mencionado la mujer?

Entonces las mediocres contestaciones que dieron a los miembros de Nameless, que no eran más que una absoluta pérdida de tiempo, pusieron en marcha unos acontecimientos que pocos podrían parar. El pelirrojo se alegraría entonces de que sus muchas patas hubiesen dado los primeros pasos para alejarse de la escena. Pasos que no tardarían en convertirse en una carrera si las cosas seguían el torcido camino que acababa de dar comienzo.

Rápidamente razonó que podría marcharse de allí con la excusa de llamar a Lysbeth, que acababa de marcharse, para que fuese ella quien pusiese fin al asunto. Si había podido desviar un rayo, estaba bastante seguro que podía equilibrar la balanza en el asunto.

Pero… algo allí no le dejaría marcharse tan rápidamente. Quería ver qué les pasaba a las copias de Elrik y en qué se transformaban estas si llegaban a recibir el filo del caballero. También tendría curiosidad por la razón por la que el agente gubernamental estuviese sufriendo, si es que lo hacía, pero para aquello aún no le habían dado tiempo para trazar teorías.

Para el inquisitivo gyojin aquellos segundos de retraso compensaban sin duda alguna la cosecha de alguna que otra respuesta.

Resumen del reservado Nameless + Ellaonoonoonoosíonora.:


Ficha del pulpo

Cosas:



CORREDORES (No me deja poner img)

El autor de este mensaje ha sido baneado del foro - Ver el mensaje

Hayden Ashworth
Hayden Ashworth
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 16:44}

El comodoro terminó de atar al último de los criminales que habían quedado vivos y se habían rendido, justo después de dar la orden de cesar el ataque tras su rendición. Entonces se irguió, mirando al exterior de la burbuja. Podía verse el mar y varios peces que se acercaban curiosos a aquella bolsa de aire que el almirante había generado. Nunca había visto el mar desde esa posición y lo cierto es que lo empezaba a maravillar... aunque se estuviese poniendo algo nervioso debido a su miedo a ahogarse. Sin embargo, dicho miedo fue disimulado.

—No olvides nuestro propósito, sargento —le contestó el dragón a Kenzo—. Protegemos vidas y recordamos al mundo la existencia de la justicia. ¡Buen trabajo, chicos! —dijo al final refiriéndose a todo el mundo.

Se dirigió entonces al almirante, que se encontraba sentado en una mesita con varias tazas de té. Tras saludarle con el respeto que un superior merecía se sentó a su derecha y cogió una de las tazas, acercándola a su nariz para inspirar el aroma. El olor le recordó a su tío, a su tienda de té y a los hechos curiosos que solía contarle sobre las hojas para hacer té más exóticas. Dio un trago de aquella nostalgia.

—Me temo que esta relajación durará poco, almirante. Sin embargo... agradezco su tranquilidad. Mis hombres están nerviosos, pues para algunos de ellos... esta es su primera guerra. Normalmente mi presencia entre ellos les da valor suficiente, pero esto me sobrepasa. Su presencia aquí, almirante... Les inspira. Bueno... ¿Cual es el plan ahora?
Eric Zor-El
Comodoro
Eric Zor-El
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 16:57}

La debilidad de los criminales que tenía como contrincante era notable. Eran muy numerosos, pero ninguno de ellos tenía la suficiente resistencia como para aguantar los contundentes golpes del salvaje que, por su parte, volví a recibir miradas de desprecio por gran parte de los marines. Él no solía caer bien allí, es más, pocos eran los que verdaderamente le consideraban un marine que luchaba por el bien del gobierno mundial y sus países afiliados; por la paz en su tiempo.

Algo disgustado, se apoyó sobre el mástil central y sacó la pipa del interior de su poncho. La miró con nostalgia y miró al cielo. Se trataba de un regalo que le entregó su abuelo antes de morir, llevaba muchas generaciones en su familia, y poseerla le recordaba de donde venía y quien era. Era de madera de árbol milenario y tenía forma de lobo. Le echó dos tercios de tabaco picado y un tercio de una hierba que conseguía en algunas islas, cuya población era muy feliz cuando la consumía. Su olor el encantaba, y se sentía muy placentero cuando la fumaba. Encendió su interior y inhaló con fuerza, aguantando todo lo posible en el pecho y luego soltarlo de golpe. Observó como el barco descendía, sí, estaba descendiendo. ¿Cómo? No lo sabía, y tampoco tenía mucho interés. Seguramente fuera cosa de algún compañero al que desconocía.

Vislumbró al otro lado del barco a dos de sus compañeros, Zuko y Kenzo concretamente, aunque el mudito y los otros tres nuevos también estaban por allí. Con ellos se sentía cómodo, y no era juzgado por ser un extranjero que había escalado, sin saber muy bien cómo, hasta el rango de comandante. Caminó lentamente hasta ellos, y vio que también estaba el hombre-rama.

—E tatau i le tagata ona faia se faaiuga i taua. A leai, o le a amataina ai se iuga mo tagata —dijo en voz alta, con tono solemne—. En mi tierra solemos decir eso, que significa que el hombre ha de estar en paz con sus hermanos para no perecer en la eternidad. La vida es efímera, pero las guerras aceleran el proceso hasta la estinci, ostinci…

Eric se mantuvo callado hasta que un recluta, un joven que podría tener la edad de su hermano menor habló.

—¿Extinción, señor?

—Eso, extinción —le contestó con una sonrisa en el rostro.

—Y sí, almirante hombre-rama —dijo Eric—. Aceptaré un té si me lo ofrece. Nada mejor para entrar en sintonía con la madre naturaleza que beber algo procedente de la misma.




La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Nb12NCA

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 VLqhfJY
Ummak Zor-El
Guerrillero
Ummak Zor-El
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 18:03}

El shandian miró de arriba abajo al cadete mientras este le echaba la bronca por algo que claramente no había hecho, pues era evidente que Ummak no había roto nada. En cualquier caso, el motor, que así era como Skión había llamado a la caja negra que emitía ruido y vibraciones, era débil y tan solo era cuestión de tiempo que alguien lo derrotara y lo pusiera en su lugar. Es más, Ummak dudaba que no estuviera ya roto antes de que este posara sus manos sobre él. En cualquier caso, el guerrillero ignoró las palabras de pánico de su acompañante y se limitó a observar, mientras se acuclillaba en la parte delantera de la embarcación, como esta se aproximaba a toda velocidad hacia el costado de un enorme navío de guerra.

- Ya bastar de llorar, si no gustar riesgo ¿Por qué no haber quedado en barco-fortaleza? – inquirió, dedicándole una mirada intensa a la par que temeraria – Skión, hijo de Skeón, si alguna vez apreciar tu vida tú agarrar fuerte a balsa.

Paciente y sorprendentemente confiado, el shandian esperaría a que la lancha se aproximara a una distancia prudencial del navío para, empleando el filo de su Kamihageshii sobre la cubierta de su embarcación, extender su dial de nube para catapultarse e irrumpir sobre la cubierta del barco que había tenido la osadía de cruzarse en su camino. En el aire, aprovecharía para dividir su pelo en ocho largos mechones que tomarían tanto la apariencia como lo movimientos propios de las serpientes. Con esta técnica, el shandian esperaba ser capaz de amedrentar a cualquier marinero que pudiera plantarle cara, inmovilizándolos o incluso zarandeándolos sobre su cabeza. Sin embargo, todo aquello no sería más que una distracción ya que, su atentico plan sería facilitarle el paso a Skión. Con la lanza ancestral de su familia aun en sus manos, retraería el dial de nube oscilándolo de izquierda a derecha en sus manos, de tal forma que se formase un pequeño camino serpenteante desde el mar hasta la cubierta del navío que actuaría a modo de rampa. Si su plan surtía efecto, el shandian usaría sus mechones de pelo restantes para interceptar la lancha a mitad del salto y usarla a modo de vehículo de huida.


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 EJEzfyy
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 G1AFPgU
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 5K0STEQ
Julianna M. Shelley
Ciudadano
Julianna M. Shelley
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 18:49}

Por suerte o por pericia, todo salió bien. El cirujano parecía orgulloso y Jul, tras terminar de coser y vendar, fue a lavarse las manos por enésima vez. El agua caliente sobre la piel le hizo suspirar y relajarse. No se había dado cuenta de lo tensa que estaba, pero por suerte lo peor había pasado. Ahora sabía de lo que era capaz y no solo por intuición. Le había salvado la vida a un hombre...un hombre que habría muerto si ella no hubiera estado ahí. Oyó la voz de Adahír en su cabeza, dándole la enhorabuena. Se sonrojó un poquito, bastante orgullosa, pero antes de que pudiera replicar un ruido estridente se hizo paso en sus oídos.

Una alarma... ¡Los submarinos! Se giró solo para encontrarse con el cirujano, que la miraba bastante agitado. Atendió a sus palabras y se aferró a su nombre antes de echar a correr. Atravesó toda la enfermería y varios pasillos, solo para tropezar en una de las esquinas y caer al suelo. Tosiendo, sacó una botellita de agua de su mochila y bebió hasta que logró calmarse. Con las manos temblorosas buscó hasta encontrar un pequeño pastillero. Cogió una dosis y la tragó sin pensar. Durante un par de segundos, todo a su alrededor se volvió borroso, pero en seguida notó una mano en su hombro y pudo levantarse. Adahír la sujetaba y junto a él atravesó la distancia que la separaba de los submarinos.

Si nadie se lo impedía, se metería en el primero que viera y se abrocharía el cinturón bien agarrada a su bolso. Si alguien se colocaba entre ella y su objetivo repetiría el nombre del cirujano y esperaría que eso bastara como ticket de ida. No quedaba tiempo y no estaba dispuesta a quedarse atrás. Ayudaría todo lo que hiciera falta, a costa de lo que fuera necesario.
Aki D. Arlia
Terror de los siete mares
Aki D. Arlia
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 20:11}

A su alrededor todo era un caos. Pasó al lado de toda clase de personas, por lo que pudo ver con el rabillo del ojo. La realidad era que no deseaba detenerse. Sabía que faltaba poco tiempo para entrar a la aguja y quería disfrutar de lo que bien podían ser sus últimos minutos de paz. No pensaba morir, pero no siempre podría controlar esa circunstancia. De momento, había otras personas muriendo.

Al otro lado de la carpa, en el mar, se había desatado el infierno. Los barcos de la marina y la revolución chocaban entre ellos, pero no eran los únicos ni los más cruentos. Frente a la aguja la batalla era despiadada y podía ver la sangre teñir las olas. El aire olía a pólvora y los cañonazos le zumbaban en los oídos. Suspirando, caminó hasta el límite de la plataforma y se sentó con cautela en donde le pareció que pasaría desapercibida. Se sintió tentada de acariciar el agua con los dedos, pero no quería mojarse. Todavía no. Y su niña, ¿estaría bien? ¿habría puesto el barco a salvo? Esperaba que si. La pobre hacía mucho por ella, seguro que agradecía las vacaciones. Se la imaginaba en la cubierta, repasando sus movimientos de esgrima y dibujando... ¿qué? Ahora no la tenía a ella para hacerle de modelo. Quizá le bastase con el recuerdo. Por lo menos, eso esperaba.

El pecho le vibraba. Algo recorría todo el lugar, lo llevaba haciendo unos minutos. No le costó discernir que provenía de la aguja, esa construcción demencial. ¿Quién necesitaba tanto espacio? ¿Quién necesitaba acabar con uno o cuatro mares? No podía entender cuál era el propósito tras tantas molestias, pero tampoco necesitaba saberlo. Entraría ahí y frenaría al culpable o a los culpables. Y si eso escapaba a sus posibilidades, se aseguraría de ser un incordio durante todo el camino de vuelta.

¿Cuánto tiempo llevaba ahí sentada? Lysbeth se incorporó e hizo desaparecer el falso vestido de cóctel. Era hora de ponerse serios. Se recogió el pelo en una larga coleta y volvió hacia la carpa a paso lento. Esperaba que Elliot y el pulpo hubieran acabado de hablar con Victor. Estaría bien entrar con alguien más, quizá necesitase una distracción o dos.

Resumen:


Datos relevantes:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Fb8aMCq

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 NsTlCkk


Cronología
Blishard
Cadete Revolucionario
Blishard
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 20:13}

Tras la salida del submarino, Blishard lo sigue por debajo, a corta distancia. Al rato, pasan cerca de un barco de la Marina y el gigante se desvía hacia él. Emerge justo al lado y baja de la Hidrocicleta para abordarlo sin hacer mucho ruido. Para el ruido ya están los Marines, que se ponen a gritar nada más verlo. Algunos incluso se ponen a tirarle piedras, sacadas de sabe Dios donde, como si sirvieran de algo contra una mole de 14 metros. No, los más preocupantes son los que cogen un par de cañones y le apuntan con ellos. Cubriéndose con su escudo, Blishard se dirige a ellos para intentar lanzarlos al mar de una patada, procurando no darle a los cañones ni a las balas de cañón. Tras eso, suponiendo que tenga éxito, irá cogiendo puñados de Marines al azar y depositándolos suavemente en el mar, intentando hacer el menor ruido posible, mientras se cubre con su escudo de posibles ataques.

Si no tiene éxito, dará un golpe descendente con su mangual, para aplastar los cañones y a los Marines que buscan cañonearlo sin motivo aparente.

"Buenas noches, caballeros, no me disparen, que vengo a quitarles vuestra nave en son de paz. Iba a ofrecerles quedarme con el barco a cambio de no comeros, pero como veo que no atienden a demasiadas razones, tendremos que pelear. Gajes del oficio, ¿saben?"

Va comentando mientras va realizando todas las acciones y pensando que hacer a continuación.

“No tengo demasiado en contra suya, pero... Espero que sepan nadar. No lo tomen a mal, el destino del mundo está en juego y lo ideal sería que todos trabajásemos codo con codo, pero como no creo que eso sea posible, pues habrá que actuar según lo que cada uno crea correcto y ahora mismo, para mí, lo correcto es despejar el camino. Cuando todo este embrollo acabe, les invitaré a una ronda de bebidas o algo así. Para compensar. Malo será que estemos todos muertos cuando esto termine, ¿no? En fin, pues eso.”
Lance Kashan
Shichibukai
Lance Kashan
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 20:20}

Una vez me paré a fijarme en lo que me rodeaba, las vistas empeoraron sobremanera. No tenía suficiente con que aquellas personas sonasen como completos dementes a la hora de hablar, sino que también debían parecerlo y demostrarlo en su forma de vestir. Me recordaban a los niños que vivían en los barrios marginales de tantas y tantas islas, que apenas tienen ropa para cubrirse pero se contentan con eso, ya que ya han aceptado todo lo que la vida le traiga. Era algo triste, por supuesto, pero no iba a ser yo quien se preocupase de lo que habían vivido o dejado de vivir, más bien la angustia era por lo que me tocaría a mí aguantar a partir de este momento. Unas palabras sonaban de fondo, las cuales solo captaba por partes, así que simplemente decidí fijarme más a fondo en las pintas de los que me rodeaban. Una, dos, tres, cuatro… Cuatro armas, quizás alguna más que no estuviese viendo levantada, pero era una cifra vergonzosa en comparación al número de gente que estaba allí agrupada.
 
Antes de que me diese cuenta, dejé de estar rodeado de gente a tener una clara dirección a la que mirar. Todos los locos se estaban apartando con rapidez al paso de un hombre, de estatura media pero cuerpo llamativo: solo hacía falta fijarse un mínimo en sus extremidades para hacerse una idea de la fuerza que tenía. Quizás, haciendo una predicción, podría ser capaz de enfrentarse cuerpo a cuerpo a todos y cada uno de los que estábamos delante, pero solo era una observación y un poco de intuición. Y el chico, señor o lo que fuese se quedó de pie justo delante de mí, mirándome fijamente, o eso creo, ya que su cara estaba cubierta por una máscara. Había dejado de ser una sorpresa para convertirse en costumbre el ver a gente con disfraces y ropa que ocultase su identidad, ya que, sin ir más lejos, tanto Grimm como yo estábamos llevando una. Pero la que estaba viendo ahora mismo, por una evidente razón, destacaba del resto. Tenía forma de serpiente, de escamas negras resplandecientes y boca carmesí, además de unos colmillos dorados que solo atraían más atención. Parecía que, más que para evitar ser descubierto, estaba hecha para asustar y causar malestar al resto, y eso nunca eran buenas noticias.
 
— ¿Quiénes sois y qué intenciones tenéis? — Una voz ciertamente grave provenía de la máscara y parecía dirigirse a mí. Quizás Grimm y yo, ambos llevando una indumentaria tan característica, no pasábamos desapercibido entre las ropas rotas del resto.
 
Tragué saliva. Sabía que no era una pregunta por educación, sino más bien por seguridad, tanto suya como mía y, notando como los ojos del reptil se clavaban en los míos, me di cierta prisa por contestar. Peligraba más si lo impacientaba que si daba una mala respuesta, creo.
 
— Somos Grimm — Señalé a mi acompañante, que parecía bastante menos incómodo con toda esta situación que yo. — y Kirin. — Toqué mi propio pecho, recalcando mi identidad y aparentando más seguridad de la que realmente tenía. Entonces, miré a mi acompañante y asintió, haciéndome entender que siguiera hablando. — Vimos mucha gente aquí agrupada y estábamos interesados en unirnos, creemos que ir en grupos tan pequeños en este encargo podría ser bastante peligroso. — A lo mejor estaba hablando de más, no lo sé, pero una vez que había abierto la boca, era difícil cerrarla y mantener silencio.
 
Por ahora, parecía que no había encendido el botón de alarma de aquel hombre. No me había tratado de arrancar la cabeza, ni había mandado a sus secuaces, o quienes parecían serlo, a apresarme, así que para mí ya todo estaba saliendo mejor de lo esperado. Se presentó, dando el nombre de Kirtash y descubriéndome que sus planes eran, básicamente, los mismos que los de la mayoría. Habían venido a la carpa para enterarse bien de todo lo que concernía a la Aguja y, una vez hecho, simplemente querían sacar beneficio de una forma u otra, lo lógico. Yuu simplemente había demostrado ser impredecible una vez más, dejando pasar una oportunidad como esta. Aunque él era algo más…, modesto. Esta persona se autodenominaba como el comandante del grupo y dejaba claro a todas luces que, aquellos que no siguieran sus órdenes, iban a pasar por bastantes peligros de aquí en adelante. Aun sintiendo cierta repulsión acerca del ofrecimiento, ya que no me terminaba de convencer la idea, noté como Grimm asentía y yo me apresuré en imitarle. Quedarme solo en mitad de tanta gente y a su merced no entraba dentro de mis  planes del momento.
 
Nos hizo un gesto para que le siguiésemos, y dejamos el grupo atrás para quedarnos seis personas en un rincón con más intimidad. Entonces, una voz comenzó a resonar en mi cabeza, causando que yo, por mero instinto, comenzase a mirar hacia totas las direcciones. Pero nadie hablaba, y solo estábamos las mismas seis personas, esta vez con cara de sorprendidos. Me recordaba a mi época en la isla Gyojin, cuando me asusté al comenzar a escuchar las voces de los niños encerradas al lado de mi cerebro. Intuí que estaban viviendo lo mismo que yo, y traté de hacer caso a aquello que se estaba comunicando directamente con la mente. Curiosamente, nuestro nuevo ‘’jefe’’ era capaz de transmitir mensajes de forma telepática, y eso podía significar tres cosas: o tenía una fruta del diablo, o un don increíble, o la ciencia estaba avanzando a pasos agigantados. En ese orden de probabilidades, para ser exactos. Por una parte era bueno, ya que, puestos a trabajar con él, esto iba a facilitar todo lo referente a la compenetración y el compartir información, pero también dejaba claro que era una persona peligrosa y con recursos bajo la manga.  
 
Las otras personas que estaban allí, obviando al ‘’mandamás’’, a mi compañero y a mí, demostraban no estar muy atrás en términos de poder. Aunque seguían teniendo una apariencia cuestionable, el aura que emitían y su equipamiento evocaban más confianza que los otros, así que debían de ser los más fuertes del grupo. A pesar de eso, el interés que tenía se esfumaba al escucharles hablar. Tampoco estaban en sus plenas facultades mentales, ya que cada frase debían incluir el nombre de ‘’La Gran Aguja’’, venerándola y dando a entender que habían estado viviendo única y exclusivamente para lo que estábamos a punto de hacer. No me hacía gracia estar al lado de tantos locos, pero mi única opción mínimamente prudente era acatar órdenes, como ya había estado haciendo desde mi llegada, y seguir a Kirtash a donde sea que nos llevase.

Resumen [AEG:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 L5hBzwao_o
Tiempos pasados:

SIGN OF QUALITY:
Señor Nat
Señor Nat
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios
https://www.onepiece-definitiverol.com/t22245-la-ventisca-del-su

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 20:46}

"Diría que no ha quedado tan mal", pensó una vez acabó de vestirlo, aunque la verdad era que lo había hecho de pena. Sin embargo, teniendo en cuenta que ponerle la ropa a un hombre de metro cincuenta que no colaboraba con agujas de hielo mientras tocaba el violín en una moto a cuatrocientos kilómetros por hora era una tarea que para casi cualquiera habría resultado imposible, se dio con un canto en los dientes cuando fue capaz de meter sus piernas por las mangas de la camisa... Aunque por el cuello asomaba todavía el cuello de un flamenco. En parte le hacía gracia, pues la única prenda que había logrado poner en su lugar era el chaleco -al menos si ignoraba que este estaba debajo de un calzoncillo por el que el pelirrojo tenía cabeza y brazo izquierdo metidos- y los pantalones ondeaban cual capa, amarrados por el cinturón al cuerpo de Arthur. Pero él se lo pasaba bien. Le repateaba admitirlo, pero el enano sabía divertirse. Lo que no sabía era cuándo.

Las cosas sin embargo empezaron a volverse tórridas. Tras la brigada -Jack y Leiren acababan de llegar tras una seguro que no poco accidentada aventura- había surgido un perro del tamaño de... Bueno, del tamaño de. Estaba a punto de confrontarlo, pero de pronto surgió el seguramente tercer mayor problema que tenía el Gobierno Mundial. "Espera, no he contado la aguja". Séptimo. Séptimo mayor problema mundial. Aunque había rellenado los impresos pertinentes para darle caza al final nunca había sido quien de ponerse manos a la obra: Tal vez porque el juicio de Legim se alargó demasiado, quizá porque su ejecución fue extraordinariamente caótica y, lo más probable, porque ni se había acordado del tema desde el día en que lo firmó hasta ese mismo instante. ¿Era él el motivo de que Zane D. Kenshin estuviese en libertad? No, si de verdad eso fuese cierto Arthur se habría acordado de ponerlo manos a la obra; por tanto, el descamisetado seguía libre porque no era tan peligroso, a pesar de que todo el mundo lo creyese. Es decir, era un peligro andante y si se le cruzaban los cables podría ser un peligro -de hecho, siguiendo su trayectoria varias veces habría sucedido eso ya- sino que, más bien, era un insulto hacia el orden por vulnerar constantemente los principios de ley que hacían seguro el territorio del Gobierno Mundial: Era un crimen de irresponsabilidad.

-Con nuestra connivencia -respondió, echándole una ojeada al artefacto una vez más. Era endiabladamente hermoso, para ser una condena a muerte. No hermoso como bello, sino como poético: asesinar con melodías, destruir a través de acordes y cantos... Como músico le resultaba, en cierto modo, arrebatador-. Esto no se construye en dos días. Alguien ha estado ignorando a los jinetes, y ahora todos temblamos ante su monstruoso poder... Hasta vosotros. -El dragón azul había estado pavoneándose hacía unos minutos; tampoco iba a quedarse mirando, cómo no- ¿Desde cuándo puedo confiar en la palabra de un pirata? Incluso si tu espada pelea hoy por nosotros, ¿mañana qué? Cuándo el mundo esté salvado, si es que lo salvamos, tendré que llevarte ante la justicia, y si fracasamos por tu culpa será mi responsabili... ¡Galhard, cállate!

El novato tenía miedo del perro. Iba a entrar a morir, estaba dispuesto a dar su vida por la causa. ¡Y temía a un puto perro!

-¿Tienes miedo? ¿Tienes preguntas? -Su voz sonaba amarga y crispada mientras se acercaba, amenazante, a Jack- ¿Quieres que nos ocupemos del perro? ¿Quieres que te presente a quien ya deberías conocer? ¡Pues no, joder! ¡Aprende a ser un buen soldado! -Con una ferocidad impropia de él metió la mano en la cabeza del vicealmirante... O más bien la reventó, dejando en su lugar lo que parecía una gran cola de atún- Primera lección, cadete. Si tienes miedo de algo, encáralo y recuérdale por qué debe temerte a ti más que tú a él. Y nunca des un paso atrás.

Haciendo acopio de todas sus fuerzas, y antes de que al azúcar de la cabeza de Jack terminase de repiquetear en medio de la pista helada, Al sacó con todas sus fuerzas el atún de su interior, lanzándolo disparado hacia unos metros más allá del animal, intentando que este corriese como un retrasado a por él... Y, viéndolo con más perspectiva, tal vez el borracho ampliase su colección de bichos raros.

-Y estúdiate los carteles -ordenó, señalando a Galhard con gesto inquisitivo.

Dio dos pasos hacia Zane, respirando profundamente mientras se percataba de lo alto que resultaba. ¿Medían lo mismo? Era curioso el parecido físico entre ambos, si bien las diferencias eran más que palpables. Lo encaró.

-Tú y tu amiguita... Tenéis muchas agallas para venir ante mí y pedir una tregua. La rechazo.

La simpleza de sus palabras le hizo asombrarse a sí mismo. No era la clase de trato que alguien pudiese ignorar, no era una oferta que pudiese simplemente desechar... Pero no era suficiente.

-Sin embargo -dijo con cierto retintín mientras en su rostro se gestaba una sonrisa- os ofrezco una alianza. Una AL-ianza. Entraremos juntos, lucharemos juntos, y hasta que esto termine nos ayudaremos como si nos fuese la vida en ello. Después yo fingiré que lográis darme esquinazo y todo vuelve a la normalidad. Salvo tú. -Desplazó la vista a la morena- Tú necesitas que te enseñen a bailar, y conozco al maestro adecuado. -Lo siguiente fingió susurrarlo- Y no es él.

Guardó por fin el violín, que llevaba un rato sin tocar, y dejó que todo el mar se congelase a medio metro bajo la superficie. Habría profundizado más, pero Kodama estaba allí abajo y sería peligroso. Aun así se generó una superficie practicable frente a las puertas, suficientemente pequeña como para no estorbar a la formación pero suficientemente confortable como para moverse por ella.

-Y mientras estemos ahí dentro, el pelirrojo tiene prohibido beber. -Miró de nuevo el cabello de Zane-. Ambos pelirrojos.

Se guardaba un as en la manga para quitarle la borrachera, pero no podía utilizarlo todavía. No sin un objetivo claro.

Resumen:


La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 3cgcSCf
La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 5rJAbZo
Siempre en el corazón:
Waiting for next admiral:

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 WY68nw0
Hamlet
Comandante
Hamlet
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 21:14}

Observé, con la excitación del momento decreciendo, como los tripulantes del barco y los esqueletos de Bizvan se deshacían de los pocos enemigos que quedaban en cubierta. Asimismo, también me di cuenta como cada uno de los marines volvía a su puesto y la burbuja se hundía en el mar, haciéndonos ciertamente indetectables a simple vista. Pensé en sugerirle al Almirante Mitoko que hundiese más el barco, puesto que la quilla de otro navío criminal podría rajar la burbuja, sentenciándonos a un nada agradable destino. No obstante, reprimí el deseo de hacerlo, puesto que sería del todo impertinente pensar que mi superior no habría tenido eso en cuenta.

Di un resoplido y noté mis pulsaciones decrecer, tranquilizándome. Miré mis armas, empapadas en sangre, y, casi sin pestañear, las limpié con las prendas de un enemigo caído. Realmente esperaba que nadie me estuviera viendo. Aproveché el momento para comprobar el estado de mi armadura, y me sorprendió que no se hubiera visto arañada en lo más mínimo. Realmente se trataba de una pieza de calidad.

Caminé hacia Bizvan, que parecía estar ocupado con algún que otro quehacer. No quería molestarle, pero sabía que la posible brecha en mi cabeza podía afectar a mi desempeño, y este no era el mejor momento para dejar que eso sucediera. Y menos delante de Kasai, que parecía estar actuado de la forma más eficiente posible.

Sin embargo, recordé la charla que había tenido antes con él y me llené de vergüenza, notando como la sangre subía a mi rostro. De haberme visto en el espejo, no me cabría duda de que el pensamiento había conseguido ruborizarme.

En su lugar, volví al lugar en el que se encontraban los cadáveres, embadurnados en sangre y luciendo contusiones. Entre estos, busqué alguno que tuviera una prenda intacta, y, tras un buen rato, encontré una camisa blanca que parecía bastante limpia por el lado izquierdo. Me asqueaba tener que hacer esto, pero, mirando el lado positivo, este no era uno de los criminales más mugrientos.

Arranqué una manga a la camisa, no sin un poco de dificultad, y me la enrollé de forma que cubriese mis sienes, que se habían llevado la peor parte del golpe. La anudé con fuerza y me puse en pie, dispuesto a seguir con mi trabajo. Aunque algo me decía que poco podría hacer en este instante, y tampoco quería hablar con mis compañeros. Simplemente me senté en cubierta solo, apoyado en el mástil, tratando de asimilar lo que acababa de ocurrir.

Resumen:
Gareth Silverwing
Contraalmirante
Gareth Silverwing
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {Dom 17 Feb 2019 - 22:43}

Todo daba vueltas y vueltas y vueltas y vueltas y vueltas y vueltas... ¿He dicho vueltas? No sabía si era yo, o era el mundo el que giraba. Por la sobrenatural habilidad del resto de la banda por mantener la postura en una superficie en movimiento me decantaba por la primera opción. Notaba como un hormigueo por el cuerpo, y no era nada debido al mareo ni a que la sangre se me hubiera ido a los pies. Creo que alguien estaba vistiéndome.

Decidí frenar, aunque debido a la velocidad la moto se echó hacia delante quedando yo con la cara en el hielo. Fueron unas 30 vueltas con el rostro deslizándose sobre la helada superficie antes de que me detuviese por completo. En efecto Al me había vestido, que aguafiestas. Aunque bueno, había hecho su mejor esfuerzo. La ropa no estaba precisamente en su sitio, pero quedaba de tal forma que me sentía completamente aireado en los lugares más importantes.

Miré la situación. Por fin la banda estaba al completo; el ALmirante Al, el dulzón de Jack, el pelo arbusto, un tipo al que no conocía de nada, el pirata Zane y una morena. De nuevo todos reunidos como una familia. Ah y un perro. Alargué la mano para acariciarlo, pero no llegaba a tocarlo, estaba un poco más lejos de lo que pensaba. Me acerqué un poco más, pero seguía sin alcanzar. Espera, estaba muy lejos, y era muy grande. Mejor, más perro, más superficie para acariciar, más amor para todos, más adorabilidad para admirar, más mejor y más para todos.

- Espera. Tú eres el pollo ese de las espadas ¡Hola pollo! - Grité a Zane mientras saludaba agitando el brazo. - Y, un momento, estamos ante una señorita. - Chasqueé los dedos y manipulé el calor en la atmósfera para que mostrase un misterioso haz de luz que cubría mis partes más vergonzosas. - Y por último pero no menos importante... ¡Un perrete!

Tras gritar eso último con todo el entusiasmo posible puse toda mi fuerza en las piernas para saltar a toda velocidad hacia este. De la fuerza que puse en el salto reventé el anillo de hielo que tanto esfuerzo había puesto Al en hacer y generé una onda de choque según despegué. Trataría de llegar a impactar en una zona entre el cuello y el esternón para parle el abrazo más entusiasta que pudiese en su blandito pelaje.

Resumen:
Contenido patrocinado
Fama
Recompensa
Características
fuerza
Fortaleza
Velocidad
Agilidad
Destreza
Precisión
Intelecto
Agudeza
Instinto
Energía
Saberes
Akuma no mi
Varios

La cuenta atrás [CAPÍTULO] - Página 12 Empty Re: La cuenta atrás [CAPÍTULO] {}

Volver arriba
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.